1. Día Mundial de la Educación: temas pendientes
31/03/2010
Educación a distancia vs. presencial; inclusión de minorías; brecha digital; fuga de
cerebros…
Las problemáticas en torno a la
educación son muy distintas hoy día a
lo que eran hace 20 años. La
complejidad de los retos sociales y
económicos que enfrentamos, la
globalización, los avances tecnológicos
y las demandas del mercado hacen
necesario abordar a la educación
desde nuevas perspectivas.
Universia presenta una revisión de
algunos de los temas más álgidos de la
educación del siglo XXI con motivo del Día Mundial de la Educación.
Blended learning
¿Estudiar a distancia es una opción de calidad? ¿En verdad transitamos hacia la educación a
distancia? ¿Las aulas van a desaparecer?
Probablemente no, pero la educación a distancia sí se ha convertido en una opción en la última
década. Hoy día existe la opción del blended learning.
Recibe este nombre la mezcla de la educación presencial y a distancia en la que se busca
desarrollar un modelo educativo más eficiente para los docentes y alumnos a través del uso de
la tecnología y la atención personalizada.
Este modelo educativo ha probado ser eficiente porque integra las ventajas de la educación a
distancia como tener acceso a la educación en un país distinto al de origen debido a la reducción
de costos, ofrece contenidos que se actualizan constantemente y presenta un modelo cómodo y
flexible de estudio para los docentes y estudiantes; con las ventajas del modelo presencial que
ofrece atención personalizada de un profesor de asignatura o tutor con el que se concretan
encuentros ya sea virtuales o presenciales, de manera periódica en los que se integran los
conocimientos revisados de manera virtual.
Algunas de las limitantes de este modelo educativo son el acceso a Internet, conocimientos
limitados de las tecnologías de la información y la modificación de los hábitos de estudio sin una
estructura determinada.
Brecha digital
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2. Cuando creíamos que podíamos ser todos iguales, surgió un nuevo escenario para la
desigualdad: el mundo digital.
Con la aparición de Internet y las nuevas tecnologías de la información se creyó que el mundo se
encaminaba hacia la “aldea global” de la que hablaba el teórico Marshall McLuhan y en donde
todos los individuos podrían compartir información, datos y conocimiento en cuestión de
segundos.
Pronto se vio que era necesario crear el concepto de “brecha digital” para señalar a esa
importante parte de la población mundial que no tiene acceso a estas tecnologías y que se
encuentra literalmente separado de aquellos que sí tienen acceso a ellas.
Según la UNESCO, pese a que las nuevas tecnologías de información contribuyen a la
construcción de una sociedad del conocimiento abierta a todos, una parte importante de la
población mundial no tiene acceso a ellas: “el ahondamiento de la brecha digital crea una
auténtica disparidad de conocimientos y aumenta las desigualdades en el ámbito del
desarrollo”.
Datos de la UNESCO aseguran que la brecha digital se ha incrementado considerablemente.
Basta con recordar que en los países ricos uno de cada tres habitantes tiene un ordenador,
mientras sólo una de cada 130 personas tiene uno en África. Además, en 2003 19% de los
habitantes del planeta representaban 91% de los usuarios de Internet y actualmente un tercio de
la humanidad sigue sin tener acceso a la electricidad.
Carreras híbridas
Surgen de la necesidad de formar a profesionistas mejor preparados que atiendan tanto a las
necesidades del mercado, como a las necesidades de crecimiento y desarrollo de la ciencia.
Anteriormente este grado de preparación se lograba una vez que los estudiantes terminaban la
licenciatura, adquirían experiencia laboral y realizaban alguna especialidad o posgrado que les
diera el grado de conocimientos que se requieren en el mundo laboral.
Con esto en mente, las universidades han creado programas académicos multifuncionales a nivel
licenciatura que integran disciplinas transversales como el derecho y la genética o las
matemáticas y las relaciones exteriores en lo que han llamado carreras híbridas. Algunos
ejemplos son nanomedicina, agronegocios, energías renovables, ciencias de la tierra, protección
civil y planeación territorial.
Fuga de cerebros
Ante la falta de oportunidades en los campos de investigación científica, desarrollo tecnológico
y sobre todo, el laboral, miles de egresados buscan mejores perspectivas en naciones
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3. desarrolladas.
El fenómeno de la “fuga de cerebros” no es reciente. Sus orígenes se remontan a 1963 cuando la
Royal Society definió “fuga de cerebros” como el éxodo de científicos británicos hacia los EEUU,
comprometiendo seriamente la economía británica, pero este término eventualmente pasó a ser
de uso común para describir las emigraciones de académicos y profesionales de los países del
Tercer Mundo.
Hay quienes han pugnado por la desaparición de este término, alegando que actualmente la
economía mundial está dominada en gran parte por la libre circulación de capitales, mercancías y
trabajo.
Sin embargo otros defienden que el término “fuga de cerebros” aún es válido, ya que todavía
hay muchas personas de países tercermundistas que abandonan sus países de origen a falta de
oportunidades.
Cultura inclusiva
Hombres y mujeres; personas con capacidades diferentes; indígenas; personas de distintas
religiones… ¿cómo dar educación a todos?
La cultura inclusiva en el ámbito de la educación se refiere, a grandes rasgos, a hacer partícipes
de la educación y del conocimiento a todos aquellos grupos que por algún motivo sufren
discriminación o que se han visto relegados.
De acuerdo a Silvia Laura Bersanelli, “la perspectiva que brinda la educación inclusiva obliga,
particularmente a los encargados de diseñar y ejecutar políticas públicas, a crear propuestas para
transformar el sistema, la organización y la cultura escolar, el currículum, la formación y el trabajo
de los profesionales de la educación, con el objetivo firme y claro de tornarlos equitativos y así
terminar y “desnaturalizar” la exclusión”. (1)
Así, la educación inclusiva busca trabajar conjuntamente desde las políticas y las prácticas para
que se atiendan todas las necesidades del alumnado, fomentar la participación de todos los
alumnos y buscar continuamente la mejora y la apertura de los espacios educativos.
Como una manera de incluir a todos los grupos minoritarios algunas instituciones han
implementado políticas de discriminación positiva que consisten en dar preferencia a estos
grupos y crear “cuotas”, es decir, definir un porcentaje específico de miembros pertenecientes a
distintas minorías (por ejemplo, contar con 50% de mujeres, o 10% de indígenas, o 20% de
homosexuales, etc.).
Este tema ha causado gran controversia, ya que se argumenta que este tipo de prácticas
discriminan al resto de la población al elegir a cierto postulante sobre otro basándose únicamente
en su calidad de minoría y no en sus capacidades y competencias académicas.
(1) Bersanelli, Sivlia Laura. “La gestión pública para una educación inclusiva”, en Revista
Electrónica Iberoamericana sobre Calidad, Eficacia y Cambio en Educación Vol.6 Núm.2, Madrid,
España, en línea el 31 de marzo de 2010.
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4. Fuente: Universia
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