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1. Carlos Sánchezde la Cruz Informe DAFO:
1. ¿Cómo se puede destacar cada fortaleza?
A medida que uno se va acostumbrado tanto a alumnos como a profesores, se
van reforzando ciertos conocimientos y habilidades que nos permiten realizar
las clases y las programaciones con mayor facilidad. Sin duda los primeros
días cuesta, pero poco a poco uno se va haciendo más y más fuerte y cogiendo
cada día más confianza. Sin duda es una experiencia inolvidable que nos
ayuda a tener aún más claro si cabe, por qué hemos elegido esta carrera. Nos
ayuda a reforzar todo lo aprendido durante los anteriores cursos, y a poner en
práctica todas las habilidades y conocimientos que hemos adquirido durante el
grado de magisterio de ed. Primaria.
2. ¿Cómo se puede disfrutar cada oportunidad?
Sin duda las oportunidades que nos brindan tanto profesores como alumnos
son maravillosas, ya que nos permiten aplicar medidas relacionadas con las
TIC para realizar muchas de las clases a lo largo de la semana escolar, y nos
ayudan a programar nuestras propias sesiones dirigidas sobre todo al
conocimiento de las asignaturas a través de las TICS. Con esfuerzo y
dedicación a este maravilloso trabajo, podemos abrir un gran mundo de
oportunidades, y al igual que los profesores hacen con nosotros, nosotros
mismos podemos hacerlo con nuestros alumnos en clase. El director del centro
nos facilitó desde el primer día el aula Altia, a través del cual empezamos a
diseñar nuestras primeras sesiones y a realizar actividades muy sencillas y
didácticas para nuestros alumnos. En definitiva, las oportunidades que se nos
brinda a la hora de realizar el Prácticum son múltiples y muy variadas, pero
sobre todo muy beneficiosas y útiles para saber de verdad a qué nos estamos
dedicando.
3. ¿Cómo se puede defender cada debilidad o carencia?
Sin duda los primeros días suponen un gran reto, el cuerpo nos tiembla y
vamos con un poco de miedo a la hora de enfrentarnos a esos “pequeños
gigantes”. Es duro saber que desde el primer día tienes que hacerte valer y
hacerle ver a los alumnos que eres capaz de saber dirigir una clase bien y
correctamente. Sin embargo, existen muchas estrategias y tácticas que ayudan
a la hora de enfrentarnos a estas duras pruebas. Estrategias, como he dicho,
que hemos ido adquiriendo a lo largo de los cursos de la carrera y que los
profesores del centro nos han facilitado también. Yo llegué a emplear diferentes
estrategias para que los niños prestaran atención y no perdieran el interés a la
hora de realizar tareas o de explicar un temario. Siempre me funcionaron y las
encontré muy útiles a la hora de expresarme también con los alumnos. Pero sin
duda, la mejor manera de defender nuestras posibles debilidades ante los
alumnos a los que vayamos a dirigirnos son: “ser tú mismo”, “no ponerte nunca

2. nervioso” y tener siempre “una salida para todo”. Son las 3 reglas que he
aplicado siempre y que me ayudaron a conseguir estar siempre con la fuerza y
entrega necesaria para que las clases vayan genial.
4. ¿Cómo se puede detener cada amenaza?
Sin duda es para mí la peor parte. En todas las clases siempre suele haber al
menos un niño o varios más problemáticos, ya sea porque sacan notas
demasiado bajas o porque apenas prestan interés en clase o se dedican a
llamar la atención y distraer a los demás. Hay muchas maneras de parar esto.
Aunque en algunas ocasiones el castigo esté mal visto, en varias ocasiones me
tocó hacerlo, y sacar a algunos de los alumnos más problemáticos al pasillo o
dejarles sin recreo. De todos modos, la mejor forma de evitar todo esto es
intentar reforzar siempre la atención del alumno, o en caso de falta de afecto
por el resto de compañeros o motivos semejantes, integrarle siempre en tareas
grupales que le ayuden a ver lo bueno que puede ser el compañerismo en
clase y a reforzar su atención e interés en clase, haciendo que valore más lo
que hace. Otra estrategia que funciona también es la famosa “recompensa por
el trabajo bien hecho”, como puede ser compensarlo con algún premio a la
hora de realizar las actividades correctamente. En mi caso, estuve trabajando
con actividades en la aplicación Aula Virtual, y a la hora de sacar a alumnos a
la pizarra y realizar las tareas con el ordenador, compensaba a aquellos que lo
hacían bien, haciendo que todos ellos prestaran mayor atención a las
actividades y mostraran más interés cada día que pasaba para seguir
trabajando los diferentes contenidos de cada asignatura.