El documento describe la arquitectura visigoda en España entre los siglos VI y VII. Los visigodos se asentaron en el sur de Francia antes de establecer su capital en Toledo. Construyeron iglesias con plantas basilicales o en cruz, usando piedra, arcos de herradura y bóvedas. Algunos ejemplos notables son las iglesias de San Juan de Baños de Cerrato, Quintanilla de las Viñas y Santa Combad e Bande.