El documento discute las virtudes de la prudencia y la fortaleza. Argumenta que la prudencia es necesaria para tener otras virtudes como la justicia y la templanza. También dice que la fortaleza permite cumplir con la voluntad de Dios a pesar de las dificultades internas o externas y que los mártires son un ejemplo de esta virtud. Además, señala que la fortaleza también se puede practicar en la vida cotidiana a través de los detalles.