La autora describe su trayectoria como maestra y su confrontación inicial con la docencia. Al principio le resultó difícil enfrentarse a alumnos de su misma edad y no saber cómo elaborar una planeación de clase. Sin embargo, con el tiempo descubrió su amor por la enseñanza a pesar de los sacrificios que conlleva. Ahora siente orgullo cuando se encuentra con exalumnos exitosos y ama su trabajo como maestra. Alienta a otros docentes a no desistir ante los tropiezos y a compartir valores que contribuyan al des
1. Ramírez_Maria_Miconfrontaciónconladocencia.doc.
Soy de una familia donde algunos de ellos son maestros, cuando estudiaba
la secundaria admiraba mucho a una maestra, me encantaba la forma en que
nos daba la clase , su forma de ser, su imagen, su seguridad con la que nos
hablaba, al terminar la secundaria estudie el C.B.T.I.S. 86, me encontraba en
el segundo grado cuando me dio clases la maestra Rosario, fue en ese
momento, cuando nació en en mi el gusto de algún día ser maestra de
Ingles, estudie la normal superior, pero cuando aún no terminaba de
estudiar me ofrecieron trabajo en el COBAEP, en esos momentos yo me
encontraba renuente pues aún no quería trabajar, sentía que todavía no era
el momento, sin embargo no me quedo otra opción, pues mi situación
económica no era muy buena, así que acepte el trabajo, recuerdo que fue
una época difícil pues yo ya estaba casada con una hija pequeña, entre a
trabajar y realmente no sabía ni como elaborar una planeación de clase, ni
un avance programático, además mis alumnos tenían casi mi misma edad y
enfrentarme a ellos en un principio fue difícil en el primer bimestre. Después
fui descubriendo el amor por la docencia, aunque es una labor muy
sacrificada y ahora no es valorada por la sociedad como en los años 80´s,
donde el maestro era respetado como tal, claro son nuevas generaciones y
nuevos intereses tanto del ser humano como de la sociedad en general, por
lo tanto nos debemos seguir preparando de acorde a las épocas y evitar estar
desfasados. Afortunadamente he tenido más satisfacciones que tropiezos y
una de mis satisfacciones es cuando encuentro a mis alumnos que ya son
profesionistas, los cuales me saludan muy afectuosamente, esto me llena de
orgullo porque yo también contribuí en su formación para la vida. Ahora les
puedo comentar que es para mí un gusto dar mis clases, porque amo mi
trabajo y me siento muy orgullosa de ser docente. A mis compañeros de la
MEB los invito a seguir adelante y no desistir ante los tropiezos, los invito a
compartir los valores que contribuyan al desarrollo de actitudes de crítica, de
cooperación, de solidaridad, de creatividad, tolerancia, etc. pará que juntos
logremos transformar y fortalecer nuestro compromiso como docentes.