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Argumentacion de las Ideas
1. UNIVERSIDAD FERMIN TORO
FACULTAD DE CIENCIAS JURIDICAS Y POLITICAS
ESCUELADE DERECHO
BARQUISIMETO – ESTADO LARA
Argumentación de las ideas
Integrante: Madeline Orosco
Barquisimeto; Junio de 2020
2. Argumentación de las ideas
La argumentación es una variedad discursiva con la cual se pretende defender
una opinión y persuadir de ella a un receptor mediante pruebas y razonamientos,
que están en relación con diferentes: la lógica, la dialéctica (procedimientos que se
ponen en juego para probar o refutar algo) y la retórica (uso de recursos
lingüísticos con el fin de persuadir movilizando resortes no racionales, como son
los afectos, las emociones, las sugestiones).
Argumentar como habilidad de pensamiento supone dar razones para sustentar la
certeza de un juicio ya sea afirmándolo o negándolo, la pertenencia de un objeto a
una clase o la validez de un ejemplo. Tiene carácter probatorio, por tanto los
conceptos no se argumentan pues ya están probados. Los juicios que se emitan
deben tener cierto carácter de ineditez y originalidad. Puede estar precedida de la
caracterización y la identificación. Antecede a la demostración.
Argumentar exige la toma de posición que puede estar implícita en la idea que se
argumenta o tiene que hacerse explícita cuando argumenta la idea expresada por
otra persona. A partir de lo que se ha denominado toma de posición, comienza la
expresión de ideas, conocimientos, información de lo que se sabe sobre la idea o
juicio que se argumenta. Cada una de las ideas, expresiones o juicios que se usan
para fundamentar la toma de posición, o adhesión al planteamiento que se
argumenta, reciben el nombre de argumentos.
a argumentación es el proceso que relaciona la información de determinadas
proposiciones, las premisas para obtener una nueva información; la conclusión o
tesis.
Al constituir la tesis información nueva, no puede ser nunca una verdad evidente ni
fácilmente integrable en el cuerpo de conocimientos y convicciones del receptor
potencial; de ahí el papel de las premisas, que constituyen el proceso de
argumentación propiamente dicho, orientado a vencer las posibles resistencias del
receptor para la asimilación cognitiva o pragmática de la tesis.
Toda argumentación trata un tema controvertible, que permite la confrontación,
acerca del cual un emisor plantea su postura fundamental o tesis, la que defiende
por medio de argumentos. El carácter controversial del tema implica, de cierta
3. manera, un diálogo implícito con el pensamiento del receptor, a quien se pretende
convencer a través del razonamiento.
La argumentación consiste en la exposición del juicio o sistema de juicios por el
cual se fundamenta la conformidad o veracidad de otro juicio o idea dada. Al
argumentar o fundamentar se exponen las ideas por las cuales se expresa la
adhesión a, o la confirmación de un planteamiento de un juicio hecho por el propio
sujeto u otra persona.
Dentro de la tipología de textos, el argumentativo es uno de los más empleados;
pero para su construcción es preciso conocer las características que lo identifican
como tal.
En el texto argumentativo la tarea consiste en convencer al receptor de la
corrección o la verdad de la aseveración. Tiene como objetivo convencer o
disuadir a alguien. Se razona y argumenta a favor de una idea o punto de vista.
En toda argumentación se integran tres elementos estrechamente relacionados
entre sí: la tesis, los argumentos y la demostración.
La tesis es la idea o planteamiento cuya veracidad requiere ser demostrada. Al
plantearla, debe tenerse en cuenta:
Ser formulada con precisión.
Ser la misma en el transcurso del texto.
No contener ninguna contradicción lógica.
La formulación de la tesis es un paso sumamente importante en la construcción
del texto argumentativo, puesto que esa postura fundamental conduce a indagar
las posturas contrarias y objeciones, así como los contraargumentos para
rebatirlas.
Los argumentos son las razones, los fundamentos a los que se recurre para
demostrar la tesis. Deben ser convincentes, confiables y verdaderos. Además
deben ser suficientes y que su veracidad sea demostrada independientemente de
la tesis.
Todo texto argumentativo cuenta con cuatro partes fundamentales:
Presentación o introducción: se presenta el tema en cuestión y se trata de
motivar al receptor y de propiciar en él una actitud favorable.
4. Exposición de la tesis: se presenta la idea fundamental objeto de la reflexión
de forma clara, breve y concisa, sin ambigüedades, puesto que ella es el punto
clave alrededor del cual girará la argumentación.
Cuerpo de la argumentación: es el núcleo del discurso en el que se presentan
las pruebas y argumentos que permiten aceptar la tesis como válida.
Conclusión: sirve para reafirmar y enfatizar la validez de la tesis, se retoman
los aspectos más relevantes para insistir en la posición fundamental del autor.
Tipos de argumentación
Subjetiva: es más informal y se basa en el sistema de pensamientos y
valoraciones del autor. Generalmente se hace de forma oral conversación
informal, discusión, debate, aunque también puede aparecer de forma escrita
en algunos artículos opinión, editoriales y otros.
Científica: se caracteriza por la objetividad y se basa en pruebas, datos,
hechos e investigaciones, o en la consulta de documentos, libros, etc. Es la
empleada en textos científicos para demostrar verdades de esa naturaleza.
La argumentación puede combinarse con otros textos; se puede encontrar en los
científicos, políticos, publicitarios, etc. como también en situaciones de la vida
cotidiana que requieren la defensa de una idea o posición: solicitar un permiso en
el trabajo, optar por una u otra carrera, excusarse de no hacer alguna actividad,
etc.
La argumentación a menudo se manifiesta como la relación entre causa y efecto.
En este caso, pueden presentarse dos variantes: se relacionan primero las causas
terminando con una oración que expone el o los efectos que produjeron, o,
viceversa, se comienza por los efectos dejando las causas para el final.
Al argumentar nos enfrentamos a la necesidad de superar algunas limitaciones del
pensamiento entre ellas la principal es la que tiene que ver con la inclusión del contenido.
Al pensar sobre contenidos concretos aparecen los rangos y niveles de la veracidad en
las afirmaciones. Habrá entonces afirmaciones más ciertas que otras, habrá matices en
nuestros actos de habla. El pensamiento formal, como demostró Piaget, ésta libre de
contenido y debido a ellos carece de importancia la pregunta obre su veracidad. Es un
pensamiento, como su nombre lo indica, que busca la coherencia lógica formal y al dejar
de lado el contenido desaparece la preocupación por la veracidad. Su infinita fortaleza
5. está en la preocupación por la validez, por la coherencia. Su limitación inmensa está en
que para interpretar el mundo la lógica formal es insuficiente. Por el contrario, la
argumentación es ramificada, multidimensional y de naturaleza diversa y compleja,
aspectos totalmente necesarios para interpretar y explicar una realidad multidimensional,
interrelacionada y multicausada.
Reglas para argumentar
men está dividido en cuatro partes: Para una buena argumentación es necesario seguir
algunas pautas como:
1. La regla del paso previo: Antes de comenzar a argumentar debe tener claramente
identificada cual es la tesis o idea que quiere exponer, de tal manera que sea clara y
pertinente, además es importante que para que usted pueda argumentar tiene que tener
cierto conocimiento basado en hechos o documentos o lecturas que le puedan ayudar a la
veracidad del argumento.
2. La regla de la falacia: consiste en que después de establecer correctamente la tesis
tengamos claro además que es muy importante tener las bases para poder argumentar,
sin embargo hay que tener en cuenta que el uso de razones acerca de un tema o tesis
con ideas que tienen la apariencia de verdad pero que son mentiras y aun sabiendo la
falta de veracidad de las ideas las usas estaría cometiendo un grave error en su
argumentación perdiendo credibilidad.
3. La regla de la completitud: cuando uno argumenta será natural que hayan personas
que no estén de acuerdo con nuestras ideas por eso es vital que usted sepa contra-
argumentar y sepa como poder defender ante cualquier circunstancia su tesis, sobre todo
cuando estamos en un mundo que cada vez se vuelve más competitivo y que la manera
en que cada uno defienda sus ideas lo convertirá en una persona de credibilidad y de
confianza ante los demás por lo tanto asegúrese de seguir cada una de las indicaciones
para que sus argumentos estén mejor orientados.
4. La regla del Lenguaje: En esta regla todas las proposiciones deben estar escritas en un
lenguaje claro, consistente y preciso. Para ello hay que evitar un lenguaje emotivo o vago.
No es adecuado hacer que un argumento parezca bueno caricaturizando a su oponente o
la idea que está rebatiendo. Con ello se evita la falacia, mediante la cual se ataca a la
persona de la autoridad y no su argumento. Se viola esta regla cuando se utilizan
6. argumentos cargados emocionalmente, cuando se ataca a la persona que formula el juicio
y no a su argumento o cuando se utiliza lenguaje impreciso.
5. La regla de la Coherencia: Dice que siempre se debe usar un único significado para
cada uno de los términos referenciados en un ensayo. Con ello se evitaría la falacia de la
“ambigüedad”. Con esta regla lo que se busca es que el texto guarde coherencia y que
siempre que se utilice un término sea preciso el significado que se quiere formular. De allí
que cuando se utilicen términos que tienen diversas acepciones o que sean utilizados de
una manera diferente a su acepción más frecuente sea necesario el precisar en qué
sentido se esta utilizando el término
6. Regla de la Comprobación: Fue prevista para que el propio escritor de un artículo o
ensayo realice su comprobación y determine si el argumento previsto es o no es un
argumento. Las reglas para los argumentos diría que formulada una tesis y señalado un
posible argumento se debe verificar si la proposición prevista es efectivamente un
argumento.
7. Reglas de las Fuentes: Al tener en cuenta el contenido, como fue formulado
anteriormente, las afirmaciones presentan niveles y grados de veracidad. De allí que
deben existir reglas cuyo propósito sea asegurar, hasta donde sea posible, mayores
niveles de certeza. La regla de las fuentes es una de ellas y parte de un principio
supremamente simple: Siempre son preferibles argumentos provenientes de fuentes
mejor informadas e imparciales. Por ello, siempre es necesario citar las fuentes utilizadas
y preguntarse si están informadas dichas fuentes, si son imparciales y si son
comprobables sus afirmaciones.
8. Regla de Causalidad: Que dos hechos se presenten simultáneamente no significa
necesariamente que uno de los dos sea causado al otro, ya que puede corresponder a
una simultaneidad sin dirección determinada, a una simultaneidad casual o una
simultaneidad en la que tanto A como B son originados por otro factor. Otra manera de
violar esta regla de la argumentación es confundiendo correlación con causalidad. La
diferencia entre estos dos conceptos está en que en la correlación dos hechos se
presentan simultáneamente, pero sin poder determinarse si uno origina al otro, si es al
revés o si los dos están siendo originados por un factor externo. Es decir, en la correlación
no podemos establecer la direccionalidad, mientras que en la causalidad si la podemos
establecer.
Técnicas de soporte para respaldar las afirmaciones
7. Durante la vida, siempre surgirán ocasiones en las que exista la oportunidad de
hablar ante una audiencia. Bien sea para realizar alguna explicación, dar un
discurso o emitir opinión acerca de un tema. Para obtener buenos resultados
deben dominar la oratoria.
1. La voz. Una buena voz facilita la labor del orador y debe reunir los requisitos de
calidad, alcance, intensidad, claridad, pureza, resistencia y flexibilidad.
2. La respiración. Para la oratoria, una respiración diafragmática es la más
aconsejada, ya que permite inspirar más aire y utilizar el diafragma al momento de
hablar. Este tipo de respiración permite hablar con claridad y facilidad.
3. La articulación. Esfuérzate en practicar la pronunciación clara y distinta de las
palabras. La mala pronunciación de consonantes o vocales, dan como resultado
una mala expresión oral.
4.-La impostación de la voz. Impostar la voz significa fijar la voz en las cuerdas
vocales para emitir el sonido sin vacilación ni temblor. Es hablar sin esfuerzo y con
naturalidad.
5. La velocidad. Se trata de la rapidez del discurso que puede variar
dependiendo de las ideas expresadas. Es recomendable que al dirigirse a un
público numeroso la velocidad sea menor que si nos dirigimos a un público
pequeño.
6.-Las pausas y silencios. Las pausas corresponden a los signos de puntuación
en los discursos leídos y se aprovechan para tomar aire. Al hablar, no deben ser
largas, pueden utilizarse para separar grupos de ideas de un párrafo, para
anticipar frases o ideas que deseamos destacar y para meditar lo que se va a
decir a continuación.