Este documento describe a Aeschynomene americana, una leguminosa anual adaptada a ambientes húmedos que puede mejorar la calidad y disponibilidad de forraje. Presenta las características, requerimientos, establecimiento y manejo de esta especie, destacando su alto valor nutritivo y potencial para mejorar la alimentación animal en la región chaqueña de Argentina.

1. Aeschynomene americana:
Una leguminosa tropical adaptada a ambientes húmedos
Por: Ing. Agr. César J. Chaparro, Ph.D.
INTA EEA El Colorado, Formosa
Universidad Nacional de Formosa
Introducción
El recurso forrajero de la ganadería de la región subtropical húmeda del NEA (Nordeste
Argentino) está basado en el pastizal o pastura natural. La misma está constituida en gran
proporción por gramíneas de crecimiento estival, con muy pocas especies de leguminosas y casi
nula presencia de especies de crecimiento invernal. La implantación de especies cultivadas es
una actividad poco desarrollada, pero que está creciendo en los últimos años. La mayoría de las
mismas son gramíneas tropicales de crecimiento estival.
Una consecuencia de ello es que la distribución de la disponibilidad y calidad de forraje es
irregular a lo largo del año, aún con la implantación de gramíneas de verano. Se observa buena
calidad y baja oferta de forraje en primavera, con buenas ganancias de peso vivo de los animales.
A medida que avanza el verano, la disponibilidad del forraje aumenta pero disminuye la calidad
(menos proteína y menor digestibilidad del forraje), observándose menores ganancias de peso
vivo. Esta situación se empeora durante el otoño e invierno.
La incorporación de una leguminosa de verano ayudaría a mejorar los aumentos de pesos
vivos de los animales durante el verano y el otoño, favoreciendo el consumo de forraje a través
del aumento de la velocidad de pasaje a nivel ruminal debido al mejoramiento del contenido de
proteína de la dieta.
El Area de Investigación de la EEA INTA El Colorado, Formosa, Argentina, viene
realizando trabajos de evaluación de forrajeras cultivadas (gramíneas y leguminosas) en
diferentes ambientes de las provincias de Formosa y Chaco, ubicado dentro de la gran región
Chaqueña de Sudamérica. Estos trabajos han permitido identificar varias especies de gramíneas y
leguminosas que se presentan promisorias en estos ambientes.
Entre ellos, se destaca Aeschynomene americana; una LEGUMINOSA ANUAL
ADAPTADA A AMBIENTES HUMEDOS, ANEGADIZOS, CON BAJO NIVELES DE
FOSFORO (P) en el suelo. Las experiencias que se vienen realizando en la EEA El Colorado, y
en campos de productores de Formosa y Chaco, están mostrando el potencial que presenta esta
leguminosa para estos ambientes. En este trabajo se presentan las características principales de
esta especie de leguminosa forrajera.
Características de la especie
Aeschynomene americana, es una especie nativa de esta parte del país, que ha sido
recolectada, seleccionada y mejorada genéticamente en otras partes del mundo, principalmente
en Australia (Queensland) y EE.UU. (Florida, Luisiana, Mississippi). Es una de las especies más
utilizadas en ambientes húmedos, con regímenes de lluvias superiores a 900 mm anuales.
Chaparro, C.J. 1998. En Simposio de pasturas y Forrajes. Fac. Cs. Veterinarias. Univ. Nac. de Asunción 1

2. A. americana es una especie anual de crecimiento estival que florece a fines de verano o
principios de otoño. Después de la maduración de los frutos, las plantas se secan y mueren. En la
próxima primavera, después de las primeras lluvias (septiembre) las semillas del suelo
comienzan a germinar para formar nuevas plantas. Hay algunos ecotipos o cultivares que
presentan plantas bianuales.
Las plantas son de porte erecto, creciendo hasta 1,80 m de alto, con tallos que se vuelven
leñosos y poco palatables si no son defoliados o pastoreados, pues son de rápido crecimiento,
una vez establecido. Sin embargo, si las plantas se pastorean temprano (a los 40 cm de altura),
las mismas desarrollan un hábito postrado y ramificado, favoreciendo la formación de hojas y
tallos delgados y herbáceos. Aeschynomene americana permite obtener forraje de alta calidad
durante 90 a 150 días (según ecotipo, manejo y condiciones de humedad de la primavera),
durante el verano y parte de otoño. Durante el verano y el otoño, las gramíneas, tanto naturales
como cultivadas presentan una disminución de la disponibilidad de nitrógeno en el forraje,
debido a la rápida lignificación de las fibras que fija parte del nitrógeno. La incorporación de una
leguminosa, con alto contenido de proteína permitiría incrementar el consumo de forraje,
mejorar la calidad de la dieta y las ganancias de peso vivo de los animales.
Sitio de siembra
Se adaptan a ambientes húmedos de los subtrópicos y trópicos. Si bien crecen mejor en
suelos de buena fertilidad, las plantas toleran suelos anegados o encharcables por ciertos
períodos, con bajos niveles de fósforo (P). A pesar de ello, se necesitan cierto drenaje superficial,
especialmente durante el período de establecimiento. Las plantas establecidas soportan cortos
períodos de encharcamiento, pero las plantas jóvenes pueden morir si son permanecen
sumergidas por el agua. En general, las plantas son más tolerantes a condiciones de humedad
excesiva que a sequía temporaria, por lo que presencia de un suelo húmedo es fundamental para
obtener buena producción de forraje. La acidez del suelo debe ser moderada a media (pH de
suelo superior a 5,5) y responde bien a la fertilización con P.
Densidad de siembra
La semilla puede estar revestida (cubierta por resto de la vaina) o bien desnuda (sin
revestimiento, después de un proceso de descascarado). Hay hasta dos veces más semillas por
kilogramo cuando ellas están desnudas, por lo que la densidad de siembra varia según la forma
en que se presenta la semilla. Además, las semillas vestidas tienen baja germinación inmediata
(15 a 30% de energía germinativa), mientras que las desnudas presentan germinación de hasta
90%. Por estas razones, se recomienda sembrar entre 4 a 6 kg/ha (semillas desnudas) y entre 12 a
15 kg/ha si se siembran semillas con cubierta. En general, se recomienda la siembra de semilla
vestida cuando se usan método al voleo, aéreas, con poca preparación de suelos y en épocas
tempranas. En cambio, con cama de siembra bien preparada, y en época con suficiente humedad
del suelo, es aconsejable la siembra de semillas desnudas.
Inoculación de semilla
Las semillas deben ser inoculadas con la bacteria fijadora de nitrógeno (Rhizobium) del
grupo del caupí cuando A. americana es sembrada por primera vez en potreros nuevos o cuando
son sembradas en suelos que no han tenido un cultivo de leguminosa de verano que requieran
este tipo de rizhobium. En caso contrario, no se requiere inoculación alguna.
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3. Establecimiento
El establecimiento de A. americana puede ocurrir en dos situaciones diferentes. a)
implantación en cultivos puros, en suelos bien preparados, con cama de siembra firme y limpia y
b) incorporación de la leguminosa en una pastura existente o el manejo de la resiembra en la
misma pastura.
En el primer caso, la implantación es fácil y rápida, utilizando semillas desnudas e
inoculadas, sembrando al voleo o en líneas. La profundidad de siembra no debe ser mayor a 3
cm. Aquí se recomienda el pasaje de un rolo compactador para favorecer el contacto de la
semilla con el suelo y lograr una germinación rápida y uniforme.
Cuando se requiere incorporar la leguminosa a una pastura ya existente se presentan varias
alternativas. Pero en todos los casos, lograr la disminución de la competencia de las plantas de
las pasturas es fundamental para lograr un buen establecimiento. En general, la competencia por
la luz es el factor más importante. Por esta razón, el establecimiento es más fácil en pasturas con
predominancia de especies de porte erecto (dicantio, setaria, Bothriochloa, grama rhodes Callide)
que con aquélllas formadas por especies estoloníferas o rastreras (pangola, Brachiaria
humidicola, pasto horqueta)
La disminución de la competencia por luz se puede lograr mediante el pastoreo intenso, la
quema, pasada de rastra de discos o la aplicación de herbicidas. Se favorece el contacto de la
semilla y el suelo mediante una pasada de discos livianos y la compactación posterior a la
siembra. Los métodos de siembra pueden ser al voleo (a mano, máquinas distribuidoras de
fertilizantes) o en líneas (intersembradoras).
Una vez establecida la pastura, se debe permitir la floración y fructificación de las plantas,
para permitir la formación de un banco de semillas en el suelo del cual se regenerarán las nuevas
plántulas, en la primavera siguiente. Para ello, será necesario la clausura las pasturas en el otoño,
por lo menos una vez cada tres años. Puestos que las semillas vestidas tienen baja germinación,
el banco de semillas tendrá semillas germinables por 3 o 4 años, con las primeras lluvias de
primavera. Durante fines del invierno y principios de la primavera, se manejará la pastura de la
misma forma que para el establecimiento inicial. Esto es, controlar la competencia de las plantas
de la pastura mediante pastoreo para favorecer la germinación e implantación.
Valor nutritivo
A. americana es una leguminosa de muy buen valor nutritivo y muy palatable por el ganado
vacuno, ovino, caprino y también por animales rumiantes silvestres (venado, ciervos). El ganado
caballar la come muy poco.
El valor nutritivo de las hojas y los tallos tiernos pueden alcanzar valores superiores a 20% de
proteína cruda y más 70% de digestibilidad. Como la planta es de porte erecto, estos valores
disminuyen a medidas que las plantas maduran y crecen en altura (más tallos y menos hojas
hacia la base), por lo que los estratos superiores de una pastura siempre presentan valores más
altos que los estratos inferiores. Por esta razón, se sugiere el pastoreo temprano cuando las
plantas tengan entre 30 y 40 cm de altura para favorecer la proporción de hojas y tallos tiernos y
evitar que la planta se lignifique.
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4. Manejo del pastoreo
Cuando A. americana es incluida en una pastura perenne ya establecida, es necesario
continuar con el pastoreo intenso (a 5 a 10 cm de altura) hasta que las plántulas de la leguminosa
alcancen 5 cm de altura, o cuando se observan que lo animales comienzan a defoliarlas. Luego,
la pastura debe ser clausurada hasta que las plantas alcancen 30 a 40 cm de altura, en caso de
utilizar pastoreo continuo. Si se trabaja con pastoreo rotativo, el descanso de cada parcela de la
rotación debe ser lo suficientemente largo (35 a 45 días) para permitir el establecimiento de las
plántulas.
Para evitar el pastoreo selectivo, se recomienda el pastoreo rotativo, e iniciar el pastoreo
cuando las plantas alcanzan 40 cm de altura, y retirar los animales cuando se alcanza una altura
remanente de 15 a 20 cm. En pastoreo continuo, se debe mantener una altura de las plantas
alrededor de 25 a 30 cm para obtener el mejor rebrote, favorecer la floración y fructificación, y
asegurando un buen banco de semilla en el suelo para la favorecer la resiembra natural.
La inclusión de A. americana en una pastura de gramíneas tropicales aporta las proteínas
necesarias durante los meses de verano y otoño, cuando gran parte del nitrógeno de las plantas
no se encuentran disponible, debido a la progresiva lignificación, mejorando el consumo y las
ganancias de peso vivo de los animales.
Utilización
Debido a su alto valor nutritivo, esta leguminosa se recomienda para el pastoreo de categoría
de mayores requerimientos nutricionales (terneros destetados anticipadamente, vacas lecheras en
producción, recría de hembras o novillos en terminación). Otra de las posibilidades es la
utilización como pastura tipo “creep grazing”. Este término se refiere a la alimentación
diferencial del ternero que estando al pie de la madre puede acceder a una pastura de alta calidad
(a través de una puerta trampa) para mejorar la performance del ternero y disminuir la
dependencia de la leche materna. El período de crecimiento de A. americana coincide con el
período de amamantamiento.
La confección de heno de A. americana es dificultosa debido a que los tallos contienen una
sustancia mucilaginácea que dificulta el secado de las andanas de forrajes cortados. Además, las
hojas, formadas por pequeños foliolos, se tornan muy caedizas con el secado, lo que disminuye
la calidad del heno cosechado (alto porcentaje de tallos).
Cultivares comerciales
Cv. Florida common: Liberado en Florida, EE.UU. Planta anual de porte erecto (hasta 1,20
m de alto), de color verde claro, con tallos finos y herbáceos. Se adapta a suelos de baja
fertilidad, con encharcamientos periódicos. Florece entre mediados y fines de marzo, con
abundante producción de semillas que se cosechan a fines de abril. La planta termina su ciclo
antes de las primeras heladas.
Cv. Glenn: Liberado en Australia. Plantas erectas y altas (hasta 1,5 a 1,8 m de altura) cuando
no es pastoreada. Esta variedad produce muchas semillas de fácil cosecha, aún en condiciones de
pastoreo, lo que le permite resembrarse naturalmente. Se adapta muy bien a suelos que
permanecen inundados por períodos largos. En estos ambientes es tan agresivo que muchas
veces no permite el crecimiento de las gramíneas, especialmente en ambientes con bajos niveles
de fósforo. Este cultivar florece a fines de abril y es posible cosechar semillas a fines de mayo.
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5. Cv. Lee: Originado en Australia. Plantas de porte muy alto (hasta 2,0 m de altura) y muy
vigorosas con tallos subleñosos, con hojas de mayor tamaño que las de Glenn. Se comporta
como perenne en ambientes tropicales libres de heladas, floreciendo en primavera. En ambientes
subtropicales, como el NEA, las presencias de heladas en junio puede evitar que las plantas de
esta variedad florezcan y produzcan semillas suficientes para reponer el banco de semillas y
asegurar la resiembra natural en primavera. En nuestro ambiente, esta variedad florece a fines
de mayo y principios de junio y con semillas maduras a fines de junio. Se observan plantas que
se comportan como bianuales. La presencia de tegumentos duros y cobertura exterior permite
que existan semillas de años anteriores en el suelo que participen de la resiembra siguiente aún
en años que no fructificaron.
Línea experimental ECF 9424: Línea híbrida seleccionada a partir de introducción de la
Universidad de Florida, EE.UU. por el INTA EEA El Colorado, en Formosa. Las plantas son
anuales bien definidas, de porte erecto de hasta 1,60m de altura. Los tallos presentan un color
rojizo característico, cubiertos por abundantes pelos o pubescencias. Florecen abundantemente a
principios de abril. La semilla madura se cosecha a fines de mayo. Presenta muy buena
resiembra natural, debido a la gran cantidad de semilla que todos los años se depositan en el
suelo durante el otoño. Actualmente está siendo evaluada en diferentes ambientes del este de
Formosa y Chaco. Se desarrolla muy bien en varios tipos de suelo; desde anegadizos y con bajo
niveles de P (Est. Clarín, Dpto. Pilcomayo) como en suelos bien provistos de P y de medias
lomas (Est. Ombú, Dpto. Laishi; INTA EEA El Colorado, Dpto. Pirané). Se encuentra en
proceso de evaluación bajo pastoreo (en INTA El Colorado, Formosa), multiplicación e
inscripción como variedad comercial.
Línea experimental ECF 9425. Línea híbrida seleccionada a partir de introducción de la
Universidad de Florida, EE.UU. por el INTA EEA El Colorado, Formosa. Las plantas son
anuales, de porte erecto de hasta 1,50m de altura. Los tallos presentan un color verde claro sin
pelos o pubescencias (glabros). Florecen a princios de abril y las semillas maduran a fines de
mayo. Esta línea esta siendo multiplicada y evaluada en El Colorado.
Otras especies de Aeschynomene
Aeschynomene falcata: Es una especie perenne de porte rastrero, con una fuerte raíz
pivotante y leñosa. Persiste en suelos infértiles y bien drenados del subtrópicos y trópicos, pero
no tolera suelos arcillosos con encharcamientos periódicos o frecuentes. Es persistente bajo
defoliación intensa y frecuente. Debido a su porte rastrero, esta especie es compatible con
gramíneas rastreras o estoloníferas. Si bien su época de crecimiento es estival, las plantas pueden
seguir creciendo durante el otoño y parte del invierno. Es muy difícil cosechar semilla debido a
su floración continua y porte rastrero, por lo que la disponibilidad de la misma es escasa. El
cultivar comercial más conocido es Bargoo, y se encuentra disponible en Australia.
Aeschynomene villosa: Especie perenne, de porte rastrera muy tolerante a pastoreo intenso y
frecuente. NO TOLERA SUELOS ANEGADIZOS O ENCHARCADOS. Requiere suelos de
buen drenaje interno y de fertilidad media. Florece a principios de otoño (abril) y produce gran
cantidad de semillas, que se cosechan entre mayo y junio. Debido a su porte rastrero y
crecimiento continuo, las plantas deben ser cortadas, hileradas y secadas en el campo, antes de
ser cosechadas. La especie es compatible con gramíneas de porte rastrero o estoloníferas
(Brachiaria decumbens, pasto estrella, bermuda). Recientemente fue liberada en Australia el
cultivar Villomix.
Aeschynomene evenia: Las plantas son perennes, pero de corta vida (3 a 4 años), de porte
postrado a semirecto, que permanecen verde hasta las primeras heladas. Pueden permanecer
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6. verde (si el invierno es suave) y rebrotar en la primavera siguiente. Es de floración continua, por
lo que es posible encontrar flores y semillas durante toda la estación de crecimiento. Las plantas
deben ser pastoreadas intensamente para evitar que las mismas se vuelvan leñosas y poco
palatables, evitando así que las plantas sean dominantes y eliminen a las gramíneas
acompañantes. Esta especie no es comida por los ciervos y venados.
Las plantas presentan un olor característico que las hacen poco palatable al comienzo del
pastoreo, hasta que los animales se acostumbren al mismo. El valor nutritivo es similar al de A.
americana. Por estas razones, a veces se sugiere la mezcla de A. evenia con A. americana para
mejorar la aceptación inicial del forraje por parte del animal. Esta especie esta siendo
desarrollada en Florida, EE.UU.
_________________
Mis documentosUNaFPublicaciones|Aeschynomene.doc
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7. verde (si el invierno es suave) y rebrotar en la primavera siguiente. Es de floración continua, por
lo que es posible encontrar flores y semillas durante toda la estación de crecimiento. Las plantas
deben ser pastoreadas intensamente para evitar que las mismas se vuelvan leñosas y poco
palatables, evitando así que las plantas sean dominantes y eliminen a las gramíneas
acompañantes. Esta especie no es comida por los ciervos y venados.
Las plantas presentan un olor característico que las hacen poco palatable al comienzo del
pastoreo, hasta que los animales se acostumbren al mismo. El valor nutritivo es similar al de A.
americana. Por estas razones, a veces se sugiere la mezcla de A. evenia con A. americana para
mejorar la aceptación inicial del forraje por parte del animal. Esta especie esta siendo
desarrollada en Florida, EE.UU.
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Mis documentosUNaFPublicaciones|Aeschynomene.doc
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