1. Confederació General del Treball de Catalunya
Secció Sindical de l´Hospital de Viladecans
Avd. De Gavá. 38 CP.08840 – VILADECANS (BCN) Tlf. 93 659 01 11 (EXT. 321)
Planta baja junto a la secretaría de radiología (Línea azul) Tlf. 619 366 225
Twitter: @SSCGTHV Facebook: Cgt Hospital Viladecans cgt.hv@gencat.cat
http://cgthospitalviladecans.blogspot.com
HOY A LAS 13:30H ENCADENADA HUMANA EN LA PUERTA PRINCIPAL Y LECTURA DE MANIFIESTO
12/12/2012 – JORNADA DE LUCHA EN LA SANIDAD PÚBLICA CATALANA:
*CONTRA LOS RECORTES AL PRESUPUESTO SANITARIO Y LA PRIVATIZACIÓN DE LA SANIDAD PÚBLICA
*ENCIERROS DE 24H EN HOSPITAL ST.PAU, VALL D´HEBRÓN, PARC TAULÍ, JOAN XXIII TARRAGONA (ENCADENADA HUMANA), BELLVITGE RECOLLIDA DE SIGNATURES NO AL EURO PER RECEPTA
*EN APOYO A LAS MOBILIZACIONES DE MADRID
1) ¿La gestión privada mejora la sanidad pública?
No, y esto ha sido sobradamente demostrado en otros países. La revista Journal of Epidemiology & Community Health, concluía en un estudio realizado en Italia que el sector público, con menos recursos económicos, reducía con mayor eficacia las muertes evitables. JAMA (Journal of the American Medical Association) publicó en 2002 estudio que comparaba la dialisis en hospitales privados con ánimo de lucro y privados sin ánimo de lucro. Observó un incremento del riesgo relativo de mortalidad en los que tenían ánimo de lucro.
En el BMJ (British Medical Journal) varios trabajos hablan del incremento de gasto que ha supuesto el modelo PFI en el Reino Unido. Se trata del modelo escogido por Madrid para construir los seis hospitales que el año próximo quiere pasar a la gestión enteramente privada.
(ver: http://ccaa.elpais.com/ccaa/2012/12/08/madrid/1355002336_720058.html)
Es evidente que la intermediación del gestor privado encarece el producto final, ya que éste, como cualquier otro empresario, busca lograr rentabilidad comercializando la "mercancía sanitaria". Para ello, utiliza criterios de gestión mercantilistas, que centran su foco en obtener beneficios, y no en alcanzar los mejores resultados terapéuticos para el paciente.
Por otro lado, la sanidad pública no tiene como premisa la obtención de beneficios, lo cual le permite disponer de lo que representaría la ganancia del empresario privado en favor del usuario.
2. 2) ¿Entonces por qué los políticos se llenan la boca diciendo que el sistema nacional de salud está en peligro por no ser sostenible? Por dos motivos:
a) mala gestión: casi siempre, el criterio para la designación de los altos y medios cargos es el compadreo, y no la competencia y el talento. La mayoría de estos cargos de la administración está ocupada por hermanos, cónyuges, primos, hijos, yernos, amiguetes, amantes, etc., de políticos de la actual o de la anterior legislatura. Es habitual oír hablar de gestores que, pese a haber sido responsables de malos resultados en su trabajo (y, en algunos casos, también involucrados en "chanchullos" que casi siempre se "tapan"), simplemente son cambiados de sector, preservando su status y salario. Estos "elementos", por más incompetentes y/o chorizos que sean, nunca conocerán el "paro", pues tienen "padrino".
b) interés de ceder el mercado de la sanidad pública a la iniciativa privada: parece ser que los políticos que dicen esto están mucho más comprometidos con ciertos grupos de poder que tienen evidente interés en deteriorar la sanidad pública y liberalizar el mercado sanitario, que con las personas que les concedieron su voto para que fueran elegidos. Estos políticos, al igual que nosotros, conocen informes de la propia OMS (organización Mundial de la Salud) que comparan la gestión privada con la correcta gestión pública de los recursos sanitarios públicos. Estos y muchos otros prestigiosos informes y estudios concluyen que la gestión privada de la sanidad pública es más costosa y se desarrolla a expensas de la calidad asistencial.
3) Pero, ¿qué es la "calidad asistencial"?
Es la capacidad de proporcionar al usuario de la sanidad el máximo bien estar y los mejores resultados terapéuticos. Es muy difícil medirla. Generalmente, el paciente no sabe si lo que el sanitario le está ofreciendo es lo mejor y más adecuado.
Hay métodos directos e indirectos para valorar la calidad asistencial. El confort percibido y la atención recibida son fácilmente identificados por el paciente. Ya el control clínico y la conducta terapéutica casi siempre le son de difícil apreciación.
Por otro lado, de manera indirecta y estadística, se pueden establecer conclusiones respecto a la calidad asistencial. Datos como el porcentaje de infecciones y otras complicaciones, de reingresos y de reintervenciones, pueden darnos una idea del funcionamiento de un hospital.
Sin embargo, el indicador social más punzante y directamente relacionado con la grave situación de deterioro de la sanidad pública que estamos padeciendo en Catalunya es, sin duda, la mortalidad.
Preguntemos a nuestros políticos cómo está la mortalidad en Catalunya. No hay otra manera de conocer la magnitud del daño causado por tan disparatada e irresponsable política, puesto que los demás indicadores del deterioro de la atención sanitaria pública son muy manipulables.
¿Cuántas personas más han muerto en Catalunya en 2011 y en 2012?
¿Actualmente, cuál es la esperanza de vida en Catalunya?
¿Cómo marcha el negocio de las funerarias catalanas en estos dos últimos años?
La salud no es un bien de consumo y tiene que estar protegida por los poderes públicos
Viladecans, 12 de diciembre de 2012