La Segunda República española (1931-1936) comenzó con un triunfo electoral de los partidos republicanos y antimonárquicos en las elecciones municipales de abril de 1931, lo que llevó a la proclamación de la República. El gobierno provisional implementó varias reformas progresistas pero también enfrentó oposición de la derecha y los sectores conservadores católicos. La victoria electoral de una coalición de derechas en 1933 dio lugar a gobiernos inestables y polarizados que no pudieron evitar el aumento de la tensión