Es importante destacar las necesidades y metas personales que un individuo lleva a una organización, para no caer en el error de caracterizarlos como una entidad que simplemente reacciona a las iniciativas que parten de la organización. Asimismo, el individuo lleva destrezas y competencias que son aplicables a las actividades que se realizan en la organización. Él puede regular, dentro del máximo que es capaz de dar, cuánta dedicación y esfuerzo pondrán en sus metas.
Formar los recursos humanos que a corto, mediano y largo plazo demanden las áreas prioritarias del desarrollo socio-económico. Se dará énfasis a la formación profesional y mejoramiento con miras de una sociedad moderna con niveles de eficiencia propuestos por nuevas perspectivas que señalan los avances de la ciencia, tecnología y la cultura.
Un repaso de los ensayos recientes de historia de la ciencia y la tecnología ...
La Gerencia y Talento Humano. Pensamiento Estratégico.
1. República Bolivariana de Venezuela
Ministerio del Poder Popular Para la Educación Universitaria
Universidad Panamericana del Puerto
Especialización en Gerencia Aduanera y Tributaria
Catedra: Planificación Estratégica y Operativa
La Gerencia y Talento Humano.
Pensamiento estratégico.
Autoras:
Abg. Adriana Morillo. V- 16.229.791
Abg. Ariellys Serrano. V- 24.304.865
Facilitador: Msc. Luis Alfredo Gòmez
Rodriguez, Econ.
Puerto Cabello, 28 de agosto del 2021
2. Introducción
Partimos de la noción de que usted, como profesional, deberá resolver
problemas y tomar decisiones; y todos aquellos factores que inciden de una u
otra manera sobre sus acciones y decisiones, deberán ser tomados en cuenta.
Pero, ¿cómo lograrlo, si son tantos elementos a considerar? Insistiremos en la
utilidad de aplicar ciertos marcos de referencia que nos permitan aproximarnos
a la multitud de datos que parecen ser pertinentes, ordenándolos y
jerarquizándolos.
Ahora bien, para poder llegar a ser un profesional con sentido crítico, necesita
ver más allá de este horizonte técnico, por crucial que este sea. Debe ser capaz
de conocer el contexto en el que se ejercerá la acción, y el modo en que este
incide en su práctica profesional, así como las consecuencias de esta última
sobre distintos aspectos de “El Capital Humano, otro activo de la empresa”.
Estudiaremos la relación que existe entre el individuo y la organización, primero
en el caso general de todos los empleados y segundo, particularizando algunos
aspectos al caso de los profesionales, un tipo especial de asalariado. Cuando se
estudia lo que el individuo lleva a la organización, se señalan, por lo general, dos
tipos de aspectos: necesidades y metas individuales y destrezas.
Es importante destacar las necesidades y metas personales que un individuo
lleva a una organización, para no caer en el error de caracterizarlos como una
entidad que simplemente reacciona a las iniciativas que parten de la
organización. Asimismo, el individuo lleva destrezas y competencias que son
aplicables a las actividades que se realizan en la organización. Él puede regular,
dentro del máximo que es capaz de dar, cuánta dedicación y esfuerzo pondrán
en sus metas.
Formar los recursos humanos que a corto, mediano y largo plazo demanden las
áreas prioritarias del desarrollo socio-económico. Se dará énfasis a la formación
profesional y mejoramiento con miras de una sociedad moderna con niveles de
eficiencia propuestos por nuevas perspectivas que señalan los avances de la
ciencia, tecnología y la cultura.
3. EL CAPITAL HUMANO, OTRO ACTIVO DE LA EMPRESA
La mayoría de los adultos de una sociedad trabajan. Esta parece una afirmación
relativamente sencilla, pero es preciso clasificar qué significa trabajo en nuestra
sociedad. Para ello hemos escogido el texto que le presentamos más adelante,
donde se establecen con claridad las características del trabajo en nuestra
sociedad.
El trabajo se define, Worsley, Peter y otros (1979) señala:
En nuestra propia sociedad, el término ‘trabajo’ parece que debería tener un
significado perfectamente inequívoco. Se refiere a un tipo especial de actividad,
claramente separada de otras actividades en el espacio y tiempo. El trabajo tiene
lugar en una oficina, un mercado o una industria –en el cualquier lugar separado
del hogar. En segundo lugar, ocurre durante periodos ‘de nueve a cinco, turno’,
etc., que están separados de otros periodos. Así, mientras el significado de la
palabra parece, a primera vista, ser perfectamente claro, existen de hecho,
problemas y contradicciones en el modo como lo usamos. Así, una persona que
gasta considerable energía física en su jardín o decorando el cuarto que da a la
calle, no se considera normalmente como que está trabajando. En nuestra
sociedad, también, un artista o un atleta puede pensar de sí mismo que está
‘trabajando’ mientras realiza actividades que para los otros serán actividades ‘de
tiempo libre’ (el problema de definir un ‘amateur’ o ‘un profesional’ en el deporte
es una indicación de este tipo de ambigüedad), y los niños que van a la escuela,
hablarán del ‘trabajo de escuela’, aunque estas actividades no lleven una
remuneración económica. ‘Un ejemplo sorprendente y mucho más debatido de
esta ambigüedad es el caso del ‘trabajo del hogar’. El trabajo del hogar, muy
ampliamente definido, como el trabajo de la mujer (aunque trabajen a tiempo
completo o parcial) exige un gran despliegue de energía física y ciertamente da
cuenta de muchas horas en las vidas de las mujeres. La vida de trabajo de la
mayoría de la gente parece estar controlada por fuerzas impersonales porque
raramente encuentran a gente que toma las decisiones cruciales que rigen y
estructuran sus vidas. Por ello, las personas se sienten como clientes de una
rueda en una máquina complicada, como el trabajador de montaje de correas de
Charlie Chaplin en Tiempos Modernos, que satisface su necesidad de ingreso,
pero no satisface o incluso complica al ‘hombre total’. De aquí que encontramos
muy diferentes, y a veces contradictorias, evaluaciones del trabajo en la sociedad
contemporánea: el trabajo en ambas cosas, humano y anti-humano, el trabajo
es necesario pero desagradable y la ociosidad es un pecado o un crimen. Incluso
el artista, –a menudo, la imagen idealizada del trabajador realizado– puede
encontrar que su trabajo no es suyo, sino que llega a ser posesión de
compradores o anunciantes comerciales, o el objeto de críticas incomprendidas,
o el tema para los caprichos de una pequeña elite intelectual. (p. 204-212)
El concepto de trabajo se utiliza con distintos tipos y grados de evaluación moral.
En nuestra sociedad se aprueba que un adulto esté empleado.
4. La valoración de distinto tipo de ocupaciones parece variar según quién sea el
que emite el juicio: Worsley señala como ejemplos de esos criterios el grado de
trabajo manual implicado y la utilidad real del trabajo para la sociedad.
Continuamos la lectura del texto de Worsley, quien en los siguientes párrafos
concentra su atención en las características del trabajo en las sociedades
modernas.
Al leerlo, tenga en cuenta las siguientes interrogantes:
¿En qué sentido es importante el trabajo en la sociedad moderna?
¿Qué elementos intervienen en la satisfacción del trabajo?
¿Qué significa la alineación del trabajo?
El trabajo de hoy, Worsley, Peter y otros (1979) señala:
El trabajo es ciertamente crucial por ser una fuente de ingreso. Pero el trabajo
de una persona es también importante en otros aspectos, sobre todo en que se
da a esta persona la identidad y el status dentro de la sociedad como una
totalidad. Así, cuando hacemos la pregunta: ¿qué es?, el tipo de respuesta que
normalmente esperamos es una manifestación sobre el trabajo que la persona
hace: ‘es ingeniero’ o ‘es dentista’. Tales palabras no son solamente etiquetas
que nos informan sobre el tipo de función técnica que una persona desempeña
en la sociedad, sino una clave básica para colocar y evaluar a una persona
socialmente. No son sólo los sociólogos quienes usan la ocupación como medio
de clasificar u ordenar a la gente en la extensa sociedad; los individuos en la vida
diaria la usan como medio de clasificación. Lockwood, por ejemplo, argumenta
que la diferencia entre los trabajadores ‘de cuello blanco’ y los trabajadores
manuales, pueden atribuirse especialmente al hecho de que estos dos diferentes
tipos de trabajos, se tratan de formar diferente, en el trabajo, incluso dentro de la
misma empresa. Los trabajadores no manuales pueden llegar en horas
diferentes, comer en locales separados y usar servicio distinto, y están a
menudo, física y socialmente más cerca de la administración. Gouldner ha
mostrado cómo las diferencias de status entre los trabajadores de la mina y los
de la superficie en una mina de yeso americano, se extendían a la comunidad
en la que ambos grupos vivían. De este modo, el trabajo de una persona puede
afectar a su posición social en la comunidad amplia. Hay un sentido final en el
que el trabajo debe considerarse ‘central’: el modo en el que le da al trabajador
un sentido de identidad, no ya a los de los otros, sino también a sus propios ojos.
Un sentido de orgullo ocupacional está bien ilustrado en esta cita de un hombre
de ferrocarril, un verdadero ferroviario, no acaba al final de su turno, acaba
cuando ha terminado el trabajo. Simplemente tener un trabajo es, para la
mayoría de los hombres adultos y para muchas mujeres adultas, una importante
fuerte de identidad en sí mismo y al habérsele negado el trabajo a través de
exceso o el retiro, se enfrentan a problemas considerables en términos de
redefinir la identidad o imagen propia. Pero el que un trabajo particular sea o no
satisfactorio, de alto o bajo status, una fuente importante de identidad o
simplemente un medio para un fin, son asuntos mucho más variables. Las
5. fuentes de algunas de estas ambigüedades pueden ser examinadas
considerando otros rasgos del trabajo en la sociedad moderna. Este es el central
porque es necesario para el individuo, para la familia y para la sociedad como
una totalidad. Con todo, a menudo parece ser marginal al ser considerado en
términos estrictamente instrumentales, como simplemente un medio para un fin.
(…) (p. 217-226)
Revisemos seguidamente los puntos más importantes que señala Worsley
en su texto:
• El trabajo básico en la sociedad moderna porque el salario es la principal
fuente de ingreso de la gente. También da identidad y status a los
individuos en una sociedad. Por último, brinda la posibilidad del orgullo
ocupacional.
• Para comprender la satisfacción del trabajo es necesario tener en cuenta,
tanto la imagen y prestigio que una ocupación tiene en la sociedad, como
las condiciones tecnológicas y expectativas que el trabajador lleva a la
situación de trabajo.
• Al caracterizar la alineación del trabajo, hay que considerar tanto los
aspectos objetivos como subjetivos de la misma. Entre los primeros se
pueden señalar la situación en la que se encuentran los trabajadores que
no controlan el proceso de producción ni el producto de su trabajo. Entre
las segundas, los sentimientos de frustración y privación que se
experimentan en la situación.
En las secciones anteriores hemos clasificado el sentido del concepto trabajo y
nos hemos aproximado superficialmente a algunas de sus características.
Podemos considerar ahora distintos tipos de ocupaciones; diferentes modos de
lograr una remuneración.
¿QUÉ SON LAS PROFESIONES?
Si formulamos esta pregunta a un grupo de educadores, a personas escogidas
al azar en la calle, y a un grupo de sociólogos, obtendremos con toda seguridad
respuestas diferentes. Los primeros, muy probablemente, harán referencia a los
años de estudios y a las credenciales requeridas para ser un profesional; los
segundos, podrán indicar la importancia de los servicios que prestan los
profesionales y el sentido de responsabilidad y servicio que los caracteriza, y los
terceros, prestarán mayor atención a las características objetivas del ejercicio de
la profesión (autonomía en las decisiones, control de acceso de aspirantes, etc.).
La definición sociológica del concepto le permitirá iluminar las características que
posee la ocupación que usted ha escogido, le señalara dificultades y
oportunidades que se le presentaran dada la naturaleza del trabajo que
desarrollara. La acepción común del término le resultara tan reveladora como la
6. primera, le indicara lo que el público espera de usted. Las expectativas pueden
estar distorsionada, pero usted tendrá que responder a ella.
La definición sociológica de profesión
El tema de las profesiones es la antigua data en la investigación sociológica.
Varios científicos sociales se han ocupado del mismo: Flexner, Carr-Saunders,
Wilson, Goode, Hall, Vollmer y Mills son algunos de ellos. Seguidamente,
presentaremos una definición de profesión que resumen principales criterios
señalados por autores mencionados anteriormente:
La profesión, es una actividad ocupacional caracterizada por:
• Ser considerada por los miembros de la sociedad como esencial para
su vida, seguridad o bienestar.
• Manejar una tecnología que se apoya en un cuerpo sistemático de
teoría, lo cual supone un largo periodo de entrenamiento especializado.
• Gozar de mayor prestigio y a un nivel de remuneración más alto
comparado con otras ocupaciones.
Gabriel Gymarti (1975), Esta definición del concepto enumera las características
de las profesiones más acabadas, aquellas consideradas prototípicas –Medicina,
Derecho– y las usa como modelo para determinar en qué medida otras
ocupaciones se acercan a ellas. Pospongamos momentáneamente un examen
crítico de la definición y consideremos cada uno de sus elementos por separado.
Por ser consideradas por lo miembros de la sociedad como esencial para su
vida, seguridad o bienestar. Es decir, son tareas “vistas” como preesedoras de
utilidad social. Por ejemplo, la Medicina se ocupa de detectar enfermedades y
restablecer la salud de los miembros de la sociedad. Se halla, sin duda, entre las
profesiones mejor y más firmemente establecidas en casi todas las sociedades.
La docencia resuelve el problema básico de la trasmisión de conocimientos entre
la generación adulta y la joven.
Pero, una vez que se cubren aquellas necesidades percibidas como realmente
básicas, existe dificultad para determinar cuán fundamentales son para la
comunidad los servicios que prestan determinadas ocupaciones (los publicistas
o los archivólogos, por citar sólo dos ejemplos).
El servicio que se presta, por encima del interés. El profesional debe anteponer
los intereses del cliente a los suyos propios. Este es un requerimiento del código
de ética que rige el ejercicio profesional y se insiste en él ya que el cliente, por
carecer de los conocimientos técnicos especializados que domina el profesional,
se encuentra indefenso ante quien maneje el saber para beneficio personal. El
cliente confía en el profesional, so sólo porque éste posee determinados
conocimientos pertinentes a una situación problemática, sino porque espera que
él actúe en el mejor interés suyo. Porque supone que utilizará esa información
en beneficio del niño.
7. Manejar una tecnología que se apoya en un cuerpo complejo y sistemático se
teoría, lo cual supone un largo periodo de entrenamiento especializado. El
ejercicio profesional consiste en la aplicación de una tecnología, cuyos principios
se conocen a través de un prolongado estudio de la teoría que lo sustenta. Este
aspecto permite distinguirlas tanto de las ocupaciones como las ciencias.
Reiteramos que se caracterizan por abarcar simultáneamente la aplicación de
tecnología para resolver el problema planteado por el cliente y el dominio de los
principios que fundamentan tal tecnología.
El científico, por su parte, hace investigación, resuelve problemas –puros o
aplicados – pero su orientación fundamental es hacia su disciplina intelectual y
su progreso. Su relación, no es con un cliente, es un problema científico que
quiere resolver.
Asimismo, hemos visto que la aplicación de tecnología que realiza un profesional
se apoya en el conocimiento de un complejo sistemático cuerpo de teoría. Ello
permite distinguir, por ejemplo, entre un odontólogo y un asistente dental. Ambos
aplican determinadas técnicas, pero sólo el primero tiene los conocimientos que
le permiten diagnosticar un problema, decidir cuál es la técnica más apropiada
para solucionarlo y evaluar los resultados de su acción.
Por lo general, los profesionales cursan sus estudios en universidades,
instituciones en las cuales adquieren una visión amplia, abstracta y aplicada a la
vez, de su campo profesional.
Poseer el derecho exclusivo al ejercicio de determinada práctica. Este monopolio
que los profesionales reclaman para sí, se justifica y aparece como legitimo ante
el resto de la población, por la naturaleza especial del llamado conocimiento
profesional, que como vimos, supone una técnica especializada y un complejo
sistema teórico que le sirve de base.
Como ya hemos señalado, la definición de profesión precedente constituye un
modelo al que las profesiones reales se acercan en mayor o menor grado. Sólo
un número muy pequeño de ocupaciones reúne todos los criterios señalados. La
Abogacía, la Medicina y la Ingeniería caerían sin ninguna duda dentro de esta
definición. Pero hay otras ocupaciones que se hallan en un proceso de
profesionalización. Es decir, han adquirido o están en proceso de adquirir,
algunos o todos los atributos que caracterizan una profesión. Una visión clara
del proceso de profesionalización permite preguntarse cuán profesionalizada se
encuentra determinada ocupación. Ello no implica que todas las ocupaciones se
convertirían en profesiones, ya que existen obstáculos de diversas naturalezas
para que ello ocurra, como veremos más adelante.
El proceso de profesionalización
Harold Wilensky (1964), A través del estudio de la evolución de gran número de
ocupaciones se identificaron regularidades que representaban aquellas que se
habían convertido en profesiones a cabalidad. Las diversas ocupaciones, según
8. ciertas características iniciales y otras que van apareciendo en su evolución,
transitan este proceso en parte o en todo el camino.
Las etapas del proceso de profesionalización son:
• El desempeño de una ocupación a tiempo completo.
• El establecimiento de una institución de 3er. nivel entrenamiento de los
aspirantes a desempeñarse en la ocupación.
• La formación de asociaciones profesionales y en especial, colegios
profesionales.
• La creación de un código de ética profesional.
• Presión política por lograr el apoyo de la ley que proteja el dominio de
aplicación de la profesión y su código de ética.
EL CONTEXTO DEL TRABAJO: LA ORGANIZACIÓN
Hasta hace algunas décadas, la actividad profesional era privada, existía una
relación personal entre lo profesional y su cliente. En la actualidad, la mayoría
de los profesionales trabajan en organizaciones. Estas se han difundido a un
ritmo muy acelerado en todas las esferas de actividad. Si nos detenemos a
pensar en ello, nos damos cuenta de que la mayor parte de nuestras vidas
transcurre en organizaciones. Cuando estamos enfermos nos internan en un
hospital, estudiamos en una escuela o universidad, rezamos en una iglesia, y así
podríamos seguir ejemplificando la presencia de las organizaciones en todos los
aspectos de la actividad humana.
Frecuentemente usted habrá escuchado quejas con respecto a las limitaciones
que las organizaciones imponen sobre nuestras vidas; se dice, que limitan
nuestra libertad o creatividad y que pautan de manera homogénea la respuesta
a ciertos problemas. Muchos autores han estudiado el conflicto de roles que
parecen enfrentar los profesionales que trabajan en organizaciones, al tener que
guiarse por los principios de su profesión y al mismo tiempo ser leales a la
organización donde trabajan.
Es evidente que muchas actividades no podrían llevarse a cabo si no se contara
con organizaciones. Las organizaciones se difunden cada vez más en las
sociedades, como una respuesta a la solución de problemas de complejidad
creciente. En consecuencia, debería ser posible a través de un estudio de las
organizaciones, lograr que estas se ajusten mejor a nuestras necesidades. Este
es el objeto de estudio de la teoría de desarrollo organizacional, tema complejo
al que no entraremos aquí.
No olvide que una organización efectiva, que logra sus metas y en la que, al
mismo tiempo, sus miembros están satisfechos, es el producto de la acción
deliberada de quienes participan en ella.
9. Principales aspectos de las Organizaciones
Para los propósitos que nos hemos planteado, nos interesa explorar los
siguientes aspectos de las organizaciones:
• Sus miembros.
• Sus metas.
• Su estructura.
• Sus límites.
Ya hemos señalado que las organizaciones son unidades sociales, compuestas
por individuos que interactúan entre sí.
Los miembros de la organización
En una organización el individuo trabaja junto a otros. El tipo de interacción
directa o indirecta que se da entre ellos afecta su comportamiento de trabajo.
Cuando se incorporan a una organización, los individuos aportan una serie de
actitudes, habilidades, conocimientos, características de personalidad, etc. Lo
que el individuo trae consigo se ajusta en mayor o menor medida a lo que la
organización necesita; ésta, a través de procesos como la selección y
entrenamiento, intenta mejorar el ajuste. El individuo sólo se incorpora
parcialmente a la organización, ya que simultáneamente es miembro de muchos
grupos u organizaciones, ninguno de los cuales lo absorbe totalmente. El
individuo participa en mayor o menor grado en cada uno de ellos.
Un individuo determinado no trabaja en un vacío; la solución de un problema no
es la mera aplicación de una técnica a una situación particular, hay varios
factores que inciden sobre lo que va hacer y cómo lo llevará a cabo.
Las metas de la organización
Se suele caracterizar a las organizaciones como unidades sociales orientadas
hacia el logro de ciertas metas. Estas consisten en el estado que se desea
obtener en el futuro. Las organizaciones tienen por lo general metas múltiples,
que deben ser compatibles y jerarquizadas. Es decir, debe ser claro cómo se
articulan y cómo se las logrará.
Las metas de la organización varían con el tiempo. Hay dos razones
fundamentales que se dan cuenta de los cambios. En primer lugar, las
organizaciones están compuestas por personas, éstas permanecen en ellas
durante un tiempo determinado y la composición de aquella cambia. Los nuevos
miembros, a menudo, revisan y modifican las metas. En segundo lugar, el
ambiente en el que se desenvuelven la organización cambia y metas que podían
ser apropiadas para ciertas condiciones del ambiente, ya no lo son cuando éstas
varían, por lo que es preciso cambiarlas.
A partir de las metas de la organización es que surgen los requerimientos que
ésta hace a sus miembros en relación a las tareas que deben llevarse a cabo.
10. La estructura de la organización
Para el logro de las metas que se desean alcanzar, las organizaciones producen
una diferenciación de funciones. Es decir, se divide el trabajo entre sus
miembros. El tipo de división del trabajo que prevalece se refleja en la estructura
de la organización. Es posible distinguir dos ejes de diferenciación, horizontal y
vertical.
La diferenciación de funciones en el eje horizontal corresponde a la división de
tareas entre individuos, a los que les corresponde aproximadamente el mismo
nivel de autoridad y responsabilidad. Por ejemplo, se les puede diferenciar según
el propósito de la tarea que realizan, el lugar donde desempeñan, o los objetos
o personas sobre los que actúan.
La diferenciación de funciones a lo largo del eje vertical implica variaciones en
aspectos tales como el alcance de la tarea, la autoridad o poder que tiene el
individuo que la desempeña y el grado de responsabilidad implicado. Las
personas que se ubican en los escalones más altos están orientados a la
formulación de metas y políticas; los que se encuentran en los puestos inferiores
desempeñan tareas específicas, relacionadas con las implementación y
ejecución de aquellas.
Una manera de entender el funcionamiento de la tarea administrativa es prestar
atención, no tanto a los cargos de la misma, sino a los niveles de la organización.
Los límites de la organización
Para lograr sus metas, la organización tiene que contar con recursos materiales
y una tecnología para procesarlos. La última de uno de los factores que más
atención ha recibido ultimadamente en los estudios sobre organizaciones,
porque se cree que determina la estructura básica de éstas.
Chapple, E. D. y Sayles, L. R. (1961), “Quién hace qué cosa, con quién, cuándo,
dónde y con qué frecuencia”. Esta caracterización es útil porque identifica los
aspectos que pueden variar cuando se hace un estudio comparativo de
organizaciones. Todas ellas, sea cual fuera su función, están compuestas por un
conjunto de individuos que realizan algún tipo de actividad cuyo fin es
transformar cierta materia prima (solicitudes, objetos, símbolos, personas, etc.)
en algo distinto de lo que entró a la organización de que se trate.
Cuanto más rutinario los casos que se procesa la organización, más
estandarizada puede ser su tecnología y mayor la posibilidad de estructurar una
organización de modo que todas las tareas estén altamente definidas y previstas.
Viceversa, cuando mayor sea el número de casos excepcionales que tenga que
manejar la organización, menor será la posibilidad de prever cómo se
desarrollarán tareas específicas.
11. Conclusión
Hemos presentado diversas perspectivas desde las cuales se puede apreciar el
contexto más inmediato: la profesión, contexto organizacional y el contexto más
amplio: el capital humano. Se ha considerado importante señalarle todas ellas,
porque cada una a su manera, inciden en su desempeño profesional. A modo de
conclusión le presentamos en forma sintética, los aspectos que inciden en la
acción profesional y hemos considerado en relación a los puntos indicados.
Los criterios de racionalidad creencial y los postulados de la racionalidad
práctica, por una parte, y el análisis social por otra, son sin duda una buena
ayuda. Dijimos al inicio, eran eminentemente teóricas, aunque hayan podido
estar salpicadas de ejemplos.
Usted tendrá oportunidad de hacer uso de estos conocimientos y referirlos a
acciones profesionales concretas, a momentos y situaciones reales. Sin
embargo, conviene que sepamos que el ejercicio continuo es la vía para
aprender, entendiendo aquí por ejercicio el poner en práctica los principios y
postulados mencionados, tener en cuenta los elementos de análisis expuestos y
hacerse, en cada caso, las preguntas adecuadas. Sólo así iremos integrando a
nuestra manera de pensar y actuar, racionalidad y sentido social.
Una sociedad no puede comprenderse sus estructuras, las instituciones en las
que desarrollamos nuestra vida social. El análisis social ayuda, justamente, a
ese conocimiento. Fundamentadas en cuatros estructuras: económica, política,
cultural y las llamadas alianzas institucionales. No hay análisis social neutro,
puramente científico ni objetivo. Nuestros valores e inclinaciones nos llevarán a
ciertos temas, determinados enfoques… pero eso no quiere decir que no
podemos ser claros, precisos, racionales y lógicos.
Las organizaciones son invenciones sociales o instrumentos que el hombre ha
desarrollado para lograr que, de otra forma, no podrían obtener. Son inventos
sociales que consisten en reunir diferentes personas, conocimientos y,
usualmente materiales de algún tipo, a los cuales se le da una estructura y
sistema a fin de integrarlos en un todo.
Una vez que la organización existe la gente toma conciencia de ella. Las
personas que la integran no se ven unos a otros únicamente como individuos,
sino también de acuerdo con lo que cada uno contribuye al esfuerzo coordinado
de la misma. El nivel operativo es el encargado de lograr racionalidad en el
manejo de las variables técnicas y económicas de la organización.
El dilema estructural más importante es la tensión inevitable impuesta a la
organización por el uso del conocimiento. Aun la aplicación del conocimiento es
básicamente un acto individual, al menos en el sentido de que el individuo
profesional tiene la responsabilidad última por su decisión profesional… la
autonomía concedida a profesionales que son básicamente responsables ante
sus conciencias, es necesaria para el trabajo profesional efectivo.
12. Venezuela es un país tradicional, de raíces agropecuarias, con un desarrollo
industrial relativo, cuyas principales bases económicas se derivan de las
industrias del petróleo y del hierro, recientemente nacionalizadas, todo lo cual
conforma una imagen heterogénea y de usos tecnológicos duales.
Hay que indicar, por otra parte, que el potencial de mano de obra activa del país
no es altamente aprovechable, en razón, por una parte, de su poca capacitación
y, por otra parte, falta de conciencia entre la formación educativa y la demanda
industrial, subordinada ésta a una tecnología extranjera sofisticada y distante de
las condiciones nacionales.
En cierta forma se puede aplicar al desarrollo de la Educación Superior, en todos
sus niveles y de acuerdo al proceso global de la sociedad. Para elevar el nivel
cultural y profesionalizar pequeños grupos de la población total, formando así
recursos humanos que no siempre eran los más adecuados para una sociedad
que requiera transformarse y desarrollarse.
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