Los conflictos armados de América Central se extendieron desde 1960 hasta la década de 1980 e involucraron a grupos guerrilleros de izquierda en países como Guatemala, Honduras, Nicaragua y El Salvador. Estas guerrillas surgieron para derrocar dictaduras militares y gobiernos de derecha apoyados por Estados Unidos, aunque su estructura varió en cada país. Inicialmente contaron con el apoyo de la población civil, pero luego perdieron este respaldo al violar los derechos humanos. Finalmente aceptaron un plan de paz en