Este documento define la presencia como la capacidad de estar plenamente consciente y crear una relación espontánea con el cliente de manera abierta, flexible y segura. Explica que la presencia implica estar atento a los patrones de pensamiento, posturas, tonos de voz y emociones del cliente, así como confiar en la intuición propia. Finalmente, señala que sin presencia puede haber omisiones importantes en la conversación, mientras que con presencia se pueden construir mejores relaciones.