Asociacion de periodistas de Oaxaca vs el Periodista Genaro Aragon Reyes

1. CRISIS EN LA ASOCIACIÓN DE PERIODISTAS DE OAXACA.
Respuesta a Cuauhtémoc Blas.
POR: Genaro Aragón Reyes /
www.megaradioexpress.com.mx
Oaxaca, Oax, a 19 de julio del año
2018, La huelga de hambre que el
suscrito emprendió en la APO, tuvo
como propósito buscar el diálogo y la
concordia. Compañeros de raigambre
pidieron que se levantara la huelga para buscar soluciones al conflicto.
Fiel a la Asociación y a los principios que la rigen, se levantó la protesta,
atendiendo a la tregua y a los valores rectores de la ética y los buenos
principios de la organización de periodistas más importante en el
sureste mexicano.
Durante la huelga de hambre los compañeros periodistas de
diferentes medios de comunicación se solidarizaron con este
escribiente.
Lejos de ser escuchado y atendido por la directiva de la Asociación de
Periodistas de Oaxaca, como socio, fui vilipendiado y agredido
nuevamente, en los medios de comunicación por el directivo
Cuauhtémoc Blas, con denostaciones que dañan la moral y a toda mi
familia. Utiliza todo el poder que le permite la APO para despotricar,
difamar y calumniarme en diversos medios de comunicación. Me tomo
la reserva para proceder, judicialmente, en su contra, en el momento
que lo considere preciso.
Ante la petición de los compañeros fundadores de la APO, en términos
amables y respetuosos, cedí, porque entendí, que debe prevalecer la

2. imagen de la APO y el compromiso de que, al interior de la
organización, se deben resolver los problemas y que es ahí donde –
como máxima autoridad- la asamblea debe atender y resolver todos los
problemas que aquejan a la comuna de periodistas agremiados.
Como directivo, el tal Cuauhtémoc Blas, utiliza todos los medios para
denostarme y calumniarme. Viola lo establecido en los estatutos en el
sentido de que la organización tiene como objetivo incluir y pugnar por
la unidad del gremio, procurando la ayuda mutua. Nada de esto está en
la tarea del citado directivo quien está creando el divisionismo y la
violencia al interior de la gremial.
Por ahora, me reservo el derecho de responder a sus calumnias porque
no se trata de denostar a la APO, sino de buscar el consenso y la unidad
para elevar el nivel de trabajo y defensa de los agremiados que se ven
vulnerados en su labor periodística por la violencia que campea contra
quienes disienten y critican la violación a derechos humanos en los
diversos niveles de gobierno.
Convoco a la base de la APO a que mediante asamblea general de
socios resuelvan los graves problemas que tiene la asociación. No es
posible que cuatro o cinco personas decidan el rumbo de tan
importante organización periodística.
Busco justicia y no confrontación. Exijo que se respeten mis derechos
como socio y que la paz y concordia predominen en cada paso de
nuestra magna asociación que es orgullo en el plano nacional.
Responsabilizo a Cuauhtémoc Blas de cualquier agresión que pueda
sufrir mi familia y el suscrito y, como lo he dicho, me reservo el derecho
de proceder judicialmente, en su contra.