La descompensación cardíaca ocurre cuando el corazón ya no puede bombear suficiente sangre a los tejidos debido a una disminución de su capacidad contráctil. Los síntomas incluyen disnea (dificultad para respirar) y edema (hinchazón de los tobillos). La descompensación se produce cuando los mecanismos compensatorios como la taquicardia y la hipertrofia cardíaca dejan de ser suficientes. El tratamiento involucra medicamentos, dieta adecuada y estilo de vida saludable.