El documento describe los beneficios de la música para los niños en edades tempranas, incluyendo mejorar el sistema auditivo, ayudar al desarrollo de la memoria y las capacidades motrices, y potenciar las habilidades artísticas, creativas y lingüísticas de los niños, además de favorecer la integración socio-cultural y el desarrollo del sentido rítmico y armónico.