2. Sabemos que existen muchas ventajas para hacer
compras por internet pero también tiene sus
desventajas, como pagar impuestos un poco más de lo
normal. En estados como Texas, California y Virginia
han aprobado leyes que obligaran a compañías como,
ebay y otras que venden en la red a que paguen
impuestos. Pero la mayoría de las compañías online no
cobran impuestos de ventas a sus clientes.
3. ¿Entonces, agregar un impuesto más a los
consumidores?
No debería existir un impuesto ya que son compras que
muchas veces se realizan ya pagando una tasa para el
ingreso de estas.
4. ¿Es necesario un marco regulador?
El comercio electrónico necesita, de un marco regulador
general que abarque desde cuestiones tan jurídicas y tan
precisas como son la determinación del lugar donde se
realizan los contratos, hasta la concreción de aspectos
esenciales para el desarrollo de este mercado, de esta nueva
forma de comerciar y evidentemente de esta nueva actividad
económica, como es conocer quién es el responsable de una
prestación adecuada del servicio o de la entrega del bien que
se ha solicitado por este medio, y el grado de responsabilidad
que tiene la citada persona, cuando el producto que entrega o
el servicio que se presta por medio del comercio electrónico es
defectuoso y no llega al consumidor en las condiciones
previstas en el contrato.
5. En la actualidad, las empresas que venden bienes o
servicios por internet solo pueden cobrar impuestos a los
consumidores si además tienen presencia física en el
estado donde se originó la compra. Así, el gobierno
estatal no recaba los impuestos generados por esas
compras en internet. Muchas compañías venden sus
productos o servicios por internet, libres de impuestos, lo
que les da una injusta ventaja sobre las empresas
tradicionales con estructura física pero que no están en
el marketspace del e-commerce. Algunas compañías
ganan millones y millones de euros y no quieren pagar
impuestos como Amazon.
6. La Oficina de Gestión y Presupuesto (OMB, por su sigla
en inglés) de la Casa Blanca dijo en una declaración
escrita que el proyecto de ley en cuestión "nivelará el
campo de acción para los minoristas locales que
compiten cada día con grandes empresas cibernéticas
fuera del estado".