La infancia de José María Arguedas estuvo marcada por el maltrato. Vivió con su madrastra y hermanastro quienes lo despreciaban y maltrataban física y psicológicamente. Esto incluyó obligarlo a presenciar actos sexuales y tirarle la comida a la cara. Más tarde, Arguedas se escapó a una hacienda donde vivió felizmente con campesinos indígenas. A pesar de esta dura infancia, Arguedas logró sobresalir académicamente y convertirse en un importante es