El paladar es una estructura en la boca que separa la cavidad nasal de la bucal y permite la alimentación. Se desarrolla entre la quinta y duodécima semana del embrión a partir del endodermo, la capa más interna de los tejidos embrionarios. Cuando no se forma correctamente, puede causar labio leporino, una alteración que impide la división de las cavidades bucal y nasal y permite que los alimentos pasen a la nariz.