La leishmaniasis es causada por un protozoo parásito del género Leishmania, que incluye más de 20 especies diferentes. Se transmite a los humanos por la picadura de flebótomos hembra infectados. Las especies varían en su capacidad de causar leishmaniasis cutánea o visceral, y algunas son antroponóticas mientras que otras son zoonóticas. El tipo de lesión y gravedad de la enfermedad depende de la especie involucrada.