La psicología ha contribuido a la tecnología educativa a través de cuatro enfoques: el conductista centrado en el profesor y la motivación, el cognitivo enfocado en la comprensión de la mente del estudiante, el psicogenético basado en el constructivismo y la responsabilidad del estudiante sobre su aprendizaje, y el sociocultural que considera el papel de factores sociales en la adquisición del conocimiento.