1. LAS ACTIVIDADES COMO DESARROLLO DEL DISEÑO CURRICULAR EN LA PRÁCTICA ESCOLAR
ELEMENTOS BÁSICOS DEL CURRÍCULO O DE TODA PROGRAMACIÓN ESCOLAR
Entre los elementos básicos del currículo o de toda programación escolar están:
LOS OBJETIVOS: como elemento directriz del diseño curricular de Centro o de Aula, que incluye el objeto y la
finalidad. De allí la importancia de mirar los objetivos que se proponen desde la ERE para el pueblo colombiano
en los diferentes niveles de educación (Preescolar, Básica Primaria, Básica secundaria y Educación Media).
LOS CONTENIDOS: Son los propuestos por el diseño curricular (los programas, los lineamientos y estándares),
los cuales responden al “Qué” y al “Para qué”, se proponen unos determinados conocimientos. “En cuanto
elaboración científica y cultural, los contenidos permiten comprender y actuar sobre la realidad”
1
.
LAS ACTIVIDADES: Una vez seleccionados los objetivos y los contenidos, se hace necesario diseñar las actividades
porque a través de ellas se realiza el proceso enseñanza aprendizaje. Las actividades están al servicio de los
objetivos (logros, metas, fines, propósitos...) y de los contenidos, que tienen que ser secuenciados y de acuerdo
con las necesidades e intereses en cada situación educativa (problemas, intereses, necesidades, situaciones...).
Diseñar actividades sin tener en cuenta su relación con el diseño curricular básico programas, es caer en mero
activismo motivador que entretiene a los alumnos o estudiantes, pero nada más. Toda acción educativa que se
realice en el aula o en ambiente de clase, debe ser una respuesta a la pregunta ¿Cómo enseñar? Es decir, Cómo
suscitar aprendizajes significativos para que los contenidos no se queden sólo al servicio de una memoria
repetitiva, sino que permitan la construcción del pensamiento y así el conocimiento pueda ser aplicado a la
realidad (solución de problemas y mejoramiento de la realidad)
2
.
LA EVALUACIÓN: Constituyen un elemento y proceso fundamental en la práctica educativa. Forma unidad con
ella permitiendo en cada momento recoger información, realizar juicios de valor necesarios para la orientación,
toma de decisiones, revisión de logros, metas, debilidades a mejorar conocimientos pendientes a investigar...
Los elementos básicos para el diseño de la acción educativa necesitan
complementariedad entre sí, porque los unos llevan a los otros. Cuando se excluye uno de ellos, se
generan diferentes modelos de diseños de enseñanza aprendizaje;
entre los más destacados están: * El modelo “Fines – Medios” con énfasis en objetivos.
* El modelo “Curricular-Prosesual”, con relevancia en los procesos, donde la actividad está por encima
de los objetivos y los contenidos quedan relativizados.
* El modelo “Instructivo-Disciplinar-Académico”, con énfasis en el contenido y su raíz epistemología.
* El modelo “teleo-interactivo”, reconoce la importancia de todos los elementos básicos (objetivos, contenidos,
actividades y evaluación), situando a los alumnos o estudiantes y el educador en un clima relacional y socio –
afectivo.
1
Cfr.
Valero
Crespo Actividades para la enseñanza escolar de la religión. PPC.Editorial y Distribuidora, S.A. Madrid. 1992
2
Delineamientos curriculares del MEN
2. Las actividades exigen de ciertas estrategias metodológicas
3
que le ayuden a pensar tales como
Comparar,
Resumir,
Observar,
Clasificar,
Interpretar,
Formular críticas,
Buscar suposiciones,
Imaginar, reunir y organizar datos,
Formular hipótesis,
Aplicar hechos y principio s nuevas situaciones y a la realidad,
Solucionar problemas.
En el Área de Educación Religiosa Escolar, estas actividades necesitan estrategias de enseñanza expositiva, de
indagación, de confrontación, comparación, discusión, análisis, de crítica, de reflexión, que partan de las
experiencias del estudiante, la confronten con los contenidos cristianos y descubran las posibilidades que dichos
contenidos ofrecen para mejorar la vida del estudiante, de su entorno o ambiente.
Por estas razones, hay que tener mínimas tres clases de Actividades para desarrollar una clase:
1.- Actividades de inicio: Estas permiten el conocimiento de la realidad que plantea el tema. Nos llevan a
tener un diagnóstico de las Necesidades, Intereses y Problemas que comparte el estudiante.Ayudan a ubicarlo
en la problemática, a motivarlo e interesarlo en la búsqueda de soluciones. Es llevar al estudiante a SENTIR lo
que está sucediendo a nivel religioso en sí mismo y en su entorno
4
. Durante estas actividades de INICIO se
pueden tener en cuenta procesos de pensamiento como observar, comparer, reflexionar, formular hipótesis,
buscar suposiciones… Algunas de estas actividades creativas y recreativas de inicio son:
Lecturas variadas referentes a la temática o problemática a plantearse.
Cantos con el mismo interés.
Diálogos o entrevistas.
Cuentos o narraciones
Sociodramas,
Videos
Dinámicas de juego y de evocación,
Celebración,
Rondas,
Historietas. Etc.
2.- Actividades de desarrollo: Estas actividades se plantean para asumir y trabajar los materiales seleccionados
que ayuden a iluminar la problemática detectada como son: Los textos bíblicos, textos doctrinales, lecturas
complementarias y de interpretación de la realidad cristiana; con ellos el estudiante tiene la oportunidad de
movilizar su esquema de pensamiento. Para asumir el contenido de este material se necesita realizar ciertas
actividades como:
Sociodramas. Teatro
Dramatización
Elaboración de mensajes
Cuentos. Poesía. Parábolas
Ejercicios de comprensión de lectura. Foros
Mesa redonda
Panel
3
Lowis Ratz y Selma Waserman, Procesos de desarrollo de pensamiento.
4
Estas Actividades de Inicio ubican al estudiante en la experiencia problema y la necesidad de buscar contenidos que le ayuden a buscar solución a
los mismos; dar razón del Objeto de estudio según los estándares. “Estándares de EDUCACIÓN Religiosa Escolar”. Conferencia Episcopal de Colombia.
Bogotá, Julio 2004.
3. Se pretende con ello que el estudiante llegue a elaborar pensamiento nuevo (PENSAR) a través de los
procesos de analizar, criticar, valorar, resumir
5
.
3.- Actividades de recogida: Estas actividades ayudan a “recoger” el nuevo pensamiento creado frente a la
problemática planteada en el tema. Sirven para la ejecución y diseño de la evaluación final. Ayudan también para
que, tanto profesores como estudiantes, generen acciones que permitan dejar ver los cambios que pueden
realizarse con los nuevos aprendizajes. Llevan por lo tanto a la ACCIÓN para implicarse en la solución de
problemas, en la aplicación de principios a la realidad, tanto individual como grupal y del entorno que lo
rodea
6
. Es el momento para concretización de hechos.
Las actividades creativas y recreativas que más pueden acercarse a esta intencionalidad son:
Mapas conceptuales
Cartelera
Collage
Tarjetas
Escrito. Cartel. Afiche
Graffiti. Boletín. Revista
Periódico
Plegable
El trabajo con las actividades en esta forma permite el desarrollo de procesos para consolidar, validar,
replantear y modificar convicciones, valores, actitudes y comportamientos. Llevar por lo tanto a SENTIR,
PENSAR Y ACTUAR.
5
Con estas actividades, en Educación Religiosa Escolar estamos desarrollando las Competencias Interpretativa y Argumentativa, que según los
Estándares son los Aprendizajes básicos de Saber comprender y saber dar razón de la fe, teniendo en cuenta las competencias derivadas de la
naturaleza y finalidades de la Educación cristiana. “Estándares de EDUCACIÓN Religiosa Escolar”. Conferencia Episcopal de Colombia. Bogotá, Julio 2004.
6
En Educación Religiosa Escolar estas actividades están relacionadas con la Competencia Propositiva referente a los aprendizajes básicos: Saber
integrar Fe y Vida, y saber aplicar a la realidad. Según los “Estándares de EDUCACIÓN Religiosa Escolar”. Conferencia Episcopal de Colombia. Bogotá,