La antigua Grecia valoraba mucho el ejercicio físico en la educación y celebraciones. En Esparta, la educación física de los niños se enfocaba en el combate y era dura, mientras que en Atenas la concepción era más integral, enfocada en desarrollar belleza corporal y equilibrio mental a través de actividades como salto, lanzamiento de disco y jabalina, lucha y danza en la palestra y gimnasios desde los 14 años.