El documento resume tres centros rectores históricos en el Campo de Calatrava, Ciudad Real: Calatrava la Vieja, Calatrava la Nueva y Almagro. Almagro fue particularmente importante en los siglos XVIII-XIX, cuando albergó banqueros alemanes y fue capital de La Mancha brevemente. El documento también describe los cambios ocurridos en Ciudad Real en el siglo XX, incluyendo su crecimiento poblacional y expansión de funciones y área de influencia, especialmente en educación, sanidad y comunicaciones.