1. Tema: La madurez emocional en la pareja
Texto: He. 5:11
Introducción: Se nos habla aquí de dos clases de personas: la madura y la inmadura,
llamada también, niño. Aquí se refiere a una madurez espiritual, pero también se da lo que es
la madurez e inmadurez emocional, que es de la que vamos a hablar ahora.
La mejor manera de saber si somos o no maduros es por medio de la comparación. Hagamos
pues 10 comparaciones y luego aprendamos como madurar y al final nos evaluamos y oramos.
I. Diferencias entre una persona emocionalmente inmadura y una madura
1. El inmaduro tiene dificultad para reconocer sus errores por lo que culpa a los demás
de lo malo que le sucede, en tanto el maduro no tiene dificultad para reconocer sus
errores.
2. Al inmaduro no le gusta recibir consejos porque cree que lo sabe todo, le incomoda
que traten de ayudarlo, en cambio el maduro aprecia y obedece el consejo.
3. El inmaduro es demasiado sensible a la crítica, la percibe como un ataque, en
cambio el maduro le saca provecho a la crítica, la ve como una oportunidad de
mejorar.
4. El inmaduro se siente impotente para resolver los problemas personales y de pareja;
su salida es llorar, enojarse, deprimirse, o huir, en cambio el maduro no teme a los
problemas porque sabe cómo enfrentarlos positivamente.
5. El inmaduro es muy dependiente de los demás, le cuesta ejercer el liderazgo, en
cambio el maduro ejerce con facilidad el liderazgo en la pareja
6. El inmaduro tiende a enfocarse mas en lo negativo de la pareja, lo sobredimensiona,
en cambio el maduro se enfoca mas en lo positivo.
7. El inmaduro tiende a ser egoísta, busca que lo atiendan y lo hagan feliz. Hace
berrinches hasta conseguir lo que quiere. En cambio el maduro busca atender y
hacer feliz a su pareja.
8. El inmaduro padece de mamitis o papitis, ve a su cónyuge como el reemplazo de
alguno de sus progenitores, en cambio el maduro asume su rol exacto en la pareja.
9. Al inmaduro le cuesta dialogar adecuadamente, se enoja, grita o llora y hace
berrinches, el maduro, en cambio, sabe comunicarse adecuadamente.
10. El inmaduro es rencoroso, guarda el resentimiento por bastante tiempo, en cambio
el maduro perdona fácilmente
II. Que se puede hacer para madurar
1. Reconocer la necesidad de madurar
2. Madurar espiritualmente por el estudio de la Palabra y por la comunión con el
Espíritu
3. Buscar ayuda de un mentor maduros
4. Buscar ayuda profesional
5. Hacer un esfuerzo consciente y constante por madurar
6. Recibir una ministración especial para ser liberados de malas influencias espirituales
Conclusión: Evaluación y ministración