El documento describe el número áureo, un número irracional utilizado por los griegos en el arte y la arquitectura. Se usó en templos griegos como el Templo de Ceres y en obras de escultura como el Discóbolo de Mirón. También se empleó en pinturas como El hombre de Vitruvio de Da Vinci, donde se relacionan figuras geométricas siguiendo proporciones áureas.