1. Barroco y contrarreforma de Europa
Se conoce con el nombre de Barroco al periodo que va desde 1600
hasta 1750. Está dentro del Renacimiento y el Clasicismo.
Las monarquías absolutas dominan el panorama político de una
Europa que está sumida en un continuo de luchas políticas y guerras.
El poder sigue estando en manos de la aristocracia y de la Iglesia que
quieren mostrar su autoridad organizando grandes espectáculos en los
que la música siempre estará presente. Se convierten, para ello, en
mecenas de los mejores artistas, los cuales trabajarán en sus grandes
cortes y palacios.
El Barroco es una época de gran fecundidad para el mundo de la
cultura, el arte y la ciencia. En esta época se darán cita personajes
importantes en el mundo de la literatura como Lope de Vega,
Calderón, Cornielle o Moliere; en la pintura contaremos con artistas
como Velázquez, Murillo, Rubens o Rembrant; además de destacar
científicos como Galileo Galilei, Torricelli o Newton.
La palabra Barroco significa recargado, excesivo o adornado, por lo
que es común encontrar obras de arte en las que no queda ni un
espacio que rellenar. A esto se le conoce con el nombre de "Horror
Vacui" (miedo al vacío).
El hombre barroco no persigue la belleza, tal y como se había hecho
en el Renacimiento, sino que fundamenta su pensamiento en torno a
dos aspectos opuestos: la razón y el sentimiento. La razón en cuanto
que intentan buscar la lógica y el lado científico de todo. El sentimiento
2. del ser humano que se hará evidente en todos los campos; en el
musical sobretodo en la ópera.
La Reforma Católica o Contrarreforma fue la respuesta a la reforma
protestante de Martín Lutero, que había debilitado a la Iglesia. Denota
el período de resurgimiento católico desde el pontificado del Papa Pío
IV en 1560 hasta el fin de la Guerra de los Treinta Años, en 1648. Sus
objetivos fueron renovar la Iglesia y evitar el avance de las doctrinas
protestantes.
Se esforzó sobre todo en cuatro temas:
Doctrina.
Reestructuración eclesiástica, con la fundación de seminarios.
Modificación de las órdenes religiosas, haciéndolas volver a sus
orígenes espirituales.
Vigilancia de los movimientos espirituales, centrándolos en la
vida piadosa y en una relación personal con Cristo. Esto incluía a
los místicos españoles y a la escuela de espiritualidad francesa.
El arte barroco y Contrarreforma
El Barroco ha sido llamado con frecuencia el arte de la
Contrarreforma, por haber sido el estilo preferido por los países
católicos durante el tiempo de los grandes conflictos religiosos. No es
cierto que el catolicismo haya creado el Barroco para combatir la
Reforma protestante, puesto que sus raíces se encuentran ya en la
derivación del arte renacentista hacia el manierismo. Pero frente a la
postura austera del protestantismo, opuesta al excesivo uso de
imágenes de santos y lujo decorativo en los altares, el estilo barroco
3. proporcionó al catolicismo los medios plásticos para la defensa y
engrandecimiento de los puntos más característicos de la controversia:
la Iglesia como institución, la veneración de los santos, la celebración
de los misterios religiosos y la liturgia como culto público y oficial.
.El arte barroco jugó un papel importante en los conflictos religiosos de
este periodo. Frente a la tendencia protestante a construir los edificios
para el culto de una manera sobria y sin decoración, la iglesia católica
usó para sus fines litúrgicos la grandiosidad y la complejidad barrocas.
El papado reaccionó contra esta división que provocó la reforma
iniciada por Lutero generando el movimiento que se conoció como la
Contrarreforma. De hecho, el arte Barroco es conocido como el arte
dela Contrarreforma.
La iglesia también alentó a los artistas para que se alejaran de los
temas paganos que tanta aceptación tuvieron durante el
Renacimiento, así como evitar los desnudos y las escenas
escandalosas.
Las diferentes disciplinas (arquitectura, escultura y pintura) fueron
utilizadas para ensalzar el prestigio de la autoridad papal e ilustrar las
verdades de la fe católica.
La monarquía también utilizó este arte con el fin de hacer propaganda
que los beneficiasen, ya sea en el arte o en la sociedad.
La burguesía de la época, también utilizó el Barroco para expresar sus
ideas y trascender más allá de su época.
4. Estas normas aparentemente conservadoras derivaron, por el
contrario, en este arte suntuoso y recargado que conocemos como
Barroco.
El siglo XVII fue una época de guerra y violencia. Por ese motivo era
más necesaria que nunca la exaltación de la vida agitada e intensa
para el hombre barroco. En ese contexto social se experimentaba el
empuje de amar las pasiones de la vida así como el movimiento y el
color.
Al igual que una representación dramática se apoya en un decorado
vistoso y efímero, la arquitectura barroca se subordina a la decoración,
que pasa a ser espectacular y grandiosa.
Otra de las características del barroco que se manifiesta tanto en la
arquitectura, escultura y la pintura es el juego de las sombras. En la
estética del barroco, son muy importantes los contrastes claros y
oscuros violentos. Esto es fácil de apreciar en la pintura
(especialmente en el tenebrismo) pero también en la arquitectura,
donde el arquitecto barroco juega con los volúmenes de manera
abrupta con numerosos salientes para provocar acusados juegos de
luces y sombras.
Si bien el arte barroco nace en Italia, rápidamente es adoptado en
Francia, en Alemania, en Holanda y en España quien lo desarrolla
hasta lo máximo en las colonias de América.
5. Con el desarrollo de la imprenta, las ideas religiosas de Luter, los
razonamientos científicos de Copérnico y Galileo y los estilos artísticos
de Venecia se difunden por toda Europa. La fe vacila hasta el
momento en que la reforma llega a dividir Europa en dos zonas: la
norte protestante y el sur católico.
Reflexión:
El Barroco se volvió una parte muy importante para la Contrarreforma,
ya que en esa época todas las iglesias, capillas, se adornaron con
este tipo de arte, que es muy cargado, donde casi o no hay espacio
entre las cosas.
La misma iglesia impulsaba a los artistas que se alejaran del arte
renacentista, donde solo se mostraba al humano desnudo y se dejaba
de lado a la iglesia.
En el barroco se jugaba mucho con las luces y las sombras; también
tenía cambios muy drásticos entre los colores claros y los oscuros.