La liquidación de obra es un proceso que se realiza parcial o totalmente con los contratistas para verificar que hayan cumplido con los trabajos acordados en cantidad y calidad. Los contratos serán objeto de liquidación de común acuerdo entre las partes dentro del plazo establecido, y el interventor deberá elaborar un acta de liquidación que incluya el balance final y cumplimiento de obligaciones. Después de firmado el acta de entrega y liquidación, se considera aprobada y se emite el recibo final de los trabajos.