Informe final de la investigación documental y de campo.

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Investigación documental y de campo:
Informe final.
Discriminación racial y étnica en México.
María Berenice Otero Pérez.
Septiembre, 2017

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Contenido
1. Introducción. 3
2. Metodología. 4
3. Resultados. 5
4. Conclusiones. 10
5. Recomendaciones. 10
6. Anexos. 11
6.1 Guía de observación/Diario de campo. 11
6.2 Guía de observación/Segundo recorrido. 11
7. Referencias y fuentes de consulta: 13

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1. Introducción.
Pasa rápidamente el tiempo, la población cada vez es mayor y con eso aumenta la
necesidad de preservar las distintas costumbres, tradiciones y la cultura misma que nos
identifica. Sin embargo, en la actualidad; estas mismas características generan rechazo,
distinciones, marginación y/o exclusión social ya que, la falta de interés sobre la cultura de
nuestro país, y la creación de “clases o razas sociales” hace que este tipo de conductas no
éticas se hagan presentes con más frecuencia. Todas estas situaciones, llevan a un solo tema:
La discriminación racial.
En nuestro país, la marginación racial o étnica es una problemática social que no queremos ver
como conflicto porque “no es fácil aceptar que somos racistas”. Es de suma importancia de que,
como ciudadanos; hagamos conciencia sobre la discriminación; sin embargo, no hay suficiente
información al respecto. En lo personal me decidí abordar el tema del racismo étnico, porque
nuestras raíces de identificación como mexicanos muchas veces no se conocen lo suficiente, y
por consecuente no se valoran como deberían.
Las etnias nos distinguen como pueblo, y eso se nos olvida dando paso a la discriminación
racial. No solo se trata de excluir a una persona por “la raza” a la que pertenezca, por el color
de piel y/o sus costumbres, sino que en muchos de los casos que se puedan presentar de
rechazo étnico, se genera un conflicto al tratar de manera diferente a la persona. No hay
conducta más reprobable, que el mal trato a un individuo por su color de piel, por sus
tradiciones. En México, tenemos una diversidad infinita de cultura y tradiciones que como país
nos toca “presumir ante el mundo”, aunque algunas veces no lo veamos de esa manera.
Actualmente, los estereotipos que vamos adoptando (de otros lugares), nos marcan como
debemos de ser, comportarnos y/o conducirnos con personas “distintas” a nosotros, y no nos
damos cuenta del gran error que cometemos primeramente como personas, y en segundo lugar
como mexicanos.
Al discriminar a un miembro de una etnia, cometemos un verdadero error al no valorar nuestras
raíces, y no darles la importancia a esas personas que, aun con las dificultades que puedan
presentarse, siguen arraigados a los orígenes que tenemos como país. Además, discriminar a
alguien por el color de piel, o cualquier otra característica física; habla de la poca formación
ética que como persona tenemos.

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Esta investigación se inició porque, aunque es un tema muy difícil de abarcar por lo extenso y
poco conocimiento que se tiene acerca del tema, no es tan común encontrar información al
respecto, además de que crear conciencia sobre esta situación real es sumamente importante
porque se trata del bienestar de una sociedad en conjunto. Hablar de discriminación en territorio
nacional y sus formas de presentarse, es hablar sobre unos de los errores que como mexicanos
cometemos; pero que muy pocas veces aceptamos. Deberíamos ser capaces de reconocer y
actuar para promover alguna solución o crear conciencia en más personas para que, aunque
sea poco a poco, la problemática disminuya. El presente texto tiene como principal objetivo
crear conciencia sobre lo difícil que es una problemática de esta magnitud y formas de disminuir
este problema que es tan común en nuestro país.
2. Metodología.
Como principio de esta investigación, delimité el tema a la discriminación racial en nuestro país,
aunque es una problemática social a nivel mundial.
Como parte de la investigación documental utilicé buscadores académicos como Google
Académico, Scielo, Redalyc y Academy.edu para recopilar diferentes opiniones, definiciones y
estudios a nivel nacional acerca de mi tema. Tomé artículos de revistas web, libros, artículos e
información de sitios web que ayudaron a guiar mi investigación.
Además se generó una serie de preguntas que formaron parte de una encuesta elaborada en
Google Formularios, con el fin de conocer la opinión de una muestra de la población para crear
estadísticas basadas en testimonios o vivencias.
En el entorno que me rodea, es muy común encontrarse con situaciones de este tipo pero para
la investigación de campo específicamente, decidí iniciar la búsqueda de fuentes muy
confiables para obtener los resultados deseados. Se intentó concertar citas para realizar
entrevistas a funcionarios de organizaciones de índole social como el Centro de Desarrollo
Indígena de León (CDIL) además, visité el DIF y la Procuraduría de los Derechos Humanos del
Estado de Guanajuato (PDHEG) pero, en estas instituciones era difícil concertar una cita para
entrevista con pocos días de anticipación, así que opté por buscar más opciones como la Casa
de la Cultura de León y personas arraigadas a alguna etnia nativa del estado de Guanajuato.
Se llevó a cabo una entrevista a un ex agente de Desarrollo Social, para obtener datos acerca
de las formas de apoyo o soluciones que le da el Gobierno de nuestro país a los casos de
discriminación racial.

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3. Resultados.
3.1 Investigación documental:
La gran multiculturalidad de México nos enriquece socialmente, pero también crea un conflicto
que, aunque a veces no es tan notorio desde nuestra perspectiva, está presente y puede llegar
a afectar la sana convivencia entre individuos y/o la integridad personal de los involucrados.
Escuchar el término “Discriminación racial”, se asocia de inmediato con la exclusión o rechazo
hacia los miembros de un pueblo indígena, sin embargo; actualmente también se genera por
rasgos físicos que se relacionen con alguna “raza” o que provengan de otra “etnicidad”,
costumbres, tradiciones y en ocasiones, hasta por las formas de vivir.
Gall O.(2003) define que “no obstante, "la raza" y "la etnicidad" son conceptos distintos, aunque
con frecuencia estrechamente relacionados, en especial dentro de las sociedades coloniales o
en las sociedades con un pasado colonial. Las dos son construcciones sociales, pero
construcciones sociales distintas. La primera es una construcción social basada en ideas acerca
de la diferencia innata, que se fueron forjando como elementos centrales en el establecimiento
de la diferencia durante los encuentros coloniales con otros pueblos. La segunda es una
construcción social basada en una noción específica de la diferenciación cultural construida
sobre la noción de "lugar de origen", en la que las relaciones sociales responden antes que
nada a diferencias geográficas, espacialmente determinadas.”
Yuri Escalante (Betancourt, 2009) nos menciona que “en el año 2005, por primera vez en la
historia de México el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred) y la
Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) levantaron una Encuesta Nacional sobre
Discriminación, un ejercicio para medir la percepción que el pueblo mexicano tiene sobre este
tema, desde diversos ámbitos de la vida cotidiana. Entre los resultados destaca que el 15.6%
considera a la población indígena como el segundo sector más desprotegido; el 19.9% piensa
que la discriminación y la pobreza son consecuencia de que en una comunidad o ciudad
convivan indígenas y no indígenas; y el dato más revelador es que 20.1%, uno de cada cinco
mexicanos, no aceptaría compartir su vivienda con un indígena.
Estas cifras son el reflejo de un fenómeno que sabemos que existe, en medio del cual,
paradójicamente, los miembros de una sociedad se enorgullecen internacionalmente por su

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origen indígena y sus culturas milenarias, pero donde se continúa excluyendo y discriminando a
este sector que representa por lo menos el 10% de la población nacional.”
Con resultados como los anteriores, podemos darnos cuenta de que la problemática social es
cada vez más frecuente, aunque pueda ser imperceptible en ocasiones.
Es necesario que se tome conciencia de lo que puede suceder si seguimos con conductas de
discriminación. Debemos de dejar de tomar los papeles de victimas en ocasiones, y victimarios
en otras tantas para que la situación social en la que nos encontramos mejore y así contribuir
con una convivencia sana con el entorno que nos rodea.
Como ya lo mencionan Bello & Rangel (2002), “el derecho a una identidad propia, a una lengua
y una cultura forman parte del repertorio de demandas que se agregan a las de tipo económico
y social y que se enlazan con la adquisición de derechos políticos como marco regulatorio y
legitimador”, es decir; al fomentar la discriminación, atentamos contra los derechos de la
víctima, y afortunadamente existe apoyo para los individuos que así lo soliciten en casos donde
se detecte discriminación étnica o racial.
En el Estado de Guanajuato, por dar un ejemplo, existen fundaciones donde se les brinda
apoyo a los indígenas, (que es el sector más afectado por la discriminación) y se encuentra
también la PDHEG que atiende y orienta a cualquier persona que sea víctima de cualquier acto
que atente contra sus derechos e integridad.
3.2 Investigación de campo:
Para apoyar los datos obtenidos en la investigación documental, se realizó una encuesta a una
muestra de la población en la cual se obtuvieron los siguientes datos:

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4. Conclusiones.
En resumen, la discriminación racial es una problemática social que muy pocos
consideran conflicto ya que, a veces pasa casi de forma imperceptible gracias a la forma
de actuar y conducirnos en nuestro entorno, pero sin duda es una situación que debería
de mejorar y disminuir para llevar una convivencia más sana y no afectar los derechos
de ninguna persona. Las costumbres, tradiciones, vestimenta, color de piel etc., no son
motivos para rechazar o excluir socialmente a una persona, porque atenta contra los
derechos humanos de forma directa.
5. Recomendaciones.
En esta investigación, se planteó el propósito de dar a conocer un poco más el tema de la
discriminación racial, para crear conciencia sobre lo que debemos evitar para que la
convivencia entre “etnias” y “razas” mejore considerablemente.
Durante el proceso de planeación e indagación sobre el tema para la investigación de
campo, hubo obstáculos que se presentaron y tuvieron que ser superados para llegar al
resultado que aquí se muestra. Sin embargo, para futuras investigaciones, es recomendable
conseguir más información en campo, ya sea en instituciones oficiales o más encuestas
aplicadas a la población, y así obtener datos un poco más concisos.

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6. Anexos.
6.1 Guía de observación/Diario de campo.
6.2 Guía de observación/Segundo recorrido.

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7. Referencias y fuentes de consulta:
Bello, M. A., & Rangel, M. (2002). La equidad y la exclusión de los pueblos indígenas y
afrodescendientes en América Latina y el Caribe. NU CEPAL, 54.
Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas. (24 de Agosto de 2015).
CDI. Recuperado el 12 de Agosto de 2017, de Comisión Nacional para el Desarrollo de
los Pueblos Indígenas: https://www.gob.mx/cdi/acciones-y-programas/programa-de-
derechos-indigenas
Escalante Betancourt, Y. (2009). Derechos de los Pueblos Indígenas y Discriminación
Étnica o Racial. México, D.F.: CONAPRED.
Gall, O. (26 de Febrero de 2003). Identidad, exclusión y racismo: reflexiones teóricas y
sobre México. Recuperado el 11 de Agosto de 2017, de SCIELO:
http://www.scielo.org.mx/scielo.php?pid=S0188-25032004000200001&script=sci_arttext