La producción agropecuaria ha evolucionado de una forma de producción independiente a una forma cada vez más industrializada e interdependiente con otros sectores. Inicialmente, la mecanización sustituyó la mano de obra por maquinaria y la energía animal por motores de combustión interna. Luego, la industria conquistó elementos discretos del proceso de producción a través de fertilizantes industriales, semillas híbridas y agroquímicos. Más recientemente, las innovaciones biológicas y genéticas permitieron una mayor apropiación industrial del