El documento resume los principales eventos históricos de la Península Ibérica desde el matrimonio de los Reyes Católicos en 1469 hasta el doble incidente de 1640. La unión de Aragón y Castilla bajo los Reyes Católicos llevó a una mayor unificación política bajo Carlos V y Felipe II, pero también al establecimiento del Tribunal de la Inquisición y la expulsión de los judíos, y eventualmente a la separación de Portugal y Cataluña en 1640.