2. La exposición Luces de Bohemia: artistas, gitanos y la
definición del mundo moderno en la Fundación Mapfre
ha sido organizada conjuntamente por la Fundación
Mapfre y la Réunion des Musées Nationaux-Grand Palais
de París. Anteriormente se pudo ver en el Grand Palais
de París, bajo el título genérico de Bohèmes (por cierto,
con un montaje mucho más amplio y adecuado). Con
gran acierto en Madrid se ha cambiado el título por el de
la famosa obra teatral de Ramón María del Valle-
Inclán, Luces de Bohemia, publicada en 1920.
El recorrido por la muestra trata de proporcionar una
visión de la historia en común de los vagabundos, de los
gitanos y de los artistas bohemios quienes desde
mediados del siglo XIX, entre el Romanticismo y el
Realismo, empiezan a valorar por encima de todo la
libertad creativa del artista. Abandonan lo académico y
lo establecido para enfrentarse a nuevos retos y, en
consecuencia, un cierto alejamiento de la sociedad. Los
artistas del siglo XIX mirarán con complicidad a este
colectivo de bohemios –étnias gitanas errantes- que
surcan con sus carromatos buena parte de Europa.
3. La pintura, la literatura, la prensa y la música se encargan de
divulgar historias que tienen que ver con jóvenes talentos
condenados a vivir en la marginación para defender su arte.
Nace así la vida bohemia, uno de los mitos de la modernidad.
Entendiendo la vida bohemia como aquella que se identifica
con una vida sin reglas, sin ataduras, en libertad. Es en ese
momento, mediados del siglo XIX, cuando en París muchos
jóvenes artistas que rechazan las normas se refugian en
pequeños guetos como son las buhardillas o las tabernas.
Muchos son genios del arte, son conscientes de su talento
pero son incomprendidos por la crítica y el publico, y por lo
tanto, por la sociedad parisina del momento. Compartirán
su marginalidad y miseria con los bohemios tradicionales y,
poco a poco, este colectivo se convertirá en un mito
identificándolo como garantía de libertad artística y
espiritual.
La bohemia gitana y la bohemia artística se convierten desde
el siglo XIX en modelos privilegiados para los propios
creadores, que buscaban representar y representarse en esa
alteridad. Esta exposición pretende indagar sobre esa
historia común, incidiendo en los encuentros y las
disparidades entre dichas “bohemias” y su papel
determinante en el nacimiento del mundo moderno.
4. Entre las casi cien obras que forman la exposición podemos contemplar cuadros de
Francisco de Goya (Autorretrato ante el caballete, 1790-95), Van Gogh (Las caravanas,
campamento gitano cerca de Arlés, 1888 o Un par de botas, 1886), Édouard Manet (El
bebedor de agua, 1862-72), Paul Signac (El Moulin de la Galette, 1884), J. S. Sargent
(Campamento gitano, 1912-13), Kees van Dongen (Gitana, 1911) y de Pablo Picasso
(Azoteas de Barcelona, 1902) entre otros muchos artistas (y muchas más obras). Esta
colección de obras ha sido posible a los prestamos realizados por prestigiosas
instituciones como: Art Institute de Chicago, la New York Public Library, la Morgan Library
and Museum y la Hispanic Society, de Nueva York, el State Hermitage Museum de San
Petersburgo, el Musée d’Orsay, el Musée du Louvre y el Centre Pompidou, de París, la Real
Academia de Bellas Artes de San Fernando, de Madrid, el Museo Picasso de Barcelona, el
Museo Van Gogh de Ámsterdam o la Tate de Londres, entre otras instituciones.
9. Thomas Gainsborough Paisaje con gitanos, c.1753-54
"Lo que cuenta no es el destino,
sino el camino que se recorre"
10. George Morland: campamento gitano, 1791
George Morland: gitanos, 1800
"Quien viaja mucho, aprende
mucho".
“Si no sabes hacia dónde vas,
acuérdate de dónde vienes".
11. Narcisse Diaz de la Peña: gitanos
en torno a una adivina, 1848
Alexandre Hardy definía a
estos gitanos y vagabundos
como "señores de los prados,
de los montes, de los campos
y de los bosques".
12. Courbet: la gitana y sus hijos, 1853-54
"La tribu profética, de pupilas ardientes
Ayer se ha puesto en marcha, cargando sus pequeños
Sobre sus espaldas, o entregando a sus fieros apetitos
El tesoro siempre listo de sus senos pendientes."
Charles Baudelaire, «Caravana de gitanos», Las flores del mal,
1857
14. Theodor von Holst: el deseo, 1840
EL MITO DE LA GITANA
Se representa la atracción hacia
el ser de una etnia distinta,
capaz de transgredir la norma y
que podía vestirse con colores
atrevidos, con el pelo suelto,
que sonreían mucho y miraban
directamente al hombre
buscando embrujarlo con su
baile. En el siglo XIX las gitanas
se convierten en símbolo de
provocación, libertad y
sexualidad.
29. Louis Gallait: Arte y libertad, 1849.
EL ARTISTA MODERNO
"Estar fuera de casa y sentirse,
sin embargo, en casa en todas
partes; ver el mundo, ser el
centro del mundo y permanecer
oculto al mundo, tales son
algunos de los menores placeres
de esos espíritus
independientes, apasionados,
imparciales [...]"
Baudelaire. El pintor de la vida
moderna. 1863.
43. Vincent van Gogh: Rincón de Montmartre / El Moulin à Poivre, 1887.
MONTMARTRE Y LAS OTRAS ESCUELAS DE LA
BOHEMIA
"No te preguntes si debes morir o vivir, es mejor cantar"
54. Henri Fantin – Latour. Un rincón de mesa 1872 ( Paul Verlaine, Arthur Rimbaud, Elzéar
Bonnier, León Valade, Émile Blémont, Jean Aicard, Ernest D'Hervilly, Camille Pelletan)
París, Musée d'Orsay
56. André Gill: Emblema del cabaret Au Lapin Agile, h 1875-80
Emblema del cabaré Au
lapin Agile, en Montmartre.
Es el último superviviente
de los cabarés artísticos del
siglo XIX y aún permanece
activo.
57. Pablo Picasso: 'Azoteas de Barcelona‘. 1902.
LA BOHEMIA EN BARCELONA
Els Quatre Gats es el principal cenáculo de artistas
modernos. Picasso estuvo desde el principio de la
Bohème en Barcelona.
58. Ramón Casas: el pintor y Pere Romeu en bicicleta, dibujo para la cromolitografía