El documento analiza cómo el miedo ordena y divide a la sociedad. El miedo a riesgos desconocidos causa incertidumbre e inseguridad entre los individuos, debilitando la confianza y cohesión social. Además, diferentes tipos de miedo como los culturales producidos por fenómenos sociales como la violencia invaden a la sociedad y afectan su estabilidad emocional y social.
1. El miedo, a partir de las distintas situaciones y fenómenos sociales, se ha visto
como un ordenador de las mismas, ya que al presentarse algún miedo por un
posible riesgo, existe una determinación de los individuos sobre su situación, a
partir de la conciencia. Dando lugar, a que en la sociedad exista una
descomposición del tejido social, dividiendo las posturas y las ideologías.
Siguiendo las ideas de Beck, la sociedad de riesgo implica una serie de
cambios: el pasaje de una sociedad de identidades fijas a una sociedad de
individuación cada vez mayor (Beck, 1998)3. Con esta idea, lo que se ve, es
que la sociedad y quien la integra ha perdido aquella confianza en sí mismos,
dándose así, que no tengan o no compartan algún tipo de actividad en pro de
su beneficio. El riesgo es visto como aquella amenaza latente hacía los
individuos, la cual genera sentimientos de incertidumbre y de temor a una o en
una determinada situación; donde la incertidumbre puede llegar a crearse a
consecuencia de un control o minimización de los riesgos en una determinada
sociedad.
Teniendo claro que el concepto de miedo prescinde de lo natural como de lo
social (centrándonos más en el social), encontramos que el conocimiento
científico además de brindarnos nuevas oportunidades llámense culturales,
económicas, políticas, etc. han hecho al mundo aún más complejo, dando lugar
a un desconocimiento del mismo; por ende, los integrantes de la sociedad no
saben cómo actuar ante este mundo complejo.
Ahora bien, existen distintos tipos de miedos, toman, los cuales se pueden
manifestar como viscerales y naturales, además de presentarse los culturales,
cada uno de ellos con sus propias implicaciones sociales. Los miedos
culturales, los cuales, como producto de ciertos fenómenos sociales (violencia,
inseguridad…), invaden de manera individual y colectiva a la sociedad,
debilitando y trastocando su estabilidad emocional y social.4 “Ya que tal miedo,
proveniente de cualquier fenómeno social: origina imágenes, elabora mitos y
crea representaciones sobre los riesgos que se presentan en la sociedad.”
“El miedo se encuentra presente a lo largo de todas las culturas y tiempos en
los cuales los hombres han habitado la tierra” (Korstanje, pero al momento de
hablar sobre qué puede ser el miedo y cómo éste se manifiesta en el ámbito
social5, puede ser algo complicado, ya que el miedo, desde una noción
2. psicológica, es visto como una conducta, o más bien una emoción, que es
antecedida por una sorpresa o confusión, y que tal miedo es causado por la
percepción de un peligro ya sea inminente o presente.
Respecto a la violencia como catalizador del miedo, ésta se “constituye [como]
uno de los problemas más inquietantes de la actualidad.
El miedo a partir de los distintos tipos de violencia, sean los que sean, han
generado que la sociedad vea en sus relaciones e interacciones, que se
complican y se transforman con este tipo de fenómenos, desconfianzas,
malentendidos e inseguridad. Es pertinente, tener una noción que se acerque a
lo qué se está situando dentro del país, en referencia a la violencia y por ende
el surgimiento de una situación y un ambiente de miedo.
Se pude manifestar en la descomposición del tejido social, afectando a la
sociedad en general, a partir de la aparición y publicidad de violencia en los
medios de comunicación, donde los integrantes de la sociedad se sienten
vulnerables, desarmados y amenazados.
Se ha llegado a considerar en diferentes contextos, que el miedo ha servido de
herramienta o medio necesario para la humanidad, pues ha contribuido a su
progreso, en ocasiones, llegándose a decir que si éste no hubiera estado
presente, había existido una ausencia de conciencia sobre los peligros a los
que la sociedad se enfrentó en su evolución social. Pero el miedo no sólo tiene
esta cara, ya que también representa un invasor, que escapa de los controles
sociales (además del sentir de la humanidad). Pero lo que sí se puede decir, es
que el miedo depende del lenguaje de donde éste se manifiesta, además de la
construcción social que se le da a éste, por lo cual el miedo se basa en un
imaginario. Donde tal imaginario se encuentra bajo las percepciones de la
sociedad, tanto de manera individual como colectiva, en este caso creadas por
inseguridad.
El miedo, partiendo de su constricción social, genera conductas acordes entre
la sociedad y el miedo, dando lugar a un “orden social”, el cual no
necesariamente es fiel a la realidad; donde el miedo es una representación de
determinados hechos sociales, y afecta a la sociedad en general.
3. Presentándose que en algunas partes de la sociedad sientan miedo de un
determinado lugar, sin conocerlo siquiera, ya que en su lugar existe una carga
simbólica, que crea “marcas territoriales” (construcción y depósito de
imaginarios de temor).
El miedo está en los individuos y por lo tanto en la sociedad, éste no
desaparece, pues forma parte de la naturaleza humana; el miedo se encuentra
latente en la sociedad, pero al mismo tiempo se transforma y se trasmuta de
acuerdo a las situaciones en las que se encuentre una persona o la sociedad
en su conjunto.
La combinación de la medición del miedo difuso y del cognitivo con la
referencia a la delincuencia en general o a delitos específicos, da lugar a
diversas posibilidades de operacionalizar el constructo de miedo al crimen