El Coliseo es un anfiteatro de 189 metros de largo y 156 de ancho construido en Roma en el siglo I d.C. bajo el mandato del emperador Vespasiano y completado por el emperador Tito, donde se celebraban espectáculos públicos como luchas de gladiadores. Originalmente llamado Anfiteatro Flavio, fue utilizado durante casi 500 años hasta convertirse en santuario cristiano y aunque dañado sigue siendo un icono de la arquitectura romana.