1. EFECTO INVERNADERO
Efectos
Según el IPCC (Panel Internacional de Expertos en el Cambio Climático), el
calentamiento global de la Tierra es ya un hecho que está produciendo, y producirá,
graves consecuencias en el clima, la atmósfera y la biodiversidad: aumento de la
temperatura media de la Tierra durante el presente siglo entre 1 y 3,5 grados,
disminución de las capas de hielo en los Polos, incremento del nivel del mar e
inundaciones de zonas bajas e islas, aumento de la desertización, desaparición de flora y
fauna en ecosistemas, escasez de agua e inestabilidades atmosféricas (huracanes,
incendios, etc.), efectos secundarios de catástrofes humanas (propagación de la
hambruna y enfermedades, etc.).
Causas
El aumento mundial de la demanda y del consumo energético, así como de la actividad
industrial, los transportes, la deforestación y la agricultura, han desembocado en un
incremento de las emisiones a la atmósfera de CO2 y metano, los principales gases de
efecto invernadero causantes del cambio climático.
Soluciones
El cambio climático es un problema mundial que requiere una solución mundial. Las
medidas para paliar este terrible futuro pasan por acatar las directrices de acuerdos
como el Protocolo de Kioto: disminuir las emisiones de CO2, reducir el uso de
combustibles fósiles y aumentar el de renovables, mejorar la eficiencia y la
diversificación energética, seguir una política de desarrollo sostenible y sobre todo
concienciar de la gravedad del problema a las generaciones futuras.
LLUVIA ACIDA
La lluvia ácida se forma cuando la humedad en el aire se combina con los óxidos de
nitrógeno y el dióxido de azufre emitidos por fábricas, centrales eléctricas y vehículos
que queman carbón o productos derivados del petróleo. En interacción con el vapor de
2. agua, estos gases forman ácido sulfúrico y ácidos nítricos. Finalmente, estas sustancias
químicas caen a la tierra acompañando a las precipitaciones, constituyendo la lluvia
ácida.
Los contaminantes atmosféricos primarios que dan origen a la lluvia ácida pueden
recorrer grandes distancias, trasladándolos los vientos cientos o miles de kilómetros
antes de precipitar en forma de rocío, lluvia, llovizna, granizo, nieve, niebla o neblina.
Cuando la precipitación se produce, puede provocar importantes deterioros en el
ambiente.
La lluvia normalmente presenta un pH de aproximadamente 5.65 (ligeramente ácido),
debido a la presencia del CO2 atmosférico, que forma ácido carbónico, H2CO3. Se
considera lluvia ácida si presenta un p H de menos de 5 y puede alcanzar el pH del
vinagre (pH 3). Estos valores de pH se alcanzan por la presencia de ácidos como el
ácido sulfúrico, H2SO4, y el ácido nítrico, HNO3. Estos ácidos se forman a partir del
dióxido de azufre, SO2, y el monóxido de nitrógeno que se convierten en ácidos. Los
hidrocarburos y el carbón usados como fuente de energía, en grandes cantidades,
pueden también producir óxidos de azufre y nitrógeno y el dióxido de azufre emitidos
por fábricas, centrales eléctricas y vehículos que queman carbón o productos derivados
del petróleo.
En interacción con el vapor de agua, estos gases forman ácido sulfúrico y ácidos
nítricos. Finalmente, estas sustancias químicas suben a la atmósfera forman una nube y
después caen a la tierra acompañando a las precipitaciones, constituyendo la lluvia
ácida.
Formación de la lluvia ácida
Una gran parte del SO2 (dióxido de azufre) emitido a la atmósfera procede de la emisión
natural que se produce por las erupciones volcánicas, que son fenómenos irregulares.
Sin embargo, una de las fuentes de SO2 es la industria metalúrgica. El SO2 puede
3. proceder también de otras fuentes, por ejemplo como el sulfuro de dimetilo, (CH 3)2S, y
otros derivados, o como sulfuro de hidrógeno, H2S. Estos compuestos se oxidan con el
oxígeno atmosférico dando SO2.Finalmente el SO2 se oxida a SO3 (interviniendo en la
reacción radicales hidroxilo y oxígeno) y este SO3 se puede quedar disuelto en las gotas
de lluvia, es el de las emisiones de SO2 en procesos de obtención de energía: el carbón,
el petróleo y otros combustibles fósiles contienen azufre en unas cantidades variables
(generalmente más del 1%), y, debido a la combustión, el azufre se oxida a dióxidos de
azufre::S + O2 → SO2 Los procesos industriales en los que se genera SO2, por ejemplo
son en la industria metalúrgica. En la fase gaseosa el dióxido de azufre se oxida por
reacción con el radical hidroxilo por una reacción intermolecular::SO2 + OH· →
HOSO2· seguida por::HOSO2· + O2 → HO2· + SO3 En presencia del agua atmosférica o
sobre superficies húmedas, el trióxido de azufre (SO 3) se convierte rápidamente en
ácido sulfúrico::SO3(g) + H2O(l) → H2SO4(l) El NO se forma por reacción entre el
oxígeno y el nitrógeno a alta temperatura::O 2 + N2 → 2NO Una de las fuentes más
importantes es a partir de las reacciones producidas en los motores térmicos de los
automóviles y aviones, donde se alcanzan temperaturas muy altas. Este NO se oxida con
el oxígeno atmosférico::O2 + 2NO → 2NO2Y este 2NO2 reacciona con el agua dando
ácido nítrico que se disuelve en el agua::3NO2 + H2O → 2HNO3 + NO
Efectos de la lluvia ácida
La acidificación de las aguas de lagos, ríos y mares dificulta el desarrollo de vida
acuática en estas aguas, lo que aumenta en gran medida la mortalidad de peces.
Igualmente, afecta directamente a la vegetación, por lo que produce daños importantes
en las zonas forestales, y acaba con microorganismos fijadores de N.
El termino "lluvia ácida" abarca la sedimentación tanto húmeda como seca de
contaminantes ácidos que pueden producir el deterioro de la superficies de los
materiales. Estos contaminantes que escapan a la atmósfera al quemarse carbón y otros
4. componentes fósiles reaccionan con el agua y los oxidantes de la atmósfera y se
transforman químicamente en ácido sulfúrico y nítrico. Los compuestos ácidos se
precipitan entonces a la tierra en forma de lluvia, nieve o niebla, o pueden unirse a
partículas secas y caer en forma de sedimentación seca.
La lluvia ácida por su carácter corrosivo, corroe a las construcciones y a las
infraestructuras. Puede disolver, por ejemplo, el carbonato de calcio, CaCO3, y afectar
de esta forma a los monumentos y edificaciones construidas con mármol o caliza.
Un efecto indirecto muy importante es que los protones, H+, procedentes de la llúvia
ácida arrastran ciertos iones del suelo. Por ejemplo, cationes de hierro, calcio, aluminio,
plomo o zinc. Como consecuencia, se produce un empobrecimiento en ciertos nutrientes
esenciales y el denominado estrés en las plantas, que las hace más vulnerables a las
plagas.
Los nitratos y sulfatos, sumados a los cationes lixiviados de los suelos, contribuyen a la
eutrofización de ríos y lagos, embalses y regiones costeras, lo que deteriora sus
condiciones ambientales naturales afecta negativamente a su aprovechamiento.
Un estudio realizado en 2005 por Vincent Gauci1 de Open University, sugiere que
cantidades relativamente pequeñas de sulfato presentes en la lluvia ácida tienen una
fuerte influencia en la reducción de gas metano producido por metanógenos en áreas
pantanosas, lo cual podría tener un impacto, aunque sea leve, en el efecto invernadero.2
Soluciones
Entre las medidas que se pueden tomar para reducir la emisión de los contaminantes
precursores de éste problema tenemos las siguientes:
• Reducir el nivel máximo de azufre en diferentes combustibles.
• Trabajar en conjunto con las fuentes fijas de la industria para establecer
disminuciones en la emisión de SOx y NOx, usando tecnologías para control de
emisión de estos óxidos.
• Impulsar el uso de gas natural en diversas industrias.
• Introducir el convertidor catalítico de tres vías.
5. • La conversión a gas en vehículos de empresas mercantiles y del gobierno.
• Ampliación del sistema de transporte eléctrico.
• Instalación de equipos de control en distintos establecimientos.
• No agregar muchas sustancias químicas en los cultivos.
• Adición de un compuesto alcalino en lagos y ríos para neutralizar el pH.
• Control de las condiciones de combustión (Temperatura, oxigeno, etc.).