El documento resume la frase "El sabio no dice todo lo que piensa, pero siempre piensa todo lo que dice" de Aristóteles. Explica que los sabios son prudentes sobre lo que comparten, ya que revelar todos sus pensamientos podría ser dañino o arriesgado. También argumenta que la sabiduría consiste en hablar sólo cuando sea conveniente y útil, en lugar de callar por egoísmo. En general, la frase enseña la importancia de pensar cuidadosamente antes de hablar y ser responsable con las palabras que se eligen.