2. Este problema que se manifiesta de varias
formas es una de las primeras causas de muerte
en México y la edad promedio de los casos de
defunción es de 53 años. Estas enfermedades
ocasionan también severas discapacidades ya
que suceden cuando una zona del cerebro se ve
privada de sangre, lo que llega a ocasionar
lesiones y/o muerte en el tejido cerebral
afectado y con ello la lesión de sus funciones.
3. La mayoría de los Eventos Vasculares Cerebrales, se ubican
en las siguientes categorías:
Infarto cerebral. También conocido como ataque cerebral
ocurre cuando parte del cerebro es privada de oxígeno debido a un
bloqueo (coágulo) o a una rotura de un vaso sanguíneo, lo que ocasiona
que las células nerviosas dentro de la zona afectada no puedan funcionar
y mueran en pocos minutos, afectando a parte del cuerpo controlada por
ésas células que desafortunadamente no se reemplazan como otras del
cuerpo.
4. Trombosis cerebral. Es el padecimiento más común y ocurre
cuando se forma un coágulo o trombo sanguíneo en alguna de las
arterias que abastecen de sangre al cerebro. A menudo es precedido por
mini-ataques como pequeñas convulsiones, también llamados ataques
isquémicos transitorios.
5. Embolia cerebral. Ocurre cuando en el organismo se forma
un émbolo o coágulo, que viaja por todo el torrente sanguíneo y se aloja
en alguna parte del cerebro.
6. Hemorragia o derrame cerebral. Se debe a la
ruptura de vasos sanguíneos debilitados o por aneurisma cerebral.
Hemorragia subaracnoidea. Generalmente es
provocada por un traumatismo y ocurre cuando un vaso sanguíneo
se rompe y se vacía entre el cerebro y el cráneo, en vez de hacerlo
dentro del cerebro.
7. Factores de riesgo:
La hipertensión arterial y su mal control.
Las cardiopatías o enfermedades del corazón.
La aterosclerosis, que estrecha los vasos
sanguíneos con depósitos de grasa y
colesterol.
La diabetes.
El exceso de glóbulos rojos en la sangre.
8. Síntomas
Se debe acudir inmediatamente con un neurólogo, ante cualquiera o
varias de las señales siguientes:
• Dormirse después de un golpe.
• Sentir debilidad en la cara, brazos o piernas.
• Tener confusión o problemas para expresarse y entender.
• Presentar problemas visuales en ambos ojos, con pupilas de tamaño
desigual.
• Tener problemas para caminar con pérdida de balance y coordinación.
• Tener mareos.
• Aumento de pulso.
• Dolor muy fuertes de cabeza.
• Desmayo.
• Convulsiones.
• Estado de coma.
9. Diagnostico
Se establece cuando el médico evalúa los signos vitales como: presión
arterial, frecuencia cardiaca y respiratoria y escucha los sonidos y siente
las pulsaciones de las arterias carótidas del cuello y otros vasos sanguíneos
en busca de sonidos irregulares, buscos o anormales. El estudio de
diagnóstico más importante es la gammagrafía cerebral o tomografía y las
Imágenes de Resonancia Magnética y la angiografía que permiten detectar
fácilmente si hay una hemorragia cerebral o bloqueo en alguna vena o
arteria y la parte dañada del cerebro. La angiografía es un procedimiento
por el que se inyecta un medio radiactivo en la vena del brazo y después se
observa, mediante una cámara, cómo fluye hasta el cerebro.
10. Tratamiento intensivo
Si se debe a un trombo o émbolo, se deben administrar fármacos para
disolver el coágulo, así como otros como la heparina para prevenir que se
formen otros. También se pueden dar medicamentos para reducir la presión
arterial, estabilizar los latidos del corazón y para evitar edema en el
cerebro.
Para prevenir nuevos eventos, se puede administrar una aspirina
infantil o regular u otros fármacos que impidan la formación de coágulos,
pero este tratamiento debe ser administrado y controlado por el médico, ya
que cada persona actúa de diferente manera frente a los fármacos. Si la
arteria carótida está seriamente obstruida, se debe realizar una cirugía
para remover los depósitos grasos.
11. Recuperación
Suele ser variable dependiendo del daño y tipo de evento ya que
algunos enfermos pueden quedar total o parcialmente paralizados, por lo
que se requiere de fisioterapia y mucho apoyo familiar.
• Cuando la lesión se presenta en el lado izquierdo del cerebro provoca
problemas del lenguaje y una conducta más cautelosa, menos organizada
y de reacciones más lentas, por lo que si se les asignan tareas sencillas
a menudo son capaces de grandes avances.
• Cuando es en la parte derecha del cerebro, pueden hablar, comprender y
responder más rápidamente, pero es posible que tengan dificultad con
tareas que requieran de habilidades relacionadas con el espacio y la
percepción por lo que es importante cuidarlos para que no tengan algún
accidente.