El documento argumenta que los estudiantes en las escuelas deben estar vivos, activos y comprometidos en lugar de quietos y pasivos. Propone transformar las aulas tradicionales eliminando el estrado del maestro y los bancos para estudiantes, en favor de grupos pequeños donde los estudiantes puedan pensar, hablar y discutir activamente como colaboradores en el proceso de enseñanza. El documento también aboga por que los estudiantes realicen actividades prácticas como experimentos de laboratorio y análisis de problemas reales en