El documento contrasta a los buenos maestros con los maestros fascinantes, señalando que mientras los buenos maestros se enfocan en la enseñanza académica y la corrección de comportamiento, los maestros fascinantes tratan de comprender a los estudiantes individualmente, inspiran emociones, estimulan la creatividad, y educan para la vida de manera inolvidable y con sabiduría.

1. BUENOS MAESTROS…MAESTROS FASCINANTES
Augusto Cury
Los buenos maestros tienen una buena cultura académica
y son elocuentes; mientras los maestros fascinantes tratan
de entender el funcionamiento de la mente de sus alumnos
para poder escucharlos.
Los buenos maestros tienen una metodología y son
didácticos; mientras que los maestros fascinantes tienen la
sensibilidad para hablar a los corazones de sus alumnos.
Los buenos maestros educan la inteligencia lógica; mientras los
maestros fascinantes educan la emoción, enseñan a sus alumnos a
explorar su ser.
Los buenos maestros usan la memoria como depósito de información;
mientras que los maestros fascinantes la usan para estimular la
creatividad.
Los buenos maestros son temporales; mientras que los maestros
fascinantes son inolvidables.
Los buenos maestros corrigen el comportamiento; mientras que los
maestros fascinantes resuelven los problemas en el salón de clases,
con sabiduría.
Los buenos maestros educan para una profesión; mientras que los
maestros fascinantes educan para la vida.

2. Debemos mostrar sinceramente al estudiante que nos
importa como persona, independientemente de que sea un
buen o mal alumno. Se trata de un compromiso humano,
singular con cada uno de ellos.