Las actividades permanentes son propuestas para crear un ambiente de aprendizaje que no se limitan a un día o contenido en particular, sino que son utilizadas sistemática y continuamente en el aula. Algunas de las principales actividades permanentes incluyen rincones de trabajo, conferencias infantiles, asambleas escolares, libros artesanales, correspondencia escolar, periódico mural, lectura en voz alta y uso sistemático de la biblioteca.