José María Arguedas escribió su obra maestra Los ríos profundos basada en sus propias experiencias de niñez dividida entre el mundo indígena y el de los terratenientes. Sufría maltratos por parte de su madrastra y hermanastro. Sin embargo, encontró consuelo conviviendo con los indígenas y aprendiendo su idioma quechua. Tanto Arguedas como su personaje Ernesto admiraban la valentía y cultura de los indígenas y querían que fueran reconocidos en lugar de ser tratados como inferiores.