El teatro fue construido entre los años 16-15 a.C. por el cónsul Marco Agripa y tenía una capacidad para unas 6.000 personas. Fue reformado varias veces y finalmente abandonado debido a la implantación del cristianismo. El anfiteatro, inaugurado en 8 a.C., podía albergar a unos 15.000 espectadores. El circo, el edificio más grande de Mérida, tenía una capacidad de 30.000 personas y se usaba para competiciones de carros.