SlideShare una empresa de Scribd logo
bmnA u t o r a de la serie éxito de librería El poder de la oración ®
Descubre el poder.
Cambia tu vida.
Cambia el mundo.
Cuando oras, ¿estás seguro de que Dios escucha? ¿Algunas veces
te preguntas si tus palabras no dan contra el cielo raso y se
evaporan? ¿Alguna vez dudas de que tus oraciones puedan ser
determinantes?
Pues bien, la verdad es que no solo pueden ser determinantes, sino
que pueden transformar vidas.
En El poder del joven que ora, descubrirás que el saber orar puede
cambiarlo todo. A través de la oración, Dios puede elevarte por
encima de las presiones de tu vida de modo que puedas ver el plan
singular que tiene con tu futuro. Veinte capítulos de actualidad te
ayudarán a...
tener un andar más íntimo con Dios
decirle adiós a las emociones negativas
atraer buenas relaciones
mantenerte libre de la presión de tus ¡guales
ser una luz para otros
Lo que es importante para ti es importante para Dios. Dile todo lo
que tienes en tu corazón, comenzando con las oraciones que se
ofrecen al final de cada capítulo. Habla con Dios. Escucha a Dios. Y
observa el desarrollo del gran propósito que tiene contigo.
Stormie Omartian es la autora de la serie de libros que han sido
éxitos de librería El Poder de la Oración® (más de siete millones
de ejemplares vendidos), Stormie, Suficiente luz para el próximo
paso y La oración que cambia todo™. Stormie y su esposo, Michael,
han estado casados durante treinta años y tienen tres hijos adultos.
www.editorialuniiit.com
ÏÏUNILIT
Producto 495446
Categoría: Jóvenes / Devocional y oración
«Publicamos para la familia•<
Publicado por
Editorial Unilit
Miami, Fl. 33172
Derechos reservados
© 2006 Editorial Unilit (Spanish translation)
Primera edición 2006
© 2005 por Stormie Omartian
Originalmente publicado en inglés con el título:
The Power of a Praying® Teen
por Harvest House Publishers
Eugene, Oregon 97402
www.harvesthousepublishers.com
Todos los derechos reservados.
Todos los derechos reservados. Ninguna porción o parte de esta obra se puede repro-
ducir, ni guardar en un sistema de almacenamiento de información, ni transmitir en
ninguna forma por algún medio (electrónico, mecánico, de fotocopias, grabación,
etc.) sin el permiso previo de los editores.
Traducción: Nancy Pineda
Revisión: Rojas & Rojas Editores, Inc.
Portada: Koechel Peterson & Associates, Inc., Minneapolis, Minnesota
A menos que se indique lo contrario, las citas bíblicas se tomaron de la Santa Biblia
Nueva Versión Internacional. © 1999 por la Sociedad Bíblica Internacional.
Las citas bíblicas señaladas con RV-60 se tomaron de la Santa Biblia, Versión Reina
Valera 1960. © 1960 por la Sociedad Bíblica en América Latina.
Las citas bíblicas señaladas con LBD se tomaron de la Santa Biblia, La Biblia al Día. ©
1979 por la Sociedad Bíblica Internacional.
Las citas bíblicas señaladas con DHH se tomaron de Dios Habla Hoy, la Biblia en Versión
Popular. © 1966, 1970, 1979 por la Sociedad Bíblica Americana, Nueva York.
Las citas bíblicas señaladas con LBLA se tomaron de la Santa Biblia, La Biblia de Las
Américas. © 1986 por The Lockman Foundation.
Las citas bíblicas señaladas con TLA se tomaron de la Bibliapara todos, © 2003. Tra-
ducción en lenguaje actual, © 2002 por las Sociedades Bíblicas Unidas.
Usadas con permiso.
Producto 495446
ISBN 0-7899-1397-6
Impreso en Colombia
Printedin Colombia
Categoría: Jóvenes/Devocional y oración
Category: Youth/Devotional & Prayer
¿Qué es el poder y por que lo necesito? 5
• i 1
'.'i11
/
'!• 4:
• '¡
Séñor, ayúdame a conocerte mejor 15
Señor, ayúdame a liberarme
de los errores del pasado 27
Scfeor, ayúdame a perdonar a otros 37
áfekar, ayúdame a hacer lo que es bueno 47
Sefior, ayúdame a mantenerme
firme contra las malas influencias 57
fillíor, ayúdame a tomar el control de mi mente 69
'""t ./iu., ' , • . , ,, ,
Séñor, ayúdame a comprender tu Palabra 79
Señor, ayúdame a liberarme
de la presión de mis ¡guales 89
Señor, ajúdame a Lener buenas relaciones 10]
Señor, a iklanie a alabarte en todo tiempo 109
"i •:. . • • •• ' .. > ,
S&etayúdame a encontrar
tu propósito para mi vida. 117
1if '»'"I ";•• .' • •
SléíEiCiayúdame a tomar decisiones sabias . . . . . . . . 127
SteWf éyúdame a deshacerme
de las emociones negativas 135
"t é
Síful^ayúdame a resistir la tentación 147
««t c r • • - ::
•
SM©íi ayúdame a ser fuerte cuando
pasan cosas malas. . 155
I" lili " :
•• "; : v
' 1
Sitó®f5
ayúdame a estar seguro 163
Seáoí, ayúdame a decir palabras que traigan vida... 171
SiñíW ayúdame a tener fe por lo imposible 181
• • ' • ' ' 1
' ' •
' lililí" ' • ' '
Seño-r; ayúdame a conocer tu voluntad para mi vida. 189
Señor; ayúdame a adentrarme
en el futuro que tienes para mí. . . . . . . . . . . . . . . , . 199
$Í¡ÉRES JOVEN, ESTÁS EN una posición Única para lograr influir
en tú mundo de una manera poderosa. Eso se debe a qué eres
parte de un mundo que es intenso, agresivo y muy pequeño en
algunas maneras. Es pequeño porque las personas que no son
jóvenes no forman parte de él de la forma en que lo,haces tú.
Eres capaz de vci de cerca tocia* las cosas que son buenas  malas
en tu mundo, las cosas que tú deseas que nunca terminaran  las
cosas que sabes que necesitan eambiar.
Tú, tu oíday tu mundo pueden cambiar mucho má> de lo t/ue
jamás soñaste posible cotí sola orar por esto todos los días.
Como joven, tienes una vida ocupada. Nunca ha habido
más presión por aprender, mejorar y triunfar. Ni nunca lu habido1
más oportunidades de hacerlo. Quizá sientas que no tienes tiempo
El podar *iel joven que ora
de orar. Si es así, no eres el único. Muchas personas se sienten
así. La vida está llena de un sinnúmero de cosas que están dise-
ñadas para mantenernos demasiado ocupados para orar. Sin
embargo, cuando no pasamos tiempo con Dios cada día en oración,
nos perdemos de escuchar su voz hablando a nuestro corazón y
guiándonos de maneras importantes. Puede hacer que nos perdamos
muchas de las cosas buenas que Él tiene para nuestra vida.
He encontrado un método para que orespor cada aspecto de tu
vida que te mantendrá enfocado en quién es Dios y en para qué te
creó. Y esto es muy importante, porque cuando las personas no
saben quién es Dios en realidad, ni para qué Él las creó, pueden
terminar tomando malas decisiones y nunca
experimentan todo lo que Dios tiene para
ellas.
Esta manera de orar quitará los proble-
mas de tus hombros y pondrá la carga en los
de Dios. Él no solo quiere llevarlas por ti,
sino también elevarte por encima de las
circunstancias difíciles para que logres ver las
cosas desde su perspectiva. Cuando puedes
hacer eso, podrás saber lo que es verdad y
lo que es mentira. Demasiado a menudo
creemos cosas que no son ciertas sobre
nosotros y nuestras situaciones, y esto
puede limitarnos, o incluso paralizar-
nos, hasta el punto en que no podemos
avanzar como debemos. Ver la verdad
como la revela Dios nos libera.
Sobre todo, este tipo de oración te ayudará a acercarte de veras a
Dios. Y ahí es donde quieres estar. Cuando estás cerca de Dios,
puedes expresar los más profundos sentimientos y deseos de tu
corazón. Y tu corazón puede escucharlo a Él guiándote en el
camino que tiene para ti, revelándote, los maravillosos planes
que tiene para tu futuro.
Las principal®3
cosas por las
que oro:
• Buena salud para mí
y mi familia
• Que tenga éxito
en la vida
• Que sea libre
de la tentación
• Que haya paz
en el mundo
• Que Dios salve
a mi generación
(16-19 años de edad)
§
¿Qué es el poder y por<|u<§"Íqnecesito?
" - " cor. r > x - í m '
La cosa más importante que necesitas comprender en la vida
es que Dios te creó, te ama, está comprometido contigo y tiene un
gran propósito con tu vida. Sin embargo, no soló tienes que creer
esto en tu cabeza, sino también conocerlo en tu corazón. Y solo a
través de una relación íntima con Dios es que puedes conocer
todo esto en verdad.
Uno comienza una relación íntima con Dios al recibir a su
Hijo, Jesús. Solo pídele a Jesús que venga a tu vida. Luego toma
una Biblia y comienza a leerla. (Revisa diferentes traducciones
para ver la que sea perfecta para ti). Procura juntarte con personas
que conozcan al Señor. ¿Cómo puedes llegar a ser todo para lo
que te creó Dios si a cada momento te empujan a un mundo
que quiere que te amoldes a su imagen? Las personas qué tengan
la mayor influencia en tu vida deben ser personas que conocen a
Dios. Búscalas en la escuela. Sobre todo, búscalas en una buena
iglesia, pues allí pueden dárte el apoyo sólido que necesitas para
cultivar tu relación con el Señor.
Tener una relación cercana con Dios no significa que nunca
tendrás problemas, sino que cuando los tengas, Él estará a tu
lado para ayudarte. Calmará las tormentas de tu vida cuándo las
cosas se pongan feas. Tomará los asuntos difíciles que enfrentas
para o bien transformarlos, permitiéndote elevarte por encima
de ellos, o para ayudarte a atravesarlos con éxito.
Sin embargo, todas estas cosas no pasan por casualidad. No
pasan sin oración.
Cuando andas cerca de Dios mediante la lectura de su Palabra
y pasando tiempo con El cada día en oración, descubrirás dé
veras quién eres y para qué te creó. Comprenderás el propósito
que Dios tiene con tu vida.
La oración es simplemente comunicarse con Dios. Es hablar con
Él y decirle cualquier cosa que tengas en el corazón. Es contarle
El potíer del jover. «gue ora
Jo que opinas de tu vida y lo que opinas de Él. Es decirle a Dios
todas las cosas que ves que son malas y cómo te gustaría que
cambiaran. Y es permitirle a Él que hable a tu corazón sobre qué piensa
de tí y cuáles son los planes y propósitos que tiene con tu vida.
Cuando oras a menudo, te enfocas en quién es Dios y en
quién , eres tú con relación a Él. Cuando hablas con Dios, Él
comienza a mostrarte cada vez más, quién debes llegar a ser y lo
que quiere que hagas. Y esa es una de las cosas más importantes
que necesitas conocer en tu vida.
B ^ a ^ e . ^ ^ ^ t i < h a b l e m o s «le m i
Este libro te ayudará a aprender a orar por ti y tu vida, y por
otras personas y circunstancias también. Es el libro que me
hubiera gustado que ya lo hubieran escrito cuando yo era joven.
Si hubiese sabido todas estas cosas, no me hubiera metido en
tantos problemas, ni malgastado tantos años de mi vida buscando
cosas que no podía tener. No hubiera pasado tiempo luchando por
algo para lo que no me crearon. No hubiese sufrido el desaliento,
la depresión, la frustración, la ansiedad ni la desesperación que
sufrí. Me hubiera ahorrado un montón de tristeza y dolor.
Cuando era adolescente, mi familia y yo
Mi oración vivíamos en una parte de la ciudad que no
& Dios era tan bonita como donde vivían los demás
Seiíor> ayúdame a pasar chicos. No era agradable en lo absoluto,
a través de esta maravillosa Los demás chicos vivían en casas que eran
Vida que me has dado. muy grandes, nuevas y bien equipadas. La
Dame todo lo que necesito mía era pequeña, vieja y de aspecto ruinoso,
y ayúdame de manera Ellos procedían de familias adineradas. La
espiritual, mía era pobre. Ellos vestían mejores ropas,
emocional y física. conducían autos más bonitos e iban a
lugares en las vacaciones. Las pocas ropas
que tenía para vestir estaban gastadas, nuestros autos
eran tan viejos y estropeados que apenas funcionaban, y nunca íba-
mos a ninguna parte. Ellos comían bien, se mantenían saludables
8
¿Qué es el poder y por Jo necesito?
y vivían mejor. Yo a menudo me iba-aja cama con hambre, casi
siempre estaba enferma y vivía en la miseria. Ellos tenían ilusión
en la vida; yo le temía a cada día y a menudo deseaba más morir
que vivir.
Si hubiera conocido al Señor en ese entonces, hubiera podido
acudir a Él con todas las necesidades que tenía. Hubiera sentido
su presencia y su poder ayudándome a través de cada día y se
hubiera llevado mi pena y soledad. Hubiera dejado de estar
avergonzada de ser quien era y hubiera estado agradecida de lo
que Dios estaba haciendo de mí. Hubiera aprendido a andar en
los caminos de Dios y a no meterme en problemas. Hubiera
reconocido mucho antes mis dones y talentos y los hubiera
desarrollado, en lugar de recriminarme por no ser lo que pensaba
que debía ser. Hubiera comprendido lo que Dios quería de mi
vida y a no apartarme del camino ni malgastar tantos años tra-
tando de descifrar la vida y buscar mi camino.
Te contaré más de mi vida a lo largo de este libro, y espero
que aprendas lo suficiente de esta para evitar los errores y los
males que tuve que soportar.
¿ » p r ^ masa———
¿Te parece a veces que orar es difícil? Si es así, no eres el único.
Yo me he sentido también de esa manera. Es más, todo el mundo
experimenta lo mismo de una manera u otra, no importa la
edad ni el tiempo que haga que conocen al Señor.
Existen muchas explicaciones diferentes de por qué se nos
hace difícil la oración. Una es que no estamos seguros de que
digamos lo que hay que decir. Pensamos que tenemos que sonar
como un predicador o que tenemos que usar las palabras apro-
piadas. Tememos no decir las cosas lo suficientemente adecua-
das ni buenas. O no oramos el tiempo suficiente ni con bastante
firmeza; '...
Algunas veces pensamos que Dios no escucha nuestras ora-
ciones. O que quizá no las considera importantes. O que está
i
El podar *iel joven que ora
demasiado ocupado para escuchar. O creemos que los asuntos
por los que queremos orar son muy grandes y nosotros somos
muy pequeños, ¿cómo es posible que nuestras oraciones mar-
quen alguna diferencia? No entendemos lo poderosas que son
nuestras oraciones y lo que se puede lograr cuando oramos.
¿Encuentras más fácil orar por otras personas que por ti? Sé
que me he sentido de esa manera. Puedo orar con mucha más
facilidad por mis amigos, familiares y personas que ni siquiera
he conocido y de las que me he enterado en las noticias que por
mis propias necesidades. ¿Por qué?
Por una cosa: me resultaba sencilla entender las necesidades
de otras personas. Las mías eran muchjas veces complicadas y no
era fácil hablar al respecto. A menudo no tenía ni idea de cómo
orar por una situación en particular. D las circunstancias eran
tan abrumadoras que mis oraciones fió eran más que un básico
clamor por ayuda. Algunas veces penisaba que no podía decir
una oración que Dios deseara escuchar. Hace mucho que he
descubierto que nada de eso es cierto. I
La verdad es que Dios no está buscando a alguien para orar
que sea perfecto, ni que diga las «cristianísimas» palabras perfec-
tas de una manera perfecta. Está buscando a alguien que tenga
un corazón lleno de amor para ÉL Dios no mide tus oraciones
por el tiempo que oras. Las mide por lo importantes que son
para ti. Sabe lo que hay en tu corazón y le interesan las cosas que
te preocupan, porque tú le importas. Lo que es importante para
ti es importante para Él. Por eso quiere que vayas a Él con las
cosas que son importantes para ti.
Es posible que estés pensando: Si Dios sabe lo que está en mi
corazón y se preocupa por mí, ¿por qué tengo que orar? ¿Por qué
simplemente no me da lo que necesito sin tener que pedírselo?
La respuesta es que Dios quiere que vayas a Él, que estés cer-
ca de Él, que hables con Él y que dependas de Él. Quiere hablar
contigo sobre las cosas que son importantes para EI& fin de que
lleguen a ser importantes para ti. Quiere llevarte a lugares a los
que no puedes llegar sin Él. Quiere hacer gfandes cosas por
¿Qué es el poder y por <|u<§"Íq necesito?
medio de ti, pero tienes que andar cerca de Él a fin de que se
hagan realidad. Cuando comprendes todo esto, orar es muchísimo
más fácil.
fias h a c f i £ c u a n t o a s . aisa4
"-^ B a t e s * - - -
¿Alguna vez has sentido que tu vida está fuera de control y
no tienes poder para hacer algo al respecto? ¿Algunas veces te
sientes tan presionado por las circunstancias externas o las emo-
ciones internas que crees que estás a punto de explotar? ¿Alguna
vez has sentido como si tu vida estuviera atascada en un lugar y
que no vas a ninguna parte, o peor aun, que vas hacia atrás?
¿Alguna vez experimentas sentimientos de vacío o frustración?
¿Te has preguntado si puedes avanzar hacia lo que Dios tiene
para ti? La mayoría de las personas sienten esas cosas, en especial
las de tu edad. Sin embargo, la buena noticia es que Dios tiene
un camino para ti a la oración qué te dará el poder para levantarte
por encima de todos esos sentimientos.
¿Has deseado a veces hacer algo gran- Oré y D i o s
de, algo que fuera determinante en este respondió
mundo, pero no sabías qué hacer ni cómo ie ^ a ^
hacerlo? Si es así, consuélate en saber que me ayudara
que esta es la manera en qúe quiere Dios en mi relación con Él
que te sientas. Él también quiere que No oraba mucho y ahora
hagas algo grande que sea determinante lo hago todos los días.
en este mundo, pero quiere que busques A veces olvidaba leer
de Él la habilidad y el poder para 'a
Biblia, pero he mejorado,
hacerlo. Demasiado a menudo trata- (14 años de edad)
mos de hacer cosas por nuestra cuenta
y nos llegamos a desalentar cuando no ocurren de la manera que
esperábamos.
Lo que necesitamos es un poder mucho mayor que nosotros
mismos. Aun así, en el mundo solo existe un poder lo suficiente
grande para ayudarnos a elevarnos por. encima de nosotros mismos
y nuestras limitaciones y circunstancias, y ese es el poder de Dios.
El poHer ¿al j^mn que . ora
•Corno s e ajferitxa un*-. • - -
Lo más maravilloso que ocurre cuando invitamos a Jesús a
entrar en nuestra vida es que el Espíritu Santo de Dios viene a
vivir dentro de nosotros. Como tenemos su Espíritu Santo en
nosotros, nunca estaremos solos y siempre tendremos acceso a todo
lo que necesitamos. Eso significa que cada vez que oramos a
Dios en el nombre de Jesús, su poder se libera a fin de actuar en
cualquier situación por la que estemos orando. Cuando nega-
mos el poder del Espíritu Santo, nos volvemos como esos indi-
viduos que la Biblia dice que «aparentarán ser piadosos, pero su
conducta desmentirá el poder de la piedad» (2 Timoteo V. ).
Sin el poder de Dios, no podemos elevarnos por encima de
nuestras limitaciones. No podemos permanecer firmes ante
todo lo que nos venga en contra cada día.
Dios quiere que comprendamos «cuán incomparable es la
grandeza de su poder a favor de los que creemos» (Efesios I; í j).
Él quiere que veamos que «no hemos recibido el espíritu del
mundo sino el Espíritu que procede de Dios, para que enten-
damos lo que por su gracia él nos ha concedido» (.„ Corintios
Eso significa que debido a que tenemos el Espíritu de
Dios morando en nosotros, lograremos experimentar todas
las cosas que Dios tiene para nosotros. ¿No es esa una gran
noticia?
No puedo hacer que comprendas el poder de Dios, ni la
manera en que el Espíritu Santo quiere obrar en ti. Eso va más
allá de mis capacidades y autoridad en tu vida. Sin embargo, tú
no necesitas que te convenza porque lo hará el mismo Espíritu
Santo. Jesús dijo: «El Defensor, el Espíritu Santo que el Padre va a
enviar en mi nombre, les enseñará todas las cosas y les recordará
todo lo que yo les he dicho» (Juan > -i DHH). El Espíritu
Santo te lo mostrará.
Una vez que haces a Jesús el Señor de tu vida, llegarás a
conocerlo como «a Aquel que es poderoso para hacer todas las cosas
mucho más abundantemente de lo que pedimos o entendemos,
¿Qué es .el poder y por <tn|¿$c -'«cesito?
según el poder que actúa en nosotros» (Efesios *..t¿', RV-60).
Esto quiere decir que debido al Espíritu Santo de Dios en ti, su
poder en ti, El puede hacer más en tu vida de lo que puedas
pedir. Él puede hacer más de lo que puedes imaginar siquiera.
¿Qué te parece?
¡ a j ^ m s s a ^ - — — — — —
Este libro te ayudará a orar por los diferentes asuntos de tu
vida. Solo toma un capítulo cada vez. Al final de cada capítulo
está una sección llamada «El poder de la oración», una oración
que puedes hacer para empezar. A medida que oras, vendrán a
tu mente otras cosas para incluirlas.
Después de esa sección está una llamada «Palabra de poder».
Son importantes promesas de la Palabra de
Dios relacionadas con lo que se está hablando.
Al leerlas, piensa en lo que cada promesa en
particular significa de manera específica
para ti y tu vida. La última sección de cada
capítulo se llama «Pensémoslo un poco más».
Estas son preguntas para que las respondas
y pensamientos para que los completes
que te ayudarán a aprender a orar por esas
cosas.
A través de todos los capítulos aparecen
pequeños recuadros que contienen pensamientos, oraciones
y opiniones de jóvenes. Decidí mantenerlos anónimos porque
muchos son muy personales y quería proteger la privacidad de
todos los que realizaron la encuesta. Están divididos por igual entre
contribuyentes masculinos y femeninos. Sin embargo, los mismos
jóvenes no realizaron la encuesta de manera anónima. Los vi y
hablé con ellos en persona, y fueron muy entusiastas y sinceros
en sus respuestas debido a que creían que su franqueza podía
ayudar a otros jóvenes que atravesaban por las mismas cosas y
experiencias.
Oro por
otros cuando;
por ellos
• Me ayudan
• Pienso en ellos
' Están tristes
• Tengo l a oportunidad
(13-15 años de edad)
El podar *iel joven que ora
l o r a . c í e •.•A;,^-
Cuando hablas con el Señor, nunca te quedas inmóvil. O bien
avanzas o retrocedes. O bien eres más semejante a Cristo cada
día o te pareces menos a Él. Es por eso que escribí este libro.
Deseo que sigas avanzando al pasar tiempo con el Señor cada
día. Deseo que aprendas a amar a Dios y vivas como Él quiere de
modo que puedas recibir todo lo que Él tiene para ti. Cuando
vives acorde a la Palabra de Dios y por el poder de su Espíritu
Santo, puedes confiar en que el Señor está obrando su perfecta
voluntad en tu vida y te está convirtiendo en todo para lo que te creó.
!íEÉe i r
oración
Señor, tu fias ffitiSTBirtO Palabra- que tu Espíritu
Santo nos ayuda a orar (Romanos 8:2i). Te invito,
Espíritu Santo, a que me enseñes a orar. Muéstrame
las cosas que me hacen falta saber. Dame la fe que
necesito para creer que tú siempre me escucharás y
responderás a tu manera y en tu tiempo. Gracias,
Señor, porque enviaste a tu Espíritu Santo a fin de
que pueda vivir en poder y que me puedas usar de
manera poderosa (1 Corintios 1:18). Ayúdame a
hacer eso. Necesito tu poder para que me permita
vivir de la manera en que quieres que lo haga, de
modo que pueda llegar a ser todo para lo que me
creaste. Te lo pido en el nombre de Jesús.
m
SíHBñ
W U j i L »
AN"I j-:s QUE LLEGARA  CONOCER AI SEÑOR, participaba en
iodo tipo de prácticas ocultas y religiones oriéntales y de la Nue-
va Era. En cada una de estas trataba de encontrar a Dios y descu-
brir el propósito de estar viva. Llegué a estar desesperada por
encontrar una salida del dolor emocional, el temor, la ansiedad
y la depresión que había experimentado casi cada día desde que
era niña. Pensaba que debía haber un Dios, y que si podía acer-
tarme a Él lo suficiente, quizá pudiera darle significado a mi
vida y entonces me sentiría mejor conmigo misma.
Por supuesto que esto no pasó porque los dioses que buscaba
eran distantes y fríos. Y esto me deprimió aun más porque me
criaba una madre que era disiaiue y fría.. También era violenta
en lo físico, abusadora de palabras, temible y cruel. Me,encerra-
ba en un armario por largos períodos y eso me ponía nun asus-
tada y irisie. Más tarde me di cuenta que ella lenía una grave
enfermedad menial, y debido a que nunca recibía ninguna ayu-
da médica, empeoraba cada vez más a medida que pasaba el
I^illip^l^ieíl -<|W«í:
.ora
Con el tiempo perdoné a mi madre
por todas las cosas que sufrí por su culpa,
pero seguía teniendo recuerdos muy
malos de mi niñez. Siempre ocultaba a
los demás esa parte de mi vida, sobre todo
cuando era adolescente. A esa edad no
era bueno ser diferente, y de seguro no
era bueno ser diferente de una manera
tan negativa como esa. El dolor qué sentí
en la adolescencia llegó a ser como una
avalancha que se estrellaba contra mí
hasta que parecía como si me fuera a ahogar bajo su peso. La
desesperanza, la depresión y la desesperación que sentía se tor-
naron tan insoportables que tuve pensamientos constantes de
suicidio.
Después de cumplir los veinte años y estar ya por mi cuenta,
estuve probando todo lo que se me ocurría para salir de mi des-
dicha, pero nada daba resultados. Tomé drogas hasta el punto
de casi matarme un par de veces por una sobredosis. Bebía
alcohol para tratar de adormecer el dolor, pero solo me hacía
sentir enferma y confundida. Por último, en el punto más bajó
de mi vida, ya tenía 2U años de edad y había hecho todo lo que
sabía a fin de encontrar una salida al dolor que sentía a cada
momento. Quería morir y estaba planeando una forma de
matarme.
Fue en ese tiempo que mi amiga Terry vio que no andaba
muy bien, y me pidió que fuera con ella a conocer a su pastor.
Era cristiana y yo no lo era, y por eso dudé. Temía que tuviera
que hablarle sobre mi madre o mis problemas, o revelar las terri-
bles cosas que había hecho. No quería que nadie lo supiera. Sin
embargo, también estaba desesperada por encontrar una razón
para vivir, y por eso fui.
El pastor de Terry, el pastor Jack, se reunió con nosotras en
un popular restaurante de la ciudad. Comimos y nos sentamos
allí por dos horas mientras me hablaba de Jesús. Cuando ¿1
Lo más difícil
de la oración es:
• Reconocer mis pecados
• Orar de corazón
• Mantener los ojos
cerrados
• No ser egoísta
• Nada. IEs fácil!
[13-15 años de edad)
Señor, ayúdame a conocerte mejor
pastor Jack hablaba de Jesús, este no se;parecía a los dioses fríosy
críticos de los que había estado leyendo en mis libros sobre reli-
giones ocultistas y orientales. El pastor Jack me dijo que si reci-
bía a Jesús como Salvador, podía comenzar un andar cercano
con Dios que cambiaría mi vida para siempre. Me ayudaría a
encontrar la paz y la restauración. Me mostraría su propósito
para mi vida, y sería mejor que nada de lo que hubiera imaginado
jamás. • ;...••• , .
El pastor Jack me dio tres libros para leer, Uno era sobre Ja
realidad del mal. Mis prácticas ocultistas me habían enseñado
que no existía el mal. El segundo libro era sobre el poder del
Espíritu Santo. Nunca había conocido esa clase de poder, y esta-
ba fascinada que pudiera tener acceso a eso cuando recibiera a
Jesús. El tercer libro era el Evangelio de Juan en tamaño pequeño.
Hablaba de la vida de Jesús, quién era y lo que enseñó. El pastor
jack me pidió que fuera con Terry a su oficina después que leyera
los libros, y luego le dijera lo que pensaba de ellos.
Me fui a la casa, puse mis planes de
suicidio en espera y leí los tres libros en Oro por otros
solo unos días. Cuándo regresé con Terry cuando:
a la semana siguiente, le dije al pastor • Me lo piden
Jack que creía que lo que había leído era . p¡0$ m ^ ^
la verdad, Me preguntó si estaba lista . N e m i t ° ^
para recibir a Jesús como Salvador, y le . gsfá(| e||ferm
d Í
'e
^U e S Í
- , ^ . , - E t ú J ™
Después que le entregue mi vida al ()3.|5 aj¡os de
Señor, pude sentir su Espíritu obrando
en mí. Por primera vez en mi vida sentí
esperanza, y pude ver que tenía un futuro, No sabía con
exactitud cuál era, pero sabía que tenía uno. Y eso fue mucho
más de lo que podía concebir antes.
También pude ver que había una trama común en todas esas
otras prácticas ocultas y religiones orientales en las que antes
había tenido un interés superficial. La similitud entre ellos era
que los dioses de cada una de esas religiones no tenían poder
El poder del joven <gue ora
para salvar ni transformar a una persona y su vida. Sin embargo,
el Dios de la Biblia sí lo tenía. Él es el único, verdadero y viviente
Dios, y cuando recibimos a su Hijo, Jesús, como Salvador, el
Espíritu Santo de Dios viene a morar en nosotros (Juan 14:I§-17).
Es mediante el poder de su Espíritu que nos transforma de
adentro hacia fuera y de manera milagrosa nos cambia a noso-
tros, nuestras circunstancias y nuestra vida.
También aprendí que se puede conocer al Dios de la Biblia y
que Él quiere estar cerca de nosotros. Es por eso que se le llama
Emanuel, lo cual significa «Dios con nosotros». Él se acerca a
nosotros cuando nos acercamos a Él (Santiago 4:8).
T o i t o - l a < n a r w r t f f l i t a a "
Me gustaría poder sentarme y conversar contigo en persona
sobre tu vida. Si pudiera hacerlo, te diría que si has recibido a
Jesús, la respuesta a todo lo que necesitarás algún día en tu vida
está dentro de ti. Eso se debe a que el Espíritu Santo de Dios está
en ti. Él promete guiarte en tu vida y enseñarte cosas que necesi-
tas saber. Pero tienes que entregarle tu vida y ser paciente a fin de
dejarle obrar en ti a su manera y en su tiempo.
Ser transformado significa ser cambiado de forma perma-
nente. No quiere decir que sea un arreglo temporal ni un pequeño
cambio. Esto no se refiere a tratar de ser suficiente bueno para
lograr que Dios te ame. Dios ya te ama. Él te amó primero. Él
solo espera que lo ames. Me refiero a llegar a conocer a Jesús,
que es perfecto, y permitir que su perfecto amor te cambie y te
ayude a hacer lo bueno. Me refiero a andar cerca de Dios y las
grandes cosas que ocurrirán en ti gracias a esto.
J «a?j e t xHorj ¡q.mr^y
Todos queremos que nos amen, pero nadie será capaz de
amarnos jamás como lo puede hacer Dios. Solo Dios puede suplir
tus necesidades a cada instante... cuando tienes una relación íntima
18
Señor, ayúdame a conocerte mejor
con Él. Ninguna persona puede alguna vez conmoverte de
manera tan profunda como lo puede»hacer Dios. Nadie puede
siquiera conocerte tan bien. Siempre que sientas un vacío den-
tro de ti que quieres que lo llenen los más cercanos a ti y estos no
lo hagan, recuerda que Dios puso allí ese vacío. Quiere que te
acerques a Él para poder llenarlo.
Dios quiere que lo quieras, Y cuando te das cuenta que es Él
lo que de veras quieres, eso te libera para que entiendas que los
anhelos, las soledades o vacíos dentro de ti son una señal de que
necesitas acercarte a Dios y pedirle que te llene con más de Él.
Pero esta profunda relación con Dios que todos queremos, ya
sea que en ese momento sepamos lo que queremos o no, no se
da por casualidad. Se tiene que buscar. Tenemos que orar por
una relación más profunda con Dios. Tenemos que orar para
que nuestro andar con Dios no sea superficial.
- o o m a n e r a s ' H e s a b e r s i t u - a n é a r ..
i m o a «8 aMpftEliciíli - —
1. Si amas al Señor solopor lo que Élpuede hacerpor ti, tu andar
con el Señor es superficial. Si lo amas lo suficiente para pre-
guntarle qué puedes hacer tú por Él, tu relación con Dios
está profundizando.
2. Si solo oras a Dios cuando las cosas son difíciles o necesitas algo,
tu andar con Él es superficial. Si oras a menudo solo porque
te encanta estar cerca de Él, tu relación con Dios es cada vez
más profunda.
3» Si te enojas con Dios o te desilusionas de Él cuando no hace lo
que quieres, tu andar con Él es superficial. Si puedes alabar a
Dios y orar a Él sin importar lo que esté pasando en tu vida,
tu relación con Dios es cada vez más profunda.
4, Si alabas a Dios solo por lo que Él hace por ti, tu andar con
Dios es superficial. Si lo alabas también por lo que es Él, tu
relación con Dios es cada vez más profunda.
ex yodfcr del w v « ..¡ra
5, Si sientes que tienes que suplicarle a Dios oforzarlo para con-
seguir que responda a tus oraciones, tu andar con El es super-
ficial. Si crees que Dios quiere responder tus oraciones de
acuerdo con su voluntad, tu relación con Dios es cada vez
más profunda. : • •.•.,•,• ;
T i ^ i n E M j s o l a s c o í V D i o s r
Nunca podremos acercamos a Dios y llegar a conocerlo
bien si no pasamos tiempo a solas con Él. En esos momentos
privados con Dios es que nos renovamos y fortalecemos. És
donde podemos ver mejor nuestras vidas desde su perspectiva y
descubrir lo que es importante en realidad. Ahí es donde com-
prendemos quién es Dios en verdad y todo lo que tiene para
nosotros.
El mismo Jesús pasó tiempo a solas con Dios. Si alguien
pudo haber salido impune al no hacerlo, de seguro habría sido Jesús.
¿Cuánto más importante debe ser para nosotros?
Sé que encontrar tiempo a solas para orar a Dios puede ser
difícil, Pero si estás dispuesto a hacerlo una prioridad, verás res-
puestas a tus oraciones como nunca antes.
Recuerda, si no has estado orando mucho, no
puedes esperar que las cosas cambien de la
noche a la mañana. Cuando alguien trata
de lograr que un enorme transatlántico dé
la vuelta y se encamine en una dirección
diferente, no ocurre en el momento que
comienza a timonear. Es más, apenas ven
algún cambio al principio. La oración puede
darle la vuelta a tú' tódá, pero no siempre
sucede en el momento que dices las pri-
meras palabras. Si no has estado orando
mucho o nada, no puedes esperar que las
cosas cambien de inmediato. Pug^e tomar un tiempo de oración
continua antes de que ve^s que comienza a cambiar el escenario
20 ; • i
Pienso en ;
Dios como:
• Alguien que me
escucha
• A l g u i e n que me ama
• Alguien con el que
puedo hablar
• Alguien que siempre
es bueno
• Alguien que me guía
(13-15 años de edad)
Señor, ayúdame a conocerte mejor
de tu vida. Esto es normal, así que no te rindas. Pronto te dirigi-
rás a toda velocidad en una nueva dirección.
Muy a menudo la gente se rinde antes de ver las respuestas a
sus oraciones. Solo recuerda que este no es un corto viaje alrededor
del puerto. Es un viaje de toda la vida para llegar a tu destino.
Rendirse no es una opción.
- '
¿Alguna vez has tenido problemas con recordar nombres?
Yo sí. En especial cuando conozco a un montón de personas a la
vez. Es más fácil recordar los rostros que los nombres. Con Dios,
la situación es diferente. El tiene un solo rostro, pero muchos,
muchísimos, nombres. Es que hay tanto que conocer de Dios
que necesitamos todos esos nombres para que nos ayuden a
recordar. En otras palabras, si no conocemos todos sus nombres,
quizá no comprendamos cabalmente cada aspecto de lo que es Él.
A Dios se le llama por muchos nombres
diferentes en la Biblia, pero a veces nos
cuesta trabajo recordar hasta algunos de los
básicos. Quizá olvidemos uno cuando
más necesitamos recordarlo. Por ejemplo,
es probable que pensemos en Dios como
nuestro Proveedor, pero que olvidemos
que es también nuestro Protector. O tal
vez lo recordemos como nuestro Padre celestial, pero que olvide-
mos que es también nuestro Amigo. Tal vez recordemos que es
nuestro Salvador, pero que olvidemos que es también nuestro
Libertador.
Cada uno de los nombres de Dios en la Biblia representa
una manera en que Dios quiere que confiemos en Él:
¿Confías en que Él es tu Fortaleza? (Salmo RV-60)
¿Es tu Paz (Efesios '. *)?
¿Es el Levantador de tu cabeza cuando estás abatido (Salmo
3:3, KV-60)? • • • : ••
Oré y Dios
respondió
O r é cuando me enferme'
y Dios me sano'.
113 años de edad)
SI poder del joven, que ora
¿Es Él tu Sabiduría (1 Corintios i;,24)?
¿Es tu Consejero (Salmo )?
Hay gran poder en cada uno de los nombres de Dios. Y cuando
los mencionas confe y entendimiento, llegas a conocer mejor a Dios.
Mientras mejor lo conozcas, másfantástica será tu vida.
Por ejemplo, el nombre de Dios siempre es un lugar seguro
al cual correr cada vez que necesites ayuda. «Torre inexpugnable
es el nombre del SEÑOR; a ella corren los justos y se ponen a salvo»
(Proverbios 18:10).
Si estás enfermo, corre a tu Sanador.
Si tienes necesidad de algo, corre a tu Proveedor.
Si tienes miedo, corre a tu Refugio.
Al pronunciar uno de sus nombres, le
invitas a que sea eso para ti. A menudo
hay mucho que no tenemos en la vida
solo porque no buscamos a Dios como la
respuesta a esa necesidad.
En la siguiente lista de nombres de
Dios, solo incluí 20. Sin embargo, hay
cientos más en su Palabra, la Biblia. A
medida que analices cada uno de esos
nombres, dale gracias a Dios por ser eso para ti. Cuando lo
hagas, te asombrarás de cómo crecerá tu fe y cuán más cerca te
sentirás de Dios. Saber lo mucho que ha hecho por ti te ayudará
a amarlo más.
Veinte nombres «te Dios para recordar
1. Dios es mi Sanador (Salmo 103:3).
2. Dios es mi Redentor (Isaías 59:20).
3. Dios es mi Libertador (Salmo 705).
4. Dios es mi Fortaleza (Salmo 43:2).
5. Dios es mi Refugio (Joel 3:1*).
€. Dios es mi Amigo (Juan 15:15).
7. Dios es mi Restaurador (Salmo 23:3,1.BLA).
Mi oración
a Dios
Señor, ayüdame a recordar
que me vuelva mme»o a V»
cuando estoy desanimado.
[$ años do e<M)
Señor, ayúdame a conocert e mejor
8. Dios es mi Padre (Isaías £6). •>
9. Dios es mi Amor (1 Juan 4:M). i'
10. Dios es mi Refugio (Salmo 32".?).
11. Dios es mi Lugar de Descanso (Jeremías 50:6, LBLA).
12. Dios es mi Verdad (Juan lfcl3).
13. Dios es mi Vida Eterna (1 Juan 5:20).
14. Dios es mi Proveedor (Génesis 22:14).
15. Dios es mi Señor de Paz (2 Tesalonicenses 3:1$).
16. Dios es mi Escudo (Salmo 144:2).
17. Dios es mi Ayudador (Hebreos 13:6).
18. Dios es mi Consejero (Isaías 9:6).
19. Dios es mi Esperanza (Salmo 71:5).
20. Dios es mi Consolación (Romanos 15:5, LBD).
Lee estos nombres a menudo, y cada vez que lo hagas, escoge
el nombre que corresponda a lo que necesitas que Dios sea en
ese día y luego dale gracias por ser eso para ti. Y siempre que leas
la Biblia y te encuentres un nombre para Dios, subráyalo, anó-
talo al margen o añádelo a esta lista. Te recordará otro aspecto de
lo que es Dios para ti.
Señor, quiero tener un andar más íntimo contigo. Me acerco
a ti ahora mismo y te doy gracia porque mientras lo hago, tú te
acercas más a mí como lo prometiste en tu Palabra (Santiago 4:8).
Quiero una relación más profunda contigo. Quiero cono-
certe en todas las maneras que puedes ser conocido. Estoy
dispuesto a todo lo que quieras hacer en mí y en mi vida. No
quiero limitarte por descuidar conocerte en cada manera
posible. Enséñame lo que necesito aprender a fin de conocerte
mejor. No quiero ser de las personas que «siempre están apren-
diendo, pero nunca logran conocer la verdad» (2 Timoteo 3:7).
Quiero conocer la verdad sobre quién eres tú. Hoy necesito
sobre todo conocerte como mi (di un nombre del Señor que
más necesites que El sea hoy para ti).
23
El poífee «leí joven, ^ue ora .
Ayúdame a confiar en que tú siempre serás eso para mí.
Ayúdame a conocerte en esa manera cada vez más todos
los días. Te lo pido en el nombre de Jesús.
, Í ',!£}£jr ' , . : , •
** X . A» .; '
Acerqúense a Dios, y él se acercará a ustedes.
;
' S A N T I A G O 4 : 8
Hasta ahora ustedes no han pedido nada en mi
n,pmbre. Háganlo, y Dios les dará lo que pidan;
así serán completamente felices.
Juan TLÁ
Para el Padre es un placer darles el reino.
!
• • • • • > LUCAS, 1 2 : 3 2 , LBD
^ "•V * r t .*1f'
»
los nombres de Dios que más significan
ç y
i'%
s nombres de Dios que representan las maneras en que
quiero conocer mejor a Dios son:
-Escribe una oración diciéndole a Dios cómo te sientes res-
pecto a Él y por qué quieres conocerlo mejor.
i' %ù, t
n
mm
+ n o " l o »
AXTB DL". QIE VAVAMQS l* POCO MÁS LEJOS, pongamos
.ilgo en orden: Todo el mundo comete errores. Nadie es perfecto.
Todos somos capaces de hacer algo malo.
¡Vaya! Es sabido.
Dije csro porque no quiero que mires a otras personas 
pienses que están muy bien y tú no. Cuando haces eso, pones
expectativas demasiado alias en ti mismo.
Esic libro no es acerca de tratar de cumplir cierta norma, I'.s
acerca de dejar que Dios se convierta en tu norma. No es acerca
de tratar de ser perfecto. Hs acerca de rendirle tu vicia a Dios 
dejar que FJ te perfeccione. No es acerca de encontrar formas de
evitar el juicio de Dios y luego semine fracasado si no lo haces
todo bien con exactitud, t s acerca de buscar la manera de expe-
rimental" el amor la gracia de Dios. Ls acerca de ser alguien que
110 eres. Es acerca de llegar a ser lo que eres en realidad. Pero a íin
de ver hechas realidad esas cosas, tienes que ser del todo sincero
contigo mismo y con Dios aceren de lo que eres en el momento.
SI poder del joven, que ora
Como joven, sabes que tu vida apenas comienza, Y quieres
vivir una vida de éxito. Quieres saber cómo resulta mejor la vida
para vivir de esa manera y tener la mejor
vida posible. Sin embargo, debido a que
todo el mundo comete errores, esto significa
que tú quizá ya has cometido errores y que
los cometerás de nuevo en el futuro.
A menudo, cuando hacemos cosas malas,
sabemos lo que estamos haciendo. Sabe-
mos si hemos mentido o desobedecido una
ley. Pero algunas veces cometemos errores
sin saberlo. No nos damos cuenta de que
lo que hacemos es malo a los ojos de Dios
porque no sabemos suficiente de los
caminos de Dios. (En el capítulo 4 verás
más al respecto de esto). Ya sea que sepa-
mos o no que lo que estamos haciendo es
malo, sigue siendo pecado. El pecado es un antiguo término de
tiro con arco que significa no dar en el blanco. Si no damos en el
blanco en la vida, no alcanzamos la marca que Dios tiene para
nosotros. Y entonces no podemos alcanzar todas las cosas bue-
nas que Él ha planeado para nuestro futuro.
El pecado nos destruye. Quizá pensemos que podemos no
vivir como Dios quiere y quedar sin castigo, pero el pecado
siempre trae destrucción a la vida. Lo bueno es que Dios nos
ama tanto que nos ha proporcionado la manera de escapar de la
destrucción que trae el pecado. Se llama confesión.
La confesión es algo que puedes hacer en cualquier momento
que vayas a Dios. Es contarle a Dios loque hiciste y decirle que lo
sientes. No le estarás contando algo que ya Él no sepa. ¡Ya lo
sabe! Él quiere saber que tú lo sabes. Y que tienes un corazón
dispuesto a cambiar de actitud.
Tener un cambio de actitudes lo que se llama arrepentimiento. A
fin de hacer estas dos cosas —confesión y arrepentimiento—,
Lo más difícil
de la oración es:
• Cuando no veo una
respuesta Inmediata
• Cuando no sí por qué
voy a orar
. Cuando he hecho
algo mato
• Cuando oourre
algo trágico
• Cuando Dios me muestra
algo sobre mi Vida
(16-19 años de edad)
Señor, ayúdame a liberarme ée los érr<vr*>s de i pasado
tienes que analizar bien tu vida. Tienes que ser muy valiente y
decir: «Señor, muéstrame lo que está- en mi mente, corazón y
vida que no debe estar allí. Muéstrame cómo no estoy dando en
el blanco. Ayúdame a ver la verdad sobre mí mismo. Ayúdame a
cambiar». • •
Hace falta valor para decir una oración como esa, Algunas
veces no queremos que Dios ponga al descubierto nuestro cora-
zón por miedo a lo que pueda revelar de
su interior. Sin embargo, podemos pedirle
el valor para hacerlo. A fín de recibir
todo lo que Dios tiene para ti, debes
estar dispuesto a tener un historial sin
mancha con El. Tienes que invitarlo a
dejar al descubierto cualquier pecado en
tu vida y permitirle que cree un corazón
limpio en ti.
Dios no quiere que andes por la vida
sintiéndote culpable. Quiere que saques el
pecado a la superficie ante Él a fin de que
te puedas librar de ese pecado. Llevar conti-
go la culpa de errores del pasado limitará lo
que Dios quiere hacer en tu vida. Y te hará
sentirte mal contigo mismo. Los sentimientos
de culpa no son agradables. Y uno no se
siente bien. No dejes que sean parte de tu
vida. No vale la pena. Si quieres ser libre de culpa de todos los errores
del pasado, disponte a hacer estas dos cosas:
]. Confiesa a Dios cualquier pecado de pensamiento o acción que
sepas que cometiste o que Él te muestre cuando se lo pides.
Arrepentirte de lo que acabas de confesar.
Oré y Dios
, respondió ..
Estaba saliendo con un
chico a escondidas de mis
padres. Le pedí a Dios
que me ayudara a tomar
buenas decisiones;.
E l chico vino a verme
y dijo que todo había
terminado. No estaba
herida ni nada
por el estilo.
Soló sabía que Dios
lo había hecho. V ahora
he renunciado
a salir con muchachos.
(13 años de edad}
- •• - ; • " ' " ' r?
No creas que porque no eres un asesino en serie ni nunca
has robado un banco que no tienes algún pecado que confesar.
23
El potter del joven que ora
No creas que porque has andado con el Señor por varios años y
vas a la iglesia todos los domingos que no tienes nada de qué
arrepentirte. El pecado no tiene que ser manifiesto ni obvio para
ser pecado.
Por ejemplo, ¿alguna vez has dudado que Dios pueda hacer
lo que promete en su Palabra? La duda es pecado.
¿Alguna vez le has contado algo a alguien sobre otra persona
que no es necesariamente un elogio? El chisme es pecado.
¿Alguna vez evitaste a alguien porque pensabas que podía
pedirte algo que tú no querías dar? El egoísmo es pecado.
Por mucho que te esfuerces, no podrás siem-
pre evitar el pecado. Es por eso que la con-
fesión es crucial. Cuando no confesamos
nuestros pecados, faltas o errores, estos nos
separan de Dios. Y no obtenemos respues-
tas a nuestras oraciones. La Biblia dice: «Son
las iniquidades de ustedes las que los
separan de su Dios. Son estos pecados los
que lo llevan a ocultar su rostro para no escuchar» (Isaías 5 9 : 2 ) .
Es un pensamiento temible. Imagina a Dios poniéndose los
dedos en los oídos y diciendo: «La, la, la, la, la, la» una y otra vez
y bien alto cuando tú oras.
Cuando no le confesamos nuestros pecados, terminamos
tratando de ocultarnos de Dios, tal y como lo hicieron Adán y
Eva en el huerto del Edén. Sentimos como que no podemos
darle la cara. Sin embargo, el problema con intentar ocultarnos
de Dios es que es imposible. La Biblia dice que Dios sabe todo
lo que hacemos. Incluso las cosas que decimos y pensamos en
secreto. «No hay nada encubierto que no llegue a revelarse, ni
nada escondido que no llegue a conocerse. Así que todo lo que
ustedes han dicho en la oscuridad se dará a conocer a plena luz,
y lo que han susurrado a puerta cerrada se proclamará desde las
azoteas» (Lucas 12:2-3).
Mi oración a Dios
Señor, no sé muy bien cómo
orar, pero necesito fortaleza
para resistir la tentación.
(18 años de edad)
Señor, ayúdame a liberarme ée los érr<vr*>s de i pasado
La Biblia también dice: «Ninguna cosa creada escapa a la
vista de Dios. Todo está al descubierto, expuesto a los ojos de
aquel a quien hemos de rendir cuentas» (Hebreos 4:13).
Si todos nosotros tendremos que rendir cuentas de nuestras
acciones y pensamientos, mientras más rápido estemos a bien
con Dios, mejor. Es más, mientras más rápido lidiemos con los
pecados que podemos ver, más rápido Dios puede revelarnos los
que no podemos ver. Y solo Dios sabe cuánto de eso hay en cada
uno de nosotros.
Siempre hay una consecuencia del pecado. El rey David lo
describió mejor cuando escribió de su propia confesión de pecado:
«Por causa de tu indignación no hay nada sano en mi cuerpo;
por causa de mi pecado mis huesos no hallan descanso. Mis
maldades me abruman, son una carga demasiado pesada» (Sal-
mo 38:3-4).
¿Alguna vez te has sentido de esa manera por algo que has
hecho? Yo sí. Sentía como una pesadez en corazón y en la cabeza
que me quitaba toda mi energía y mi vida. Sin duda alguna, el
pecado no me hace sentir bien conmigo misma.
Recuerdo que una vez tuve un resentimiento hacia una
persona porque las palabras que había
dicho me habían herido de manera pro-
funda. Mientras me aferraba a la herida y
el resentimiento, me sentía físicamente
enferma. No quería confesar esos senti-
mientos porque pensaba que estaban jus-
tificados y que la otra persona era la que
estaba equivocada. Sin embargo, al final
me di cuenta que todo pecado es pecado,
así que le confesé mi resentimiento a Dios.
En el momento que hice eso, la sensación
de estar enfermo abandonó mi cuerpo.
Nada es más pesado que el pecado.
No nos damos cuenta de cuán pesado
es hasta el día en que sentimos que su
" e o en
la oración
porque:
• A n t e s he tenido respues-
tas a mis oraciones
• He visto que cambia
«na situación
• He experimentado
milagros
• M e h a ayudado a través
de los tiempos difíciles
• Hace que lo imposible
parezca posible
(16-19 años de edad)
23
El poUer ele! joven <gue ora
Pienso en
Dios como:
• Un poderoso
Gobernador que
controla todas
las situaciones
• Un Juez que decide
si soy digno de tener
respuesta a mi oración
• Un Oyente con el que
puedo hablar y en el
que puedo confiar
• El único que me
conoce de veras
• Un Padre que me
ama de manera
incondicional
(16-19 afios de ^dad)
peso nos aplasta el alma. No damos cuenta de
cuán destructivo es hasta que nos hacemos
pedazos contra el muro que se ha levantado
entre nosotros y Dios debido a esto. Por eso
es mejor confesar cada pecado en cuanto lo
detectemos, para poder tener nuestros cora-
zones limpios de inmediato.
La confesión es más que una simple dis-
culpa. Cualquiera puede hacer esb. Todos
conocemos personas que son buenas para
disculparse. Son buenas en esto porque lo
practican mucho. Dicen «Lo siento» muchas
veces, pero nunca cambian sus costumbres.
Y sus confesiones no significan nada. La
verdadera confesión significa reconocer ante
Dios con lujo de detalles lo que has hecho y
luego arrepentirte por completo.
Una cosa es reconocer que has hecho algo malo; otra es
estar tan triste por lo que has hecho que estás decidido a no
hacerlo jamás de nuevo. Eso es arrepentimiento.
La confesión significa reconocer que hemos actuado mal y
admitir nuestro pecado. El arrepentimiento significa que lamen-
tamos nuestro pecado a tal punto de dolor, que nos volvemos y
nos alejamos del pecado.
El arrepentimiento por algo no necesariamente significa que
nunca haremos eso de nuevo. Significa que no intentaremos
hacerlo de nuevo. Por lo tanto, si descubres que has confesado el
mismo pecado otra vez después de una reciente confesión y
arrepentimiento, hazlo. No dejes que el enemigo te cargue con
la culpa y te venga encima diciéndote que has fallado. Confiesa
y arrepiéntete cuantas veces sea necesario para quitártelo de
encima y ver la victoria en la batalla sobre este problema. No
Señor, ayúdame a liberarme ée los érr<vr*>s de i pasado
creas que Dios no te perdona otra vez por la misma cosa que acabas
de confesar la semana pasada. Dios te perdona cada vez que le
confiesas tu pecado y te arrepientes por completo.
Pídele a Dios cada día que te muestre dónde tu corazón no
es limpio y recto ante Él. No dejes1
que nada te separe de todo lo
que Él tiene para ti.
E M C ! » á© : ^Wftto - - - :
* ; ; "
Imagina que participas en una carrera y estás tratando de
llegar a la meta y ganar el premio. Sin embargo, por mucho que
te esfuerzas, nunca logras la línea de meta debido a qué hay una
pesada carga atada alrededor de tus piernas. Luchas por arras-
trarla, pero te hace ir despacio y te agotas tanto que quieres darte
por vencido. No se te ocurre que es algo que no tienes que car-
gar, y que no puedes terminar la carrera mientrás no te liberes de
ella. Así sucede con los recuerdos malos de pasados fracasos que
llevamos a cuesta.
Muchos jóvenes son duros con ellos mismos por los fracasos
del pasado. O lo que perciben como fracasos del pasado. Pueden
llegar a estar tan desalentados por eso que sienten deseos de darse
por vencidos y salir de una vez de la carrera. Si alguna vez has
sentido algo similar, recuerda que Dios quiere eliminar esos
recuerdos malos a fin de que no tengas que cargarlos de nuevo.
(Si es un recuerdo de algo que te hizo alguien, hablaremos más
de eso en el capítulo siguiente).
Lo mismo si es algo que pasó hace mucho tiempo o tan recien-
temente como ayer, el pasado puede impedirte avanzar hacia
todo lo que Dios tiene para ti. Es por eso que quiere liberarte de
eso. Y no solo eso, sino que quiere redimir y restaurar lo que se
ha perdido o destruido en tu pasado y hacer que cuente para
algo importante en tu vida ahora.
Cuando recibes a Jesús, te conviertes en una nueva creación.
Él hace nuevas todas las cosas en tu vida. Dios quiere que
23
El poüer He! joven .«pie ora
olvides lo que queda atrás y te esfuerces por alcanzar lo que está
delante (Filipenses 3:13). El te ayudará a hacerlo. Uno de los
grandes misterios del Señor es cómo puede tomar los horribles,
trágicos, dolorosos, devastadores y penosos recuerdos y expe-
riencias de nuestras vidas y no solo sanarlos, sino usarlos para
bien. No es que Él haga que no puedas recordarlos, sino que te
sanará tan a fondo de sus efectos que ya no pensarás en ellos con
dolor. Te dará una nueva vida que disfrutarás tanto que no
desearás regresar otra vez en tu mente a la antigua.
Dios no quiere borrar por completo los recuerdos del pasado
porque quiere usar esa parte de tu vida para la obra que te ha lla-
mado a hacer, Él puede tomar lo peor de tu pasado y hacer que
sea la mayor bendición en el futuro. Te usará para dar esperanza
a otras personas que han atravesado una situación similar. Él
quiere que leas tu pasado como un libro de historia, no como
una profecía de tu futuro.
Dile a Dios que quieres permanecer en la carrera. Dile que
quieres correr de tal manera que logres obtener el premio
(1 Corintios 9:24).
*M  >» Vi-' |ir | í„ .„ ,
Señor, ya sé que conoces los secretos de mi corazón (Salmo
44:21). Revélame algo que no vea. Perdóname por los
pensamientos que he tenido, o las palabras que he dicho,
o las cosas que he hecho que no te son agradables. Especí-
ficamente te confieso (nombra cualquier cosa que hayas
hecho que sabes que no le agrada a Dios). Lo confieso
como pecado y me arrepiento. Ayúdame a hacer los
cambios que sean necesarios.
Te ruego que me liberes de mi pasado. Ayúdame a dejar
cualquier recuerdo de mi pasado que me impida avanzar
hacia todo lo que tienes para mí. Específicamente, te pido
que me liberes de (nombra cualquier recuerdo doloroso o
Señor, ayúdame a liberarme de los e crores del pasado
malo que tengas). Todo lo que me han hecho, o lo que
yo he hecho, que me cause dolor, lo rindo a ti. Gracias
porque tú haces nuevas todas las cosas, y me haces nuevo
a mí en todo (Apocalipsis 2" --)• Libérame del pasado a
fin de que pueda marcharme de él y entrar en el futuro
que tienes para mí. Te lo pido en el nombre de Jesús.
• - P O D E R •
Si confesamos nuestros pecados, Dios, que es fiel
y justo, nos los perdonará y nos limpiará de toda
maldad.
1 JUAN 1 : 9
Amados, si nuestro corazón no nos reprende,
confianza tenemos en Dios; y cualquiera cosa
que pidiéremos la recibiremos de él, porque guar-
damos sus mandamientos, y hacemos las cosas
que son agradables delante de él.
1 JUAN 3:21-22, R V - 6 0
Si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las
cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas
nuevas.
2 C O R I N T I O S 5 : 1 7 , R V - 6 0
35
^ „ . i í ímejores razones para confesar tus pecados a Dios y arre-
pentirte?
O
. ¿Gómo te sientes después que confiesas tus pecados a Dios
y te arrepientes?
-Escribe una oración mencionándole a Dios cualquier momen-
to en que, sentiste que te equivocaste en tu vida. Dile que
quieres ser libre del tormento de cualquier error del pasado.
Si te resuleas difícil hablar con Dios sobre estas cosas, pídele
que te ayude a comunicarte con Él.
j m
AUN CUANDO MI MADRE ERA ABUSIVA durante ral crecimiento,
mi padre no lo era. Era amable. Cuando me convertí en cristia-
na, perdonar a mi madre era lo lógico, y eso es lo que hice por-
que quería ser libre del pasado. No me di cuenta hasta años más
rarde que ella no era la única a la que tenía que perdonar.
Un día estaba conversando con una amiga que era una cre-
veiue muv consagrada y le dije que me parecía que mi vida 110
iba a ninguna parre y que me sentía muy Irusrracla por eso. Me
comenió que pensaba que era porque necesitaba perdonar a mi
papá. Le respondí que estaba equivocada en cuanto a eso porque
mi papá era el padre luicrio.
•Pregúntaselo a Dios», me dijo.
Más tarde en ese día le piegunté a Dios: «Señor, ¿hay algo
que 110 le he perdonado a mi papá?».
Esperaba que Dios me asegurara que no tenía nada tic eso
en mi cora/ón. Sin embargo, de buenas a primeras me di cuenta
que en lo profundo sentía que mi papá nunca hizo por mí lo que
tenía que hacer. Nunca me rescató de la locura de mi madre.
El poder dei joven que ora
Nunca abrió el armario a fin de que pudiera salir. No me daba
cuenta de lo mucho que lo culpaba por permitir que mi madre,
quien sabía que tenía una enfermedad mental grave, me tratara
con tal crueldad.
Cuando perdoné a mi papá ese día, al final sentí una sensación
de paz como nunca antes. Y después de eso hubo un verdadero
progreso en mi vida. Podía sentir que mi vida se movía en una
buena dirección. Podía sentir que Dios me guiaba más que nunca.
Cuando no perdonamos, esto nos impide
avanzar en nuestras vidas.
Casi siempre sabemos cuando no hemos
perdonado a alguien. Lo sentimos en el corazón.
No queremos perdonar a esa persona por-
que nos hizo mucho daño y queremos que
lo pague de alguna manera. Y eso termina
en hacernos desdichados.
Si te das cuenta de que no has perdo-
nado a alguien por algo, confiésalo a Dios.
Y recuerda queperdonar a otro no le da la razón, pero te libera a ti.
En otras palabras, cuando perdonas a una persona, no estás jus-
tificando lo que hizo. No estás diciendo que lo que hicieron no
fue malo ni dañino. Estás diciendo que quieres olvidarlo y
seguir adelante con tu vida. Si no lo haces, terminarás como yo,
atascado y sintiendo que no vas a ninguna parte.
Algunas veces podemos estar guardándole rencor a alguien
sin siquiera darnos cuenta. Pensamos que estamos perdonando,
pero no es así en realidad. A fin de asegurarte de que no te suceda,
necesitas hacer lo mismo que yo y pedirle a Dios que te muestre
la verdad acerca de ti mismo. Dile: «Señor, muéstrame si hay
alguien a quien no he perdonado». Entonces, cuando te venga a
la mente una persona que te ha dicho algo malo o te ha hecho
algún mal, confiésalo al Señor y pídele que te ayude a liberarte
de eso. Te sentirás muy bien cuando te quites esa pesada carga
de falta de perdón de tus hombros.
Oré y Dio®
respondió
Mi relación con
mi madre estaba
al borde de una crisis,
así que oré y
ahora es fabulosa.
(16 años de edad)
38
Señor» ayúdame a perdón»! - otros
Sé que la palabra «odio» es muy füerte y que detestamos usar
la palabra «odio» a la ligera. Y ciertamente detestamos pensar
que quizá sintamos odio por otra persona. Sin embargo, eso no
es perdonar, es la raíz del odio. Cuando abrigamos pensamien-
tos de falta de perdón, dirigimos el odio a nuestro interior. Y eso
puede enfermarnos. Sin lugar a dudas, nos hace poco atractivos
para otros.
Jesús tenía opiniones tan contunden-
tes acerca de esto que dijo: «Todo el que odia
a su hermano es un asesino, y ustedes
saben que en ningún asesino permanece
la vida eterna» (1 Juan '^-lü). También dijo:
«Cuando estén orando, si tienen algo con-
tra alguien, perdónenlo, para que también
su Padre que está en el cielo les perdone
Lo más difícil
de la oración es:
• C u a n d o me parece
que mis oraciones
no pasan del techo
* Cuando no puedo
escuchar a Dios
a ustedes sus pecados» (Marcos X l ' i s
Ahora, aclaremos bien esto. Jesús está
diciendo que si no perdonamos, se nos
considera asesinos, sin esperanza eterna
alguna, que no podemos esperar que
Dios nos perdone hasta que hayamos per-
donado a otros. Yo diría que si tenemos
que decidir entre perdonar y no perdo-
nar, el perdón parece la mejor decisión.
Cuando decidimos no perdonar,
terminamos andando en tinieblas
(1 Juan 2S 11, RV-60). No podemos ver con claridad y por eso
tropezamos en confusión. Esto descarría nuestros juicios y
cometemos errores. Llegamos a debilitarnos, enfermarnos y amar-
garnos. Otras personas notan todo esto porque la falta de perdón
se manifiesta en el rostro, en las palabras y en las acciones. Lo
ven incluso si no logran identificar con exactitud lo que es, y no
se sienten cómodos a nuestro alrededor.
mi corazón
* Cuando no sé
cómo orar por algo
• Cuando oro en voz
alta delante de otros
• Cuando no me
parece que me
conecto con Dios
(13.-15 años de edsd)
;¿'> M&er ¿el ¿ove!» ora
Es muy fácil no perdonar a nuestros familiares. Eso se debe a
que están más con nosotros, nos conocen mejor y pueden herirnos
de manera más profunda. Pero por esas mismas razones, la falta
de perdón hacia uno de ellos traerá la mayor devastación a nues-
tras vidas. Es por eso que el perdón debe comenzar en el hogar.
Ante todo, es muy importante asegurarte que has perdonado
a tu mamá y a tu papá. La Biblia es clara como el agua en esto. El
primero de los Diez Mandamientos dice: «Honra a tu padre y a
tu madre, para que disfrutes de una larga
vida en la tierra que te da el SEÑOR tu
Dios» (Éxodo i No honrar a tu padre
y a tu madre te hará un desdichado y acor-
tará tu vida. Y no los puedes honrar por
completo si no los has perdonado.
Esto es cierto no importa cuál sea la
situación de tu familia. Es cierto ya sea que
tengas padres biológicos o padres adopti-
vos. Si uno de tus padres, o ambos, murie-
ron, se separaron o te abandonaron, nece-
sitas perdonarlos de manera especial por
haberlo hecho. Conozco una muchacha
que ha perdonado a su mamá y su papá
por divorciarse. Conozco a otra que ha
perdonado a su madre porque esta viajaba muchísimo por su tra-
bajo y la dejaba con su abuela. La hija sabía que su madre la amaba,
pero de todos modos tenía que perdonarla por esos tiempos en
que se sentía abandonada por la ausencia de su madre.
Conozco a un muchacho que tuvo que perdonar a su papá
por abandonar a su mamá y sus hermanos y no regresar. Se sentía
abandonado y pensaba que su padre no lo amaba lo suficiente
para quedarse. Cuando el padre trató más tarde de reconciliarse
con su hijo, este no quería tener nada que ver con su papá. Car-
gaba esa herida y no quería curársela. No fue hasta años después
Mi oración
a Dios
Señor, esta es la primera
vez que te pido ayuda.
Caí en una tentación
y necesito alguien
en quien confiar.
Si no tengo tu ayuda,
sé que caeré de nuevo
y. no quiero caer.
Te ruego que me ayudes
a ser fuerte hoy.
(17 años de edad)
Señor, ayüéajfte a perAoáír a otros
que el hijo pudo perdonar al papá, y hoy están muy unidos. Pero
se malgastaron muchos años por cargar la falta del perdón.
Conozco a otro muchacho que necesitaba perdonar a su
madre las palabras duras y de crítica que le decía casi todos los
días. Sin embargo, nunca la perdonó y fue desdichado toda su
vida por eso. Mi mamá también me hablaba con crueldad. A
menudo me decía que yo era. una fracasada despreciable y que
nunca llegaría a nada. No fue hasta que la perdoné por todas
esas palabras que pude dejar de pensar que era la fracasada que
predijo ella y avanzar al éxito que tenía Dios para mí.
Cuando tomé la decisión de perdonar a
mi madre, lo hice porque quería obedecer
a Dios. Sin embargo, perdonarla una vez
no significaba que nunca tendría que preo-
cuparme de perdonarla de nuevo. Había una
capa tras otra de falta de perdón que había
construido en mí durante años, y descu-
brí que tenía que perdonarla cada vez
que un mal recuerdo de lo que me hizo o
dijo me venía a la mente. A la larga, llegué
a ser libre de todo.
Solo porque confieses un día que no
has perdonado a alguien, no significa que no tengas falta de per-
dón en ti al día siguiente por otra cosa. Es por eso que el perdón
es una decisión que debes tomar todos los días. Decides perdo-
nar ya sea que tengas deseos o no. Si esperas que te lleguen pri-
mero emociones positivas hacia esa persona, puedes quedarte
esperando toda la vida. Tu responsabilidad es confesarle a Dios
cualquier falta de perdón y pedirle que te ayude a perdonar por
completo y a seguir adelante con tu vida.
arma ^i^mt^ps^ «¿n^^ < •• v . •
• • v y u c ^ e s p e / d o n a r
El perdón nunca es fácil, pero a veces el perdón puede parecer
imposible debido al devastador dolor que has sufrido. Si piensas
Mis principales
motivos de
oración son:
• Pedirle perdón a Dios
• A s u n t o s políticos
• Que Dios bendiga
a mi escuela
• Mis problemas diarios
• Mis relaciones
(13-tS años de
poder del joven «fue ora
en alguien al que te es difícil perdonar, pídele a Dios que te ayude.
Si alguien te avergonzó, rechazó, fue rudo contigo o dijo algo malo
de ti en tu cara o a tus espaldas, pídele a Dios que te dé un cora-
zón perdonador hacia esa persona. Lo hará aun cuando parezca
imposible. En realidad, el perdón es la mejor venganza porque
no solo te libera de la persona que perdonas, sino que te libera
para avanzar hacia todas las buenas cosas que Dios tiene para ti.
Recuerda que perdonar a alguien no depende de que esa
persona reconozca su culpabilidad y pida disculpas. Si fuera así,
la mayoría de nosotros nunca podría perdonar a nadie. Perdo-
namos no importa lo que la otra persona haga.
Algunas veces tenemos que perdonarnos a nosotros mismos
por las cosas que hemos hecho. Algunas veces necesitamos per-
donar a Dios cuando han pasado ciertas cosas y le hemos echado
la culpa a Él. Pídele a Dios que te muestre si tienes alguna de
estas; cosas en tu corazón. No permitas que ningún tipo de falta
de perdón limite lo que Dios quiere hacer en tu vida.
L o u « » ñ ¿ f i i i i f i c f i a a £ i á - — — -
¡Cuatrocientas noventa veces! Esas son las veces que tenemos
que perdonar a una persona. Pedro le preguntó a Jesús: «Señor,
¿cuántas veces perdonaré a mi hermano que peque contra mí?
¿Hasta siete?». Jesús le respondió: «No te digo hasta siete, sino
aun hasta setenta veces siete» (Mateo 1 8 : 2 1 - 2 2 , RV-60).
Jesús quiere que perdones tantas veces como sea necesario.
Jesús narró una historia de un hombre al que le habían per-
donado una deuda inmensa que tenía con su amo. Sin embargo,
aquel hombre se dio la vuelta enseguida y mandó a su propio
siervo pobre a la cárcel por no pagarle una deuda pequeña.
Cuando el amo se enteró de esto, dijo: «Te perdoné toda aquella
deuda porque me lo suplicaste-. ¿No debías tú también haberte
compadecido de tu compañero, así como yo me compadecí de ti?».
42
Señor» ayúdame a perdón* a otros
El amo estaba tan enojado que e p a r e c e
mandó que torturaran al hombre hasta o r o I n á s
cuando:
que pagara todo lo que debía. " Lucho contra una
Jesús dijo: «Así también mi Padre situación difícil
celestial los tratará a ustedes, a menos " ft o yo tenemos
que cada uno perdone de corazón a problemas de salud
su hermano» (Mateo 18:35 ). Esto es ' N e m i t o
sabiduría
muy serio. A los que hemos aceptado • E s t o y triste o llorando
aJesús se nos ha perdonado una deuda * a p o n g o de tranquilidad
inmensa. No tenemos derecho a no ^ silencio
perdonar a otros. Dios dice: «Sean <iÍM
<1« e<M)
bondadosos y compasivos unos con
otros, y perdónense mutuamente, así como Dios los perdonó a
ustedes en Cristo» (Efesios 4 : 3 2 ) . Si no perdonamos, también
nuestro odio nos encarcelará y nuestra amargura nos torturará.
Todo lo que hacemos en la vida que dura para siempre gira
en torno a dos cosas: amar a Dios y amar a otros. Es muchísimo
más fácil amar a Dios que amar a otros, pero Dios lo ve del mismo
modo. Una de las cosas más lindas que podemos hacer es perdo-
nar. Es difícil perdonar a los que nos han herido, ofendido o
maltratado. Sin embargo, Dios quiere que amemos incluso a
nuestros enemigos. Y en el proceso de hacer eso, nos perfecciona
(Mateo 5:48).
Cuando perdonas a otros, le muestras a Dios lo mucho que
lo amas. Te abre el corazón y el intelecto y te libera para experi-
mentar el amor de Dios en una mayor medida. Te libera para
avanzar a todo lo que Dios tiene para ti.
Señor, ayúdame a comprender lo mucho que me has
perdonado a fin de que no vacile en perdonar a otros.
Ayúdame a perdonarme por las veces que he fallado. Y si
te he culpado por las cosas que he pasado en mi vida,
muéstramelo para que pueda reconocerlo ante ti.
43
E& pat®??-.^el- joven,.^«e ora
Ayúdame a orar por los que me han herido de modo
que mi corazón se suavice hacia ellos. Y si alguna persona
no me ha perdonado, muéstrame lo que puedo hacer
para ayudar a resolver este asunto entre nosotros. Te
ruego que suavices su corazón para que me perdone.
Señor, muéstrame si no he perdonado a mi madre o
a mi pádre por algo que hicieron o no hicieron. Ayúdame
a perdonar a cualquier miembro de mi familia o amigo
cada vez que necesite hacerlo. No quiero que nada se
interponga entre tú y yo, Señor. No quiero limitar con
mi falta de perdón lo que quieres hacer en mi vida. Te lo
pido en el nombre de Jesús.
i'/'l.F'Vf?11
®!' -
í A P A L A B H . A ;
• • • ;
••1
•':
No juzguen, y no se les juzgará. No condenen, y no
se les condenará. Perdonen, y se les perdonará.
'.'; •'"'• ' ' '"'LUCAS FI:37
El que aborrece a su hermano está en tinieblas, y
anda en tinieblas, y no sabe a dónde va, porque
las tinieblas le han cegado los ojos.
,,.7 . 7 o!.JUAN 2I11/RV-6O •"•>•'; •
Si perdonan a otros sus ofensas, también los per-
donará a ustedes su Padre celestial. Pero si no
perdonan a otros sus ofensas, tampoco su Padre
les perdonará a ustedes las suyas.
' ' ' MATEÓ.fiÍ4~lS
Acribe una oración pidiéndole a Dios cjgt®'
alguien que no has perdonado. Si Dios te mue!fhS'á<
persona, pídele que te ayude a perdonarla por completó.
r Una de las maneras en que puedes perdonar con más facili-
dad a otros es orando por ellos. Escribe una oración por
alguien que necesites perdonar, no importa cuánto tiempo
haga que ocurrió la ofensa contra ti.
HÍ¡UWSj, • • i . . • ' . • : . ••• I
'4
Eécribe una oración pidiéndole a Dios que te muestre si
hay alguien que no has perdonado por algo. Pídele que te
muestre como hacer bien las cosas entre tanto.
R U A N D O ESTABA EN LA ESCUELA SUPERIOR EN CALIFORNIA,
"tuve que tomar una clase reglamentaria de natación por un
semestre. Lo detestaba porque era a las 7-.w cada mañana y que-
daba con el pelo húmedo y arruinado por el resto del día. Tenía
que nadar todos los días, lloviera o hubiera sol, y podía haber
mucho frío en esas nubladas mañanas de invierno de California.
La única manera en que podía excusarme de la natación era si
ípe estaba muriendo, y aun así tenía que presentar un certificado
médico.
A pesar de la desdicha de esa experiencia, me encantaba la
natación y llegué a ser buena en ella. Aprendí que si estaba en
Vina adecuada posición y hacía bien todos los movimientos,
Como me enseñaba mi instructor de natación, podía avanzar
fon rapidez en el agua. Se volvió una suave maniobra con la que
graba llegar con rapidez al otro lado de la piscina gigante. Y
da me hacía vacilar. iBfcssiqa^
dadpies':a:ambü5:W
El poájftr Éel joven q;ue ora
El mismo principio es cierto para ti y para mí. Si queremos
navegar con éxito por las aguas de la vida, debemos situarnos
como es debido y aprender los movimientos apropiados. Si no
lo hacemos, cuando lleguen las situaciones turbulentas, no
lograremos navegar a través de ellas. Terminaremos golpeándo-
nos y agotándonos solo para mantenernos a flote. Y nunca llega-
remos a ninguna parte. Sin embargo, cuando nos colocamos
bajo la dirección de Jesús y aprendemos a hacer lo que exige de
nosotros, hay un flujo del Espíritu Santo que nos lleva adonde-
quiera que necesitemos ir.
T^los los movimiento, ', '
La manera en que aprendemos lo que espera Dios de noso-
tros es leyendo su Palabra. No podemos comenzar a hacer los
movimientos adecuados si no sabemos cuáles son. Sin embargo,
eso es solo el comienzo. Podemos estudiar todo lo que deseemos
y aprender cada cosa que debemos hacer,
pero todavía tenemos qué hacerlo. El ins-
tructor de natación puede decirnos cómo
nadar, pero aun así tenemos que saltar al
agua en algún momento. Una cosa es hacer
una lista de lo que hay que hacer y lo que
hay que evitar; otra muy diferente es tener
un corazón que busca los caminos de Dios y
un alma que anhela andar por ellos. Una
cosa es leer sobre la vida; otra es vivirla.
La obediencia es algo que haces; tener
un corazón para obedecer a Dios y vivir en
sus caminos es algo por lo que hay que orar.
Es mucho más fácil descubrir lo que se espera
que hagamos que hacerlo. Es por eso que
necesitamos orar que Dios nos permita
ser lo bastante disciplinados para hacer lo
que tenemos que hacer.
Mis principales
motivos
de oración son:
• Por un corazón
por todo lo que
Dios ha hecho por mí
»Por la seguridad
y salvación
de mi escuela
• Por mis problemas y
preocupaciones diarias
• Que tenga el valor
para permanecer firme
• Que alabe a Dios cada
día por lo que El es
[16-19 años de edad)
48
Señor, -ayúé^me -a hacer lo «§t=.e es. bueno
Soy una persona disciplinada, pero no siempre fui así. Hubo
un tiempo en mi vida cuando era todo lo opuesto. Debido a que
estaba siempre deprimida, no podía pensar con claridad ni orga-
nizar bien mi vida. Es difícil hacer las
cosas que son buenas para uno cuando
no sabemos si valemos la pena. Es difí-
cil seguir adelante en la vida cuando
uno necesita toda las energías solo para
sobrevivir cada día.
Cuando comencé a aprender a orar
por todo, le pedí a Dios que me ayudara
a ser suficientemente disciplinada para
leer su Palabra y orar todos los días. Le
pedí que me ayudara a comprender
cómo quería que viviera y después que
me ayudara a vivir de esa forma. Dios
me respondió esas oraciones. Ahora
soy mucho más disciplinada y organi-
zada. Y soy obediente a Dios más allá de lo que sé que podría
hacer sin su ayuda. Esto no pasó de la noche a la mañana. Ocu-
rrió poco a poco mientras oraba por eso y Dios respondía mis
oraciones.
No te desanimes si no lo haces bien todo. No hay quién
pueda hacerlo. Es por eso que necesitamos al Señor. El apren-
dizaje para vivir a la manera de Dios lleva toda una vida. Siem-
pre hay cosas nuevas que aprender, y nos metemos en proble-
mas cuando creemos que sabemos lo que hay que hacer y deja-
mos de preguntarle a Dios si eso es cierto. Nunca podemos
enorgullecemos por la forma tan perfecta en que obedecemos
a Dios, porque Él nos está enseñando sin cesar acerca de sus
caminos. Y El nos ayudará a vivirlos si se lo pedimos. Todo lo
que tienes que decir es: «Señor, ayúdame a obedecerte de la
manera que quieres a fin de que pueda llegar a ser la persona
para la que me creaste». No debemos cansarnos «de hacer el
' 49
Creo en la
oración porgue:
• S é que da resultados
• Tengo f e en que Dios
me escucha
• He visto respondidas
las oraciones de otros
• Es la manera de
comunicarnos con Dios
• La Biblia dice
que oremos
(16-19 año$ de edad
El poder dei joven que ora
bien, porque a su debido tiempo cosecharemos si no nos damos
por vencidos» (Gálatas ti^).
Las cosas «fue Dios nos. •
n i HUI w m MTifflnffll j y y f i ^ ü m a l m e n t f f l , . - — -
Además de las reglas que Dios quiere que obedezca todo el
mundo, hay cosas específicas que nos pide a cada uno de noso-
tros que hagamos a fin de que avancemos hacia el propósito que
tiene con nuestras vidas. Este es diferente para cada persona. Por
ejemplo, Dios quizá te instruya a que aprendas una cierta des-
treza que no les pedirá a tus amigos que adquieran. Es posible
que te pida que tomes cierta clase, qu<2 trabajes en cierto empleo,
que dejes cierta actividad, que te unas a determinada iglesia o
que cambies la forma en que siempre has hecho algo. Lo que sea
que te pida que hagas, recuerda que Él hace esto para bendecirte
más. Es importante orar: «Señor, muéstrame lo que debo
hacer». Si no lo pides, no lo sabrás.
Macea cosas fue prefiere»,.,no Jiacer
Todos tenemos que hacer cosas que no queremos hacer.
Hasta en las más maravillosas clases o empleos, todavía hay cosas
que no disfrutamos. Sin embargo, parte de tener éxito en la vida
es hacer cosas aun cuando preferiríamos no hacerlas. Cuando
hacemos cosas que no nos gustan solo por-
oro por otros qLie s a be mos que tenemos que hacerlas, se
cuando: forja el carácter en nosotros. Nos discipli-
• Tienen problemas namos, Nos convierten en un líder en el
con su familia que Dios puede confiar. Siempre hay un
• Están en apuros precio que pagar cuando solo hacemos las
. No son salvos cosas que nos gusta hacer y no hacemos las
• N e c e s i t a n aliento cosas que necesitamos hacer.
• Están sufriendo Tienes que sacrificarte por las cosas
(13-15 años de edad) buenas que quieres. Siempre que te sea
50
Señor, ayúdame a hacerloi'-:-ifuees bueno
difícil hacer lo que sabes que tienes que hacer, pídele al Espíritu
Santo que te ayude. Desde luego, aun así tienes que ser el que dé
el primer paso, no importa lo mucho que te pese darlo. Pero cuando
lo hagas, el Espíritu Santo te ayudará a lo largo del camino.
¿ « t b u e n a s r a s o p a a L p a g » - o t a s d a c a s a . S h a 9 — -
Existen muchas razones para obedecer
a Dios, pero la mejor razón es que Él lo 0 r ó
y Q
i ° 3
dijo. Si no hubiera otra razón, esa cierta- respondió
mente bastaría. ¿Alguna vez le has pre- O r é que pudiera dejar
guntado a tus padres por qué tienes que de ser adicto a la Internet,
hacer algo y te dicen: «Porque yo lo digo»? Poco después, descubrí
Lo que eso significa es que quieren que que ya no deseaba entrar
hagas lo que te piden y confíes en que ®" ' a
Internet; me parecía
saben lo que es mejor. Tratan de ense- aburrida. Tenía ganas
ñarte a ser obediente a lo que exigen de ti. ^ t m r
®' P'ano
Eso es lo que Dios quiere que tú hagas * c a n t a r
®" adoración,
también. Más ,ard
« m
® <"
Existen muchas más razones para cuenta
1ue era una
obedecer a Dios que debes conocer, y m
t m h a
.U
.,rMW
"-
he incluido diez buenas razones a conti- (13 anos de
nuación:
1. Cuando obedezco a Dios, Él escucha mis oraciones. «Si observo
iniquidad en mi corazón, el Señor no me escuchará. Pero
ciertamente Dios me ha oído; Él atendió a la voz de mi ora-
ción» (Salmo $6:18-1$, LBLA).
2. Cuando obedezco a Dios, tengo un mayor sentido de su presen-
cia en mi vida. «El que me ama, obedecerá mi palabra, y mi
Padre lo amará, y haremos nuestra vivienda en él» (Juan
3. Cuando obedezco a Dios, tengo más sabiduría. «Él provee de
sana sabiduría a los rectos; es escudo a los que caminan rec-
tamente» (Proverbios
El joven «me ora
4. Cuando obedezco a Dios, demuestro que soy su amigo. «Ustedes
son mis amigos si hacen lo que yo les mando» (Juan "i ;:
*).
5» Cuando obedezco a Dios, vivo seguro. «Pongan en práctica
mis estatutos y observen mis preceptos, y habitarán seguros
en la tierra» (Levítico
6. Cuando obedezco a Dios, me vuelvo una persona más amorosa.
«El que guarda su palabra, en éste verdaderamente el amor
de Dios se ha perfeccionado» (1 Juan 2:5, RV-60).
7, Cuando obedezco a Dios, me ocurren cosas buenas. «Hoy les
doy a elegir entre la bendición y la maldición: bendición, si
obedecen los mandamientos que yo, el SEÑOR su Dios,
hoy les mando obedecer» (Deuteronomio 11:26 .27).
& Cuando obedezco a Dios, soy más dichoso. «¡Dichosos los que
son obedientes a la ley!» (Proverbios
Cuando obedezco a Dios, tengo paz. «Fíjate en el hombre
honrado y sin tacha: el futuro de ese hombre es la paz» (Salmo
147:37, DHH).
10. Cuando obedezco a Dios, viviré más tiempo. «Hijo mío, no te
olvides de mi enseñanza, y tu corazón guarde mis manda-
mientos, porque largura de días y años de vida y paz te aña-
dirán» (Proverbios 5:1 -2, LBLA).
Avanza hapia Xo Dios tiene para ti -
Dios tiene grandes planes para ti. Tiene cosas importantes
que quiere que hagas. Y Él tef está preparando para eso ahora
mismo. Sin embargo, tienes que dar los pasos de obediencia a
fin de llegar allí. Y tienes que confiar en que Él sabe lo que es
mejor y que no te hará daño en el proceso. Dios no ha puesto
reglas para hacerte un desdichado. Las reglas de Dios son para tu
beneficio. Cuando vivas por ellas, la vida va bien. Cuando no
vives por ellas, la vida se hace pedazos,
Señor, ayúdame a hacer loi'-:-ifue es bueno
Existe una concreta conexión entre .la
obediencia y el amor de Dios. Jesús dijo:
«¿Quién es el que me ama? El que hace
suyos mis mandamientos y los obedece.
Y al que me ama, mi Padre lo amará, y
yo también lo amaré y me manifestaré a
él» (Juan ¡4:'¿L). Eso significa que la
manera en que mostramos nuestro amor
por Dios es viviendo como El manda.
Y cuando no obedecemos a Dios, aun
cuando Dios nos ama, no sentiremos su amor como lo necesitamos.
Existe también una conexión directa entre la obediencia y la
respuesta a tus oraciones (I Juan 'M22). Si te sientes triste porque
no ves las respuestas a tus oraciones, pregúntale a Dios si se debe
a la desobediencia. Dile: «Señor, ¿existe alguna esfera en mi vida
donde no te estoy obedeciendo?». No sigas diciéndole a Dios lo
que tú quieres sin preguntarle lo que Él quiere.
Dios usó aquellas clases de natación en mi vida de una manera
que no me hubiera imaginado. Recordar lo que me había ense-
ñado mi instructor cuando estaba aprendiendo a nadar, y lo que
había practicado con diligencia por años, me salvó la vida. Un
día estaba en la playa con una amiga y nadábamos en el mar
cuando una corriente fuerte nos sacó mar afuera. No podíamos
regresar a la costa por nuestra cuenta, pero logramos nadar con la
marea y mantenernos a flote hasta que nos rescataron los salvavidas.
Si no hubiera obedecido a mi instructor de natación años antes, ni
hubiera aprendido todos los movimientos adecuados, rae
espanta pensar en lo podría haber pasado. La obediencia a Dios
te salvará la vida en más de una manera.
Uno nunca sabe cuándo se presentará un momento especial
para el cual nos ha preparado Dios. Y no es solo un momento;
Él tiene muchos momentos sucesivos preparados para tu vida.
Dios te está preparando cada día para algo fabuloso. Algo impor-
tante. Sin embargo, tienes que estar atento a tu Instructor. «El
Mi oración a Dios
Señor, dame fuerza
para mantenerme firme
por ti, aun si otros
se burlan de mf.
Dame las agallas
para permanecer
firme, aun euando
parezca Imposible.
{13 ¡ños de edadj
El poéer <dei joven que ora
que compite como atleta, no gana el premio si no compite de
acuerdo con las reglas» (2 Timoteo 2:5, LBLA). Tú no podrás
nadar bien en la corriente en esos momentos si no haces todos
los movimientos adecuados ahora. Pero si aprendes a hacer los
movimientos apropiados, estarás preparado para esos momentos
especiales y para cualquiera de las aguas profundas en que te
encuentres.
Señor, tu Palabra dice que los que amamos tu ley ten-
dremos gran paz y nada nos hará tropezar (Salmo
1U:1#S, LBLA). Amo tu ley porque sé que es buena y es
para mi bien. Ayúdame a obedecerte de cualquier
manera a fin de que no tropiece y caiga. Si hay pasos de
obediencia que necesito dar, ábreme los ojos para ver la
verdad y ayúdame a dar esos pasos. Sé que no puedo
hacer bien todas las cosas sin tu ayuda, por eso te pido
que me ayudes a vivir en obediencia a tus caminos (Salmo
119:10).
Tu Palabra dice que «si decimos que no tenemos
pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la verdad
no está en nosotros» (1 Juan 1:8, RV-60). No quiero enga-
ñarme al no preguntarte dónde no estoy dando en el blanco
que tú has establecido para mi vida. Revélame cuándo
no estoy haciendo las cosas que debo hacer. Muéstrame
si estoy haciendo cosas que no debo hacer. Ayúdame a
escuchar tus instrucciones específicas. Háblame con
claridad a través de tu Palabra a fin de que comprenda lo
que es bueno y lo que es malo. No quiero entristecer al
Espíritu Santo en cualquier cosa que haga (Efesios 4:30,
LBLA). Ayúdame a aprender siempre de tus caminos
para que pueda vivir en la plenitud de tu presencia y
avanzar hacia todo lo que tienes para mí. Te lo pido en el
nombre de Jesús.
54
,-ienor, ayudam» » hacer Jo ^ue es bueno
Recibimos todo lo que le pedimos porque obe-
decemos sus mandamientos y hacemos lo que le
agrada.
1 JUAN 3 : 2 2
El SEÑOR es sol y escudo; Dios nos concede
honor y gloria. El SEÑOR brinda generosamente
su bondad a los que se conducen sin tacha.
SALMO 8 4 : 1 1
¡Pero más bienaventurados son los que oyen la
palabra de Dios y la ponen en práctica!
LUCAS 1 . 1 : 2 8 , LBD
Jka ley de Dios que tengo más dificultad ^rt' cMed'fer es-'f'
Escribe una oración pidiéndole a Dios que te ayude a obe-
decerlo en esto.
;í5e las «Diez buenas razones para obedecer a Dios» en las
páginas 51 y 52, ¿cuáles son las tres más importantes para ti
en cuanto a inspirarte a obedecer las leyes de Dios?
La esfera de mi vida donde me gustaría tener más disciplina es:
Escribe una oración pidiéndole a Dios que te ayude a ser
más disciplinado en esa esfera de obediencia.
JIHSH
m m- a » a n t « « « M
EXISTE UN LUGAR EN LA TIERRA DONDE puedas tener la
luta seguridad de que no existen malás influencias. Eso se
ebe a que la influencia del maligno puede estar en cualquier
e. Algunas veces rios parece que está en todas partes. Así que
vas a enfrentar con malas influencias en algún momento de tu
vida. Es probable que ya las hayas enfrentado, hasta cierto grado,
cuanto antes aprendas a reconocerlas, mejor.
T.o que necesitas saber es que cualquiera que haya entregado
u  ida a Dios es blanco para las influencias del maligno. Eso se
debe a que lienes un enemigo. Cualquiera que ame a Dios y
delicada las cosas que defiende Dios tiene un enemigo. Ese ene-
migo se opone a Lodo k> que es de Dios, a todo lo que Él haces y
malquiera qu,e ciea en Él. Fl enemigo tratará de arfuinar tu
'da. Tú tienes que esiar lisio por él.
ILLenemigo es el diablo. Dios lo creó para bien, pero se con*
'ni(') en orgulloso  decidió rebelarse contra Dios. Quería ser
ios  que todos los seres creados le adoraran. Debido j eso
El poá^í joven que ora
cayó de la presencia de Dios en el cielo a la tierra, donde nunca
se cansa de buscar a alguien para destruirlo.
Lo bueno es que los que conocemos al Señor tenemos poder
sobre él. Nuestro enemigo no lo sabe todo, ni está siempre pre-
sente. No puede estar en todas partes, ni puede saber cada uno
de nuestros pensamientos. Pero si no nos damos cuenta de que
ya es un enemigo derrotado, nos puede acosar a cada instante.:
Puede usar a otras personas que no conocen a Dios para tratar
de ejercer influencia en nosotros y tratar de alejarnos de la vida
que Dios tiene para nosotros.
Una de las cosas que Jesús logró cuando murió en la cruz y
resucitó fue romper con el poder del enemigo sobre nuestra^
vidas. Dio a los creyentes autoridad sobre él, diciendo: «Les he
dado autoridad a ustedes para [...] vencer todo el poder del ene-
migo; nada les podrá hacer daño» (Lucas 10:14).
Todos estamos involucrados en una continua batalla espiri-
tual con un enemigo que nunca descansa. La Biblia nos dice que
«no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados;
contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas dí
este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones
celestes» (Efesios #:12, RV-60). Aun cuando nos traten de mala
manera o alguna persona en particular ejerza influencia para
que hagamos lo malo, tenemos que seguil
Lo más difícil reconociendo quién es nuestro verdadero
Ae la oración es. e n e m j g 0 g s t e s e r á e l primer paso en man
• Quedarme quieto tenernos firmes en contra de él y de las
por mucho tiempo personas en las que influye y que tratarárí
• S a b e r por qué orar de influir en tó.
. Estar preocupado M i g u a j q u g D i o s t i e n e u n p í a n p a r a
de que no dé resultados ^ ^ ^ ^ ^ ^ R [ p l a ¿
• N o saber si Dios d e S a t a n á s e s destruirte. «El ladrón no
esta escuc ^ viene más que a robar, matar y destruir;
• Ser veraz y sincero - j „ - j i
• 7
, „ yo he venido para que tengan vida, y la;
(15-15 años de edad) . , T f , , c „ 11
tengan en abundancia» (Juanxüilü). Satanas
Señor, ayúdame -a mantener*1
« firme,..
nunca toma un día de descanso, así que
trata a cada momento de ver cumplido
el plan que tiene contigo. Es por eso que
tienes que cuidarte de las malas influen-
cias. La Biblia dice: «Practiquen el domi-
nio propio y manténganse alerta. Su ene-
migo el diablo ronda como león rugiente,
buscando a quién devorar» (1 Pedro
La mayoría de las veces uno puede
reconocer los ataque obvios del enemigo.
Por ejemplo, si alguien te brinda alcohol
o una droga ilegal, sabes que es malo. Tienes que decir no de
inmediato y alejarte de esa persona. Las drogas y el alcohol des-
truyen la mente y el alma, así como también el cuerpo. Pregún-
tale a cualquiera que esté muriendo de alguna enfermedad cau-
sada por las drogas y el alcohol si no lamentan haber caído en el
vicio. Te dirán que lamentan desde lo más profundo haberse
dejado engañar por el pensamiento de: No me hará daño si tomo
solo un poco. Esta es una mentira del enemigo concebida para
nuestra destrucción, pues las adicciones ocurren poco a poco
hasta que la persona es adicta y no puede parar. Parte del plan
del enemigo para destruirte es que te entusiasmes por las drogas
y el alcohol.
La pornografía es otra mala influencia obvia. Casi todas las
personas saben que la pornografía es mala en el momento que la
--yen por casualidad, y enseguida apartan los ojos de ella. La verdad
s que daña a las personas que la ven más de lo que se dan cuenta.
Jplanta un gancho en su interior que las arrastrará cada vez más a
¡fila. Es adictiva y a la larga destruye la vida de las personas. La
(pornografía es otra parte del plan del enemigo para destruirte,
fe',
jpDn' i r í r Vmift M — —
f- Antes de que me convirtiera en creyente, entré en las drogas
y el alcohol para tratar de librarme del dolor y la depresión que
55
Tengo más líeseos
fie orar cuando:
• T e n g o miedo
• M e siento culpable
• Después que
leo la Biblia
• Estoy solo
• S i e m p r e
(16-19 años de edad)
El po#sr «te/ « v e n fue ora
sentía a cada instante. Pensaba que me ayudarían, pero no fue
así. Aunque parecían ayudarme de forma temporal, después me
sentía peor que nunca en cuanto a mi persona y mi vida. Me
volví descuidada y por poco me mato varias veces. Una vez
estando casi bajo una sobredosis, le aseguré a un Dios que ni
siquiera conocía que si podía salvarme de la muerte, no tomaría
drogas de nueyo. Él cumplió su parte del convenio, pero yo no
pude cumplir la mía.
En cierta ocasión cuando conducía bájo la influencia de las
drogas, casi tuve Un choque de frente. Conducía al aeropuerto
para alcanzar un vuelo muy temprano y no me daba cuenta de
que las drogas que había tomado la noche antes todavía me esta-
ban afectando. Pensaba que las había tomado otro día y que
estaba bien, pero en realidad solo había sido unas horas antes.
Conducía rápido porque había dormido demasiado y era muy
tarde, lo cual en sí fue un gran error. Mientras ascendía una colina,
una ambulancia venía a toda velocidad en dirección contraría a
la mía. No la vi ni escuché la estridente sirena hasta que estaba
prácticamente encima de mí. La ambulancia se desvió a la
izquierda y yo me desvié a la derecha y evitamos un choque
frontal por una fracción de centímetro. Nuestros vehículos
pasaron tan cerca uno del otro que mi auto
se estremeció con violencia. Sabía que aca-
baba de librarme de la muerte o de una
severa discapacidad.
Ese incidente me conmocionó de muchas
maneras. Me espantó que estuviera bajo la
influencia de esas drogas y que ni siquiera
me diera cuenta. Estaba tan fuera de mis
cabales que ni escuché siquiera la sirena.
Sabía que si no cambiaba mis hábitos, todo
iba a acabar para mí. Lo que había comen-
zado un par de años antes como una simple
prueba de algo que me ofrecieron en una
Mis principales
motivos de
oración son:
. Que sepa la voluntad
de Dios para mi vida
• Que me lleve bien
con mi madrastra
• Que mi papa'se salve
• Que esté protegido
del mal
• Q u e mi familia Y yo
tengamos salud
[13-15 años de edad)
Señor, ayúdame a mar>teneteme firme.
reunión social se convirtió en algo que y Dios
estaba a punto de destruir mí vida. Había respondió
caído bajo una mala influencia y no tuve Cuando mi abuelo tuvo
suficiente fuerza para detenerla hasta un ataque al corazón
que encontré al Señor. solo contaba con veinticinco
Existen muchas malas influencias a f o r
«tonto de posibilidades
nuestro alrededor, algunas evidentes y ^ sobrevivir. Mis primos
otras no tan obvias. Las sutiles pueden Y Vo
oramos y oramos,
seducirte a recibir algo malo en tu Vida
Lí
fue un éxito
sin que te des cuenta. Algo que a la larga y sobwivió.
te apartará del camino que Dios tiene °r mu
Y «decido
para ti y que destruirá tu vida. Un ejem- ¿«Dios" k"1
*"
pío de eso es la promiscuidad sexual, Se ¡ n f l u e n e l /
ve tanto de esto en la televisión y en las ^ 8
" ""
películas que es fácil que nos lleguemos " " '
a acostumbrar tanto a la idea que nos parezca que no tiene
tanta importancia. Pareciera como que «todo el mundo lo hace».
Sin embargo, no es cierto. Tiene mucha importancia. Y todo el
mundo no lo hace;
A fin de evitar estos y otros tiposde influencias malas, nece-
sitas estar bajo la influencia del Señor, Pídele a Dios que te ayude
a discernir las influencias que te rodean. Si te mantienes cerca de
Dios y su Palabra, Él te revelará la obra del enemigo en tu vida.
Te mostrará en los casos en que estás en territorio peligroso. Te
dará discernimiento cuando te estén;endiendo tina trampa y te
ayudará a ver la verdad.
Si ya estás bajo una mala influencia, Dios t e dará el poder
para ponerle fin. Él promete que podes resistir «al diablo, y él
huirá de [ti]» (Santiago 4:7).
, a r m a s c o n t r a e l enej^fo
Dios nos ha dado muchas arma^ntra el enemigo. He aquí
las cinco principales:
Elpoder"del-joven que ora
1. Una poderosa arma ,contra el enemigo es la Palabra de Dios.
Jesús mismo usó está arma contra el diablo cuando el Espí-
ritu Santo lo guió al desierto y Satanás fue a tentarlo
(Mateo 4:1). Uno pensaría que si era el Hijo de Dios no
tenía por qué haber entrado al desierto, y mucho menos
para que lo tentara el diablo. Sin embargo, «el tentador se le
acercó» (versículo 3) de la misma manera que viene a todos
nosotros, y Jesús usó la Palabra de Dios para desmentirlo.
Le dijo: «No solo de pan vive el hombre, sino de toda pala-
bra que sale de la boca de Dios» (versículo 4).
Cuando el diablo trate de influir en tu vida de alguna
manera, cítale la Biblia como lo hizo Jesús. En el momento
que sientas que te persuaden las malas influencias, corre a la
Palabra de Dios y comienza a citarla. Di: «Todo lo puedo
en Cristo que me fortalece» (Filipenses 4 : 1 3 ) . El diablo
aborrece eso y te dejará tranquilo.
2. Unapoderosa arma contra elenemigo es la alabanza. El diablo
también aborrece que adoremos a Dios. No puede tolerar
que la agente adore a otro que no sea él. Lo detesta tanto
que no puede siquiera estar cerca. Cuando alabamos y ado-
ramos al Señor, la presencia de Dios mora de forma pode-
rosa en medio nuestro y el diablo tiene que huir.
3. Una gran arma contra el enemigo es la obediencia. Si vivimos
en pecado o andamos en desobediencia, estamos dejando
abierta la puerta en nuestras vidas para que el diablo tenga
entrada y a la larga una posición establecida. Cosas malas
ocurren cuando nuestro pecado continuo le extiende una
invitación al enemigo a erigir una fortaleza en n,uestra vida.
Satanás no tiene jurisdicción sobre ti, pero la desobediencia
a las leyes de Dios le tiende una alfombra para, que entre.
Tú puedes cerrarle la puerta en la cara mediante,la. confe-
sión de tus errores y arrepintiéndote de ellos ante él Señor.
4. Una poderosa arma contra el enemigo es lafe mente
que el enemigo siempre está plantando minasféiljacite de ti.
12
Señor» ayúdame a mantenerme firme,,.
No tienes idea dónde están porque no son visibles a la vista
humana, Se eluden caminando cerca de Dios y permitién-
dole que guíe nuestros pasos. Dios dice sobre el enemigo:
«Resístanlo, manteniéndose firmes en la fe, sabiendo que
sus hermanos en todo el mundo están soportando la misma
clase de sufrimientos» (1 Pedro 5:9). Eso significa que
ponemos nuestra fe en Dios y nos negamos a hacer lo que
quiere el enemigo. Andar bajo la influencia dé Dios mediante
la fe en la Palabra de Dios es una manera poderosa de eludir
las trampas del enemigo.
5. Unapoderosa arpia contra elenemigo es la oración. El enemigo
detesta que hablemos con Dios. Sabe que Dios escucha
nuestras oraciones y las responde. El enemigo tratará de
lograr que dudemos que Dios nos escucha, a fin de debili-
tarnos. Sin embargo, no te dejes engañar por esa mentira.
Di: «Señor, ayúdame a resistir al enemigo y las influencias
del mal qüe trae a mi vida», y luego consuélate al saber que
esta sencilla oración tiene poder suficiente para destruir al
enemigo.
3 i h w ú m * « s
a t a c a d
¿Por qué atacan a las personas buenas? La respuesta está en la
pregunta misma. El enemigo te ataca porque eres una persona
buena. El diablo quiere destruir a todo el que puede, pero en
especial quiere destruir a cualquiera que ame a Dios y viva en sus
caminos. Es más, esta es la principal razón de que sea tu enemigo.
La única manera en que no consigues hacer eso es llegando a ser
como él. Tendrías que defender lo que representa él.
Recuerda que mientras mayor sea tu compromiso con el
Señor, más tratará de molestarte el diablo. Hará todo lo posible
por debilitarte con confusión, desaliento, culpa, temor, depre-
sión, tentación o derrota. Aun cuando ni con mucho está cerca
de ser tan poderoso como Dios, tratará de hacerte pensar que lo
€3
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora
 el poder del joven que ora

Más contenido relacionado

La actualidad más candente

1. Estructura de Sermón Bíblico.pptx
1. Estructura de Sermón Bíblico.pptx1. Estructura de Sermón Bíblico.pptx
1. Estructura de Sermón Bíblico.pptx
AnnabellSantamara
 
15 Sermones Escritos para Predicadores.pdf
15 Sermones Escritos para Predicadores.pdf15 Sermones Escritos para Predicadores.pdf
15 Sermones Escritos para Predicadores.pdf
JairoClemente2
 
SER CONOCIDO POR DIOS
SER CONOCIDO POR DIOSSER CONOCIDO POR DIOS
SER CONOCIDO POR DIOS
Carlos Sialer Horna
 
El servidor
El servidorEl servidor
El servidor
pollocolachema
 
A.t la biblia abraham la promesa
A.t la biblia abraham  la promesaA.t la biblia abraham  la promesa
A.t la biblia abraham la promesa
WillianAFranco
 
Vocabulario básico de homilética y predicación
Vocabulario básico de homilética y predicaciónVocabulario básico de homilética y predicación
Vocabulario básico de homilética y predicación
Pablo A. Jimenez
 
Efesios - Serie de Estudios para Grupos Pequeños
Efesios - Serie de Estudios para Grupos PequeñosEfesios - Serie de Estudios para Grupos Pequeños
Efesios - Serie de Estudios para Grupos Pequeños
Igreja Adventista do Sétimo Dia
 
Marcas de una iglesia comprometida
Marcas de una iglesia comprometidaMarcas de una iglesia comprometida
Marcas de una iglesia comprometidamchpeva
 
Como recibir el Bautismo del Espíritu Santo - Gordon Lindsay
Como recibir el Bautismo del Espíritu Santo - Gordon LindsayComo recibir el Bautismo del Espíritu Santo - Gordon Lindsay
Como recibir el Bautismo del Espíritu Santo - Gordon Lindsay
Helio Colombe
 
Hermeneutica Biblica
Hermeneutica BiblicaHermeneutica Biblica
Hermeneutica Biblica
Patricio González
 
Guia practica para estudiar y predicar la biblia
Guia practica para estudiar y predicar la bibliaGuia practica para estudiar y predicar la biblia
Guia practica para estudiar y predicar la biblia
Luis Fernando Guarin R.
 
Teología para la misión hoy
Teología para la misión hoyTeología para la misión hoy
Teología para la misión hoymuseomg
 
El ayuno cristiano
El ayuno cristianoEl ayuno cristiano
El ayuno cristiano
Carlos Castillo
 
Taller sobre evangelismo
Taller sobre evangelismoTaller sobre evangelismo
Taller sobre evangelismo
Ministerio Viva y Eficaz
 
El cristiano y su compromiso fervoroso con dios
El cristiano y su compromiso fervoroso con diosEl cristiano y su compromiso fervoroso con dios
El cristiano y su compromiso fervoroso con dios
Josue Gallegos
 
Principios rectores de_la_vida_cristiana_manual[1]
Principios rectores de_la_vida_cristiana_manual[1]Principios rectores de_la_vida_cristiana_manual[1]
Principios rectores de_la_vida_cristiana_manual[1]
Edgar Sanchez
 

La actualidad más candente (20)

1. Estructura de Sermón Bíblico.pptx
1. Estructura de Sermón Bíblico.pptx1. Estructura de Sermón Bíblico.pptx
1. Estructura de Sermón Bíblico.pptx
 
15 Sermones Escritos para Predicadores.pdf
15 Sermones Escritos para Predicadores.pdf15 Sermones Escritos para Predicadores.pdf
15 Sermones Escritos para Predicadores.pdf
 
SER CONOCIDO POR DIOS
SER CONOCIDO POR DIOSSER CONOCIDO POR DIOS
SER CONOCIDO POR DIOS
 
Declaración DE FE
Declaración DE FEDeclaración DE FE
Declaración DE FE
 
El servidor
El servidorEl servidor
El servidor
 
Historia De La Biblia
Historia De La BibliaHistoria De La Biblia
Historia De La Biblia
 
Curso de homiletica
Curso de homileticaCurso de homiletica
Curso de homiletica
 
A.t la biblia abraham la promesa
A.t la biblia abraham  la promesaA.t la biblia abraham  la promesa
A.t la biblia abraham la promesa
 
Vocabulario básico de homilética y predicación
Vocabulario básico de homilética y predicaciónVocabulario básico de homilética y predicación
Vocabulario básico de homilética y predicación
 
Efesios - Serie de Estudios para Grupos Pequeños
Efesios - Serie de Estudios para Grupos PequeñosEfesios - Serie de Estudios para Grupos Pequeños
Efesios - Serie de Estudios para Grupos Pequeños
 
Marcas de una iglesia comprometida
Marcas de una iglesia comprometidaMarcas de una iglesia comprometida
Marcas de una iglesia comprometida
 
Como recibir el Bautismo del Espíritu Santo - Gordon Lindsay
Como recibir el Bautismo del Espíritu Santo - Gordon LindsayComo recibir el Bautismo del Espíritu Santo - Gordon Lindsay
Como recibir el Bautismo del Espíritu Santo - Gordon Lindsay
 
Hermeneutica Biblica
Hermeneutica BiblicaHermeneutica Biblica
Hermeneutica Biblica
 
Guia practica para estudiar y predicar la biblia
Guia practica para estudiar y predicar la bibliaGuia practica para estudiar y predicar la biblia
Guia practica para estudiar y predicar la biblia
 
Teología para la misión hoy
Teología para la misión hoyTeología para la misión hoy
Teología para la misión hoy
 
El ayuno cristiano
El ayuno cristianoEl ayuno cristiano
El ayuno cristiano
 
Taller sobre evangelismo
Taller sobre evangelismoTaller sobre evangelismo
Taller sobre evangelismo
 
El cristiano y su compromiso fervoroso con dios
El cristiano y su compromiso fervoroso con diosEl cristiano y su compromiso fervoroso con dios
El cristiano y su compromiso fervoroso con dios
 
Principios rectores de_la_vida_cristiana_manual[1]
Principios rectores de_la_vida_cristiana_manual[1]Principios rectores de_la_vida_cristiana_manual[1]
Principios rectores de_la_vida_cristiana_manual[1]
 
Evangelio de marcos
Evangelio de marcosEvangelio de marcos
Evangelio de marcos
 

Similar a el poder del joven que ora

16 proverbios 16. contraste entre santidad y maldad
16 proverbios 16. contraste entre santidad y maldad16 proverbios 16. contraste entre santidad y maldad
16 proverbios 16. contraste entre santidad y maldad
Comparte la Biblia
 
Lectio divina para niños introducción
Lectio divina para niños introducciónLectio divina para niños introducción
Lectio divina para niños introducción
Misión Continental Chilena
 
40 dias-de-transformacion-devocionales
40 dias-de-transformacion-devocionales40 dias-de-transformacion-devocionales
40 dias-de-transformacion-devocionales
daniel jimenez osua
 
José Luis Caravias, sj. EE (Ejercicios Espirituales) 2 días
José Luis Caravias, sj. EE (Ejercicios Espirituales) 2 díasJosé Luis Caravias, sj. EE (Ejercicios Espirituales) 2 días
José Luis Caravias, sj. EE (Ejercicios Espirituales) 2 díasinfocatolicos
 
Formas De Crecimiento Espiritual
Formas De Crecimiento EspiritualFormas De Crecimiento Espiritual
Formas De Crecimiento Espiritual
Alfredo Umaña (Comunidad Cristiana El Hatillo)
 
DEVOCIONAL 20 DIAS CON DIOS.docx
DEVOCIONAL 20 DIAS CON DIOS.docxDEVOCIONAL 20 DIAS CON DIOS.docx
DEVOCIONAL 20 DIAS CON DIOS.docx
eudilac1
 
Semana de oración de jóvenes y de jóvenes adultos 2017
Semana de oración de jóvenes y de jóvenes adultos 2017 Semana de oración de jóvenes y de jóvenes adultos 2017
Semana de oración de jóvenes y de jóvenes adultos 2017
Henry Alexander Salgado Martinez
 
Semana de oración de jóvenes y de jóvenes adultos 2017
Semana de oración de jóvenes y de jóvenes adultos 2017 Semana de oración de jóvenes y de jóvenes adultos 2017
Semana de oración de jóvenes y de jóvenes adultos 2017
Henry Alexander Salgado Martinez
 
Soñadores
SoñadoresSoñadores
¡Ya basta! Sanidad Interior - Angela Kellenberger.pdf
¡Ya basta! Sanidad Interior - Angela Kellenberger.pdf¡Ya basta! Sanidad Interior - Angela Kellenberger.pdf
¡Ya basta! Sanidad Interior - Angela Kellenberger.pdf
juan23xpx
 
Área Eclesiástica
Área EclesiásticaÁrea Eclesiástica
Área EclesiásticaJorda Ly
 
4.Qué pinta Dios en tu vida. UCAS
4.Qué pinta Dios en tu vida. UCAS4.Qué pinta Dios en tu vida. UCAS
4.Qué pinta Dios en tu vida. UCASGloria Loupiac
 
Filipenses
FilipensesFilipenses
Filipenses
maritzavasquez31
 
La Palabra de Dios y la Oración Modulo No.4
La Palabra de Dios y la Oración Modulo No.4La Palabra de Dios y la Oración Modulo No.4
La Palabra de Dios y la Oración Modulo No.4
Alcira Marquez
 
Pequeños devocionales correspondientes al mes de Mayo
Pequeños devocionales correspondientes al mes de MayoPequeños devocionales correspondientes al mes de Mayo
Pequeños devocionales correspondientes al mes de Mayo
Iglesia Evangelica Buen Pastor Burriana
 

Similar a el poder del joven que ora (20)

16 proverbios 16. contraste entre santidad y maldad
16 proverbios 16. contraste entre santidad y maldad16 proverbios 16. contraste entre santidad y maldad
16 proverbios 16. contraste entre santidad y maldad
 
La vocación
La vocaciónLa vocación
La vocación
 
Lectio divina para niños introducción
Lectio divina para niños introducciónLectio divina para niños introducción
Lectio divina para niños introducción
 
40 dias-de-transformacion-devocionales
40 dias-de-transformacion-devocionales40 dias-de-transformacion-devocionales
40 dias-de-transformacion-devocionales
 
José Luis Caravias, sj. EE (Ejercicios Espirituales) 2 días
José Luis Caravias, sj. EE (Ejercicios Espirituales) 2 díasJosé Luis Caravias, sj. EE (Ejercicios Espirituales) 2 días
José Luis Caravias, sj. EE (Ejercicios Espirituales) 2 días
 
Formas De Crecimiento Espiritual
Formas De Crecimiento EspiritualFormas De Crecimiento Espiritual
Formas De Crecimiento Espiritual
 
DEVOCIONAL 20 DIAS CON DIOS.docx
DEVOCIONAL 20 DIAS CON DIOS.docxDEVOCIONAL 20 DIAS CON DIOS.docx
DEVOCIONAL 20 DIAS CON DIOS.docx
 
Semana de oración de jóvenes y de jóvenes adultos 2017
Semana de oración de jóvenes y de jóvenes adultos 2017 Semana de oración de jóvenes y de jóvenes adultos 2017
Semana de oración de jóvenes y de jóvenes adultos 2017
 
Semana de oración de jóvenes y de jóvenes adultos 2017
Semana de oración de jóvenes y de jóvenes adultos 2017 Semana de oración de jóvenes y de jóvenes adultos 2017
Semana de oración de jóvenes y de jóvenes adultos 2017
 
Oración eficaz
Oración eficazOración eficaz
Oración eficaz
 
Soñadores
SoñadoresSoñadores
Soñadores
 
Poder
PoderPoder
Poder
 
Poder
PoderPoder
Poder
 
¡Ya basta! Sanidad Interior - Angela Kellenberger.pdf
¡Ya basta! Sanidad Interior - Angela Kellenberger.pdf¡Ya basta! Sanidad Interior - Angela Kellenberger.pdf
¡Ya basta! Sanidad Interior - Angela Kellenberger.pdf
 
Área Eclesiástica
Área EclesiásticaÁrea Eclesiástica
Área Eclesiástica
 
4.Qué pinta Dios en tu vida. UCAS
4.Qué pinta Dios en tu vida. UCAS4.Qué pinta Dios en tu vida. UCAS
4.Qué pinta Dios en tu vida. UCAS
 
Como oir a_dios
Como oir a_diosComo oir a_dios
Como oir a_dios
 
Filipenses
FilipensesFilipenses
Filipenses
 
La Palabra de Dios y la Oración Modulo No.4
La Palabra de Dios y la Oración Modulo No.4La Palabra de Dios y la Oración Modulo No.4
La Palabra de Dios y la Oración Modulo No.4
 
Pequeños devocionales correspondientes al mes de Mayo
Pequeños devocionales correspondientes al mes de MayoPequeños devocionales correspondientes al mes de Mayo
Pequeños devocionales correspondientes al mes de Mayo
 

Más de Ludwing Sanchez Carranza

lider juvenil
lider juvenillider juvenil
Entiende a tu preadolescente
Entiende a tu preadolescenteEntiende a tu preadolescente
Entiende a tu preadolescente
Ludwing Sanchez Carranza
 
+infancia+y+adolescencia en RIESGO
 +infancia+y+adolescencia en RIESGO +infancia+y+adolescencia en RIESGO
+infancia+y+adolescencia en RIESGO
Ludwing Sanchez Carranza
 
El sexo y el adolescente cristiano
El sexo y el adolescente cristianoEl sexo y el adolescente cristiano
El sexo y el adolescente cristiano
Ludwing Sanchez Carranza
 
Biblioteca de ideas rompehielos
Biblioteca de ideas   rompehielos Biblioteca de ideas   rompehielos
Biblioteca de ideas rompehielos
Ludwing Sanchez Carranza
 
Mensaje impactante paul washer
Mensaje impactante   paul washerMensaje impactante   paul washer
Mensaje impactante paul washer
Ludwing Sanchez Carranza
 
Amar es para valientes (spanish edition)
Amar es para valientes (spanish edition)Amar es para valientes (spanish edition)
Amar es para valientes (spanish edition)
Ludwing Sanchez Carranza
 
la-prueba-del-amor
 la-prueba-del-amor la-prueba-del-amor
la-prueba-del-amor
Ludwing Sanchez Carranza
 
Redes sociales y los jovenes
Redes sociales y los jovenesRedes sociales y los jovenes
Redes sociales y los jovenes
Ludwing Sanchez Carranza
 
noviazgo juvenil cristiano
noviazgo juvenil cristianonoviazgo juvenil cristiano
noviazgo juvenil cristiano
Ludwing Sanchez Carranza
 
Empoderados liderazgo
Empoderados liderazgoEmpoderados liderazgo
Empoderados liderazgo
Ludwing Sanchez Carranza
 
Parra astudillo, eugenio (2017). jovenes que transforman el mundo. el modelo ...
Parra astudillo, eugenio (2017). jovenes que transforman el mundo. el modelo ...Parra astudillo, eugenio (2017). jovenes que transforman el mundo. el modelo ...
Parra astudillo, eugenio (2017). jovenes que transforman el mundo. el modelo ...
Ludwing Sanchez Carranza
 
Como multiplicar tu ministerio , jontahan mc kee
Como multiplicar tu ministerio , jontahan mc keeComo multiplicar tu ministerio , jontahan mc kee
Como multiplicar tu ministerio , jontahan mc kee
Ludwing Sanchez Carranza
 
Ministerio cristocentrico para jovenes (barry st.clair) (1)
Ministerio cristocentrico para jovenes (barry st.clair) (1)Ministerio cristocentrico para jovenes (barry st.clair) (1)
Ministerio cristocentrico para jovenes (barry st.clair) (1)
Ludwing Sanchez Carranza
 
Jovenes evangelizando jovenes
Jovenes evangelizando jovenesJovenes evangelizando jovenes
Jovenes evangelizando jovenes
Ludwing Sanchez Carranza
 
Pensamientos para jovenes
Pensamientos para jovenesPensamientos para jovenes
Pensamientos para jovenes
Ludwing Sanchez Carranza
 
Compartiendo el-evangelio-con-los-jovenes-por-willie-alvarenga 1
Compartiendo el-evangelio-con-los-jovenes-por-willie-alvarenga 1Compartiendo el-evangelio-con-los-jovenes-por-willie-alvarenga 1
Compartiendo el-evangelio-con-los-jovenes-por-willie-alvarenga 1
Ludwing Sanchez Carranza
 
50 proyectos de accion social para jovenes
50 proyectos de accion social para jovenes50 proyectos de accion social para jovenes
50 proyectos de accion social para jovenes
Ludwing Sanchez Carranza
 
Articulos practicos-para-los-jovenes-por-willie-alvarenga
Articulos practicos-para-los-jovenes-por-willie-alvarengaArticulos practicos-para-los-jovenes-por-willie-alvarenga
Articulos practicos-para-los-jovenes-por-willie-alvarenga
Ludwing Sanchez Carranza
 
Una palabra a los jovenes
Una palabra a los  jovenesUna palabra a los  jovenes
Una palabra a los jovenes
Ludwing Sanchez Carranza
 

Más de Ludwing Sanchez Carranza (20)

lider juvenil
lider juvenillider juvenil
lider juvenil
 
Entiende a tu preadolescente
Entiende a tu preadolescenteEntiende a tu preadolescente
Entiende a tu preadolescente
 
+infancia+y+adolescencia en RIESGO
 +infancia+y+adolescencia en RIESGO +infancia+y+adolescencia en RIESGO
+infancia+y+adolescencia en RIESGO
 
El sexo y el adolescente cristiano
El sexo y el adolescente cristianoEl sexo y el adolescente cristiano
El sexo y el adolescente cristiano
 
Biblioteca de ideas rompehielos
Biblioteca de ideas   rompehielos Biblioteca de ideas   rompehielos
Biblioteca de ideas rompehielos
 
Mensaje impactante paul washer
Mensaje impactante   paul washerMensaje impactante   paul washer
Mensaje impactante paul washer
 
Amar es para valientes (spanish edition)
Amar es para valientes (spanish edition)Amar es para valientes (spanish edition)
Amar es para valientes (spanish edition)
 
la-prueba-del-amor
 la-prueba-del-amor la-prueba-del-amor
la-prueba-del-amor
 
Redes sociales y los jovenes
Redes sociales y los jovenesRedes sociales y los jovenes
Redes sociales y los jovenes
 
noviazgo juvenil cristiano
noviazgo juvenil cristianonoviazgo juvenil cristiano
noviazgo juvenil cristiano
 
Empoderados liderazgo
Empoderados liderazgoEmpoderados liderazgo
Empoderados liderazgo
 
Parra astudillo, eugenio (2017). jovenes que transforman el mundo. el modelo ...
Parra astudillo, eugenio (2017). jovenes que transforman el mundo. el modelo ...Parra astudillo, eugenio (2017). jovenes que transforman el mundo. el modelo ...
Parra astudillo, eugenio (2017). jovenes que transforman el mundo. el modelo ...
 
Como multiplicar tu ministerio , jontahan mc kee
Como multiplicar tu ministerio , jontahan mc keeComo multiplicar tu ministerio , jontahan mc kee
Como multiplicar tu ministerio , jontahan mc kee
 
Ministerio cristocentrico para jovenes (barry st.clair) (1)
Ministerio cristocentrico para jovenes (barry st.clair) (1)Ministerio cristocentrico para jovenes (barry st.clair) (1)
Ministerio cristocentrico para jovenes (barry st.clair) (1)
 
Jovenes evangelizando jovenes
Jovenes evangelizando jovenesJovenes evangelizando jovenes
Jovenes evangelizando jovenes
 
Pensamientos para jovenes
Pensamientos para jovenesPensamientos para jovenes
Pensamientos para jovenes
 
Compartiendo el-evangelio-con-los-jovenes-por-willie-alvarenga 1
Compartiendo el-evangelio-con-los-jovenes-por-willie-alvarenga 1Compartiendo el-evangelio-con-los-jovenes-por-willie-alvarenga 1
Compartiendo el-evangelio-con-los-jovenes-por-willie-alvarenga 1
 
50 proyectos de accion social para jovenes
50 proyectos de accion social para jovenes50 proyectos de accion social para jovenes
50 proyectos de accion social para jovenes
 
Articulos practicos-para-los-jovenes-por-willie-alvarenga
Articulos practicos-para-los-jovenes-por-willie-alvarengaArticulos practicos-para-los-jovenes-por-willie-alvarenga
Articulos practicos-para-los-jovenes-por-willie-alvarenga
 
Una palabra a los jovenes
Una palabra a los  jovenesUna palabra a los  jovenes
Una palabra a los jovenes
 

Último

Sistemas-de-Numeración-para-Primero-de-Secundaria.doc
Sistemas-de-Numeración-para-Primero-de-Secundaria.docSistemas-de-Numeración-para-Primero-de-Secundaria.doc
Sistemas-de-Numeración-para-Primero-de-Secundaria.doc
LuisEnriqueCarboneDe
 
EXPERIENCIA PROYECTOS STARTUP JAVIER LASA
EXPERIENCIA PROYECTOS STARTUP JAVIER LASAEXPERIENCIA PROYECTOS STARTUP JAVIER LASA
EXPERIENCIA PROYECTOS STARTUP JAVIER LASA
Javier Lasa
 
Presentación Arduino, proyecto colectivo
Presentación Arduino, proyecto colectivoPresentación Arduino, proyecto colectivo
Presentación Arduino, proyecto colectivo
juanlemus11122
 
fase 4-Estudio de la geometria analitica[1].pptx
fase 4-Estudio de la geometria analitica[1].pptxfase 4-Estudio de la geometria analitica[1].pptx
fase 4-Estudio de la geometria analitica[1].pptx
QuerubinOlayamedina
 
FISICA IMPRIMIR MATERIAL ACADEMICO NIVEL SECUNDARIO
FISICA IMPRIMIR MATERIAL ACADEMICO NIVEL SECUNDARIOFISICA IMPRIMIR MATERIAL ACADEMICO NIVEL SECUNDARIO
FISICA IMPRIMIR MATERIAL ACADEMICO NIVEL SECUNDARIO
DarwinNestorArapaQui
 
Los derechos de autor y Ética Profesional
Los derechos de autor y Ética ProfesionalLos derechos de autor y Ética Profesional
Los derechos de autor y Ética Profesional
bgonzalezm20
 
WordPress training basics - básicos de cómo enseñar WordPress
WordPress training basics - básicos de cómo enseñar WordPressWordPress training basics - básicos de cómo enseñar WordPress
WordPress training basics - básicos de cómo enseñar WordPress
Fernando Tellado
 
INSTITUTO AUCARA SEMANA NUMERO 7 AGROPECUARIA I
INSTITUTO AUCARA SEMANA NUMERO 7 AGROPECUARIA IINSTITUTO AUCARA SEMANA NUMERO 7 AGROPECUARIA I
INSTITUTO AUCARA SEMANA NUMERO 7 AGROPECUARIA I
CESAR MIJAEL ESPINOZA SALAZAR
 
EduLearnIAappde IAparatodosdisponible.pptx
EduLearnIAappde IAparatodosdisponible.pptxEduLearnIAappde IAparatodosdisponible.pptx
EduLearnIAappde IAparatodosdisponible.pptx
Elizabeth Mejia
 

Último (9)

Sistemas-de-Numeración-para-Primero-de-Secundaria.doc
Sistemas-de-Numeración-para-Primero-de-Secundaria.docSistemas-de-Numeración-para-Primero-de-Secundaria.doc
Sistemas-de-Numeración-para-Primero-de-Secundaria.doc
 
EXPERIENCIA PROYECTOS STARTUP JAVIER LASA
EXPERIENCIA PROYECTOS STARTUP JAVIER LASAEXPERIENCIA PROYECTOS STARTUP JAVIER LASA
EXPERIENCIA PROYECTOS STARTUP JAVIER LASA
 
Presentación Arduino, proyecto colectivo
Presentación Arduino, proyecto colectivoPresentación Arduino, proyecto colectivo
Presentación Arduino, proyecto colectivo
 
fase 4-Estudio de la geometria analitica[1].pptx
fase 4-Estudio de la geometria analitica[1].pptxfase 4-Estudio de la geometria analitica[1].pptx
fase 4-Estudio de la geometria analitica[1].pptx
 
FISICA IMPRIMIR MATERIAL ACADEMICO NIVEL SECUNDARIO
FISICA IMPRIMIR MATERIAL ACADEMICO NIVEL SECUNDARIOFISICA IMPRIMIR MATERIAL ACADEMICO NIVEL SECUNDARIO
FISICA IMPRIMIR MATERIAL ACADEMICO NIVEL SECUNDARIO
 
Los derechos de autor y Ética Profesional
Los derechos de autor y Ética ProfesionalLos derechos de autor y Ética Profesional
Los derechos de autor y Ética Profesional
 
WordPress training basics - básicos de cómo enseñar WordPress
WordPress training basics - básicos de cómo enseñar WordPressWordPress training basics - básicos de cómo enseñar WordPress
WordPress training basics - básicos de cómo enseñar WordPress
 
INSTITUTO AUCARA SEMANA NUMERO 7 AGROPECUARIA I
INSTITUTO AUCARA SEMANA NUMERO 7 AGROPECUARIA IINSTITUTO AUCARA SEMANA NUMERO 7 AGROPECUARIA I
INSTITUTO AUCARA SEMANA NUMERO 7 AGROPECUARIA I
 
EduLearnIAappde IAparatodosdisponible.pptx
EduLearnIAappde IAparatodosdisponible.pptxEduLearnIAappde IAparatodosdisponible.pptx
EduLearnIAappde IAparatodosdisponible.pptx
 

el poder del joven que ora

  • 1. bmnA u t o r a de la serie éxito de librería El poder de la oración ®
  • 2. Descubre el poder. Cambia tu vida. Cambia el mundo. Cuando oras, ¿estás seguro de que Dios escucha? ¿Algunas veces te preguntas si tus palabras no dan contra el cielo raso y se evaporan? ¿Alguna vez dudas de que tus oraciones puedan ser determinantes? Pues bien, la verdad es que no solo pueden ser determinantes, sino que pueden transformar vidas. En El poder del joven que ora, descubrirás que el saber orar puede cambiarlo todo. A través de la oración, Dios puede elevarte por encima de las presiones de tu vida de modo que puedas ver el plan singular que tiene con tu futuro. Veinte capítulos de actualidad te ayudarán a... tener un andar más íntimo con Dios decirle adiós a las emociones negativas atraer buenas relaciones mantenerte libre de la presión de tus ¡guales ser una luz para otros Lo que es importante para ti es importante para Dios. Dile todo lo que tienes en tu corazón, comenzando con las oraciones que se ofrecen al final de cada capítulo. Habla con Dios. Escucha a Dios. Y observa el desarrollo del gran propósito que tiene contigo. Stormie Omartian es la autora de la serie de libros que han sido éxitos de librería El Poder de la Oración® (más de siete millones de ejemplares vendidos), Stormie, Suficiente luz para el próximo paso y La oración que cambia todo™. Stormie y su esposo, Michael, han estado casados durante treinta años y tienen tres hijos adultos. www.editorialuniiit.com ÏÏUNILIT Producto 495446 Categoría: Jóvenes / Devocional y oración «Publicamos para la familia•<
  • 3. Publicado por Editorial Unilit Miami, Fl. 33172 Derechos reservados © 2006 Editorial Unilit (Spanish translation) Primera edición 2006 © 2005 por Stormie Omartian Originalmente publicado en inglés con el título: The Power of a Praying® Teen por Harvest House Publishers Eugene, Oregon 97402 www.harvesthousepublishers.com Todos los derechos reservados. Todos los derechos reservados. Ninguna porción o parte de esta obra se puede repro- ducir, ni guardar en un sistema de almacenamiento de información, ni transmitir en ninguna forma por algún medio (electrónico, mecánico, de fotocopias, grabación, etc.) sin el permiso previo de los editores. Traducción: Nancy Pineda Revisión: Rojas & Rojas Editores, Inc. Portada: Koechel Peterson & Associates, Inc., Minneapolis, Minnesota A menos que se indique lo contrario, las citas bíblicas se tomaron de la Santa Biblia Nueva Versión Internacional. © 1999 por la Sociedad Bíblica Internacional. Las citas bíblicas señaladas con RV-60 se tomaron de la Santa Biblia, Versión Reina Valera 1960. © 1960 por la Sociedad Bíblica en América Latina. Las citas bíblicas señaladas con LBD se tomaron de la Santa Biblia, La Biblia al Día. © 1979 por la Sociedad Bíblica Internacional. Las citas bíblicas señaladas con DHH se tomaron de Dios Habla Hoy, la Biblia en Versión Popular. © 1966, 1970, 1979 por la Sociedad Bíblica Americana, Nueva York. Las citas bíblicas señaladas con LBLA se tomaron de la Santa Biblia, La Biblia de Las Américas. © 1986 por The Lockman Foundation. Las citas bíblicas señaladas con TLA se tomaron de la Bibliapara todos, © 2003. Tra- ducción en lenguaje actual, © 2002 por las Sociedades Bíblicas Unidas. Usadas con permiso. Producto 495446 ISBN 0-7899-1397-6 Impreso en Colombia Printedin Colombia Categoría: Jóvenes/Devocional y oración Category: Youth/Devotional & Prayer
  • 4. ¿Qué es el poder y por que lo necesito? 5 • i 1 '.'i11 / '!• 4: • '¡ Séñor, ayúdame a conocerte mejor 15 Señor, ayúdame a liberarme de los errores del pasado 27 Scfeor, ayúdame a perdonar a otros 37 áfekar, ayúdame a hacer lo que es bueno 47 Sefior, ayúdame a mantenerme firme contra las malas influencias 57 fillíor, ayúdame a tomar el control de mi mente 69 '""t ./iu., ' , • . , ,, , Séñor, ayúdame a comprender tu Palabra 79 Señor, ayúdame a liberarme de la presión de mis ¡guales 89 Señor, ajúdame a Lener buenas relaciones 10] Señor, a iklanie a alabarte en todo tiempo 109
  • 5. "i •:. . • • •• ' .. > , S&etayúdame a encontrar tu propósito para mi vida. 117 1if '»'"I ";•• .' • • SléíEiCiayúdame a tomar decisiones sabias . . . . . . . . 127 SteWf éyúdame a deshacerme de las emociones negativas 135 "t é Síful^ayúdame a resistir la tentación 147 ««t c r • • - :: • SM©íi ayúdame a ser fuerte cuando pasan cosas malas. . 155 I" lili " : •• "; : v ' 1 Sitó®f5 ayúdame a estar seguro 163 Seáoí, ayúdame a decir palabras que traigan vida... 171 SiñíW ayúdame a tener fe por lo imposible 181 • • ' • ' ' 1 ' ' • ' lililí" ' • ' ' Seño-r; ayúdame a conocer tu voluntad para mi vida. 189 Señor; ayúdame a adentrarme en el futuro que tienes para mí. . . . . . . . . . . . . . . , . 199
  • 6. $Í¡ÉRES JOVEN, ESTÁS EN una posición Única para lograr influir en tú mundo de una manera poderosa. Eso se debe a qué eres parte de un mundo que es intenso, agresivo y muy pequeño en algunas maneras. Es pequeño porque las personas que no son jóvenes no forman parte de él de la forma en que lo,haces tú. Eres capaz de vci de cerca tocia* las cosas que son buenas malas en tu mundo, las cosas que tú deseas que nunca terminaran las cosas que sabes que necesitan eambiar. Tú, tu oíday tu mundo pueden cambiar mucho má> de lo t/ue jamás soñaste posible cotí sola orar por esto todos los días. Como joven, tienes una vida ocupada. Nunca ha habido más presión por aprender, mejorar y triunfar. Ni nunca lu habido1 más oportunidades de hacerlo. Quizá sientas que no tienes tiempo
  • 7. El podar *iel joven que ora de orar. Si es así, no eres el único. Muchas personas se sienten así. La vida está llena de un sinnúmero de cosas que están dise- ñadas para mantenernos demasiado ocupados para orar. Sin embargo, cuando no pasamos tiempo con Dios cada día en oración, nos perdemos de escuchar su voz hablando a nuestro corazón y guiándonos de maneras importantes. Puede hacer que nos perdamos muchas de las cosas buenas que Él tiene para nuestra vida. He encontrado un método para que orespor cada aspecto de tu vida que te mantendrá enfocado en quién es Dios y en para qué te creó. Y esto es muy importante, porque cuando las personas no saben quién es Dios en realidad, ni para qué Él las creó, pueden terminar tomando malas decisiones y nunca experimentan todo lo que Dios tiene para ellas. Esta manera de orar quitará los proble- mas de tus hombros y pondrá la carga en los de Dios. Él no solo quiere llevarlas por ti, sino también elevarte por encima de las circunstancias difíciles para que logres ver las cosas desde su perspectiva. Cuando puedes hacer eso, podrás saber lo que es verdad y lo que es mentira. Demasiado a menudo creemos cosas que no son ciertas sobre nosotros y nuestras situaciones, y esto puede limitarnos, o incluso paralizar- nos, hasta el punto en que no podemos avanzar como debemos. Ver la verdad como la revela Dios nos libera. Sobre todo, este tipo de oración te ayudará a acercarte de veras a Dios. Y ahí es donde quieres estar. Cuando estás cerca de Dios, puedes expresar los más profundos sentimientos y deseos de tu corazón. Y tu corazón puede escucharlo a Él guiándote en el camino que tiene para ti, revelándote, los maravillosos planes que tiene para tu futuro. Las principal®3 cosas por las que oro: • Buena salud para mí y mi familia • Que tenga éxito en la vida • Que sea libre de la tentación • Que haya paz en el mundo • Que Dios salve a mi generación (16-19 años de edad) §
  • 8. ¿Qué es el poder y por<|u<§"Íqnecesito? " - " cor. r > x - í m ' La cosa más importante que necesitas comprender en la vida es que Dios te creó, te ama, está comprometido contigo y tiene un gran propósito con tu vida. Sin embargo, no soló tienes que creer esto en tu cabeza, sino también conocerlo en tu corazón. Y solo a través de una relación íntima con Dios es que puedes conocer todo esto en verdad. Uno comienza una relación íntima con Dios al recibir a su Hijo, Jesús. Solo pídele a Jesús que venga a tu vida. Luego toma una Biblia y comienza a leerla. (Revisa diferentes traducciones para ver la que sea perfecta para ti). Procura juntarte con personas que conozcan al Señor. ¿Cómo puedes llegar a ser todo para lo que te creó Dios si a cada momento te empujan a un mundo que quiere que te amoldes a su imagen? Las personas qué tengan la mayor influencia en tu vida deben ser personas que conocen a Dios. Búscalas en la escuela. Sobre todo, búscalas en una buena iglesia, pues allí pueden dárte el apoyo sólido que necesitas para cultivar tu relación con el Señor. Tener una relación cercana con Dios no significa que nunca tendrás problemas, sino que cuando los tengas, Él estará a tu lado para ayudarte. Calmará las tormentas de tu vida cuándo las cosas se pongan feas. Tomará los asuntos difíciles que enfrentas para o bien transformarlos, permitiéndote elevarte por encima de ellos, o para ayudarte a atravesarlos con éxito. Sin embargo, todas estas cosas no pasan por casualidad. No pasan sin oración. Cuando andas cerca de Dios mediante la lectura de su Palabra y pasando tiempo con El cada día en oración, descubrirás dé veras quién eres y para qué te creó. Comprenderás el propósito que Dios tiene con tu vida. La oración es simplemente comunicarse con Dios. Es hablar con Él y decirle cualquier cosa que tengas en el corazón. Es contarle
  • 9. El potíer del jover. «gue ora Jo que opinas de tu vida y lo que opinas de Él. Es decirle a Dios todas las cosas que ves que son malas y cómo te gustaría que cambiaran. Y es permitirle a Él que hable a tu corazón sobre qué piensa de tí y cuáles son los planes y propósitos que tiene con tu vida. Cuando oras a menudo, te enfocas en quién es Dios y en quién , eres tú con relación a Él. Cuando hablas con Dios, Él comienza a mostrarte cada vez más, quién debes llegar a ser y lo que quiere que hagas. Y esa es una de las cosas más importantes que necesitas conocer en tu vida. B ^ a ^ e . ^ ^ ^ t i < h a b l e m o s «le m i Este libro te ayudará a aprender a orar por ti y tu vida, y por otras personas y circunstancias también. Es el libro que me hubiera gustado que ya lo hubieran escrito cuando yo era joven. Si hubiese sabido todas estas cosas, no me hubiera metido en tantos problemas, ni malgastado tantos años de mi vida buscando cosas que no podía tener. No hubiera pasado tiempo luchando por algo para lo que no me crearon. No hubiese sufrido el desaliento, la depresión, la frustración, la ansiedad ni la desesperación que sufrí. Me hubiera ahorrado un montón de tristeza y dolor. Cuando era adolescente, mi familia y yo Mi oración vivíamos en una parte de la ciudad que no & Dios era tan bonita como donde vivían los demás Seiíor> ayúdame a pasar chicos. No era agradable en lo absoluto, a través de esta maravillosa Los demás chicos vivían en casas que eran Vida que me has dado. muy grandes, nuevas y bien equipadas. La Dame todo lo que necesito mía era pequeña, vieja y de aspecto ruinoso, y ayúdame de manera Ellos procedían de familias adineradas. La espiritual, mía era pobre. Ellos vestían mejores ropas, emocional y física. conducían autos más bonitos e iban a lugares en las vacaciones. Las pocas ropas que tenía para vestir estaban gastadas, nuestros autos eran tan viejos y estropeados que apenas funcionaban, y nunca íba- mos a ninguna parte. Ellos comían bien, se mantenían saludables 8
  • 10. ¿Qué es el poder y por Jo necesito? y vivían mejor. Yo a menudo me iba-aja cama con hambre, casi siempre estaba enferma y vivía en la miseria. Ellos tenían ilusión en la vida; yo le temía a cada día y a menudo deseaba más morir que vivir. Si hubiera conocido al Señor en ese entonces, hubiera podido acudir a Él con todas las necesidades que tenía. Hubiera sentido su presencia y su poder ayudándome a través de cada día y se hubiera llevado mi pena y soledad. Hubiera dejado de estar avergonzada de ser quien era y hubiera estado agradecida de lo que Dios estaba haciendo de mí. Hubiera aprendido a andar en los caminos de Dios y a no meterme en problemas. Hubiera reconocido mucho antes mis dones y talentos y los hubiera desarrollado, en lugar de recriminarme por no ser lo que pensaba que debía ser. Hubiera comprendido lo que Dios quería de mi vida y a no apartarme del camino ni malgastar tantos años tra- tando de descifrar la vida y buscar mi camino. Te contaré más de mi vida a lo largo de este libro, y espero que aprendas lo suficiente de esta para evitar los errores y los males que tuve que soportar. ¿ » p r ^ masa——— ¿Te parece a veces que orar es difícil? Si es así, no eres el único. Yo me he sentido también de esa manera. Es más, todo el mundo experimenta lo mismo de una manera u otra, no importa la edad ni el tiempo que haga que conocen al Señor. Existen muchas explicaciones diferentes de por qué se nos hace difícil la oración. Una es que no estamos seguros de que digamos lo que hay que decir. Pensamos que tenemos que sonar como un predicador o que tenemos que usar las palabras apro- piadas. Tememos no decir las cosas lo suficientemente adecua- das ni buenas. O no oramos el tiempo suficiente ni con bastante firmeza; '... Algunas veces pensamos que Dios no escucha nuestras ora- ciones. O que quizá no las considera importantes. O que está i
  • 11. El podar *iel joven que ora demasiado ocupado para escuchar. O creemos que los asuntos por los que queremos orar son muy grandes y nosotros somos muy pequeños, ¿cómo es posible que nuestras oraciones mar- quen alguna diferencia? No entendemos lo poderosas que son nuestras oraciones y lo que se puede lograr cuando oramos. ¿Encuentras más fácil orar por otras personas que por ti? Sé que me he sentido de esa manera. Puedo orar con mucha más facilidad por mis amigos, familiares y personas que ni siquiera he conocido y de las que me he enterado en las noticias que por mis propias necesidades. ¿Por qué? Por una cosa: me resultaba sencilla entender las necesidades de otras personas. Las mías eran muchjas veces complicadas y no era fácil hablar al respecto. A menudo no tenía ni idea de cómo orar por una situación en particular. D las circunstancias eran tan abrumadoras que mis oraciones fió eran más que un básico clamor por ayuda. Algunas veces penisaba que no podía decir una oración que Dios deseara escuchar. Hace mucho que he descubierto que nada de eso es cierto. I La verdad es que Dios no está buscando a alguien para orar que sea perfecto, ni que diga las «cristianísimas» palabras perfec- tas de una manera perfecta. Está buscando a alguien que tenga un corazón lleno de amor para ÉL Dios no mide tus oraciones por el tiempo que oras. Las mide por lo importantes que son para ti. Sabe lo que hay en tu corazón y le interesan las cosas que te preocupan, porque tú le importas. Lo que es importante para ti es importante para Él. Por eso quiere que vayas a Él con las cosas que son importantes para ti. Es posible que estés pensando: Si Dios sabe lo que está en mi corazón y se preocupa por mí, ¿por qué tengo que orar? ¿Por qué simplemente no me da lo que necesito sin tener que pedírselo? La respuesta es que Dios quiere que vayas a Él, que estés cer- ca de Él, que hables con Él y que dependas de Él. Quiere hablar contigo sobre las cosas que son importantes para EI& fin de que lleguen a ser importantes para ti. Quiere llevarte a lugares a los que no puedes llegar sin Él. Quiere hacer gfandes cosas por
  • 12. ¿Qué es el poder y por <|u<§"Íq necesito? medio de ti, pero tienes que andar cerca de Él a fin de que se hagan realidad. Cuando comprendes todo esto, orar es muchísimo más fácil. fias h a c f i £ c u a n t o a s . aisa4 "-^ B a t e s * - - - ¿Alguna vez has sentido que tu vida está fuera de control y no tienes poder para hacer algo al respecto? ¿Algunas veces te sientes tan presionado por las circunstancias externas o las emo- ciones internas que crees que estás a punto de explotar? ¿Alguna vez has sentido como si tu vida estuviera atascada en un lugar y que no vas a ninguna parte, o peor aun, que vas hacia atrás? ¿Alguna vez experimentas sentimientos de vacío o frustración? ¿Te has preguntado si puedes avanzar hacia lo que Dios tiene para ti? La mayoría de las personas sienten esas cosas, en especial las de tu edad. Sin embargo, la buena noticia es que Dios tiene un camino para ti a la oración qué te dará el poder para levantarte por encima de todos esos sentimientos. ¿Has deseado a veces hacer algo gran- Oré y D i o s de, algo que fuera determinante en este respondió mundo, pero no sabías qué hacer ni cómo ie ^ a ^ hacerlo? Si es así, consuélate en saber que me ayudara que esta es la manera en qúe quiere Dios en mi relación con Él que te sientas. Él también quiere que No oraba mucho y ahora hagas algo grande que sea determinante lo hago todos los días. en este mundo, pero quiere que busques A veces olvidaba leer de Él la habilidad y el poder para 'a Biblia, pero he mejorado, hacerlo. Demasiado a menudo trata- (14 años de edad) mos de hacer cosas por nuestra cuenta y nos llegamos a desalentar cuando no ocurren de la manera que esperábamos. Lo que necesitamos es un poder mucho mayor que nosotros mismos. Aun así, en el mundo solo existe un poder lo suficiente grande para ayudarnos a elevarnos por. encima de nosotros mismos y nuestras limitaciones y circunstancias, y ese es el poder de Dios.
  • 13. El poHer ¿al j^mn que . ora •Corno s e ajferitxa un*-. • - - Lo más maravilloso que ocurre cuando invitamos a Jesús a entrar en nuestra vida es que el Espíritu Santo de Dios viene a vivir dentro de nosotros. Como tenemos su Espíritu Santo en nosotros, nunca estaremos solos y siempre tendremos acceso a todo lo que necesitamos. Eso significa que cada vez que oramos a Dios en el nombre de Jesús, su poder se libera a fin de actuar en cualquier situación por la que estemos orando. Cuando nega- mos el poder del Espíritu Santo, nos volvemos como esos indi- viduos que la Biblia dice que «aparentarán ser piadosos, pero su conducta desmentirá el poder de la piedad» (2 Timoteo V. ). Sin el poder de Dios, no podemos elevarnos por encima de nuestras limitaciones. No podemos permanecer firmes ante todo lo que nos venga en contra cada día. Dios quiere que comprendamos «cuán incomparable es la grandeza de su poder a favor de los que creemos» (Efesios I; í j). Él quiere que veamos que «no hemos recibido el espíritu del mundo sino el Espíritu que procede de Dios, para que enten- damos lo que por su gracia él nos ha concedido» (.„ Corintios Eso significa que debido a que tenemos el Espíritu de Dios morando en nosotros, lograremos experimentar todas las cosas que Dios tiene para nosotros. ¿No es esa una gran noticia? No puedo hacer que comprendas el poder de Dios, ni la manera en que el Espíritu Santo quiere obrar en ti. Eso va más allá de mis capacidades y autoridad en tu vida. Sin embargo, tú no necesitas que te convenza porque lo hará el mismo Espíritu Santo. Jesús dijo: «El Defensor, el Espíritu Santo que el Padre va a enviar en mi nombre, les enseñará todas las cosas y les recordará todo lo que yo les he dicho» (Juan > -i DHH). El Espíritu Santo te lo mostrará. Una vez que haces a Jesús el Señor de tu vida, llegarás a conocerlo como «a Aquel que es poderoso para hacer todas las cosas mucho más abundantemente de lo que pedimos o entendemos,
  • 14. ¿Qué es .el poder y por <tn|¿$c -'«cesito? según el poder que actúa en nosotros» (Efesios *..t¿', RV-60). Esto quiere decir que debido al Espíritu Santo de Dios en ti, su poder en ti, El puede hacer más en tu vida de lo que puedas pedir. Él puede hacer más de lo que puedes imaginar siquiera. ¿Qué te parece? ¡ a j ^ m s s a ^ - — — — — — Este libro te ayudará a orar por los diferentes asuntos de tu vida. Solo toma un capítulo cada vez. Al final de cada capítulo está una sección llamada «El poder de la oración», una oración que puedes hacer para empezar. A medida que oras, vendrán a tu mente otras cosas para incluirlas. Después de esa sección está una llamada «Palabra de poder». Son importantes promesas de la Palabra de Dios relacionadas con lo que se está hablando. Al leerlas, piensa en lo que cada promesa en particular significa de manera específica para ti y tu vida. La última sección de cada capítulo se llama «Pensémoslo un poco más». Estas son preguntas para que las respondas y pensamientos para que los completes que te ayudarán a aprender a orar por esas cosas. A través de todos los capítulos aparecen pequeños recuadros que contienen pensamientos, oraciones y opiniones de jóvenes. Decidí mantenerlos anónimos porque muchos son muy personales y quería proteger la privacidad de todos los que realizaron la encuesta. Están divididos por igual entre contribuyentes masculinos y femeninos. Sin embargo, los mismos jóvenes no realizaron la encuesta de manera anónima. Los vi y hablé con ellos en persona, y fueron muy entusiastas y sinceros en sus respuestas debido a que creían que su franqueza podía ayudar a otros jóvenes que atravesaban por las mismas cosas y experiencias. Oro por otros cuando; por ellos • Me ayudan • Pienso en ellos ' Están tristes • Tengo l a oportunidad (13-15 años de edad)
  • 15. El podar *iel joven que ora l o r a . c í e •.•A;,^- Cuando hablas con el Señor, nunca te quedas inmóvil. O bien avanzas o retrocedes. O bien eres más semejante a Cristo cada día o te pareces menos a Él. Es por eso que escribí este libro. Deseo que sigas avanzando al pasar tiempo con el Señor cada día. Deseo que aprendas a amar a Dios y vivas como Él quiere de modo que puedas recibir todo lo que Él tiene para ti. Cuando vives acorde a la Palabra de Dios y por el poder de su Espíritu Santo, puedes confiar en que el Señor está obrando su perfecta voluntad en tu vida y te está convirtiendo en todo para lo que te creó. !íEÉe i r oración Señor, tu fias ffitiSTBirtO Palabra- que tu Espíritu Santo nos ayuda a orar (Romanos 8:2i). Te invito, Espíritu Santo, a que me enseñes a orar. Muéstrame las cosas que me hacen falta saber. Dame la fe que necesito para creer que tú siempre me escucharás y responderás a tu manera y en tu tiempo. Gracias, Señor, porque enviaste a tu Espíritu Santo a fin de que pueda vivir en poder y que me puedas usar de manera poderosa (1 Corintios 1:18). Ayúdame a hacer eso. Necesito tu poder para que me permita vivir de la manera en que quieres que lo haga, de modo que pueda llegar a ser todo para lo que me creaste. Te lo pido en el nombre de Jesús.
  • 16. m SíHBñ W U j i L » AN"I j-:s QUE LLEGARA CONOCER AI SEÑOR, participaba en iodo tipo de prácticas ocultas y religiones oriéntales y de la Nue- va Era. En cada una de estas trataba de encontrar a Dios y descu- brir el propósito de estar viva. Llegué a estar desesperada por encontrar una salida del dolor emocional, el temor, la ansiedad y la depresión que había experimentado casi cada día desde que era niña. Pensaba que debía haber un Dios, y que si podía acer- tarme a Él lo suficiente, quizá pudiera darle significado a mi vida y entonces me sentiría mejor conmigo misma. Por supuesto que esto no pasó porque los dioses que buscaba eran distantes y fríos. Y esto me deprimió aun más porque me criaba una madre que era disiaiue y fría.. También era violenta en lo físico, abusadora de palabras, temible y cruel. Me,encerra- ba en un armario por largos períodos y eso me ponía nun asus- tada y irisie. Más tarde me di cuenta que ella lenía una grave enfermedad menial, y debido a que nunca recibía ninguna ayu- da médica, empeoraba cada vez más a medida que pasaba el
  • 17. I^illip^l^ieíl -<|W«í: .ora Con el tiempo perdoné a mi madre por todas las cosas que sufrí por su culpa, pero seguía teniendo recuerdos muy malos de mi niñez. Siempre ocultaba a los demás esa parte de mi vida, sobre todo cuando era adolescente. A esa edad no era bueno ser diferente, y de seguro no era bueno ser diferente de una manera tan negativa como esa. El dolor qué sentí en la adolescencia llegó a ser como una avalancha que se estrellaba contra mí hasta que parecía como si me fuera a ahogar bajo su peso. La desesperanza, la depresión y la desesperación que sentía se tor- naron tan insoportables que tuve pensamientos constantes de suicidio. Después de cumplir los veinte años y estar ya por mi cuenta, estuve probando todo lo que se me ocurría para salir de mi des- dicha, pero nada daba resultados. Tomé drogas hasta el punto de casi matarme un par de veces por una sobredosis. Bebía alcohol para tratar de adormecer el dolor, pero solo me hacía sentir enferma y confundida. Por último, en el punto más bajó de mi vida, ya tenía 2U años de edad y había hecho todo lo que sabía a fin de encontrar una salida al dolor que sentía a cada momento. Quería morir y estaba planeando una forma de matarme. Fue en ese tiempo que mi amiga Terry vio que no andaba muy bien, y me pidió que fuera con ella a conocer a su pastor. Era cristiana y yo no lo era, y por eso dudé. Temía que tuviera que hablarle sobre mi madre o mis problemas, o revelar las terri- bles cosas que había hecho. No quería que nadie lo supiera. Sin embargo, también estaba desesperada por encontrar una razón para vivir, y por eso fui. El pastor de Terry, el pastor Jack, se reunió con nosotras en un popular restaurante de la ciudad. Comimos y nos sentamos allí por dos horas mientras me hablaba de Jesús. Cuando ¿1 Lo más difícil de la oración es: • Reconocer mis pecados • Orar de corazón • Mantener los ojos cerrados • No ser egoísta • Nada. IEs fácil! [13-15 años de edad)
  • 18. Señor, ayúdame a conocerte mejor pastor Jack hablaba de Jesús, este no se;parecía a los dioses fríosy críticos de los que había estado leyendo en mis libros sobre reli- giones ocultistas y orientales. El pastor Jack me dijo que si reci- bía a Jesús como Salvador, podía comenzar un andar cercano con Dios que cambiaría mi vida para siempre. Me ayudaría a encontrar la paz y la restauración. Me mostraría su propósito para mi vida, y sería mejor que nada de lo que hubiera imaginado jamás. • ;...••• , . El pastor Jack me dio tres libros para leer, Uno era sobre Ja realidad del mal. Mis prácticas ocultistas me habían enseñado que no existía el mal. El segundo libro era sobre el poder del Espíritu Santo. Nunca había conocido esa clase de poder, y esta- ba fascinada que pudiera tener acceso a eso cuando recibiera a Jesús. El tercer libro era el Evangelio de Juan en tamaño pequeño. Hablaba de la vida de Jesús, quién era y lo que enseñó. El pastor jack me pidió que fuera con Terry a su oficina después que leyera los libros, y luego le dijera lo que pensaba de ellos. Me fui a la casa, puse mis planes de suicidio en espera y leí los tres libros en Oro por otros solo unos días. Cuándo regresé con Terry cuando: a la semana siguiente, le dije al pastor • Me lo piden Jack que creía que lo que había leído era . p¡0$ m ^ ^ la verdad, Me preguntó si estaba lista . N e m i t ° ^ para recibir a Jesús como Salvador, y le . gsfá(| e||ferm d Í 'e ^U e S Í - , ^ . , - E t ú J ™ Después que le entregue mi vida al ()3.|5 aj¡os de Señor, pude sentir su Espíritu obrando en mí. Por primera vez en mi vida sentí esperanza, y pude ver que tenía un futuro, No sabía con exactitud cuál era, pero sabía que tenía uno. Y eso fue mucho más de lo que podía concebir antes. También pude ver que había una trama común en todas esas otras prácticas ocultas y religiones orientales en las que antes había tenido un interés superficial. La similitud entre ellos era que los dioses de cada una de esas religiones no tenían poder
  • 19. El poder del joven <gue ora para salvar ni transformar a una persona y su vida. Sin embargo, el Dios de la Biblia sí lo tenía. Él es el único, verdadero y viviente Dios, y cuando recibimos a su Hijo, Jesús, como Salvador, el Espíritu Santo de Dios viene a morar en nosotros (Juan 14:I§-17). Es mediante el poder de su Espíritu que nos transforma de adentro hacia fuera y de manera milagrosa nos cambia a noso- tros, nuestras circunstancias y nuestra vida. También aprendí que se puede conocer al Dios de la Biblia y que Él quiere estar cerca de nosotros. Es por eso que se le llama Emanuel, lo cual significa «Dios con nosotros». Él se acerca a nosotros cuando nos acercamos a Él (Santiago 4:8). T o i t o - l a < n a r w r t f f l i t a a " Me gustaría poder sentarme y conversar contigo en persona sobre tu vida. Si pudiera hacerlo, te diría que si has recibido a Jesús, la respuesta a todo lo que necesitarás algún día en tu vida está dentro de ti. Eso se debe a que el Espíritu Santo de Dios está en ti. Él promete guiarte en tu vida y enseñarte cosas que necesi- tas saber. Pero tienes que entregarle tu vida y ser paciente a fin de dejarle obrar en ti a su manera y en su tiempo. Ser transformado significa ser cambiado de forma perma- nente. No quiere decir que sea un arreglo temporal ni un pequeño cambio. Esto no se refiere a tratar de ser suficiente bueno para lograr que Dios te ame. Dios ya te ama. Él te amó primero. Él solo espera que lo ames. Me refiero a llegar a conocer a Jesús, que es perfecto, y permitir que su perfecto amor te cambie y te ayude a hacer lo bueno. Me refiero a andar cerca de Dios y las grandes cosas que ocurrirán en ti gracias a esto. J «a?j e t xHorj ¡q.mr^y Todos queremos que nos amen, pero nadie será capaz de amarnos jamás como lo puede hacer Dios. Solo Dios puede suplir tus necesidades a cada instante... cuando tienes una relación íntima 18
  • 20. Señor, ayúdame a conocerte mejor con Él. Ninguna persona puede alguna vez conmoverte de manera tan profunda como lo puede»hacer Dios. Nadie puede siquiera conocerte tan bien. Siempre que sientas un vacío den- tro de ti que quieres que lo llenen los más cercanos a ti y estos no lo hagan, recuerda que Dios puso allí ese vacío. Quiere que te acerques a Él para poder llenarlo. Dios quiere que lo quieras, Y cuando te das cuenta que es Él lo que de veras quieres, eso te libera para que entiendas que los anhelos, las soledades o vacíos dentro de ti son una señal de que necesitas acercarte a Dios y pedirle que te llene con más de Él. Pero esta profunda relación con Dios que todos queremos, ya sea que en ese momento sepamos lo que queremos o no, no se da por casualidad. Se tiene que buscar. Tenemos que orar por una relación más profunda con Dios. Tenemos que orar para que nuestro andar con Dios no sea superficial. - o o m a n e r a s ' H e s a b e r s i t u - a n é a r .. i m o a «8 aMpftEliciíli - — 1. Si amas al Señor solopor lo que Élpuede hacerpor ti, tu andar con el Señor es superficial. Si lo amas lo suficiente para pre- guntarle qué puedes hacer tú por Él, tu relación con Dios está profundizando. 2. Si solo oras a Dios cuando las cosas son difíciles o necesitas algo, tu andar con Él es superficial. Si oras a menudo solo porque te encanta estar cerca de Él, tu relación con Dios es cada vez más profunda. 3» Si te enojas con Dios o te desilusionas de Él cuando no hace lo que quieres, tu andar con Él es superficial. Si puedes alabar a Dios y orar a Él sin importar lo que esté pasando en tu vida, tu relación con Dios es cada vez más profunda. 4, Si alabas a Dios solo por lo que Él hace por ti, tu andar con Dios es superficial. Si lo alabas también por lo que es Él, tu relación con Dios es cada vez más profunda.
  • 21. ex yodfcr del w v « ..¡ra 5, Si sientes que tienes que suplicarle a Dios oforzarlo para con- seguir que responda a tus oraciones, tu andar con El es super- ficial. Si crees que Dios quiere responder tus oraciones de acuerdo con su voluntad, tu relación con Dios es cada vez más profunda. : • •.•.,•,• ; T i ^ i n E M j s o l a s c o í V D i o s r Nunca podremos acercamos a Dios y llegar a conocerlo bien si no pasamos tiempo a solas con Él. En esos momentos privados con Dios es que nos renovamos y fortalecemos. És donde podemos ver mejor nuestras vidas desde su perspectiva y descubrir lo que es importante en realidad. Ahí es donde com- prendemos quién es Dios en verdad y todo lo que tiene para nosotros. El mismo Jesús pasó tiempo a solas con Dios. Si alguien pudo haber salido impune al no hacerlo, de seguro habría sido Jesús. ¿Cuánto más importante debe ser para nosotros? Sé que encontrar tiempo a solas para orar a Dios puede ser difícil, Pero si estás dispuesto a hacerlo una prioridad, verás res- puestas a tus oraciones como nunca antes. Recuerda, si no has estado orando mucho, no puedes esperar que las cosas cambien de la noche a la mañana. Cuando alguien trata de lograr que un enorme transatlántico dé la vuelta y se encamine en una dirección diferente, no ocurre en el momento que comienza a timonear. Es más, apenas ven algún cambio al principio. La oración puede darle la vuelta a tú' tódá, pero no siempre sucede en el momento que dices las pri- meras palabras. Si no has estado orando mucho o nada, no puedes esperar que las cosas cambien de inmediato. Pug^e tomar un tiempo de oración continua antes de que ve^s que comienza a cambiar el escenario 20 ; • i Pienso en ; Dios como: • Alguien que me escucha • A l g u i e n que me ama • Alguien con el que puedo hablar • Alguien que siempre es bueno • Alguien que me guía (13-15 años de edad)
  • 22. Señor, ayúdame a conocerte mejor de tu vida. Esto es normal, así que no te rindas. Pronto te dirigi- rás a toda velocidad en una nueva dirección. Muy a menudo la gente se rinde antes de ver las respuestas a sus oraciones. Solo recuerda que este no es un corto viaje alrededor del puerto. Es un viaje de toda la vida para llegar a tu destino. Rendirse no es una opción. - ' ¿Alguna vez has tenido problemas con recordar nombres? Yo sí. En especial cuando conozco a un montón de personas a la vez. Es más fácil recordar los rostros que los nombres. Con Dios, la situación es diferente. El tiene un solo rostro, pero muchos, muchísimos, nombres. Es que hay tanto que conocer de Dios que necesitamos todos esos nombres para que nos ayuden a recordar. En otras palabras, si no conocemos todos sus nombres, quizá no comprendamos cabalmente cada aspecto de lo que es Él. A Dios se le llama por muchos nombres diferentes en la Biblia, pero a veces nos cuesta trabajo recordar hasta algunos de los básicos. Quizá olvidemos uno cuando más necesitamos recordarlo. Por ejemplo, es probable que pensemos en Dios como nuestro Proveedor, pero que olvidemos que es también nuestro Protector. O tal vez lo recordemos como nuestro Padre celestial, pero que olvide- mos que es también nuestro Amigo. Tal vez recordemos que es nuestro Salvador, pero que olvidemos que es también nuestro Libertador. Cada uno de los nombres de Dios en la Biblia representa una manera en que Dios quiere que confiemos en Él: ¿Confías en que Él es tu Fortaleza? (Salmo RV-60) ¿Es tu Paz (Efesios '. *)? ¿Es el Levantador de tu cabeza cuando estás abatido (Salmo 3:3, KV-60)? • • • : •• Oré y Dios respondió O r é cuando me enferme' y Dios me sano'. 113 años de edad)
  • 23. SI poder del joven, que ora ¿Es Él tu Sabiduría (1 Corintios i;,24)? ¿Es tu Consejero (Salmo )? Hay gran poder en cada uno de los nombres de Dios. Y cuando los mencionas confe y entendimiento, llegas a conocer mejor a Dios. Mientras mejor lo conozcas, másfantástica será tu vida. Por ejemplo, el nombre de Dios siempre es un lugar seguro al cual correr cada vez que necesites ayuda. «Torre inexpugnable es el nombre del SEÑOR; a ella corren los justos y se ponen a salvo» (Proverbios 18:10). Si estás enfermo, corre a tu Sanador. Si tienes necesidad de algo, corre a tu Proveedor. Si tienes miedo, corre a tu Refugio. Al pronunciar uno de sus nombres, le invitas a que sea eso para ti. A menudo hay mucho que no tenemos en la vida solo porque no buscamos a Dios como la respuesta a esa necesidad. En la siguiente lista de nombres de Dios, solo incluí 20. Sin embargo, hay cientos más en su Palabra, la Biblia. A medida que analices cada uno de esos nombres, dale gracias a Dios por ser eso para ti. Cuando lo hagas, te asombrarás de cómo crecerá tu fe y cuán más cerca te sentirás de Dios. Saber lo mucho que ha hecho por ti te ayudará a amarlo más. Veinte nombres «te Dios para recordar 1. Dios es mi Sanador (Salmo 103:3). 2. Dios es mi Redentor (Isaías 59:20). 3. Dios es mi Libertador (Salmo 705). 4. Dios es mi Fortaleza (Salmo 43:2). 5. Dios es mi Refugio (Joel 3:1*). €. Dios es mi Amigo (Juan 15:15). 7. Dios es mi Restaurador (Salmo 23:3,1.BLA). Mi oración a Dios Señor, ayüdame a recordar que me vuelva mme»o a V» cuando estoy desanimado. [$ años do e<M)
  • 24. Señor, ayúdame a conocert e mejor 8. Dios es mi Padre (Isaías £6). •> 9. Dios es mi Amor (1 Juan 4:M). i' 10. Dios es mi Refugio (Salmo 32".?). 11. Dios es mi Lugar de Descanso (Jeremías 50:6, LBLA). 12. Dios es mi Verdad (Juan lfcl3). 13. Dios es mi Vida Eterna (1 Juan 5:20). 14. Dios es mi Proveedor (Génesis 22:14). 15. Dios es mi Señor de Paz (2 Tesalonicenses 3:1$). 16. Dios es mi Escudo (Salmo 144:2). 17. Dios es mi Ayudador (Hebreos 13:6). 18. Dios es mi Consejero (Isaías 9:6). 19. Dios es mi Esperanza (Salmo 71:5). 20. Dios es mi Consolación (Romanos 15:5, LBD). Lee estos nombres a menudo, y cada vez que lo hagas, escoge el nombre que corresponda a lo que necesitas que Dios sea en ese día y luego dale gracias por ser eso para ti. Y siempre que leas la Biblia y te encuentres un nombre para Dios, subráyalo, anó- talo al margen o añádelo a esta lista. Te recordará otro aspecto de lo que es Dios para ti. Señor, quiero tener un andar más íntimo contigo. Me acerco a ti ahora mismo y te doy gracia porque mientras lo hago, tú te acercas más a mí como lo prometiste en tu Palabra (Santiago 4:8). Quiero una relación más profunda contigo. Quiero cono- certe en todas las maneras que puedes ser conocido. Estoy dispuesto a todo lo que quieras hacer en mí y en mi vida. No quiero limitarte por descuidar conocerte en cada manera posible. Enséñame lo que necesito aprender a fin de conocerte mejor. No quiero ser de las personas que «siempre están apren- diendo, pero nunca logran conocer la verdad» (2 Timoteo 3:7). Quiero conocer la verdad sobre quién eres tú. Hoy necesito sobre todo conocerte como mi (di un nombre del Señor que más necesites que El sea hoy para ti). 23
  • 25. El poífee «leí joven, ^ue ora . Ayúdame a confiar en que tú siempre serás eso para mí. Ayúdame a conocerte en esa manera cada vez más todos los días. Te lo pido en el nombre de Jesús. , Í ',!£}£jr ' , . : , • ** X . A» .; ' Acerqúense a Dios, y él se acercará a ustedes. ; ' S A N T I A G O 4 : 8 Hasta ahora ustedes no han pedido nada en mi n,pmbre. Háganlo, y Dios les dará lo que pidan; así serán completamente felices. Juan TLÁ Para el Padre es un placer darles el reino. ! • • • • • > LUCAS, 1 2 : 3 2 , LBD
  • 26. ^ "•V * r t .*1f' » los nombres de Dios que más significan ç y i'% s nombres de Dios que representan las maneras en que quiero conocer mejor a Dios son: -Escribe una oración diciéndole a Dios cómo te sientes res- pecto a Él y por qué quieres conocerlo mejor. i' %ù, t
  • 27. n
  • 28. mm + n o " l o » AXTB DL". QIE VAVAMQS l* POCO MÁS LEJOS, pongamos .ilgo en orden: Todo el mundo comete errores. Nadie es perfecto. Todos somos capaces de hacer algo malo. ¡Vaya! Es sabido. Dije csro porque no quiero que mires a otras personas pienses que están muy bien y tú no. Cuando haces eso, pones expectativas demasiado alias en ti mismo. Esic libro no es acerca de tratar de cumplir cierta norma, I'.s acerca de dejar que Dios se convierta en tu norma. No es acerca de tratar de ser perfecto. Hs acerca de rendirle tu vicia a Dios dejar que FJ te perfeccione. No es acerca de encontrar formas de evitar el juicio de Dios y luego semine fracasado si no lo haces todo bien con exactitud, t s acerca de buscar la manera de expe- rimental" el amor la gracia de Dios. Ls acerca de ser alguien que 110 eres. Es acerca de llegar a ser lo que eres en realidad. Pero a íin de ver hechas realidad esas cosas, tienes que ser del todo sincero contigo mismo y con Dios aceren de lo que eres en el momento.
  • 29. SI poder del joven, que ora Como joven, sabes que tu vida apenas comienza, Y quieres vivir una vida de éxito. Quieres saber cómo resulta mejor la vida para vivir de esa manera y tener la mejor vida posible. Sin embargo, debido a que todo el mundo comete errores, esto significa que tú quizá ya has cometido errores y que los cometerás de nuevo en el futuro. A menudo, cuando hacemos cosas malas, sabemos lo que estamos haciendo. Sabe- mos si hemos mentido o desobedecido una ley. Pero algunas veces cometemos errores sin saberlo. No nos damos cuenta de que lo que hacemos es malo a los ojos de Dios porque no sabemos suficiente de los caminos de Dios. (En el capítulo 4 verás más al respecto de esto). Ya sea que sepa- mos o no que lo que estamos haciendo es malo, sigue siendo pecado. El pecado es un antiguo término de tiro con arco que significa no dar en el blanco. Si no damos en el blanco en la vida, no alcanzamos la marca que Dios tiene para nosotros. Y entonces no podemos alcanzar todas las cosas bue- nas que Él ha planeado para nuestro futuro. El pecado nos destruye. Quizá pensemos que podemos no vivir como Dios quiere y quedar sin castigo, pero el pecado siempre trae destrucción a la vida. Lo bueno es que Dios nos ama tanto que nos ha proporcionado la manera de escapar de la destrucción que trae el pecado. Se llama confesión. La confesión es algo que puedes hacer en cualquier momento que vayas a Dios. Es contarle a Dios loque hiciste y decirle que lo sientes. No le estarás contando algo que ya Él no sepa. ¡Ya lo sabe! Él quiere saber que tú lo sabes. Y que tienes un corazón dispuesto a cambiar de actitud. Tener un cambio de actitudes lo que se llama arrepentimiento. A fin de hacer estas dos cosas —confesión y arrepentimiento—, Lo más difícil de la oración es: • Cuando no veo una respuesta Inmediata • Cuando no sí por qué voy a orar . Cuando he hecho algo mato • Cuando oourre algo trágico • Cuando Dios me muestra algo sobre mi Vida (16-19 años de edad)
  • 30. Señor, ayúdame a liberarme ée los érr<vr*>s de i pasado tienes que analizar bien tu vida. Tienes que ser muy valiente y decir: «Señor, muéstrame lo que está- en mi mente, corazón y vida que no debe estar allí. Muéstrame cómo no estoy dando en el blanco. Ayúdame a ver la verdad sobre mí mismo. Ayúdame a cambiar». • • Hace falta valor para decir una oración como esa, Algunas veces no queremos que Dios ponga al descubierto nuestro cora- zón por miedo a lo que pueda revelar de su interior. Sin embargo, podemos pedirle el valor para hacerlo. A fín de recibir todo lo que Dios tiene para ti, debes estar dispuesto a tener un historial sin mancha con El. Tienes que invitarlo a dejar al descubierto cualquier pecado en tu vida y permitirle que cree un corazón limpio en ti. Dios no quiere que andes por la vida sintiéndote culpable. Quiere que saques el pecado a la superficie ante Él a fin de que te puedas librar de ese pecado. Llevar conti- go la culpa de errores del pasado limitará lo que Dios quiere hacer en tu vida. Y te hará sentirte mal contigo mismo. Los sentimientos de culpa no son agradables. Y uno no se siente bien. No dejes que sean parte de tu vida. No vale la pena. Si quieres ser libre de culpa de todos los errores del pasado, disponte a hacer estas dos cosas: ]. Confiesa a Dios cualquier pecado de pensamiento o acción que sepas que cometiste o que Él te muestre cuando se lo pides. Arrepentirte de lo que acabas de confesar. Oré y Dios , respondió .. Estaba saliendo con un chico a escondidas de mis padres. Le pedí a Dios que me ayudara a tomar buenas decisiones;. E l chico vino a verme y dijo que todo había terminado. No estaba herida ni nada por el estilo. Soló sabía que Dios lo había hecho. V ahora he renunciado a salir con muchachos. (13 años de edad} - •• - ; • " ' " ' r? No creas que porque no eres un asesino en serie ni nunca has robado un banco que no tienes algún pecado que confesar. 23
  • 31. El potter del joven que ora No creas que porque has andado con el Señor por varios años y vas a la iglesia todos los domingos que no tienes nada de qué arrepentirte. El pecado no tiene que ser manifiesto ni obvio para ser pecado. Por ejemplo, ¿alguna vez has dudado que Dios pueda hacer lo que promete en su Palabra? La duda es pecado. ¿Alguna vez le has contado algo a alguien sobre otra persona que no es necesariamente un elogio? El chisme es pecado. ¿Alguna vez evitaste a alguien porque pensabas que podía pedirte algo que tú no querías dar? El egoísmo es pecado. Por mucho que te esfuerces, no podrás siem- pre evitar el pecado. Es por eso que la con- fesión es crucial. Cuando no confesamos nuestros pecados, faltas o errores, estos nos separan de Dios. Y no obtenemos respues- tas a nuestras oraciones. La Biblia dice: «Son las iniquidades de ustedes las que los separan de su Dios. Son estos pecados los que lo llevan a ocultar su rostro para no escuchar» (Isaías 5 9 : 2 ) . Es un pensamiento temible. Imagina a Dios poniéndose los dedos en los oídos y diciendo: «La, la, la, la, la, la» una y otra vez y bien alto cuando tú oras. Cuando no le confesamos nuestros pecados, terminamos tratando de ocultarnos de Dios, tal y como lo hicieron Adán y Eva en el huerto del Edén. Sentimos como que no podemos darle la cara. Sin embargo, el problema con intentar ocultarnos de Dios es que es imposible. La Biblia dice que Dios sabe todo lo que hacemos. Incluso las cosas que decimos y pensamos en secreto. «No hay nada encubierto que no llegue a revelarse, ni nada escondido que no llegue a conocerse. Así que todo lo que ustedes han dicho en la oscuridad se dará a conocer a plena luz, y lo que han susurrado a puerta cerrada se proclamará desde las azoteas» (Lucas 12:2-3). Mi oración a Dios Señor, no sé muy bien cómo orar, pero necesito fortaleza para resistir la tentación. (18 años de edad)
  • 32. Señor, ayúdame a liberarme ée los érr<vr*>s de i pasado La Biblia también dice: «Ninguna cosa creada escapa a la vista de Dios. Todo está al descubierto, expuesto a los ojos de aquel a quien hemos de rendir cuentas» (Hebreos 4:13). Si todos nosotros tendremos que rendir cuentas de nuestras acciones y pensamientos, mientras más rápido estemos a bien con Dios, mejor. Es más, mientras más rápido lidiemos con los pecados que podemos ver, más rápido Dios puede revelarnos los que no podemos ver. Y solo Dios sabe cuánto de eso hay en cada uno de nosotros. Siempre hay una consecuencia del pecado. El rey David lo describió mejor cuando escribió de su propia confesión de pecado: «Por causa de tu indignación no hay nada sano en mi cuerpo; por causa de mi pecado mis huesos no hallan descanso. Mis maldades me abruman, son una carga demasiado pesada» (Sal- mo 38:3-4). ¿Alguna vez te has sentido de esa manera por algo que has hecho? Yo sí. Sentía como una pesadez en corazón y en la cabeza que me quitaba toda mi energía y mi vida. Sin duda alguna, el pecado no me hace sentir bien conmigo misma. Recuerdo que una vez tuve un resentimiento hacia una persona porque las palabras que había dicho me habían herido de manera pro- funda. Mientras me aferraba a la herida y el resentimiento, me sentía físicamente enferma. No quería confesar esos senti- mientos porque pensaba que estaban jus- tificados y que la otra persona era la que estaba equivocada. Sin embargo, al final me di cuenta que todo pecado es pecado, así que le confesé mi resentimiento a Dios. En el momento que hice eso, la sensación de estar enfermo abandonó mi cuerpo. Nada es más pesado que el pecado. No nos damos cuenta de cuán pesado es hasta el día en que sentimos que su " e o en la oración porque: • A n t e s he tenido respues- tas a mis oraciones • He visto que cambia «na situación • He experimentado milagros • M e h a ayudado a través de los tiempos difíciles • Hace que lo imposible parezca posible (16-19 años de edad) 23
  • 33. El poUer ele! joven <gue ora Pienso en Dios como: • Un poderoso Gobernador que controla todas las situaciones • Un Juez que decide si soy digno de tener respuesta a mi oración • Un Oyente con el que puedo hablar y en el que puedo confiar • El único que me conoce de veras • Un Padre que me ama de manera incondicional (16-19 afios de ^dad) peso nos aplasta el alma. No damos cuenta de cuán destructivo es hasta que nos hacemos pedazos contra el muro que se ha levantado entre nosotros y Dios debido a esto. Por eso es mejor confesar cada pecado en cuanto lo detectemos, para poder tener nuestros cora- zones limpios de inmediato. La confesión es más que una simple dis- culpa. Cualquiera puede hacer esb. Todos conocemos personas que son buenas para disculparse. Son buenas en esto porque lo practican mucho. Dicen «Lo siento» muchas veces, pero nunca cambian sus costumbres. Y sus confesiones no significan nada. La verdadera confesión significa reconocer ante Dios con lujo de detalles lo que has hecho y luego arrepentirte por completo. Una cosa es reconocer que has hecho algo malo; otra es estar tan triste por lo que has hecho que estás decidido a no hacerlo jamás de nuevo. Eso es arrepentimiento. La confesión significa reconocer que hemos actuado mal y admitir nuestro pecado. El arrepentimiento significa que lamen- tamos nuestro pecado a tal punto de dolor, que nos volvemos y nos alejamos del pecado. El arrepentimiento por algo no necesariamente significa que nunca haremos eso de nuevo. Significa que no intentaremos hacerlo de nuevo. Por lo tanto, si descubres que has confesado el mismo pecado otra vez después de una reciente confesión y arrepentimiento, hazlo. No dejes que el enemigo te cargue con la culpa y te venga encima diciéndote que has fallado. Confiesa y arrepiéntete cuantas veces sea necesario para quitártelo de encima y ver la victoria en la batalla sobre este problema. No
  • 34. Señor, ayúdame a liberarme ée los érr<vr*>s de i pasado creas que Dios no te perdona otra vez por la misma cosa que acabas de confesar la semana pasada. Dios te perdona cada vez que le confiesas tu pecado y te arrepientes por completo. Pídele a Dios cada día que te muestre dónde tu corazón no es limpio y recto ante Él. No dejes1 que nada te separe de todo lo que Él tiene para ti. E M C ! » á© : ^Wftto - - - : * ; ; " Imagina que participas en una carrera y estás tratando de llegar a la meta y ganar el premio. Sin embargo, por mucho que te esfuerzas, nunca logras la línea de meta debido a qué hay una pesada carga atada alrededor de tus piernas. Luchas por arras- trarla, pero te hace ir despacio y te agotas tanto que quieres darte por vencido. No se te ocurre que es algo que no tienes que car- gar, y que no puedes terminar la carrera mientrás no te liberes de ella. Así sucede con los recuerdos malos de pasados fracasos que llevamos a cuesta. Muchos jóvenes son duros con ellos mismos por los fracasos del pasado. O lo que perciben como fracasos del pasado. Pueden llegar a estar tan desalentados por eso que sienten deseos de darse por vencidos y salir de una vez de la carrera. Si alguna vez has sentido algo similar, recuerda que Dios quiere eliminar esos recuerdos malos a fin de que no tengas que cargarlos de nuevo. (Si es un recuerdo de algo que te hizo alguien, hablaremos más de eso en el capítulo siguiente). Lo mismo si es algo que pasó hace mucho tiempo o tan recien- temente como ayer, el pasado puede impedirte avanzar hacia todo lo que Dios tiene para ti. Es por eso que quiere liberarte de eso. Y no solo eso, sino que quiere redimir y restaurar lo que se ha perdido o destruido en tu pasado y hacer que cuente para algo importante en tu vida ahora. Cuando recibes a Jesús, te conviertes en una nueva creación. Él hace nuevas todas las cosas en tu vida. Dios quiere que 23
  • 35. El poüer He! joven .«pie ora olvides lo que queda atrás y te esfuerces por alcanzar lo que está delante (Filipenses 3:13). El te ayudará a hacerlo. Uno de los grandes misterios del Señor es cómo puede tomar los horribles, trágicos, dolorosos, devastadores y penosos recuerdos y expe- riencias de nuestras vidas y no solo sanarlos, sino usarlos para bien. No es que Él haga que no puedas recordarlos, sino que te sanará tan a fondo de sus efectos que ya no pensarás en ellos con dolor. Te dará una nueva vida que disfrutarás tanto que no desearás regresar otra vez en tu mente a la antigua. Dios no quiere borrar por completo los recuerdos del pasado porque quiere usar esa parte de tu vida para la obra que te ha lla- mado a hacer, Él puede tomar lo peor de tu pasado y hacer que sea la mayor bendición en el futuro. Te usará para dar esperanza a otras personas que han atravesado una situación similar. Él quiere que leas tu pasado como un libro de historia, no como una profecía de tu futuro. Dile a Dios que quieres permanecer en la carrera. Dile que quieres correr de tal manera que logres obtener el premio (1 Corintios 9:24). *M >» Vi-' |ir | í„ .„ , Señor, ya sé que conoces los secretos de mi corazón (Salmo 44:21). Revélame algo que no vea. Perdóname por los pensamientos que he tenido, o las palabras que he dicho, o las cosas que he hecho que no te son agradables. Especí- ficamente te confieso (nombra cualquier cosa que hayas hecho que sabes que no le agrada a Dios). Lo confieso como pecado y me arrepiento. Ayúdame a hacer los cambios que sean necesarios. Te ruego que me liberes de mi pasado. Ayúdame a dejar cualquier recuerdo de mi pasado que me impida avanzar hacia todo lo que tienes para mí. Específicamente, te pido que me liberes de (nombra cualquier recuerdo doloroso o
  • 36. Señor, ayúdame a liberarme de los e crores del pasado malo que tengas). Todo lo que me han hecho, o lo que yo he hecho, que me cause dolor, lo rindo a ti. Gracias porque tú haces nuevas todas las cosas, y me haces nuevo a mí en todo (Apocalipsis 2" --)• Libérame del pasado a fin de que pueda marcharme de él y entrar en el futuro que tienes para mí. Te lo pido en el nombre de Jesús. • - P O D E R • Si confesamos nuestros pecados, Dios, que es fiel y justo, nos los perdonará y nos limpiará de toda maldad. 1 JUAN 1 : 9 Amados, si nuestro corazón no nos reprende, confianza tenemos en Dios; y cualquiera cosa que pidiéremos la recibiremos de él, porque guar- damos sus mandamientos, y hacemos las cosas que son agradables delante de él. 1 JUAN 3:21-22, R V - 6 0 Si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas. 2 C O R I N T I O S 5 : 1 7 , R V - 6 0 35
  • 37. ^ „ . i í ímejores razones para confesar tus pecados a Dios y arre- pentirte? O . ¿Gómo te sientes después que confiesas tus pecados a Dios y te arrepientes? -Escribe una oración mencionándole a Dios cualquier momen- to en que, sentiste que te equivocaste en tu vida. Dile que quieres ser libre del tormento de cualquier error del pasado. Si te resuleas difícil hablar con Dios sobre estas cosas, pídele que te ayude a comunicarte con Él.
  • 38. j m AUN CUANDO MI MADRE ERA ABUSIVA durante ral crecimiento, mi padre no lo era. Era amable. Cuando me convertí en cristia- na, perdonar a mi madre era lo lógico, y eso es lo que hice por- que quería ser libre del pasado. No me di cuenta hasta años más rarde que ella no era la única a la que tenía que perdonar. Un día estaba conversando con una amiga que era una cre- veiue muv consagrada y le dije que me parecía que mi vida 110 iba a ninguna parre y que me sentía muy Irusrracla por eso. Me comenió que pensaba que era porque necesitaba perdonar a mi papá. Le respondí que estaba equivocada en cuanto a eso porque mi papá era el padre luicrio. •Pregúntaselo a Dios», me dijo. Más tarde en ese día le piegunté a Dios: «Señor, ¿hay algo que 110 le he perdonado a mi papá?». Esperaba que Dios me asegurara que no tenía nada tic eso en mi cora/ón. Sin embargo, de buenas a primeras me di cuenta que en lo profundo sentía que mi papá nunca hizo por mí lo que tenía que hacer. Nunca me rescató de la locura de mi madre.
  • 39. El poder dei joven que ora Nunca abrió el armario a fin de que pudiera salir. No me daba cuenta de lo mucho que lo culpaba por permitir que mi madre, quien sabía que tenía una enfermedad mental grave, me tratara con tal crueldad. Cuando perdoné a mi papá ese día, al final sentí una sensación de paz como nunca antes. Y después de eso hubo un verdadero progreso en mi vida. Podía sentir que mi vida se movía en una buena dirección. Podía sentir que Dios me guiaba más que nunca. Cuando no perdonamos, esto nos impide avanzar en nuestras vidas. Casi siempre sabemos cuando no hemos perdonado a alguien. Lo sentimos en el corazón. No queremos perdonar a esa persona por- que nos hizo mucho daño y queremos que lo pague de alguna manera. Y eso termina en hacernos desdichados. Si te das cuenta de que no has perdo- nado a alguien por algo, confiésalo a Dios. Y recuerda queperdonar a otro no le da la razón, pero te libera a ti. En otras palabras, cuando perdonas a una persona, no estás jus- tificando lo que hizo. No estás diciendo que lo que hicieron no fue malo ni dañino. Estás diciendo que quieres olvidarlo y seguir adelante con tu vida. Si no lo haces, terminarás como yo, atascado y sintiendo que no vas a ninguna parte. Algunas veces podemos estar guardándole rencor a alguien sin siquiera darnos cuenta. Pensamos que estamos perdonando, pero no es así en realidad. A fin de asegurarte de que no te suceda, necesitas hacer lo mismo que yo y pedirle a Dios que te muestre la verdad acerca de ti mismo. Dile: «Señor, muéstrame si hay alguien a quien no he perdonado». Entonces, cuando te venga a la mente una persona que te ha dicho algo malo o te ha hecho algún mal, confiésalo al Señor y pídele que te ayude a liberarte de eso. Te sentirás muy bien cuando te quites esa pesada carga de falta de perdón de tus hombros. Oré y Dio® respondió Mi relación con mi madre estaba al borde de una crisis, así que oré y ahora es fabulosa. (16 años de edad) 38
  • 40. Señor» ayúdame a perdón»! - otros Sé que la palabra «odio» es muy füerte y que detestamos usar la palabra «odio» a la ligera. Y ciertamente detestamos pensar que quizá sintamos odio por otra persona. Sin embargo, eso no es perdonar, es la raíz del odio. Cuando abrigamos pensamien- tos de falta de perdón, dirigimos el odio a nuestro interior. Y eso puede enfermarnos. Sin lugar a dudas, nos hace poco atractivos para otros. Jesús tenía opiniones tan contunden- tes acerca de esto que dijo: «Todo el que odia a su hermano es un asesino, y ustedes saben que en ningún asesino permanece la vida eterna» (1 Juan '^-lü). También dijo: «Cuando estén orando, si tienen algo con- tra alguien, perdónenlo, para que también su Padre que está en el cielo les perdone Lo más difícil de la oración es: • C u a n d o me parece que mis oraciones no pasan del techo * Cuando no puedo escuchar a Dios a ustedes sus pecados» (Marcos X l ' i s Ahora, aclaremos bien esto. Jesús está diciendo que si no perdonamos, se nos considera asesinos, sin esperanza eterna alguna, que no podemos esperar que Dios nos perdone hasta que hayamos per- donado a otros. Yo diría que si tenemos que decidir entre perdonar y no perdo- nar, el perdón parece la mejor decisión. Cuando decidimos no perdonar, terminamos andando en tinieblas (1 Juan 2S 11, RV-60). No podemos ver con claridad y por eso tropezamos en confusión. Esto descarría nuestros juicios y cometemos errores. Llegamos a debilitarnos, enfermarnos y amar- garnos. Otras personas notan todo esto porque la falta de perdón se manifiesta en el rostro, en las palabras y en las acciones. Lo ven incluso si no logran identificar con exactitud lo que es, y no se sienten cómodos a nuestro alrededor. mi corazón * Cuando no sé cómo orar por algo • Cuando oro en voz alta delante de otros • Cuando no me parece que me conecto con Dios (13.-15 años de edsd)
  • 41. ;¿'> M&er ¿el ¿ove!» ora Es muy fácil no perdonar a nuestros familiares. Eso se debe a que están más con nosotros, nos conocen mejor y pueden herirnos de manera más profunda. Pero por esas mismas razones, la falta de perdón hacia uno de ellos traerá la mayor devastación a nues- tras vidas. Es por eso que el perdón debe comenzar en el hogar. Ante todo, es muy importante asegurarte que has perdonado a tu mamá y a tu papá. La Biblia es clara como el agua en esto. El primero de los Diez Mandamientos dice: «Honra a tu padre y a tu madre, para que disfrutes de una larga vida en la tierra que te da el SEÑOR tu Dios» (Éxodo i No honrar a tu padre y a tu madre te hará un desdichado y acor- tará tu vida. Y no los puedes honrar por completo si no los has perdonado. Esto es cierto no importa cuál sea la situación de tu familia. Es cierto ya sea que tengas padres biológicos o padres adopti- vos. Si uno de tus padres, o ambos, murie- ron, se separaron o te abandonaron, nece- sitas perdonarlos de manera especial por haberlo hecho. Conozco una muchacha que ha perdonado a su mamá y su papá por divorciarse. Conozco a otra que ha perdonado a su madre porque esta viajaba muchísimo por su tra- bajo y la dejaba con su abuela. La hija sabía que su madre la amaba, pero de todos modos tenía que perdonarla por esos tiempos en que se sentía abandonada por la ausencia de su madre. Conozco a un muchacho que tuvo que perdonar a su papá por abandonar a su mamá y sus hermanos y no regresar. Se sentía abandonado y pensaba que su padre no lo amaba lo suficiente para quedarse. Cuando el padre trató más tarde de reconciliarse con su hijo, este no quería tener nada que ver con su papá. Car- gaba esa herida y no quería curársela. No fue hasta años después Mi oración a Dios Señor, esta es la primera vez que te pido ayuda. Caí en una tentación y necesito alguien en quien confiar. Si no tengo tu ayuda, sé que caeré de nuevo y. no quiero caer. Te ruego que me ayudes a ser fuerte hoy. (17 años de edad)
  • 42. Señor, ayüéajfte a perAoáír a otros que el hijo pudo perdonar al papá, y hoy están muy unidos. Pero se malgastaron muchos años por cargar la falta del perdón. Conozco a otro muchacho que necesitaba perdonar a su madre las palabras duras y de crítica que le decía casi todos los días. Sin embargo, nunca la perdonó y fue desdichado toda su vida por eso. Mi mamá también me hablaba con crueldad. A menudo me decía que yo era. una fracasada despreciable y que nunca llegaría a nada. No fue hasta que la perdoné por todas esas palabras que pude dejar de pensar que era la fracasada que predijo ella y avanzar al éxito que tenía Dios para mí. Cuando tomé la decisión de perdonar a mi madre, lo hice porque quería obedecer a Dios. Sin embargo, perdonarla una vez no significaba que nunca tendría que preo- cuparme de perdonarla de nuevo. Había una capa tras otra de falta de perdón que había construido en mí durante años, y descu- brí que tenía que perdonarla cada vez que un mal recuerdo de lo que me hizo o dijo me venía a la mente. A la larga, llegué a ser libre de todo. Solo porque confieses un día que no has perdonado a alguien, no significa que no tengas falta de per- dón en ti al día siguiente por otra cosa. Es por eso que el perdón es una decisión que debes tomar todos los días. Decides perdo- nar ya sea que tengas deseos o no. Si esperas que te lleguen pri- mero emociones positivas hacia esa persona, puedes quedarte esperando toda la vida. Tu responsabilidad es confesarle a Dios cualquier falta de perdón y pedirle que te ayude a perdonar por completo y a seguir adelante con tu vida. arma ^i^mt^ps^ «¿n^^ < •• v . • • • v y u c ^ e s p e / d o n a r El perdón nunca es fácil, pero a veces el perdón puede parecer imposible debido al devastador dolor que has sufrido. Si piensas Mis principales motivos de oración son: • Pedirle perdón a Dios • A s u n t o s políticos • Que Dios bendiga a mi escuela • Mis problemas diarios • Mis relaciones (13-tS años de
  • 43. poder del joven «fue ora en alguien al que te es difícil perdonar, pídele a Dios que te ayude. Si alguien te avergonzó, rechazó, fue rudo contigo o dijo algo malo de ti en tu cara o a tus espaldas, pídele a Dios que te dé un cora- zón perdonador hacia esa persona. Lo hará aun cuando parezca imposible. En realidad, el perdón es la mejor venganza porque no solo te libera de la persona que perdonas, sino que te libera para avanzar hacia todas las buenas cosas que Dios tiene para ti. Recuerda que perdonar a alguien no depende de que esa persona reconozca su culpabilidad y pida disculpas. Si fuera así, la mayoría de nosotros nunca podría perdonar a nadie. Perdo- namos no importa lo que la otra persona haga. Algunas veces tenemos que perdonarnos a nosotros mismos por las cosas que hemos hecho. Algunas veces necesitamos per- donar a Dios cuando han pasado ciertas cosas y le hemos echado la culpa a Él. Pídele a Dios que te muestre si tienes alguna de estas; cosas en tu corazón. No permitas que ningún tipo de falta de perdón limite lo que Dios quiere hacer en tu vida. L o u « » ñ ¿ f i i i i f i c f i a a £ i á - — — - ¡Cuatrocientas noventa veces! Esas son las veces que tenemos que perdonar a una persona. Pedro le preguntó a Jesús: «Señor, ¿cuántas veces perdonaré a mi hermano que peque contra mí? ¿Hasta siete?». Jesús le respondió: «No te digo hasta siete, sino aun hasta setenta veces siete» (Mateo 1 8 : 2 1 - 2 2 , RV-60). Jesús quiere que perdones tantas veces como sea necesario. Jesús narró una historia de un hombre al que le habían per- donado una deuda inmensa que tenía con su amo. Sin embargo, aquel hombre se dio la vuelta enseguida y mandó a su propio siervo pobre a la cárcel por no pagarle una deuda pequeña. Cuando el amo se enteró de esto, dijo: «Te perdoné toda aquella deuda porque me lo suplicaste-. ¿No debías tú también haberte compadecido de tu compañero, así como yo me compadecí de ti?». 42
  • 44. Señor» ayúdame a perdón* a otros El amo estaba tan enojado que e p a r e c e mandó que torturaran al hombre hasta o r o I n á s cuando: que pagara todo lo que debía. " Lucho contra una Jesús dijo: «Así también mi Padre situación difícil celestial los tratará a ustedes, a menos " ft o yo tenemos que cada uno perdone de corazón a problemas de salud su hermano» (Mateo 18:35 ). Esto es ' N e m i t o sabiduría muy serio. A los que hemos aceptado • E s t o y triste o llorando aJesús se nos ha perdonado una deuda * a p o n g o de tranquilidad inmensa. No tenemos derecho a no ^ silencio perdonar a otros. Dios dice: «Sean <iÍM <1« e<M) bondadosos y compasivos unos con otros, y perdónense mutuamente, así como Dios los perdonó a ustedes en Cristo» (Efesios 4 : 3 2 ) . Si no perdonamos, también nuestro odio nos encarcelará y nuestra amargura nos torturará. Todo lo que hacemos en la vida que dura para siempre gira en torno a dos cosas: amar a Dios y amar a otros. Es muchísimo más fácil amar a Dios que amar a otros, pero Dios lo ve del mismo modo. Una de las cosas más lindas que podemos hacer es perdo- nar. Es difícil perdonar a los que nos han herido, ofendido o maltratado. Sin embargo, Dios quiere que amemos incluso a nuestros enemigos. Y en el proceso de hacer eso, nos perfecciona (Mateo 5:48). Cuando perdonas a otros, le muestras a Dios lo mucho que lo amas. Te abre el corazón y el intelecto y te libera para experi- mentar el amor de Dios en una mayor medida. Te libera para avanzar a todo lo que Dios tiene para ti. Señor, ayúdame a comprender lo mucho que me has perdonado a fin de que no vacile en perdonar a otros. Ayúdame a perdonarme por las veces que he fallado. Y si te he culpado por las cosas que he pasado en mi vida, muéstramelo para que pueda reconocerlo ante ti. 43
  • 45. E& pat®??-.^el- joven,.^«e ora Ayúdame a orar por los que me han herido de modo que mi corazón se suavice hacia ellos. Y si alguna persona no me ha perdonado, muéstrame lo que puedo hacer para ayudar a resolver este asunto entre nosotros. Te ruego que suavices su corazón para que me perdone. Señor, muéstrame si no he perdonado a mi madre o a mi pádre por algo que hicieron o no hicieron. Ayúdame a perdonar a cualquier miembro de mi familia o amigo cada vez que necesite hacerlo. No quiero que nada se interponga entre tú y yo, Señor. No quiero limitar con mi falta de perdón lo que quieres hacer en mi vida. Te lo pido en el nombre de Jesús. i'/'l.F'Vf?11 ®!' - í A P A L A B H . A ; • • • ; ••1 •': No juzguen, y no se les juzgará. No condenen, y no se les condenará. Perdonen, y se les perdonará. '.'; •'"'• ' ' '"'LUCAS FI:37 El que aborrece a su hermano está en tinieblas, y anda en tinieblas, y no sabe a dónde va, porque las tinieblas le han cegado los ojos. ,,.7 . 7 o!.JUAN 2I11/RV-6O •"•>•'; • Si perdonan a otros sus ofensas, también los per- donará a ustedes su Padre celestial. Pero si no perdonan a otros sus ofensas, tampoco su Padre les perdonará a ustedes las suyas. ' ' ' MATEÓ.fiÍ4~lS
  • 46. Acribe una oración pidiéndole a Dios cjgt®' alguien que no has perdonado. Si Dios te mue!fhS'á< persona, pídele que te ayude a perdonarla por completó. r Una de las maneras en que puedes perdonar con más facili- dad a otros es orando por ellos. Escribe una oración por alguien que necesites perdonar, no importa cuánto tiempo haga que ocurrió la ofensa contra ti. HÍ¡UWSj, • • i . . • ' . • : . ••• I '4 Eécribe una oración pidiéndole a Dios que te muestre si hay alguien que no has perdonado por algo. Pídele que te muestre como hacer bien las cosas entre tanto.
  • 47.
  • 48. R U A N D O ESTABA EN LA ESCUELA SUPERIOR EN CALIFORNIA, "tuve que tomar una clase reglamentaria de natación por un semestre. Lo detestaba porque era a las 7-.w cada mañana y que- daba con el pelo húmedo y arruinado por el resto del día. Tenía que nadar todos los días, lloviera o hubiera sol, y podía haber mucho frío en esas nubladas mañanas de invierno de California. La única manera en que podía excusarme de la natación era si ípe estaba muriendo, y aun así tenía que presentar un certificado médico. A pesar de la desdicha de esa experiencia, me encantaba la natación y llegué a ser buena en ella. Aprendí que si estaba en Vina adecuada posición y hacía bien todos los movimientos, Como me enseñaba mi instructor de natación, podía avanzar fon rapidez en el agua. Se volvió una suave maniobra con la que graba llegar con rapidez al otro lado de la piscina gigante. Y da me hacía vacilar. iBfcssiqa^ dadpies':a:ambü5:W
  • 49. El poájftr Éel joven q;ue ora El mismo principio es cierto para ti y para mí. Si queremos navegar con éxito por las aguas de la vida, debemos situarnos como es debido y aprender los movimientos apropiados. Si no lo hacemos, cuando lleguen las situaciones turbulentas, no lograremos navegar a través de ellas. Terminaremos golpeándo- nos y agotándonos solo para mantenernos a flote. Y nunca llega- remos a ninguna parte. Sin embargo, cuando nos colocamos bajo la dirección de Jesús y aprendemos a hacer lo que exige de nosotros, hay un flujo del Espíritu Santo que nos lleva adonde- quiera que necesitemos ir. T^los los movimiento, ', ' La manera en que aprendemos lo que espera Dios de noso- tros es leyendo su Palabra. No podemos comenzar a hacer los movimientos adecuados si no sabemos cuáles son. Sin embargo, eso es solo el comienzo. Podemos estudiar todo lo que deseemos y aprender cada cosa que debemos hacer, pero todavía tenemos qué hacerlo. El ins- tructor de natación puede decirnos cómo nadar, pero aun así tenemos que saltar al agua en algún momento. Una cosa es hacer una lista de lo que hay que hacer y lo que hay que evitar; otra muy diferente es tener un corazón que busca los caminos de Dios y un alma que anhela andar por ellos. Una cosa es leer sobre la vida; otra es vivirla. La obediencia es algo que haces; tener un corazón para obedecer a Dios y vivir en sus caminos es algo por lo que hay que orar. Es mucho más fácil descubrir lo que se espera que hagamos que hacerlo. Es por eso que necesitamos orar que Dios nos permita ser lo bastante disciplinados para hacer lo que tenemos que hacer. Mis principales motivos de oración son: • Por un corazón por todo lo que Dios ha hecho por mí »Por la seguridad y salvación de mi escuela • Por mis problemas y preocupaciones diarias • Que tenga el valor para permanecer firme • Que alabe a Dios cada día por lo que El es [16-19 años de edad) 48
  • 50. Señor, -ayúé^me -a hacer lo «§t=.e es. bueno Soy una persona disciplinada, pero no siempre fui así. Hubo un tiempo en mi vida cuando era todo lo opuesto. Debido a que estaba siempre deprimida, no podía pensar con claridad ni orga- nizar bien mi vida. Es difícil hacer las cosas que son buenas para uno cuando no sabemos si valemos la pena. Es difí- cil seguir adelante en la vida cuando uno necesita toda las energías solo para sobrevivir cada día. Cuando comencé a aprender a orar por todo, le pedí a Dios que me ayudara a ser suficientemente disciplinada para leer su Palabra y orar todos los días. Le pedí que me ayudara a comprender cómo quería que viviera y después que me ayudara a vivir de esa forma. Dios me respondió esas oraciones. Ahora soy mucho más disciplinada y organi- zada. Y soy obediente a Dios más allá de lo que sé que podría hacer sin su ayuda. Esto no pasó de la noche a la mañana. Ocu- rrió poco a poco mientras oraba por eso y Dios respondía mis oraciones. No te desanimes si no lo haces bien todo. No hay quién pueda hacerlo. Es por eso que necesitamos al Señor. El apren- dizaje para vivir a la manera de Dios lleva toda una vida. Siem- pre hay cosas nuevas que aprender, y nos metemos en proble- mas cuando creemos que sabemos lo que hay que hacer y deja- mos de preguntarle a Dios si eso es cierto. Nunca podemos enorgullecemos por la forma tan perfecta en que obedecemos a Dios, porque Él nos está enseñando sin cesar acerca de sus caminos. Y El nos ayudará a vivirlos si se lo pedimos. Todo lo que tienes que decir es: «Señor, ayúdame a obedecerte de la manera que quieres a fin de que pueda llegar a ser la persona para la que me creaste». No debemos cansarnos «de hacer el ' 49 Creo en la oración porgue: • S é que da resultados • Tengo f e en que Dios me escucha • He visto respondidas las oraciones de otros • Es la manera de comunicarnos con Dios • La Biblia dice que oremos (16-19 año$ de edad
  • 51. El poder dei joven que ora bien, porque a su debido tiempo cosecharemos si no nos damos por vencidos» (Gálatas ti^). Las cosas «fue Dios nos. • n i HUI w m MTifflnffll j y y f i ^ ü m a l m e n t f f l , . - — - Además de las reglas que Dios quiere que obedezca todo el mundo, hay cosas específicas que nos pide a cada uno de noso- tros que hagamos a fin de que avancemos hacia el propósito que tiene con nuestras vidas. Este es diferente para cada persona. Por ejemplo, Dios quizá te instruya a que aprendas una cierta des- treza que no les pedirá a tus amigos que adquieran. Es posible que te pida que tomes cierta clase, qu<2 trabajes en cierto empleo, que dejes cierta actividad, que te unas a determinada iglesia o que cambies la forma en que siempre has hecho algo. Lo que sea que te pida que hagas, recuerda que Él hace esto para bendecirte más. Es importante orar: «Señor, muéstrame lo que debo hacer». Si no lo pides, no lo sabrás. Macea cosas fue prefiere»,.,no Jiacer Todos tenemos que hacer cosas que no queremos hacer. Hasta en las más maravillosas clases o empleos, todavía hay cosas que no disfrutamos. Sin embargo, parte de tener éxito en la vida es hacer cosas aun cuando preferiríamos no hacerlas. Cuando hacemos cosas que no nos gustan solo por- oro por otros qLie s a be mos que tenemos que hacerlas, se cuando: forja el carácter en nosotros. Nos discipli- • Tienen problemas namos, Nos convierten en un líder en el con su familia que Dios puede confiar. Siempre hay un • Están en apuros precio que pagar cuando solo hacemos las . No son salvos cosas que nos gusta hacer y no hacemos las • N e c e s i t a n aliento cosas que necesitamos hacer. • Están sufriendo Tienes que sacrificarte por las cosas (13-15 años de edad) buenas que quieres. Siempre que te sea 50
  • 52. Señor, ayúdame a hacerloi'-:-ifuees bueno difícil hacer lo que sabes que tienes que hacer, pídele al Espíritu Santo que te ayude. Desde luego, aun así tienes que ser el que dé el primer paso, no importa lo mucho que te pese darlo. Pero cuando lo hagas, el Espíritu Santo te ayudará a lo largo del camino. ¿ « t b u e n a s r a s o p a a L p a g » - o t a s d a c a s a . S h a 9 — - Existen muchas razones para obedecer a Dios, pero la mejor razón es que Él lo 0 r ó y Q i ° 3 dijo. Si no hubiera otra razón, esa cierta- respondió mente bastaría. ¿Alguna vez le has pre- O r é que pudiera dejar guntado a tus padres por qué tienes que de ser adicto a la Internet, hacer algo y te dicen: «Porque yo lo digo»? Poco después, descubrí Lo que eso significa es que quieren que que ya no deseaba entrar hagas lo que te piden y confíes en que ®" ' a Internet; me parecía saben lo que es mejor. Tratan de ense- aburrida. Tenía ganas ñarte a ser obediente a lo que exigen de ti. ^ t m r ®' P'ano Eso es lo que Dios quiere que tú hagas * c a n t a r ®" adoración, también. Más ,ard « m ® <" Existen muchas más razones para cuenta 1ue era una obedecer a Dios que debes conocer, y m t m h a .U .,rMW "- he incluido diez buenas razones a conti- (13 anos de nuación: 1. Cuando obedezco a Dios, Él escucha mis oraciones. «Si observo iniquidad en mi corazón, el Señor no me escuchará. Pero ciertamente Dios me ha oído; Él atendió a la voz de mi ora- ción» (Salmo $6:18-1$, LBLA). 2. Cuando obedezco a Dios, tengo un mayor sentido de su presen- cia en mi vida. «El que me ama, obedecerá mi palabra, y mi Padre lo amará, y haremos nuestra vivienda en él» (Juan 3. Cuando obedezco a Dios, tengo más sabiduría. «Él provee de sana sabiduría a los rectos; es escudo a los que caminan rec- tamente» (Proverbios
  • 53. El joven «me ora 4. Cuando obedezco a Dios, demuestro que soy su amigo. «Ustedes son mis amigos si hacen lo que yo les mando» (Juan "i ;: *). 5» Cuando obedezco a Dios, vivo seguro. «Pongan en práctica mis estatutos y observen mis preceptos, y habitarán seguros en la tierra» (Levítico 6. Cuando obedezco a Dios, me vuelvo una persona más amorosa. «El que guarda su palabra, en éste verdaderamente el amor de Dios se ha perfeccionado» (1 Juan 2:5, RV-60). 7, Cuando obedezco a Dios, me ocurren cosas buenas. «Hoy les doy a elegir entre la bendición y la maldición: bendición, si obedecen los mandamientos que yo, el SEÑOR su Dios, hoy les mando obedecer» (Deuteronomio 11:26 .27). & Cuando obedezco a Dios, soy más dichoso. «¡Dichosos los que son obedientes a la ley!» (Proverbios Cuando obedezco a Dios, tengo paz. «Fíjate en el hombre honrado y sin tacha: el futuro de ese hombre es la paz» (Salmo 147:37, DHH). 10. Cuando obedezco a Dios, viviré más tiempo. «Hijo mío, no te olvides de mi enseñanza, y tu corazón guarde mis manda- mientos, porque largura de días y años de vida y paz te aña- dirán» (Proverbios 5:1 -2, LBLA). Avanza hapia Xo Dios tiene para ti - Dios tiene grandes planes para ti. Tiene cosas importantes que quiere que hagas. Y Él tef está preparando para eso ahora mismo. Sin embargo, tienes que dar los pasos de obediencia a fin de llegar allí. Y tienes que confiar en que Él sabe lo que es mejor y que no te hará daño en el proceso. Dios no ha puesto reglas para hacerte un desdichado. Las reglas de Dios son para tu beneficio. Cuando vivas por ellas, la vida va bien. Cuando no vives por ellas, la vida se hace pedazos,
  • 54. Señor, ayúdame a hacer loi'-:-ifue es bueno Existe una concreta conexión entre .la obediencia y el amor de Dios. Jesús dijo: «¿Quién es el que me ama? El que hace suyos mis mandamientos y los obedece. Y al que me ama, mi Padre lo amará, y yo también lo amaré y me manifestaré a él» (Juan ¡4:'¿L). Eso significa que la manera en que mostramos nuestro amor por Dios es viviendo como El manda. Y cuando no obedecemos a Dios, aun cuando Dios nos ama, no sentiremos su amor como lo necesitamos. Existe también una conexión directa entre la obediencia y la respuesta a tus oraciones (I Juan 'M22). Si te sientes triste porque no ves las respuestas a tus oraciones, pregúntale a Dios si se debe a la desobediencia. Dile: «Señor, ¿existe alguna esfera en mi vida donde no te estoy obedeciendo?». No sigas diciéndole a Dios lo que tú quieres sin preguntarle lo que Él quiere. Dios usó aquellas clases de natación en mi vida de una manera que no me hubiera imaginado. Recordar lo que me había ense- ñado mi instructor cuando estaba aprendiendo a nadar, y lo que había practicado con diligencia por años, me salvó la vida. Un día estaba en la playa con una amiga y nadábamos en el mar cuando una corriente fuerte nos sacó mar afuera. No podíamos regresar a la costa por nuestra cuenta, pero logramos nadar con la marea y mantenernos a flote hasta que nos rescataron los salvavidas. Si no hubiera obedecido a mi instructor de natación años antes, ni hubiera aprendido todos los movimientos adecuados, rae espanta pensar en lo podría haber pasado. La obediencia a Dios te salvará la vida en más de una manera. Uno nunca sabe cuándo se presentará un momento especial para el cual nos ha preparado Dios. Y no es solo un momento; Él tiene muchos momentos sucesivos preparados para tu vida. Dios te está preparando cada día para algo fabuloso. Algo impor- tante. Sin embargo, tienes que estar atento a tu Instructor. «El Mi oración a Dios Señor, dame fuerza para mantenerme firme por ti, aun si otros se burlan de mf. Dame las agallas para permanecer firme, aun euando parezca Imposible. {13 ¡ños de edadj
  • 55. El poéer <dei joven que ora que compite como atleta, no gana el premio si no compite de acuerdo con las reglas» (2 Timoteo 2:5, LBLA). Tú no podrás nadar bien en la corriente en esos momentos si no haces todos los movimientos adecuados ahora. Pero si aprendes a hacer los movimientos apropiados, estarás preparado para esos momentos especiales y para cualquiera de las aguas profundas en que te encuentres. Señor, tu Palabra dice que los que amamos tu ley ten- dremos gran paz y nada nos hará tropezar (Salmo 1U:1#S, LBLA). Amo tu ley porque sé que es buena y es para mi bien. Ayúdame a obedecerte de cualquier manera a fin de que no tropiece y caiga. Si hay pasos de obediencia que necesito dar, ábreme los ojos para ver la verdad y ayúdame a dar esos pasos. Sé que no puedo hacer bien todas las cosas sin tu ayuda, por eso te pido que me ayudes a vivir en obediencia a tus caminos (Salmo 119:10). Tu Palabra dice que «si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la verdad no está en nosotros» (1 Juan 1:8, RV-60). No quiero enga- ñarme al no preguntarte dónde no estoy dando en el blanco que tú has establecido para mi vida. Revélame cuándo no estoy haciendo las cosas que debo hacer. Muéstrame si estoy haciendo cosas que no debo hacer. Ayúdame a escuchar tus instrucciones específicas. Háblame con claridad a través de tu Palabra a fin de que comprenda lo que es bueno y lo que es malo. No quiero entristecer al Espíritu Santo en cualquier cosa que haga (Efesios 4:30, LBLA). Ayúdame a aprender siempre de tus caminos para que pueda vivir en la plenitud de tu presencia y avanzar hacia todo lo que tienes para mí. Te lo pido en el nombre de Jesús. 54
  • 56. ,-ienor, ayudam» » hacer Jo ^ue es bueno Recibimos todo lo que le pedimos porque obe- decemos sus mandamientos y hacemos lo que le agrada. 1 JUAN 3 : 2 2 El SEÑOR es sol y escudo; Dios nos concede honor y gloria. El SEÑOR brinda generosamente su bondad a los que se conducen sin tacha. SALMO 8 4 : 1 1 ¡Pero más bienaventurados son los que oyen la palabra de Dios y la ponen en práctica! LUCAS 1 . 1 : 2 8 , LBD
  • 57. Jka ley de Dios que tengo más dificultad ^rt' cMed'fer es-'f' Escribe una oración pidiéndole a Dios que te ayude a obe- decerlo en esto. ;í5e las «Diez buenas razones para obedecer a Dios» en las páginas 51 y 52, ¿cuáles son las tres más importantes para ti en cuanto a inspirarte a obedecer las leyes de Dios? La esfera de mi vida donde me gustaría tener más disciplina es: Escribe una oración pidiéndole a Dios que te ayude a ser más disciplinado en esa esfera de obediencia.
  • 58. JIHSH m m- a » a n t « « « M EXISTE UN LUGAR EN LA TIERRA DONDE puedas tener la luta seguridad de que no existen malás influencias. Eso se ebe a que la influencia del maligno puede estar en cualquier e. Algunas veces rios parece que está en todas partes. Así que vas a enfrentar con malas influencias en algún momento de tu vida. Es probable que ya las hayas enfrentado, hasta cierto grado, cuanto antes aprendas a reconocerlas, mejor. T.o que necesitas saber es que cualquiera que haya entregado u ida a Dios es blanco para las influencias del maligno. Eso se debe a que lienes un enemigo. Cualquiera que ame a Dios y delicada las cosas que defiende Dios tiene un enemigo. Ese ene- migo se opone a Lodo k> que es de Dios, a todo lo que Él haces y malquiera qu,e ciea en Él. Fl enemigo tratará de arfuinar tu 'da. Tú tienes que esiar lisio por él. ILLenemigo es el diablo. Dios lo creó para bien, pero se con* 'ni(') en orgulloso decidió rebelarse contra Dios. Quería ser ios que todos los seres creados le adoraran. Debido j eso
  • 59. El poá^í joven que ora cayó de la presencia de Dios en el cielo a la tierra, donde nunca se cansa de buscar a alguien para destruirlo. Lo bueno es que los que conocemos al Señor tenemos poder sobre él. Nuestro enemigo no lo sabe todo, ni está siempre pre- sente. No puede estar en todas partes, ni puede saber cada uno de nuestros pensamientos. Pero si no nos damos cuenta de que ya es un enemigo derrotado, nos puede acosar a cada instante.: Puede usar a otras personas que no conocen a Dios para tratar de ejercer influencia en nosotros y tratar de alejarnos de la vida que Dios tiene para nosotros. Una de las cosas que Jesús logró cuando murió en la cruz y resucitó fue romper con el poder del enemigo sobre nuestra^ vidas. Dio a los creyentes autoridad sobre él, diciendo: «Les he dado autoridad a ustedes para [...] vencer todo el poder del ene- migo; nada les podrá hacer daño» (Lucas 10:14). Todos estamos involucrados en una continua batalla espiri- tual con un enemigo que nunca descansa. La Biblia nos dice que «no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados; contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas dí este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes» (Efesios #:12, RV-60). Aun cuando nos traten de mala manera o alguna persona en particular ejerza influencia para que hagamos lo malo, tenemos que seguil Lo más difícil reconociendo quién es nuestro verdadero Ae la oración es. e n e m j g 0 g s t e s e r á e l primer paso en man • Quedarme quieto tenernos firmes en contra de él y de las por mucho tiempo personas en las que influye y que tratarárí • S a b e r por qué orar de influir en tó. . Estar preocupado M i g u a j q u g D i o s t i e n e u n p í a n p a r a de que no dé resultados ^ ^ ^ ^ ^ ^ R [ p l a ¿ • N o saber si Dios d e S a t a n á s e s destruirte. «El ladrón no esta escuc ^ viene más que a robar, matar y destruir; • Ser veraz y sincero - j „ - j i • 7 , „ yo he venido para que tengan vida, y la; (15-15 años de edad) . , T f , , c „ 11 tengan en abundancia» (Juanxüilü). Satanas
  • 60. Señor, ayúdame -a mantener*1 « firme,.. nunca toma un día de descanso, así que trata a cada momento de ver cumplido el plan que tiene contigo. Es por eso que tienes que cuidarte de las malas influen- cias. La Biblia dice: «Practiquen el domi- nio propio y manténganse alerta. Su ene- migo el diablo ronda como león rugiente, buscando a quién devorar» (1 Pedro La mayoría de las veces uno puede reconocer los ataque obvios del enemigo. Por ejemplo, si alguien te brinda alcohol o una droga ilegal, sabes que es malo. Tienes que decir no de inmediato y alejarte de esa persona. Las drogas y el alcohol des- truyen la mente y el alma, así como también el cuerpo. Pregún- tale a cualquiera que esté muriendo de alguna enfermedad cau- sada por las drogas y el alcohol si no lamentan haber caído en el vicio. Te dirán que lamentan desde lo más profundo haberse dejado engañar por el pensamiento de: No me hará daño si tomo solo un poco. Esta es una mentira del enemigo concebida para nuestra destrucción, pues las adicciones ocurren poco a poco hasta que la persona es adicta y no puede parar. Parte del plan del enemigo para destruirte es que te entusiasmes por las drogas y el alcohol. La pornografía es otra mala influencia obvia. Casi todas las personas saben que la pornografía es mala en el momento que la --yen por casualidad, y enseguida apartan los ojos de ella. La verdad s que daña a las personas que la ven más de lo que se dan cuenta. Jplanta un gancho en su interior que las arrastrará cada vez más a ¡fila. Es adictiva y a la larga destruye la vida de las personas. La (pornografía es otra parte del plan del enemigo para destruirte, fe', jpDn' i r í r Vmift M — — f- Antes de que me convirtiera en creyente, entré en las drogas y el alcohol para tratar de librarme del dolor y la depresión que 55 Tengo más líeseos fie orar cuando: • T e n g o miedo • M e siento culpable • Después que leo la Biblia • Estoy solo • S i e m p r e (16-19 años de edad)
  • 61. El po#sr «te/ « v e n fue ora sentía a cada instante. Pensaba que me ayudarían, pero no fue así. Aunque parecían ayudarme de forma temporal, después me sentía peor que nunca en cuanto a mi persona y mi vida. Me volví descuidada y por poco me mato varias veces. Una vez estando casi bajo una sobredosis, le aseguré a un Dios que ni siquiera conocía que si podía salvarme de la muerte, no tomaría drogas de nueyo. Él cumplió su parte del convenio, pero yo no pude cumplir la mía. En cierta ocasión cuando conducía bájo la influencia de las drogas, casi tuve Un choque de frente. Conducía al aeropuerto para alcanzar un vuelo muy temprano y no me daba cuenta de que las drogas que había tomado la noche antes todavía me esta- ban afectando. Pensaba que las había tomado otro día y que estaba bien, pero en realidad solo había sido unas horas antes. Conducía rápido porque había dormido demasiado y era muy tarde, lo cual en sí fue un gran error. Mientras ascendía una colina, una ambulancia venía a toda velocidad en dirección contraría a la mía. No la vi ni escuché la estridente sirena hasta que estaba prácticamente encima de mí. La ambulancia se desvió a la izquierda y yo me desvié a la derecha y evitamos un choque frontal por una fracción de centímetro. Nuestros vehículos pasaron tan cerca uno del otro que mi auto se estremeció con violencia. Sabía que aca- baba de librarme de la muerte o de una severa discapacidad. Ese incidente me conmocionó de muchas maneras. Me espantó que estuviera bajo la influencia de esas drogas y que ni siquiera me diera cuenta. Estaba tan fuera de mis cabales que ni escuché siquiera la sirena. Sabía que si no cambiaba mis hábitos, todo iba a acabar para mí. Lo que había comen- zado un par de años antes como una simple prueba de algo que me ofrecieron en una Mis principales motivos de oración son: . Que sepa la voluntad de Dios para mi vida • Que me lleve bien con mi madrastra • Que mi papa'se salve • Que esté protegido del mal • Q u e mi familia Y yo tengamos salud [13-15 años de edad)
  • 62. Señor, ayúdame a mar>teneteme firme. reunión social se convirtió en algo que y Dios estaba a punto de destruir mí vida. Había respondió caído bajo una mala influencia y no tuve Cuando mi abuelo tuvo suficiente fuerza para detenerla hasta un ataque al corazón que encontré al Señor. solo contaba con veinticinco Existen muchas malas influencias a f o r «tonto de posibilidades nuestro alrededor, algunas evidentes y ^ sobrevivir. Mis primos otras no tan obvias. Las sutiles pueden Y Vo oramos y oramos, seducirte a recibir algo malo en tu Vida Lí fue un éxito sin que te des cuenta. Algo que a la larga y sobwivió. te apartará del camino que Dios tiene °r mu Y «decido para ti y que destruirá tu vida. Un ejem- ¿«Dios" k"1 *" pío de eso es la promiscuidad sexual, Se ¡ n f l u e n e l / ve tanto de esto en la televisión y en las ^ 8 " "" películas que es fácil que nos lleguemos " " ' a acostumbrar tanto a la idea que nos parezca que no tiene tanta importancia. Pareciera como que «todo el mundo lo hace». Sin embargo, no es cierto. Tiene mucha importancia. Y todo el mundo no lo hace; A fin de evitar estos y otros tiposde influencias malas, nece- sitas estar bajo la influencia del Señor, Pídele a Dios que te ayude a discernir las influencias que te rodean. Si te mantienes cerca de Dios y su Palabra, Él te revelará la obra del enemigo en tu vida. Te mostrará en los casos en que estás en territorio peligroso. Te dará discernimiento cuando te estén;endiendo tina trampa y te ayudará a ver la verdad. Si ya estás bajo una mala influencia, Dios t e dará el poder para ponerle fin. Él promete que podes resistir «al diablo, y él huirá de [ti]» (Santiago 4:7). , a r m a s c o n t r a e l enej^fo Dios nos ha dado muchas arma^ntra el enemigo. He aquí las cinco principales:
  • 63. Elpoder"del-joven que ora 1. Una poderosa arma ,contra el enemigo es la Palabra de Dios. Jesús mismo usó está arma contra el diablo cuando el Espí- ritu Santo lo guió al desierto y Satanás fue a tentarlo (Mateo 4:1). Uno pensaría que si era el Hijo de Dios no tenía por qué haber entrado al desierto, y mucho menos para que lo tentara el diablo. Sin embargo, «el tentador se le acercó» (versículo 3) de la misma manera que viene a todos nosotros, y Jesús usó la Palabra de Dios para desmentirlo. Le dijo: «No solo de pan vive el hombre, sino de toda pala- bra que sale de la boca de Dios» (versículo 4). Cuando el diablo trate de influir en tu vida de alguna manera, cítale la Biblia como lo hizo Jesús. En el momento que sientas que te persuaden las malas influencias, corre a la Palabra de Dios y comienza a citarla. Di: «Todo lo puedo en Cristo que me fortalece» (Filipenses 4 : 1 3 ) . El diablo aborrece eso y te dejará tranquilo. 2. Unapoderosa arma contra elenemigo es la alabanza. El diablo también aborrece que adoremos a Dios. No puede tolerar que la agente adore a otro que no sea él. Lo detesta tanto que no puede siquiera estar cerca. Cuando alabamos y ado- ramos al Señor, la presencia de Dios mora de forma pode- rosa en medio nuestro y el diablo tiene que huir. 3. Una gran arma contra el enemigo es la obediencia. Si vivimos en pecado o andamos en desobediencia, estamos dejando abierta la puerta en nuestras vidas para que el diablo tenga entrada y a la larga una posición establecida. Cosas malas ocurren cuando nuestro pecado continuo le extiende una invitación al enemigo a erigir una fortaleza en n,uestra vida. Satanás no tiene jurisdicción sobre ti, pero la desobediencia a las leyes de Dios le tiende una alfombra para, que entre. Tú puedes cerrarle la puerta en la cara mediante,la. confe- sión de tus errores y arrepintiéndote de ellos ante él Señor. 4. Una poderosa arma contra el enemigo es lafe mente que el enemigo siempre está plantando minasféiljacite de ti. 12
  • 64. Señor» ayúdame a mantenerme firme,,. No tienes idea dónde están porque no son visibles a la vista humana, Se eluden caminando cerca de Dios y permitién- dole que guíe nuestros pasos. Dios dice sobre el enemigo: «Resístanlo, manteniéndose firmes en la fe, sabiendo que sus hermanos en todo el mundo están soportando la misma clase de sufrimientos» (1 Pedro 5:9). Eso significa que ponemos nuestra fe en Dios y nos negamos a hacer lo que quiere el enemigo. Andar bajo la influencia dé Dios mediante la fe en la Palabra de Dios es una manera poderosa de eludir las trampas del enemigo. 5. Unapoderosa arpia contra elenemigo es la oración. El enemigo detesta que hablemos con Dios. Sabe que Dios escucha nuestras oraciones y las responde. El enemigo tratará de lograr que dudemos que Dios nos escucha, a fin de debili- tarnos. Sin embargo, no te dejes engañar por esa mentira. Di: «Señor, ayúdame a resistir al enemigo y las influencias del mal qüe trae a mi vida», y luego consuélate al saber que esta sencilla oración tiene poder suficiente para destruir al enemigo. 3 i h w ú m * « s a t a c a d ¿Por qué atacan a las personas buenas? La respuesta está en la pregunta misma. El enemigo te ataca porque eres una persona buena. El diablo quiere destruir a todo el que puede, pero en especial quiere destruir a cualquiera que ame a Dios y viva en sus caminos. Es más, esta es la principal razón de que sea tu enemigo. La única manera en que no consigues hacer eso es llegando a ser como él. Tendrías que defender lo que representa él. Recuerda que mientras mayor sea tu compromiso con el Señor, más tratará de molestarte el diablo. Hará todo lo posible por debilitarte con confusión, desaliento, culpa, temor, depre- sión, tentación o derrota. Aun cuando ni con mucho está cerca de ser tan poderoso como Dios, tratará de hacerte pensar que lo €3