El conflicto se debe a las modificaciones del Estudio de Impacto Ambiental hechas por la empresa minera MMG sin consultar a las comunidades, como el cambio del transporte de mineral de un mineroducto a camiones por carretera. Esto, sumado a la falta de diálogo y beneficios con las comunidades cercanas, ha llevado a protestas y bloqueos que enfrentan represión policial. Recientemente, la minera y comunidades acordaron que estas últimas provean servicios a la empresa para retomar el diálogo.