El documento resume las condiciones sociales de los campesinos durante el Porfiriato en México. Describe que la mayoría de los 11 millones de campesinos sobrevivían con salarios diarios de 25 a 30 centavos y que existían cuatro clases de trabajadores en las haciendas. También menciona que en el sur habían condiciones de esclavitud disfrazadas y que los campesinos solían endeudarse con las tiendas de raya de los hacendados, lo que los obligaba a permanecer en las haciendas.