Este documento ofrece requisitos y expectativas para ser parte del ministerio de alabanza de una iglesia. Se enfatiza la importancia de la espiritualidad, motivación y preparación de los miembros individuales, así como que el grupo en general sea lleno del Espíritu Santo, viva lo que predica y sirva como ejemplo para la congregación. También se destacan aspectos como la vestimenta adecuada, puntualidad y flexibilidad.