2. Cuando vemos un objeto
cualquiera o una persona,
tenemos de ella una
imagen parcial, porque sólo
la vemos de frente o de
costado o de espaldas, pero
no obstante, sabemos que
no es solamente así,
sabemos que faltaría una
parte por representar si
quisiéramos describirla
totalmente.
3. Una forma de
representar, no sólo lo
que vemos, sino lo que
sabemos que falta, es la
llamada perspectiva
torcida, según la cual,
una imagen se
representa con unas
partes de perfil y otras
de frente, dando así una
imagen de totalidad de la
figura.
Estela de Urnanshe. Louvre. III mileni a.c.
4. No fue el único recurso o convencionalismo
que utilizaron: al no tratarse de pinturas o
relieves realistas, se buscaron distintas
fórmulas para representar por ejemplo la
perspectiva, el movimiento o la secuencia
temporal de la narración.
5.
6. Por último habría que decir
también, que las piezas
escultóricas egipcias y
mesopotámicas se
caracterizan por una gran
rigidez. Es decir, no hay
sensación de de movimiento.
Además, parece que estén
hechas únicamente para verlas
si nos ponemos frente a ellas.
Se dice que son frontales, y
que tienen pocos puntos de
vista para el espectador.
Triada de Mikerinos