El documento describe la historia y costumbres de la ciudad de Málaga bajo el dominio musulmán. Los musulmanes llegaron a España en el año 711 y Málaga se convirtió en un centro próspero de comercio para productos agrícolas y artesanales. Los habitantes vivían según las costumbres musulmanas y la mezquita era el centro de la vida religiosa y social. La alcazaba, un palacio fortificado, protegía a los residentes y al gobernador de la ciudad.