1. El documento habla sobre Santo Tomás de Aquino, un teólogo y filósofo católico del siglo XIII, considerado uno de los más importantes representantes de la escolástica.
2. Su obra más conocida es la Suma Teológica, en la cual pretende exponer de modo ordenado la doctrina católica.
3. Fue canonizado en 1323 y nombrado Doctor de la Iglesia en 1567. Se le considera santo patrón de las universidades y centros de estudio católicos.
1. SANTO TOMÁS DE AQUINO
Tomás de Aquino, en italiano Tommaso D'Aquino (Roccasecca o Belcastro,
Italia 1224/1225 –Abadía de Fossanuova, 7 de marzo de 1274) fue un teólo-
go y filósofo católico perteneciente a la Orden de Predicadores, el principal
representante de la tradición escolástica, y fundador de la escuela tomista de
teología y filosofía. Es conocido también como "Doctor Angélico" , "Doctor
Común" y " Doctor Universal".
Es considerado santo por la Iglesia Católica. Su trabajo más conocido es la
Suma Teológica, tratado en el cual pretende exponer de modo ordenado la
doctrina católica. Canonizado en 1323, fue Doctor de la Iglesia en 1567 y santo
patrón de las universidades y centros de estudio católicos en 1880. Su festivi-
dad se celebra el 28 de enero
Resumen de las vías
Primera Vía: Esta vía habla del movimiento que es observable por los sentidos. En la
primera vía, Santo Tomas es influido por Aristóteles y Averroes. En primer lugar, para
demostrar la existencia de Dios, Sto Tomás parte de un fenómeno natural observable: hay
movimiento en el mundo. Define el movimiento como el paso de potencia al acto. Todo lo
que se mueve es movido por otro, este es el principio de causalidad, que niega el
automovimiento. Por ejemplo, un tren compuesto por distintos vagones en movimiento,
los vagones son movidos por una locomotora, éste sería el primer motor y el resto de
vagones serían los motores intermedios. No podríamos remontarnos al infinito en esta
serie de vagones sin llegar nunca a la locomotora. El primer motor que no es movido por
nadie, y que causa el movimiento de los otros, es Dios.
Segunda vía: Se encuentra influenciada por Aristóteles. Trata de la demostración de la
existencia de Dios, a partir de la existencia de causas eficientes. En el mundo hay un
orden de causas eficientes, pero nada es causa de si mismo, porque seria anterior a si
mismo. Es decir, no podemos afirmar, que seamos la causa de nuestra propia existencia;
es obligatorio que haya una causa externa por la cual existimos. Por ejemplo: Una niña
está en el mundo debido al parto de su madre, a su vez la causa de la existencia de la
madre es la abuela y así sucesivamente. Sin embargo, no podemos remontarnos al
infinito, porque esto no tendría ningún sentido, asi que necesitamos aceptar la existencia
de una primera causa, fuente de todas las demás, no causada por nada y esta causa es
DIOS.
Tercera vía: En esta vía, el autor es influenciado por Avicena, Aristóteles y Maimónides.
Es llamada vía de la contingencia y parte de que en la naturaleza, hay seres contingentes,
es decir, que pueden ser de otra manera, pueden existir o no existir. Cualquiera de
nosotros existe hoy pero podría no existir mañana, o simplemente no haber existido
nunca. Cualquier ser es contingente. Sin embargo si afirmamos que todos los seres son
contingentes, también tenemos que aceptar que hubo un tiempo en el que nada existió.
Cualquier ser que existe, no empieza a existir más que por algo que ya existe. Por tanto si
hubo un tiempo en el que no existió nada es imposible que empezara a existir algo.
Tenemos que aceptar la existencia de un ser que no sea contingente, es decir que sea
necesario y esto significa que ha existido siempre, que es eterno y que su existencia no
depende de ningún otro ser. Este ser necesario a partir del cual existen todos los demás
seres es DIOS.
2. Cuarta vía: Ésta es la vía de los grados de perfección, está influenciada por Platón y
Plotino. Es un hecho de existencia innegable (perceptible por los sentidos), que hay unos
seres más perfectos que otros, todos no son iguales. El ser que reúne todas las
perfecciones en grado sumo es el máximo ser, que a su vez es causa de la existencia del
resto de los seres. Por ejemplo, el máximo frío es la causa de todos los fríos. Si no
existiese el ser perfecto no sería posible que nosotros pudiésemos alcanzar algún grado de
perfección, porque no habría referente con el que compararnos. Esto es, lo máximo es la
causa de la existencia de lo mínimo; lo bueno es causa de la bondad de los seres buenos,
así como de la existencia de éstos. En conclusión este ser, responsable de la bondad, la
perfección y la nobleza de los seres es DIOS.
Quinta vía: En esta vía Santo Tomás es influenciado por Aristóteles, Platón y Anaxágoras.
Se basa en el orden que rige en las cosas y los seres pertenecientes a nuestro mundo.
Para poder entender esta concepción de la realidad y su funcionamiento debemos partir de
un hecho de existencia, el cual es, que todos los seres naturales, incluso los que carecen
de conocimiento, obran para alcanzar un fin.
Todos luchan para conseguir un objetivo, y para llegar a su consecución, se debe seguir
un proceso de manera ordenada que responda a un plan, no al azar.
Por ello podemos decir que para poder alcanzar sus objetivos y fines, como estos seres,
han de llevar a cabo un proceso ordenado para alcanzar un fin de forma intencionada.
Necesitamos postular la existencia de otros seres inteligentes que les dirijan y orienten
hacia sus objetivos, para evitar la formación de nuevo de una cadena que se remonte al
infinito. La existencia de esta cadena no puede ser posible, porque no explicaría nada, y
como el azar no puede ser causa del orden del universo, debe existir necesariamente un
ser eterno, inmutable, e imperecedero a partir del cual, se ordenan todas las cosas
naturales y sus movimientos para alcanzar diversos fines. Este ser lo llamamos Dios.
1ª Objeción
La primera de las objeciones se apoya en la existencia del mal. En el mundo hay mal y eso
está comprobado por los sentidos. Suponiendo que Dios representa el bien absoluto, el
mal quedaría anulado. Esto quiere decir: si uno de los contrarios es infinito, el otro
quedaría anulado. Observamos que esto no ocurre así. En el mundo hay mal, y eso nos
lleva a pensar que Dios no existe.
Respuesta a la primera objeción:
Siguiendo a San Agustín, afirma: Dios nunca permitiría que existiese ningún mal, a no ser
que de este mal sacara un bien. Esto forma parte de la gran bondad de Dios que permite
el mal, porque considera que de él se puede sacar un bien mayor, (indirectamente, Sto.
Tomas esta hablando de la libertad; es preferible ésta a su no existencia, ya que de lo
contrario, perderíamos nuestra capacidad de elegir).
2ª Objeción
Todos los fenómenos y actos, encuentran su razón de ser o causa en una serie de
principios, sin tener que recurrir a Dios como causa suprema; lo que es natural encuentra
sus principios en la naturaleza, y todo lo que conlleva una intención, tiene su causa en la
razón y voluntad del ser humano. Por tanto, no necesitamos recurrir a la existencia de
Dios para encontrar nuestra razón de ser y de los fenómenos que nos rodean.
Respuesta la segunda objeción:
3. Santo Tomás responde alegando que las leyes de la naturaleza no pueden explicar por si
mismas todos los fenómenos naturales, ya que estos actúan por un fin, y necesitan una
primera causa que los dirija, una inteligencia ordenadora, tal y como queda demostrado
en la quinta vía, la cual es Dios. También debemos destacar que toda acción realizada
intencionadamente necesita tener como origen una causa superior, ya que la razón y la
voluntad humanas, son cambiantes y poco seguras. Por eso, se necesita la existencia de
una figura que dirija y ordene nuestra realidad, Dios.
2. Nociones
Movimiento y Primer motor
En esta primera noción Santo tomas emplea el movimiento y el primer movimiento para
probar la existencia de Dios. Se fundamenta en la física de Aristóteles, y usada también
por Maimónides y san Alberto Magno.
Está claro que los sentidos nos muestran que en el mundo hay cosas que se mueven o
que cambian, por lo tanto la existencia del movimiento es innegable y evidente para
Aristóteles y Santo Tomás, incluso para nosotros. El movimiento es cuando se está en
potencia, y es imposible estar en acto y potencia a la misma vez respecto a lo mismo, por
ejemplo: es imposible estar a la vez en potencia y en acto de ser adolescente.
Santo Tomás también explica el principio de causalidad según la cual: ''todo lo que se
mueve es movido por otro'' según él por Dios, un motor inmóvil, perfecto ya que no
necesita buscar nada ya que tiene el máximo nivel de perfección. Este principio se basa en
otras dos:
- Todo lo que se mueve es movido por algo. Sí pues, lo que se mueve o está en
potencia, es movida por otro que está en acto. Lo que está en acto es la causa de que otro
se mueva y esté en potencia. Por ejemplo: Una comida en el congelador está en potencia
de estar fría, ya que el acto del congelador helado hace que esté la comida en potencia
fría.
- Lo que se mueve no puede ser lo mismo que lo que es movido.
También nos encontramos por otra parte, que es imposible remontarse al infinito
buscando la causa en acto que provoca el movimiento de cada cosa. Por lo tanto, si
tenemos una serie de motores móviles en la que cada uno mueve al siguiente tendremos
que aceptar un primer motor, uno que moverá a todos los demás, un motor inmóvil al
que todos llamamos Dios.
Causa eficiente primera y ser necesario
La segunda vía encuentra su origen en Aristóteles (Metafísica Libro II 2). Pero
fueron Avicena y Alberto Magno quienes utilizaron el razonamiento para demostrar la
existencia de Dios. Santo Tomás sigue especialmente de cerca al primero de ellos.
En esta segunda vía se trata de constatar que hay un orden de causas eficientes. Esto
significa constatar que hay cosas que producen otras y son a su vez producidas, por
ejemplo, un hombre engendra a otro gracias a que es un ser humano, pero su humanidad
4. hubo de ser producida por otro ser.
A este punto de partida se aplica el principio de causalidad bajo esta formulación: no hay
nada que pueda ser causa de sí mismo. En efecto, en cuanto que el efecto depende
esencialmente de la causa, ésta ha de ser necesariamente anterior a aquél, pero así las
cosas, algo que fuese causa de sí mismo sería algo que estaría ya producido antes de ser
producido, lo cual es imposible; por ejemplo el primer ser humano no pudo engendrar su
humanidad, pues para eso tendría que haber existido antes de existir.
Mas, y aquí radica el tercer fundamento de la prueba, no podemos remontarnos
al infinito en la serie de las causas, por ejemplo tiene que haber un ser distinto al
hombre que sea la causa de su humanidad.
Tiene que haber una causa primera que explica la existencia de todas las cosas y
que es ella misma incausada. Es lo que entendemos por Dios.
La tercera vía es estática y parte de este hecho de experiencia: hay seres que
nacen y mueren y por tanto son contingentes o posibles. Pero, o bien todos los seres son
contingentes, o no. Si todos los seres son contingentes, en la hipótesis de un mundo de
duración infinita, nada existiría ahora, pues un ser sólo puede llegar a ser por virtud de
otro que ya es. Esto último es evidentemente absurdo, por lo que se deduce que no todos
los seres son contingentes o lo que es lo mismo que hay un ser necesario, un ser que sea
por sí mismo necesario. Es Dios por cuanto un ser necesario por sí mismo no tiene la
existencia recibida ni participada, sino que es la existencia misma o el Ser.
Ser perfectísimo e inteligencia Ordenadora
El trayecto comenzado por Sto. Tomas para definir la esencia de Dios, pasa por adjudicar
a Dios cualquier perfección que queramos admirar en la naturaleza de los seres humanos.
El ser perfectísimo es el que obtiene un grado máximo de conocimiento sobre la bondad,
la verdad y la unidad. Existe, algo que es verísimo, óptimo y nobilísimo, y por tanto es
verdadero al máximo. En el mundo hay entes que se acercan a estas cualidades de forma
gradual y poco a poco a este máximo. Existe algo que es verdadero, noble y bueno y por
consiguiente, esto es algo que ya esta en el grado máximo. Pero lo optimo (máximo) en la
verdad, también es optimo en el ser. El máximo de cada género es la causa, de todo dicho
género. Debe haber algo que para todos los entes sea la causa de su bondad, su ser y de
todas sus perfecciones, y a este algo se le llama Dios.
En la quinta prueba para probar la existencia de Dios, Santo Tomás considera a éste como
causa del orden del mundo, como una ''inteligencia ordenadora'' que rige y dirige el
ordenamiento del mundo. Santo Tomás se remite al origen de la demostración a san Juan
Damasceno. Este argumento se basa en que los seres carentes de conocimiento como un
árbol, obran por un fin, ya que actúan de la misma manera para alcanzar lo mejor. Por lo
tanto no pueden actuar por azar o casualidad, ya que estos cuerpos naturales actúan así
frecuentemente, siempre igual e intencionadamente. Por lo tanto, santo Tomás hace uso
del principio de casualidad: ''Lo que carece de conocimiento no tiende a un fin si no lo
dirige alguien que entienda, como el arquero a la flecha''. Por lo tanto, los agentes
naturales precisan de una inteligencia ordenadora que los dirija para conseguir sus fines.
Estos seres directores no pueden remontarse al infinito, luego tiene que existir
necesariamente un ser inteligente por el cual todas las cosas naturales se ordenan a su
fin, y a ese ser le denominamos Dios. Si nosotros no admitimos la existencia de un ser
necesario, quedaría totalmente imposibilitada la existencia de otro ser contingente, puesto
que no habría otra cosa en el mundo, que hiciera posible su existencia real. Y como no
podemos remontarnos al infinito en la búsqueda del ser necesario, concluimos finalmente
que este es Dios.
Existencia de Dios y existencia del mal
Sto. Tomas considera que la existencia de Dios no es algo evidente por si mismo
contrariamente a la tesis de San Anselmo, para quien sí es evidente, ya que utiliza una
5. demostración a priori: "Dios es el ser mayor que el cual nada puede ser pensado". En la
consideración de la existencia del mal, (sigue a San Agustín) afirma, que Dios, por ser el
ser perfectísimo no admitiría el mal en el mundo, a no ser que de él extrajera algún bien.
Este es el caso, Dios que es absolutamente bueno, concede al hombre la posibilidad de
elegir entre el bien y el mal. Concede que la libertad humana es un bien, sólo que
condicionado a la actuación real del hombre. Según esto, aquellas conductas que permiten
la realización de las inclinaciones naturales son buenas y las que sean antinaturales malas.
3. Síntesis
3.1. Teología racional y teología revelada.
El texto de Sto. Tomas brinda una ocasión perfecta para rebatir las tesis de aquellos que
se niegan a creer en Dios, o bien la de aquellos que no aceptan el argumento ontológico
de San Anselmo, y se ampara en la idea de que la fe y la razón son dos entidades
separadas. Diferenciándose en esto también de San Agustín.
Las vías pretenden demostrar la existencia de Dios, para ello utilizará la razón como
instrumento lógico a la hora de argumentar.
STO. TOMAS distingue perfectamente entre el conocimiento acerca de Dios que es objeto de
la Razón y el conocimiento de Dios objeto de la Fe. Así, él tiene claro que verdades del tipo
"Dios es Uno y Trino", "Dios murió y resucitó", etc.... no pueden ser sabidas y demostradas
por la Razón natural del hombre: solo pueden ser creídas; y en este sentido resultan objeto
de Fe.
Ahora bien, Sto. Tomas, siguiendo a ARISTOTELES, sostiene que verdades como
"Dios existe", y otras relativas a la esencia y atributos de Dios, sí son susceptibles de prueba
o demostración racional: de ahí la posibilidad de una Teología natural, racional o
filosófica que funcione como preámbulo o introducción a la Teología sobrenatural,
revelada o religiosa.
Existe una clara distinción entre la filosofía y la teología, o lo que es lo mismo, entre la
razón y la fe. Los artículos de fe, como los dogmas o misterios, solo pueden ser creídos
por fe. Sto. Tomas define la fe como un acto del entendimiento movido por la voluntad a
la que Dios asiste mediante la gracia. Los artículos de fe son inaccesibles a la razón, nos
resulta imposible comprenderlos, y por eso la teología se ocupa de su estudio. Un artículo
de fe es la esencia de Dios, lo que Dios es.
Por otro lado, la razón se ocupa de investigar los entes, las cosas naturales; para ello
parte de los axiomas, como las verdades evidentes en sí mismas, y sus conclusiones se
mantienen en el ámbito de lo racional y lo natural.
Se debe encontrar la concordancia entre la razón y la fe. De ahí que T. Aquino afirme que
la filosofía es la sierva de la teología.
Este es el punto de conexión que nos permite llegar a los preámbulos de la fe. Estos son
verdades que requieren de una demostración racional para la fe, la primera es la
existencia de Dios. De esta forma se puede llevar a la razón en un proceso ascendente,
hasta la revelación y después descender desde la revelación a las verdades naturales que
estudia la razón.
Si cualquier verdad de razón contradice una verdad de fe, siempre será falsa la primera.
Prevalece la verdad de la fe, frente a las limitaciones de la razón.
En tanto que para el agustinismo filosófico no hay separación entre filosofía y teología,
entre razón y fe, pues ambas colaboran solidariamente en el esclarecimiento de la verdad:
la razón sirve a la fe y la fe ilumina a la razón. La razón sola, sin la fe, no puede alcanzar
la verdad (que es Dios). Su máxima expresión es credo ut intelligam. (Crees en la medida
en que comprendes).
San Anselmo coge el principio agustiniano de la necesidad de la fe para poder
conocer la verdad. Sin fe no se puede alcanzar la verdad. Sin embargo como veremos en
el texto, para Sto. Tomas esta demostración no es valida porque parte de la esencia de
6. Dios, por eso el propone las cinco vías.
3.2. Las vías y su estructura lógica
Santo Tomas cree en la posibilidad de establecer una demostración de la existencia de
Dios basada en la razón, ya que esta no es evidente para nosotros; Para ello utiliza las
vías, que no se basan en la fe en la existencia de Dios, sino en un proceso lógico y
razonado que nos lleva hasta la concepción de la existencia de Dios.
Para este filosofo existen dos clases de demostraciones: una llamada propter quid , en la
cual se parte de la idea de algo y se deducen ciertas propiedades a partir de esta
idea:Con S. Anselmo, si creemos que Dios es el ser mas perfecto de todos, seria una
imperfección que no existiera, por lo tanto debe existir. Pero santo Tomas se opone a esta
clase de demostración ya que piensa que la esencia y la existencia son conceptos
separados, ya que no podemos deducir la existencia de Dios a partir de la idea del mismo.
Por ello Santo Tomas utiliza otro tipo de demostración llamado quia que parte del
principio de causalidad, que se encuentra omnipresente en sus cinco vías. Estas vías
recorren distintos caminos para remontarse racionalmente hasta Dios, todos los cuales
aplican el principio de causalidad. Las vías recorren de forma explicita los caminos que
sigue naturalmente la razón humana para concluir que existe el ser supremo y presentan
una estructura más o menos semejante, que es la siguiente:
Se parte siempre de un fenómeno natural que sea observado es decir, un hecho de
experiencia sensible.
A este hecho de experiencia se le aplica siempre el principio de causalidad. Cada
fenómeno viene a ser explicado en función de una causa que le precede.
Se afirma que es imposible remontarse al infinito en la serie de las causas, ya que
si no existiera una causa primera no podrían tener lugar todas las demás y tampoco sus
respectivos efectos. Pero como nosotros somos capaces de percibir esos efectos mediante
nuestra experiencia sensible es necesaria la existencia de esa causa primera para explicar
este efecto.
Por ultimo, se llega a la conclusión de que esa causa inmutable, imperecedera y
eterna es Dios, siendo éste, el ser y la esencia en si mismo.
A continuación resumiremos muy brevemente las cinco vías de Santo Tomas y su
desarrollo:
Primera vía: El movimiento como actuación del móvil: Es cierto y consta por los
sentidos, que en este mundo algunas cosas son movidas. Pero todo lo que es movido es
movido por otro. Por tanto, si lo que mueve es movido a su vez, ha de ser movido por
otro, y este por otro. Mas así no se puede proceder hasta el infinito. Luego es necesario
llegar a un primer motor que no es movido por nada; todos entienden que éste es Dios.
Segunda vía: Experiencia de un orden de causas eficientes: Vemos que en este
mundo sensible existe un orden de causas eficientes; pero no vemos ni es posible que
algo sea causa eficiente de sí mismo, porque de lo contrario sería anterior a sí mismo, lo
cual es imposible. Ahora bien, no es posible que en el orden de causas eficientes se
proceda hasta el infinito. Luego es necesario suponer una causa eficiente primera, que
todos llaman Dios.
Tercera vía: La contingencia o limitación en el existir: Nos encontramos con cosas
que tienen posibilidad de existir y de dejar de existir, pues algunas se engendran y se
corrompen. Ahora bien, lo que tiene posibilidad de no existir alguna vez no existe. De ahí
que si todas las cosas tuviesen esa posibilidad de no existir, alguna vez no habría existido
nada, y por consiguiente ahora tampoco, pues de la nada no procede nada. Pero dado que
ahora existe algo, se entiende que algo ha de ser necesario, y esto, en última instancia,
es Dios.
7. Cuarta vía: Diversos grados de perfección en las cosas: Encontramos en este mundo
cosas más o menos buenas, más o menos verdaderas, más o menos nobles, y otras
cualidades así. Ahora bien, el más y el menos se dicen de cosas diversas según la diversa
aproximación a lo que es máximo en ese orden. Por eso ha de haber algo que sea óptimo,
nobilísimo, máximamente verdadero y, por consiguiente, máximo ser. Y como lo que es
máximo en un género es causa de todo lo que se contiene bajo ese género, ha de haber
un máximo ser causa de la bondad, de la verdad, de la nobleza y de las demás cualidades
por el estilo; y este es Dios.
Quinta vía: El gobierno de las cosas: Vemos que algunas cosas que carecen de
conocimiento, esto es, los cuerpos naturales, obran con intención de fin. Ahora bien, las
cosas que no tienen conocimiento no tienden a un fin si no son dirigidas por algún ser
cognoscente e inteligente. Luego existe algún ser inteligente que dirige todas las cosas
naturales a un fin; que es lo que llamamos Dios.
4. Contextualización
Santo Tomás de Aquino es un pensador del siglo XIII, época caracterizada por el
resurgimiento cultural de Europa, gracias al auge de las ciudades y del comercio, el
florecimiento del arte gótico, la creación de composiciones polifónicas y la fundación de las
primeras universidades, también la aparición de las órdenes mendicantes. Históricamente
se trata de un período en el cual aparece la idea de una cristiandad universal enturbiada
por el enfrentamiento entre el imperio y el papado, enriquecida por los intercambios
culturales entre el mundo islámico y el cristiano propiciado por las cruzadas y por la labor
de la Escuela de Traductores de Toledo
Este texto pertenece a la obra Suma Teológica. Esta obra inmortalizó a Santo Tomás. El
autor mismo la consideraba sencillamente un manual de la doctrina Cristiana para
estudiantes. En realidad es una completa exposición, ordenada con criterio científico, de la
Teología y a la vez un sumario de la Filosofía Cristiana. En la cuestión introductoria "De la
Doctrina Sagrada", demuestra que además del conocimiento que proporciona la razón, la
Revelación es necesaria también para salvarse, primero porque sin ella, el hombre no
puede conocer el fin sobrenatural al que deben tender por sus actos voluntarios, segundo,
porque sin la Revelación, incluso las verdades sobre Dios que pueden demostrarse con la
razón serían conocidas "sólo por unos pocos,". Cuando se han aceptado las verdades
reveladas, la mente del hombre puede explicarlas y sacar conclusiones de ellas. De aquí
nace la Teología(racional); La razón se usa en Teología no para demostrar las verdades de
la fe, que se aceptan por autoridad divina, sino para defender, explicar las verdades que
tienen su fundamento en la razon.
El texto que esta sujeto a nuestro estudio se encuentra en el artículo 3 de la cuestión 2
de la obra titulada “si Dios existe”. En este primer articulo se expone si la existencia
de Dios es evidente en si misma, aquí Santo Tomas se opone al pensamiento de que la
existencia de Dios esta impresa en nosotros por la naturaleza, ya que piensa que su
existencia es evidente pero nosotros necesitamos recorrer un proceso basado en la razón
y en la lógica para aprobar su existencia. De esta forma en el artículo 2 se plantea si Dios
existe o no existe; y la respuesta a esta pregunta se encuentra en el siguiente artículo
donde se demuestra finalmente la existencia de Dios.
A continuación, analizaremos los distintos pensadores que influyeron en el pensamiento
de Tomas de Aquino:
8. Debemos destacar a Platón ya que influye de manera directa en la filosofía de Santo
Tomás; de él toma la idea de los grados de participación-perfección: Según Platón, las
cosas del mundo sensible participan de las ideas del mundo inteligible; lo mismo ocurre
con los cosas de este mundo (entes). Cada cosa participa, toma, de Dios, en algún grado
o medida su bondad, nobleza y verdad, tal y como vemos reflejado en la cuarta vía;
También toma su concepto de dualismo cosmológico, (Mundo de las Ideas- Mundo de las
Apariencias), que el Aquinate adaptará a su concepto de Cielo y Tierra.
San Agustín su filosofía domino ampliamente el panorama intelectual de occidente hasta
el siglo XIII. Las características del agustinismo filosófico son las siguientes: no hay
separación entre la filosofía y la teología, entre la fe y la razón, ambas colaboran en el
establecimiento de la verdad; la razón sirve a la fe y la fe ilumina a la razón. Este
concepto también es utilizado por Santo Tomas, si bien, este último apostará por la
defensa de su independencia, (separación y autonomía entre fe y razón).
San Agustín mantuvo el dualismo antropológico platónico, separando el alma y el cuerpo.
Tesis que también acepta el Aquinate. Según S. Agustín, Dios ilumina la mente humana
para que esta pueda conocer la verdad; la voluntad predomina sobre el conocimiento,
mientras que para Santo Tomas era todo lo contrario, el entendimiento predominaba sobre
la voluntad. S. Agustín desconfiaba de las pruebas físicas de la existencia de Dios,
mientras que Santo Tomas se basa en hechos empíricos ( movimiento, causa-efecto,
contingencia...) para probar dicha existencia.
La filosofía de Aristóteles había tenido una recepción más lenta en Occidente,
especialmente la Metafísica, de la mano de dos filósofos árabes, Avicena y Averroes, que
interpretaron los textos de Aristóteles de una manera que era difícilmente compatible con
la fe cristiana. Consecuencia de esto es que Tomas coge de Avicena la distinción entre
esencia y existencia , y la idea de la contingencia, aparece plasmado en la tercera via. Se
distancia de Averroes en las tesis de la doble verdad, argumentado que sólo hay una
verdad, la verdad procedente de Dios; niega también la mortalidad del alma, así como la
eternidad del mundo, ya que estas invalidarían la doctrina cristiana.
Aristóteles: fue el filósofo que mas influyo en la forma de pensar de Santo Tomas, estos
son los conceptos más importantes que tomo de él, pero matizados por su concepción
cristiana de la realidad:
Ontología: conceptos de forma/materia, acto/potencia, substancia/accidente,
conceptos a los que Santo Tomás añade la oposición metafísica esencia/existencia.
Teología natural o racional: Aplica el procedimiento racional principalmente en la
primera, segunda y quinta Vía, o en la concepción de Dios como motor inmóvil, acto puro
y forma inmaterial.
Teoría del conocimiento: primacía de la experiencia en la fundamentación del
conocimiento, aunque éste no se limita a lo dado a los sentidos: podemos conocer las
realidades trascendentes (Dios y el alma).
Antropología: concepción biologista del alma, división tripartita del alma:
vegetativa, sensitiva e intelectiva, aunque Santo Tomás defiende con más claridad la
inmortalidad del alma espiritual individual.
Ética: el concepto y la clasificación aristotélica de la virtud, pero añade las virtudes
sobrenaturales.
Política: emplea las ideas de Aristóteles sobre la ley natural, y las completa con la
referencia a la ley eterna (ajena al pensamiento aristotélico).
San Alberto Magno establece una clara distinción entre ésta y la teología. La filosofía
opera con la sola razón, mientras que la teología parte de la revelación divina y con la sola
luz de la fe lleva al esclarecimiento de los dogmas revelados.
Se aleja de este planteamiento que San Anselmo de Canterbury usará, para demostrar
9. la existencia de Dios, (“Dios es el ser mayor que el cual nada puede ser pensado”)
centrada únicamente en el concepto de Dios y en la afirmación del mismo por medio de su
solo pensamiento. La existencia de Dios puede ser demostrada valiéndose de la razón.
Por otro lado conviene mencionar a aquellos a quienes Tomas de Aquino influye, es decir,
cuales serían sus influencias posteriores:
Su influencia se percibe también en los racionalistas: Descartes utilizará las pruebas
tomistas de la causalidad eficiente y la contingencia para la demostración de la existencia
de Dios; Leibniz empleará la tercera vía para su afirmación.
Lo vemos también presente de algún modo en el Empirismo, sin embargo, Hume y
posteriormente Kant no estarán de acuerdo con la aplicación de su teoría de la causalidad
más allá de la experiencia.