Los principales cambios hemodinámicos en el embarazo incluyen un aumento del gasto cardiaco y la frecuencia cardíaca a partir de la quinta semana, una expansión del volumen plasmático entre las 10 y 20 semanas, y cambios anatómicos y funcionales en el corazón como su desplazamiento hacia la izquierda y arriba. También hay una disminución de la presión arterial hasta las 24-26 semanas que contribuye a la aparición de edema, varices y hemorroides.