La depreciación y la amortización son procesos contables similares pero diferentes. La depreciación se aplica a activos fijos tangibles para reconocer la pérdida de valor a lo largo del tiempo de uso, mientras que la amortización se aplica a activos intangibles y diferidos para distribuir el costo a lo largo del tiempo. Existen varios métodos de depreciación como línea recta, unidades producidas y doble saldo decreciente.